- «Somos deflectores a menudo invisibles, siempre confiables, que los protegemos de los peligros de los que necesitan no preocuparse nunca. Miramos en las sombras no porque veamos lo peor de las personas, sino porque queremos que los mejores estén a salvo.»
- ―Tanivos Divo
Tanivos Exantor Divo, más comúnmente conocido como Tan Divo, fue un inspector humano de la policía que trabajó para la Fuerza de Seguridad de Coruscant durante las décadas finales de la República Galáctica. Con un rígido sentido de la justicia, Divo buscó erradicar el crimen que corría desenfrenado por Coruscant, la capital de la República. Divo libró una ardua batalla contra la élite política y criminal de Coruscant para lograr sus objetivos y a lo largo de su larga y dilatada carrera, buscó descubrir grandes operaciones criminales a través de casos más pequeños. Aunque en ocasiones era demasiado confiado y estirado, Divo creía firmemente en su trabajo y se esforzó por mantener Coruscant seguro.
La dificil niñez de Divo a merced del crimen de Coruscant le inculcó los valores de la justicia, y se unió a las fuerzas policiales como un modo de proteger su planeta natal. Durante su carrera temprana, Divo intentó transformar la agencia de la ley en Coruscant en una red de agencias que harían que los malhechores del planeta rindieran cuentas, pero se enfrentó a los obstáculos de funcionarios corruptos de la República que se aprovechaban del crimen desenfrenado. Divo alteró sus planes para centrarse en casos más pequeños, con la esperanza de que le condujeran hacia los señores del crimen que gobernaban la galaxia. Divo lideró investigaciones sobre varios sindicatos del crimen, como el Sindicato Pyke y el Clan Hutt, y aunque no tuvo éxito en conducir sus casos hacia sus operaciones principales, fue capaz de frenar sus intentos de expandirse por Coruscant.
Durante el conflicto pan-galáctico de las Guerras Clon entre la República y la Confederación de Sistemas Independientes, Divo continuó con su trabajo y encontró aún más dificultades en su carrera. Un descuido de Divo le impidió encontrar al secuestrador de las hijas del Presidente Notluwiski Papanoida de Pantora, y posteriormente tuvo que hacer frente a interferencias en su investigación del asesinato de los Senadores Onaconda Farr y Mee Deechi. Gran parte de la carrera profesional de Divo se vio socavada durante el curso de la guerra, ya que las maquinaciones políticas de la República y la creciente independencia de la ley de la Orden Jedi mermaron sus investigaciones y lo dejaron incapaz de actuar legalmente en numerosos de sus casos más antiguos. Aunque frustrado por estos acontecimientos y sufriendo una baja tasa de éxito en resolver casos, Divo permaneció comprometido con su lucha por la justicia.
Tras el final de las Guerras Clon, Divo sirvió al sucesor de la República, el Imperio Galáctico, durante años antes de retirarse. Su hija, Andressa Divo, continuó con el legado de la familia Divo en la aplicación de la ley uniéndose al Buró de Seguridad Imperial. La relación de Divo con su hija se tensó cuando el totalitarismo del Imperio se hizo más aparente, con Divo oponiéndose a la falta de contención y abuso de poder del Nuevo Orden. El último día en que Tanivos y Andressa hablaron, el Imperio dio a conocer su nueva superarma, la Estrella de la Muerte, que usó para destruir el planeta rebelde Alderaan. Divo se encontraba en Alderaan cuando fue destruido, y murió junto a los demás billones de personas que se encontraban en el planeta. Andressa posteriormente se alejó de la ideología del Imperio, y su hijo, Exantor, seguiría con la tradición familiar como comisario de la policía en Hosnian Prime tras la caída del Imperio.
Biografía[]
Vida temprana[]
- «En un mundo de lujo, no tenemos el lujo de maravillarnos con las alturas o distraernos con las vistas. Nos asomamos a las sombras, para que nuestros vecinos no tengan miedo de atravesarlas para llegar a casa.»
- ―Tanivos Divo
Tanivos Exantor Divo nació en el Nivel 3215 del planeta Coruscant, la capital de la República Galáctica. El Nivel 3215 se encontraba lejos de la superficie soleada de Coruscant, pero se encontraba por encima de los niveles más peligrosos de la[3] ecumenópolis.[5] Divo procedía de un linaje que había estado implicado en el cumplimiento de la ley durante catorce generaciones. De niño, Divo y su familia vivieron en el barrio Gavas-Eclat. Viviendo entre los apartamentos de clase baja y áreas industriales de Gavas-Eclat, Divo y su familia se encontraban entre los honrados trabajadores que se convirtieron en el blanco de los criminales que acudían al distrito. Divo vio impotente cómo su padre era obligado a pagar a unos matones con los créditos que había ganado trabajando honradamente. Ver las dificultades de su familia hizo endurecerse a Divo, a quien se le inculcó un rígido sentido de la justicia y la equidad. Buscando acabar con el crimen rampante y la injusticia que invadía la ciudad galáctica, Divo se dedicó a sus estudios académicos y obtuvo una beca para la Academia de Policía del Distrito Federal a los dieciséis años. El arduo trabajo de Divo valió la pena cuando se graduó como mejor estudiante. En su ceremonia de graduación, Divo pronunció un discurso de despedida a sus 4500 compañeros graduados, diciéndoles que su trabajo como agentes del orden público no era ver lo peor de las personas sino mantener a salvo a los mejores.[3]
Inspector de policía[]
Encontrando su equilibrio[]
- «Mil años de paz conllevan una complacencia que atraer al crimen como un imán.»
