Un Mecabot que ayuda en tareas submarinas y mejora el rendimiento de la maquinaria de submarinismo. Originalmente, servía para limpiar basura, algas y otros deshechos a fin de evitar la obstrucción de los componentes de los Mecabots acuáticos y, así, minimizar los errores.
Comparado con otros modelos producidos en masa, este mecarreparador dorado de coleccionismo posee una cubierta más limpia y brillante. Se trata de un modelo conmemorativo producido por un equipo de desarrolladores que, para convencer a unos comerciantes adinerados de que financiaran su proyecto, les regalaron estos modelos conmemorativos para que los colocaran en sus peceras como sofisticados peces ornamentales. Por desgracia, todos los intentos del equipo para captar inversiones fracasaron, así que decidieron vender estos mecarreparadores como juguetes para sufragar los gastos cada vez más cuantiosos del proyecto.
Al final, todo el mundo acabó enterándose de lo ocurrido, así que el equipo de desarrolladores detuvo su trabajo y se cancelaron los proyectos futuros. Actualmente, nadie se encarga de ningún mecarreparador que vive en las aguas de Fontaine, y el lote del modelo dorado de coleccionismo cuya producción se realizó con antelación acabó en el fondo del agua, en paradero desconocido y siendo la especie piscícola más distintiva y cara de Fontaine. Conforme se hacían públicos algunos proyectos del Instituto de Ciencias, los periodistas de «El Pájaro de Vapor» empezaron a investigar y contrastar información, y descubrieron que “la contaminación acuática de Fontaine no experimentó grandes mejoras incluso tras el despliegue de los mecarreparadores, por lo que dicho proyecto ha tenido una eficacia dudosa”. Más tarde, los mecarreparadores dorados de colección que aún no habían sido activados siguieron patrullando las aguas de Fontaine, y los pescadores empezaron a alardear cuando pescaban uno, ya que eran con diferencia mucho menos comunes que los peces ornamentales de otras naciones.