- ―Inspector Tan Divo
Tras graduarse de la academia de policía, Divo inició su carrera como patrullero en la Fuerza de Seguridad de Coruscant y eventualmente ascendió a la posición de Inspector con el rango de Teniente. Divo abogó por amplias reformas en la forma en que la fuerza policial realizaba sus investigaciones, sugiriendo crear una red de información y coordinación que se extendería desde los niveles superiores hasta los policías de a pie que operaban en los niveles más profundos de Coruscant. Sin embargo, las propuestas de Divo fueron frustradas en todo momento por jueces, lobistas y otros políticos que se beneficiaban de los sistemas de delincuencia y desinversión en los niveles inferiores de Coruscant. Durante sus primeros años, el mayor oponente de Divo fue el Senador Aks Moe[3] de Malastare,[6] quien tenía una gran influencia sobre las cortes y los políticos que frenaron los intentos de reforma de Divo. Moe criticó los procedimientos policiales de Divo por permitir que los narcóticos de los niveles inferiores de Coruscant entraran en los pasillos del Senado Galáctico, y sus acusaciones justificaron una audiencia de declaración, donde el indignado senador cuestionó a Divo sobre su trabajo. En contraste con Moe, Divo habló sin rodeos y al grano, afirmando que había sido la complacencia de la República lo que había engendrado el crimen que se extendía por toda la capital.[3]
Divo cambió su forma de ver el trabajo policial a partir de entonces, sabiendo que no sería capaz de lograr justicia desde arriba con hombres poderosos y bien conectados como Moe en su camino. Escogiendo casos pequeños, Divo esperaba construir otros casos más grandes contra los señores del crimen que corrían libremente por Coruscant y los políticos que hacían negocios con ellos. Divo tuvo diferencias bien documentadas con la Orden Jedi, un grupo que afirmaba ser los guardianes de la paz y la justicia. Los Jedi, cuyas misiones eran encargadas por el Senado, se centraron en asuntos como la piratería, disputas interplanetarias, y soberanía, pero raramente centraron su trabajo en el crimen de Coruscant. Divo sentía que la agencia de la ley en Coruscant se encontraba sola en su esfuerzo por impartir justicia en el planeta, pero encontró un aliado en el Maestro Jedi Quinlan Vos, el enlace de la Orden Jedi con la policía local. Vos demostró respeto por la policía y se compadeció de ellos por las deficiencias de la República, convirtiéndose en una valiosa fuente de información y perspicacia de los niveles más altos de la sociedad de Coruscant. Aunque no congeniaba con los Jedi, Divo elogió a Vos en sus informes.[3]
Lidiando con los pykes[]
- «No me complace inspeccionar un domicilio pyke, o irrumpir en la trastienda de un restaurante o cocina pyke solo por quién vive o trabaja allí. Es una situación podrida en la que estas personas tienen que soportar la peor parte de las sospechas porque alguien lejos de ellos se está enriqueciendo al mirar hacia otro lado.»
- ―Inspector Tan Divo acerca de los pykes
Durante su carrera, Divo estuvo implicado en una serie de casos relacionados con el Sindicato Pyke, una organización criminal establecida en Oba Diah y especializada en el transporte y la distribución de especias narcóticas. Una ruptura en la cooperación entre divisiones a lo largo de las líneas jurisdiccionales ayudó a que el negocio de pyke se extendiera por Coruscant, donde el flagelo de la adicción a las especias creció desenfrenadamente en la ciudad subterránea. Divo trabajó para descubrir las guaridas de la especia y canales de negocio pyke en el planeta pero se vio a sí mismo sospechando debido a estereotipos mientras inspeccionaba los negocios legítimos de pykes que no estaban asociados al sindicato de Oba Diah. Examinó varios domicilios pyke y buscó en muchos restaurantes y cocinas administrados por pykes que supuestamente eran guaridas secretas de especias, pero en realidad no tenían nada que ver con el Sindicato Pyke. Aunque a Divo no le complacía hacer esto, su búsqueda dio resultado. En el 35 ABY, tras la captura e interrogación de una holo-estrella adicta a las especias, la FSC supo de un almacén de especias camuflado como una tienda de curiosidades en el Nivel 3321, a cambio de mantener el nombre de la holo-estrella en el anonimato. La Fuerza de Seguridad envió sondas a la tienda, que confirmaron que se trataba de una guarida de especias dirigida por el traficante de especias Tach Drud y revelaron los tratos de un rico lobista senatorial y un transportista de carga de los pykes.[3]
La mano del Sindicato Pyke no solo se encontraba en los niveles bajo sino también entre los miembros de alto rango de la República Galáctica. El Senador Yudrish Sedran de Chalacta estuvo bajo investigación por afirmaciones de que había aceptado sobornos de los pykes a cambio de ignorar la expansión de sus operaciones más allá del espacio pyke, así como garantizar a los pykes un estatus de embajador limitado, que confería a los delegados pykes legitimidad y acceso al Senado Galáctico. Divo y un equipo de droides forenses sellaron las oficinas y apartamentos de Sedran y llevaron a cabo una minuciosa examinación de su contenido en busca de evidencias de actividad criminal. Entre los elementos encontrados había diversas pinturas pyke, como por ejemplo un retrato del líder del Sindicato Pyke Lom Pyke, que Sedran afirmaba que se trataba de un regalo de intercambio cultural de Oba Diah. El equipo legal de élite de Sedran consiguió limpiar los cargos del senador, pero el retrato consiguió frustrar algunas de las operaciones de los pykes. El equipo forense de Divo analizó las pinturas y encontró granos de especia de Kessel en el montón de terciopelo de los lienzos. Usando los núcleos orgánicos únicos de los granos de especia, los droides rastreadores de la FSC y equipos de sabuesos rastrearon el contrabando hasta los muelles del Nivel 1313.[3]
Trabajando contra los cárteles[]
- «Es un alivio saber que basura como esta no pondrá un pie en nuestra ciudad, y los niños de aquí no presentarán a este sinvergüenza como una especie de ídolo.»
- ―Tan Divo, reflexionando acerca de niños idolatrando a los corredores de vainas de carreras en el Borde Exterior
Un intento de Entretenimiento Zugga de abrir una carrera de vainas en el Gran Gravidomo Aratech de Coruscant hizo que Divo llevara a cabo una gran cantidad de investigaciones sobre este deporte, cuya sombría reputación levantó sus sospechas. Las carreras de vainas eran un peligroso deporte del Borde Exterior que estaba ganando gran popularidad en los Mundos del Núcleo. Zugga supo que la agencia de la ley se estaba interesando por su proyecto, el cual cayó. La búsqueda de Divo señaló la letalidad y corrupción que envolvía a este deporte, con patrocinadores corporativos masivos invirtiendo fondos en las carreras y la crueldad y las acciones criminales de los propios corredores. En su investigación, Divo llegó hasta el corredor de vainas Sebulba, a quien los niños del Borde Exterior trataban como a un héroe. Al reflexionar sobre las fechorías criminales de Sebulba en las carreras de vainas y la adoración que se le brindaba, el teniente se alegró de que el deporte no encontrara un hogar en Coruscant. Algún tiempo después de que el plan de Zugga fracasara, Divo recibió un aviso anónimo destinado a respaldar su investigación de los crímenes relacionados con las carreras de vainas. La evidencia, un holograma, supuestamente respondía al misterio destino de Neva Kee, un corredor de vainas en ascenso que había desaparecido durante la Clásica de Boonta Eve del 32 ABY, que había tenido lugar en la ciudad Mos Espa de Tatooine. Las grabaciones de la carrera no incluían el momento en el que Kee había desaparecido, y rumores posteriores afirmaron que Kee había huido para escapar de sus creditores. Divo no pudo confirmar la autenticidad de la imagen, que mostraba al señor del crimen establecido en Tatooine, Jabba el hutt pagando a la cazarrecompensas Aurra Sing mientras dos compinches sacaban a Kee de su vaina de carreras accidentada. El oficial de Mos Espa, que estaba investigando el caso, buscó la ayuda de Divo. La teoría de Divo, que actualizó años después del incidente, era que los fabricantes originales de la vaina de carreras de Kee, Farwan & Glott, habían dispuesto alcanzar a Kee para obtener los secretos de sus modificaciones.[3]
Divo y las operaciones de vigilancia de la FSC no se limitaron a los pykes. Los agentes de Divo iniciaron intentos de infiltrarse en el Palacio de Ziro, el club nocturno de Ziro Desilijic Tiure, un hutt con lazos con el poderoso Cártel Hutt del Borde Exterior. Ziro era un caso atípico de las empresas comerciales de los hutts, habiendo establecido su imperio criminal en Coruscant, lejos del Espacio Hutt. Divo vio difícil implicar a Ziro en cualquier actividad ilegal, puesto que no había pruebas y no quería someter a Ziro a los estereotipos, tal como ocurría a menudo con los pykes. Lo que Divo pudo descubrir era que la clientela de Ziro a menudo procedía de ambientes criminales y que los hutts tenían varios frentes y operaciones en Coruscant que llenaban las arcas de reelección de los políticos de Coruscant. Aunque no pudo acusar formalmente a Ziro de ningún crimen, los agentes encubiertos de Divo capturaron grabaciones en el club nocturno de poderosa clientela política, lo que proporcionó a Divo más pistas que seguir.[3]
Uno de los casos misteriosos con los que Divo lidió fue el del Cártel Xrexus, un grupo de empresas semilegítimas de fabricación de droides del Borde Medio que se unió para fijar precios y distribuir autómatas de combate sin licencia del Borde Exterior. Divo supo por primera vez de la existencia del Cártel Xrexus cuando interceptó un cargamento de pernos de restricción falsos destinados a El Fallo, una facción disidente del infame Gotra Droide, un grupo de emancipación de droides, que planeaba un alzamiento de droides en Coruscant. Divo intentó hacer un seguimiento del Cártel Xrexus, pero todas sus pistas se desvanecieron cuando tanto el cártel como su fundadora, Xev Xrexus, aparentemente se desvanecieron simultáneamente de la galaxia. Lo que Divo pudo encontrar fue una invitación a una subasta hospedada por Xrexus y su cártel, en la que ofrecían un premio de una «rareza atesorada de extremada importancia e interés». Sin más pistas que condujeran a esta extraña situación, el caso de Xrexus se enfrió.[3]
En el 26 ABY, un pau'ano llamado Zodu Onglo fue arrestado en el Nivel 1671 por asalto agravado después de un intento fallido de vender un alijo de armas robadas. El Inspector Divo viajó hasta el lugar del incidente, donde interrogó a los testigos mientras los oficiales del inframundo de Coruscant ponían a Onglo bajo custodia. Divo procedió ante el arresto de Onglo con más investigación, que reveló una conexión entre el criminal y el sindicato Estrella Errante, afincado en el Nivel 1313. Unos pocos años después, el Teniente Divo habló con la clase de la Academia de Policía del Distrito Federal '953.4. Alrededor de ese tiempo, Divo y la FSC iniciaron investigaciones acerca de Sistemas de Transporte Xomit, una compañía naviera falleen con un importante centro regional en Mustafar. La compañía estaba conectada con varios incidentes de contrabando y se sospechaba que estaba liderada por el sindicato Sol Negro. Aunque la FSC poseía varias pistas que podrían haber implicado directamente al Sol Negro, la compañía tenía la protección de gremios comerciales ricos con senadores en sus bolsillos. Los intentos de acceder al cargamento de la compañía fueron detenidos por estos gremios comerciales, que impusieron permisos y exenciones para la FSC que enfriaron las pistas.[3]
Guerras Clon[]
Vigilancia y compromiso[]
- «Odio tener que comprometerme de esta manera, pero es difícil negar que Faytonni vale las celdas de combustible necesarias para enviar un deslizador a buscarlo, y tiene talento para lavarse las manos del crimen. Pero se equivocará. Siempre lo hacen. Y cuando lo haga. estaré allí.»
- ―Tan Divo, acerca de Dannl Faytonni
En el 22 ABY,[2] durante el pico de las tensiones entre la República y su estado secesionista, la Confederación de Sistemas Independientes,[7] Divo y la FSC emprendieron una serie de operaciones de vigilancia sobre delincuentes y presuntos centros delictivos en Coruscant. Uno de los establecimientos monitoreados por Divo fue el Restaurante de Dex, un local de alimentación ubicado en el Distrito de Comercio Colectivo, o «Ciudad CoCo» para abreviar. El restaurante no se encontraba lejos del Distrito Federal y también era cercano al Palacio de Ziro. La vigilancia de Divo reveló un patrón entre el club nocturno de Ziro y el restaurante de Dex, en el que los socios que se conocían por primera vez en el elegante local de Ziro eventualmente se encontraban disfrutando de una comida sin lujos en el restaurante de Dex, que estaba abierto las veinticuatro horas. El propietario del restaurante, Dexter Jettster, no estaba interesado en la intromisión de Divo, pero el Inspector lo respetaba por su buen carácter. Las investigaciones de Divo no mostraron ninguna conexión entre Dex y los tratos criminales hechos por sus clientes, y su operación de vigilancia se redujo a instancias del propio Dex, quien no quería que su negocio se viese empañado por la reputación de invadir la privacidad. Divo, por respeto a Dex, decidió mantener a la FSC a distancia del restaurante, pero no obstante mantuvo su vigilancia en el lugar.[3]
En vísperas de la controvertida votación sobre el Acta de Creación Militar, la Senadora Padmé Amidala del sector Chommell fue el objetivo de dos intentos de asesinato. El primero, una bomba en la nave de la senadora, mató a siete miembros de su séquito y provocó que se pospusiera la votación. Más adelante esa noche, un segundo intento de asesinato tuvo lugar usando dos artrópodos venenosos. El Teniente Divo negoció con los Caballeros Jedi que investigaban para asegurar que le proporcionaran las criaturas para estudiarlas, lo cual le fue concedido. La investigación reveló que el atacante, que posteriormente fue identificado como Zam Wesell, había usado un droide mensajero ASN para insertar los artrópodos en el dormitorio de Amidala mientras dormía. Divo envió los cuerpos partidos en dos de las criaturas al Zoo de Coruscant para identificarlas. Los miriapodólogos del zoo identificaron a las criaturas como Kouhuns de Indoumodo y preservaron los especímenes en un bote como prueba. El zoo, trabajando con la FSC, extirpó los sacos de veneno de los kouhuns con la esperanza de desarrollar un antídoto. El informe oficial de Divo acerca del incidente dio crédito al jefe de seguridad de Amidala, el Capitán Gregar Typho, por su rápida respuesta ante el atentado contra su vida, pero hizo poca mención a los Jedi que habían estado presentes.[3]
Uno de los individuos por los que Divo tomó un particular interés fue Dannl Faytonni, un estafador de bajo nivel con un número creciente de informes de incidentes. Se sabía que Faytonni merodeaba por los establecimientos de entretenimiento del Distrito Uscru, principalmente entre los niveles 4000 y mediados de 3000. El mayor crimen de Faytonni era el de hacerse pasar por un oficial del Departamento Judicial, lo que le costó una orden de arresto.[3] Las tensiones entre la República y la Confederación llegaron a un punto crítico cuando la República promulgó una respuesta militarizada a las acciones de la Confederación, lo que condujo al estallido de la guerra con la Primera Batalla de Geonosis.[7] Un cambio repentino en los recursos de la República llevó a Divo y a la FSC a hacer concesiones en su trabajo. El Canciller Supremo de la República, Sheev Palpatine, propuso una medida para restringir férreamente los mercados de coaxium, que proporcionaban combustibles hiperespaciales a las agencias de transporte que cumplían con la ley. A esta medida se opusieron los gremios comerciales que protegían a Sistemas de Transporte Xomit, dejando a Divo y a la FSC incapaces de actuar contra la compañía naviera y dejando su destino en manos del Senado. En un giro más decepcionante, Divo se vio obligado a dejar sus asignaciones para centrarse en aumentar la seguridad de Coruscant, lo que significaba que no podía seguir persiguiendo a Faytonni. Faytonni, una persona adaptable y astuta, jugó al gato y al ratón dándole pistas mientras seguía siendo esquivo, y el Inspector Divo le permitió hacerlo para obtener información sobre pistas utilizables y presas más grandes. Aunque se mostró reservado en su decisión de permitir que Faytonni realizara sus pequeños delitos, Divo estaba seguro de que podría atrapar a su presa en algún momento.[3]
Entre los individuos a los que Divo había vigilado en el Restaurante de Dex se encontraban la salenga Ione Marcy y la saltadora terelliana Cassilyda Cryar. Marcy era la novia del notorio asesino a sueldo Nack Movers, que había evadido la ley debido a sus conexiones, lo que evitó que rindiera cuentas por una cadena de informantes, contadores y policías muertos por sus actos. Debido a esta protección, Movers y Marcy vivían en un cómodo apartamento en un rascacielos en la zona superior este del Distrito Jrade. A pesar de esto, Divo mantuvo un caso abierto acerca de las actividades de Movers, esperando llevarlo ante la justicia. La paranoia de Movers hizo que contratara a Cryar como guardaespaldas. Marcy y Cryar se hicieron amigas cercanas, y las dos se unieron para matar a Movers después de que comenzara a hacer proposiciones lascivas a la guardaespaldas.[3] Movers fue encontrado muerto por los Jedi Tera Sinube y Ahsoka Tano, quienes habían seguido la pista de los sables de luz robados de Ahsoka hasta Movers. Tano emprendió la persecución de Cryar mientras ella intentaba escapar, y Sinube acorraló a Marcy y dedujo su culpabilidad, causando que ella escapara. Con la ayuda del anciano Sinube, Tano consiguió entregar a Cryar y Marcy a los oficiales de la FSC en una estación de tren antes de que pudieran escapar.[8] La FSC, junto al droide de análisis de escenas del crimen Jedi Russo-ISC, investigaron la muerte de Movers, descubriendo que había muerto tras consumir una bebida mezclada con sennari. El arma profesional de Movers era el veneno, puesto que aparentemente había sido entrenado como envenenador Malkite. En sus notas, Divo comentó que aunque la FSC no había llevado a Movers ante la justicia, la justicia le había alcanzado a manos de una persona en la que él confiaba, siendo esta persona Marcy. Los exámenes de muebles derribados y marcas de garras en una pintura de Movers, Marcy y Cryar mostraron que su muerte había sido casi instantánea después de una serie de convulsiones por el veneno. Divo consideró irónico que Movers hubiera vivido envenenando a individuos y hubiera terminado sufriendo el mismo destino.[3]
Interés en Boba Fett[]
- «Este caso me mantiene despierto por las noches. Esta guerra está convirtiendo a los niños en soldados, pero podemos ignorarlo gracias a la aceleración del crecimiento de los kaminoanos. Pero así es como se ve un clon inalterado, y ¿realmente puede llegar a ser quien es si fue moldeado para ser esto?»
- ―El Teniente Divo, acerca de Boba Fett
Después de que Boba Fett fuese arrestado y llevado a Coruscant, Divo abrió una ficha para el joven chico.[3] Fett era un clon inalterado del famoso cazarrecompensas Jango Fett, que había sido el donante genético original para el ejército clon de la República. Jango fue asesinado durante la Primera Batalla de Geonosis[7] por el Maestro Jedi Mace Windu en defensa propia, de lo que fue testigo el impresionable Boba.[3] Él, junto a cazarrecompensas y criminales conocidos como Aurra Sing y Bossk, intentó vengarse de Windu atentando contra sus aposentos en el Destructor Estelar Resistencia, y, después de que el primer intento fracasara, derribó la nave entera inutilizando sus motores sobre Vanqor.[9] Ambos intentos de asesinato fracasaron, y los cazarrecompensas pusieron posteriormente una trampa para Windu entre los restos del Resistencia, el casco de Jango Fett, que poseía una carga de baradio. Tanto Windu como el General Jedi Anakin Skywalker, durante su investigación de la nave accidentada, quedaron atrapados bajo escombros durante horas antes de ser rescatados.[10] El General Plo Koon y Ahsoka Tano más adelante siguieron el rastro de Fett y los cazadores hasta Florrum, donde arrestaron a Boba y Bossk pero fallaron en capturar a Sing, que aparentemente murió en la colisión de una nave.[11] Divo y la FSC recibieron la custodia de parte del casco dañado de Jango, que analizaron y guardaron como prueba tras escuchar el testimonio de Windu que lo autentificó.[3]
Boba fue arrestado por cargos de intentar asesinar a Windu y el atentar contra el Destructor Estelar Resistencia sobre Vanqor. Boba Fett[3] y Bossk[11] fueron arrestados y llevados a Coruscant, donde fueron procesados por su papel en el complot. Los abogados argumentaron que Fett era un subadulto que había sido coaccionado por Sing, la verdadera autora intelectual de la trama. Otros argumentaron que, como clon, Fett era propiedad de la República y cedieron al derecho a que fuera procesado como tal. El propio Windu recomendó que Fett fuera indultado y rehabilitado en lugar de ser sometido a castigos corporales, pero el Poder Judicial de la República se negó debido a su tolerancia cero a los ataques contra activos militares durante la guerra. Divo se mostró de acuerdo con Windu en su informe sobre Fett. Adicionalmente, Divo se mostró profundamente preocupado por las implicaciones de que el Gran Ejército de la República estuviera compuesto por un ejército de niños tan jóvenes como Fett, a quien los clones se asemejarían si no fuera por que estaban genéticamente alterados para acelerar su crecimiento por parte de sus creadores kaminoanos.[3] Boba y Bossk fueron declarados culpables y apresados en el Centro de Detención Judicial Central de la República en Coruscant.[12]
Mandalorianos y mooganos[]
- «Los policías pueden hablar con policías, y en ese caso, dejamos la política de lado en el tema de la seguridad pública.»
- ―Inspector Tan Divo
Algún tiempo después, Divo fue contactado por el Capitán Patrok Ru-Saxon de la Guardia Mandaloriana, la agencia de la ley del gobierno de los Nuevos Mandalorianos en el planeta Mandalore. Ru-Saxon había ayudado recientemente a la gobernante mandaloriana, la Duquesa Satine Kryze, a exponer una trama del mercado negro que había tomado el control del planeta y causado un brote de envenenamiento en varias escuelas.[3] El doctor mandaloriano Zak Zaz identificó la fuente del brote como[13] una variante de té moogano conocida como Bebida Ardees[14] importada por la Compañía de Bebidas Ardees, que había sido elaborada con slabina para extender su vida útil.[3] La slabina se había vuelto letal debido a su elevada concentración en la mezcla. Una investigación liderada por Kryze y la Senadora Padmé Amidala de la República destapó unas operaciones de contrabando mooganas en los muelles de Sundari. Tras una escaramuza en la base de los mooganos que dejó a Ru-Saxon herido y al jefe de las operaciones de contrabando, Tee Va, arrestado, Kryze ordenó que el almacén fuera quemado como símbolo de a qué se enfrentaría la corrupción en Mandalore, a pesar de las protestas de Ru-Saxon de que podría destruir pistas valiosas.[13]
Aunque Ru-Saxon no pudo averiguar más cosas a partir de la base de los contrabandistas,[13] consiguió revisar los registros de navegación de la nave de transporte moogana, que indicaron una parada en Coruscant. Ru-Saxon dedujo que el grupo había estado planeando expandir su negocio del mercado negro en Coruscant, y notificó al Teniente Divo sus hallazgos. Divo se sorprendió por este atípico apoyo de Mandalore, un planeta conocido por su independencia[3] y neutralidad bajo el mando de Kryze.[13] Con la pista de Ru-Saxon, Divo localizó e interceptó un cargamento en los Muelles del Puerto Este destinado a los niveles inferiores de Coruscant antes de que pudiera causar daños, y confiscó varias muestras del té moogano contaminado. Como muestra de agradecimiento, Divo le envió a Ru-Saxon una botella de té de tarina, y a cambio recibió una botella de ale kri'gee mandaloriano.[3]
Secuestro de los Papanoida[]
- «Hemos completado un barrido completo de su apartamento, Presidente. No hay evidencias de juego sucio.»
«La vida de mis hijas está en sus manos, inspector.»
«No tiene nada de lo que preocuparse, Señor. Tenemos el control total de la situación.» - ―Tan Divo y el Presidente Papanoida
Una crisis en la luna Pantora surgió durante las Guerras Clon cuando la Federación de Comercio bloqueó el sistema. Aunque la Federación de Comercio afirmaba que lo había hecho para buscar el pago de unas deudas vencidas, en realidad había bloqueado Pantora para influir en la luna y que se uniera a la Confederación. Cuando el Presidente de Pantora, el Barón Notluwiski Papanoida, llegó a Coruscant para reunirse con la Senadora pantorana Riyo Chuchi, sus dos hijas, Chi Eekway y Che Amanwe, desaparecieron. Divo fue asignado al caso, y dirigió un barrido de los apartamentos de los Papanoida como parte de la investigación, junto a un equipo de droides policía. Mientras buscaba en el apartamento, sin embargo, no encontró pruebas de juego sucio. Divo y su equipo acudieron ante el Barón Papanoida y su hijo, Ion, mientras salían del local. Divo informó a Papanoida de que no había encontrado nada en el apartamento que sugiriese un asesinato, y el impaciente barón dijo a Divo que la vida de sus hijas estaba en sus manos. Divo respondió al barón que no debía preocuparse por nada y que la FSC tenía el control total de la situación. Entonces, abandonó el complejo de apartamentos para continuar con la investigación.[15]
Por desgracia, Divo había pasado algo por alto durante su barrido del apartamento de Papanoida. Mientras investigaban las habitaciones, él y su equipo encontraron el Icono de la Diosa de la Luna fuera de su sitio, pensando que se encontraba donde correspondía. Cuando Papanoida entró en el apartamento, notó que la estatuilla no se encontraba donde debía, y mientras la colocaba en su altar, notó que había sangre debajo de ella. Papanoida y su hijo, ignorando la investigación de Divo, analizaron la sangre ellos mismos y supieron que Chi Eekway y Che Amanwe habían sido secuestradas por un cazarrecompensas llamado Greedo. Con la ayuda de la Senadora Chuchi y la Jedi Ahsoka Tano, Papanoida lideró un esfuerzo extralegal para rastrear y recuperar a sus hijas, anulando el bloqueo de la Federación de Comercio en el proceso.[15]
Investigaciones sofocadas[]
- «Los eruditos legales de la República subestimaron groseramente la jurisprudencia de los hutt. Sus abogados enmendaron el tratado hasta tal punto que pudieron mirar hacia nuestro lado de la cerca, pero nosotros no pudimos hacer lo mismo.»
- ―Teniente Divo
Durante las etapas iniciales de las Guerras Clon, la República forjó un tratado con el Clan Hutt para lograr acceso a las rutas hiperespaciales y comerciales de los hutt en el Borde Exterior.[3] El acuerdo, forjado entre las fuerzas de la República y Jabba el Hutt, ocurrió tras el arresto de Ziro por su complot para derrocar a Jabba y aliarse con la Confederación.[16] Divo y las fuerzas del orden creyeron desde el principio que este tratado permitiría que la jurisdicción de la República llegara más allá de las fronteras del Espacio Hutt, pero pronto se encontraron con las manos atadas en asuntos legales y políticos. Los abogados hutt enmendaron el tratado hasta el punto de permitirles ver los asuntos de la República, pero impidieron que la República hiciera lo mismo con ellos. Debido al estrecho margen con el que tuvo que trabajar Divo, gran parte de su material recopilado contra los cárteles hutt, gran parte del cual habría sido inadmisible si hubiera podido emprender acciones legales, finalmente se volvió inútil sin forma de usarlo contra los clanes. A pesar de esta decepción, las agencias de Divo y la República hicieron todo lo posible para seguir reuniendo material. Para obtener acceso tras los muros del Gran Consejo Hutt en Nal Hutta, se regaló un droide traductor a los líderes del cartel a través de un tercero. El droide capturó una imagen de Ziro el hutt retenido ante el Consejo Hutt,[3] después de que fuera liberado de la custodia de la República tras una crisis de rehenes ordenada por los hutt en el Senado. Varios senadores fueron tomados como rehenes por cazarrecompensas, y a cambio de su seguridad, Ziro fue liberado.[17] Aunque la imagen, igual que el resto de archivos de Divo contra los hutts, era inservible en términos legales, les permitió a él y a los líderes de la FSC obtener un aviso acerca de algunos de los planes más nefastos del Clan Hutt.[3] Ziro fue encontrado asesinado misteriosamente en Teth tras su liberación de la cárcel. Había muerto asesinado bajo las órdenes del Consejo Hutt para evitar que filtrara información dañina de sus actividades criminales, aunque esto nunca fue sabido por la República.[18]
Cuando la noticia de jóvenes capturados y traficados fuera de Coruscant al Borde Exterior llegó a Divo, usó su red de contactos para averiguar cuál era su destino final. Sus contactos apuntaron a Zygerria, el planeta natal de los zygerrianos y del antiguo Imperio Esclavista Zygerriano. Los zygerrianos se habían envalentonado por el estado fracturado de la República durante las Guerras Clon para hacer emerger de nuevo su comercio clandestino de esclavos y se aprovecharon de las personas desplazadas por la guerra para alimentar su floreciente imperio. Desafortunadamente, Divo no pudo emprender acciones dada la independencia de Zygerria, que limitaba las acciones que la República podía tomar contra los esclavistas. No fue hasta que los zygerrianos fueron identificados como cómplices de los Separatistas[3] tras atacar y secuestrar a una colonia de togrutas en Kiros[19] que la República lanzó un esfuerzo de liberación como parte de una operación militar. Durante un ataque contra los esfuerzos zygerrianos en el Núcleo, un contenedor de transporte con veintisiete subadultos de Coruscant, Corellia y Denon fue capturado y una de las armas de los zygerrianos, un electrolátigo, fue entregada a Divo como prueba. El análisis del diseño y la ingeniería del arma proporcionó a Divo y a las fuerzas del orden más información sobre cómo los zygerrianos torturaban a sus esclavos.[3]
Homicidios en el Senado[]
- «¿Qué le hace pensar que fue un asesinato?»
«El veneno, por supuesto. El método favorito de los políticos. Encontramos un químico en su torrente sanguíneo, lo mató de inmediato. Es un caso obvio. Los políticos siempre tienen algo que ocultar, y siempre vuelve para atormentarlos, ¿verdad? Oh, mire a quién se lo estoy preguntando. A una sala llena de políticos.» - ―Padmé Amidala y Tan Divo
Tras un discurso de la Senadora Amidala, los defensores de su legislación—incluido los Senadores Onaconda Farr, Mon Mothma, y Bail Organa, junto con la asistenta de Farr, Lolo Purs—se retiraron a la oficina de Padmé. Mientras disfrutaban de unos refrescos, Farr se atragantó con su bebida y murió. Se llamó a la Fuerza de Seguridad de Coruscant y procedió a investigar la sospechosa muerte, con Divo asignado como inspector del caso. Se tomaron muestras de las bebidas, y el informe forense concluyó que se había envenenado al Senador, clasificándose su muerte como un homicidio. Tras el funeral del Senador, los aliados políticos de Farr fueron convocados a la oficina del Canciller en el Edificio de Oficinas del Senado. Allí, Divo reveló que Farr no había muerto por causas naturales y que de hecho había sido asesinado. Amidala sugirió que Farr había muerto a manos de alguien enfadado por el Proyecto de Ley para la Reducción de Gastos Militares que habían propuesto. Divo rechazó esa idea y les dijo a los senadores que se mantuvieran al margen de su investigación.[20]
Sin estar convencida de las explicaciones de Divo, Amidala decidió comprobar su propia teoría. Empezó a interrogar a los enemigos políticos de Farr, los Senadores Mee Deechi y Halle Burtoni. Deechi reveló que había ordenado seguir a Farr para destapar los trapos sucios del Senador y que la noche antes de su muerte, Farr había ido a los muelles de Coruscant para asistir a una reunión clandestina. Aunque sus amigos le recordaron que Divo les había ordenado apartarse de la investigación, Amidala partió a los muelles junto a Organa. Allí, fueron emboscados y disparados sin saber la identidad de su atacante. Los disturbios alertaron a las fuerzas policiales de Coruscant, que respondieron y aseguraron la escena del crimen. Tras llegar al lugar él mismo, Divo expresó su malestar por las acciones de Amidala, quien no solo había optado por no informarle de la pista de los muelles, sino que había complicado su trabajo al alertar al asesino de que la investigación se cernía sobre el culpable. Durante la conversación, Amidala llegó a creer que Deechi podría ser el responsable del intento contra su vida, puesto que él le había informado de los muelles. Aunque Divo intentó frenarla, ella lo ignoró, y el inspector, frustrado, la siguió hasta la oficina de Deechi. Allí, encontraron a Deechi apuñalado en su silla, muerto.[20]
Para asegurar la vida de los individuos implicados en el caso, incluido los Senadores Amidala y Organa así como la ayudante de Farr, Lolo Purs, Divo los reunió a todos en el Edificio del Senado y les dijo que serían puestos bajo la protección de la policía de Coruscant y las fuerzas de la Guardia del Senado. Sin embargo, Lolo Purs se negó a ello y abandonó la sala. Divo preguntó a las personas restantes quién más había sabido que Amidala y Organa irían a los muelles. En respuesta, Amidala afirmó que la única persona que lo había sabido era la Senadora Burtoni. Aunque Divo intentó localizar a Burtoni, la kaminoana no pudo ser encontrada.[20]
Divo regresó con los senadores a tiempo para que Purs irrumpiera y afirmara que Burtoni la había atacado. Divo ordenó a la Guardia del Senado y a los droides policía de Coruscant que encontraran a Burtoni, y el policía dirigió una búsqueda en su oficina, sin éxito. Finalmente, pudieron capturarla y llevarla a la oficina del Canciller, donde esperaban varias personas involucradas en el caso, incluidos Amidala y Organa, así como el Canciller Supremo Sheev Palpatine. El interrogatorio inicial de Divo llevó a Burtoni a negar cualquier participación tanto en el asesinato de Farr como en el ataque a Purs. Divo luego reveló que un informe forense indicaba que el veneno utilizado para matar a Farr, que solo era letal para los rodianos, era de origen kaminoano. Con esa evidencia en la mano, Divo ordenó que arrestaran a Burtoni.[20]
Sin embargo, en ese momento, Amidala se dio cuenta de que, dado que el veneno debía haber estado en la bebida de todos, Purs también debería haber muerto, ya que también era rodiana. Amidala recordó entonces que Purs no había bebido nada. Purs, sintiéndose descubierta y expuesta, sacó un pequeño bláster y tomó a Amidala como rehén. Cuando Amidala le preguntó por qué había matado a Farr, Purs respondió que lo había hecho debido a la guerra que él había traído a Rodia y porque Rodia necesitaba un nuevo líder moralmente más fuerte. Como Deechi había sabido sobre la reunión, Purs había sentido que también tenía que ser eliminado. Su confesión validó la teoría original de Divo, ya que había sido un error del pasado de Farr lo que condujo a su asesinato. Durante la conversación, Divo, sin que Purs lo notara, activó discretamente a los droides policía del exterior de la oficina del Canciller. Sorprendieron a Purs en la puerta, permitiendo a Amidala liberarse y dejarla inconsciente. Entonces, los droides policía y Divo pusieron a Purs bajo su custodia.[20]
Complot para secuestrar al Canciller Supremo[]
- «Los Jedi se arriesgaron mucho, y dudo que alguna vez tenga una imagen completa de lo que implicaba esta operación. El Canciller me dijo que toda esta elaborada operación fue una maniobra Jedi para detener un intento de asesinato contra su vida, diseñado por Eval desde detrás de los muros de la prisión.»
- ―El Inspector Divo
A mediados de las Guerras Clon, una serie de criminales de alto perfil fueron arrestados y llevados al Centro de Detención Judicial Central de la República en Coruscant, habiendo sido vigilados muchos de ellos por Divo a lo largo de los años. Moralo Eval, un asesino en serie violento y sociópata ampliamente conocido por su genio trastornado y su brillantez astuta para evitar la ley, fue uno de los arrestados. Eval fue capturado por un destacamento de la policía en Denon, aunque la supervisión del Poder Judicial le permitió tener contacto con otros presos durante su reclusión en el Centro de Detención Central.[3] Poco después del apresamiento de Eval,[21] el famoso y notorio cazarrecompensas Cad Bane, que había cosechado el título de mejor cazarrecompensas de la galaxia durante las Guerras Clon, también fue arrestado. Bane había sido monitoreado por Divo durante años a pesar de su supuesta postura legal con una licencia de cazarrecompensas. Sin embargo, durante las Guerras Clon, Bane realizó varios ataques a gran escala contra la República Galáctica y los Jedi,[3] incluida la crisis de rehenes en el Senado para liberar a Ziro Desilijic Tiure.[17] Fue tras estos incidentes que la República tomó a Bane como prisionero. Cuando Divo vio el holograma de su captura, Divo solo comentó que parecía que Bane estaba seguro de que saldría de la cárcel.[3]
El tercer alto perfil criminal puesto bajo custodia fue Rako Hardeen, a quien Divo había estado persiguiendo durante años. Hardeen, también conocido como el Tirador de Concord Dawn, era un cazarrecompensas con fama de tomar casos extralegales. Divo pudo actualizar el perfil de Hardeen a menudo debido a sus frecuentes visitas a Coruscant, pero nunca pudo abrir un caso en su contra. Una mañana, sin embargo, Divo fue sorprendido por una alerta inesperada de que los Jedi lo habían arrestado y lo tenían prisionero en el Templo Jedi. Divo inmediatamente solicitó acceso a Hardeen, pero se le negó cualquier contacto con él. Incluso después de la transferencia de Hardeen al Centro de Detención Central, las solicitudes de Divo para entrevistarlo o examinar los informes de arresto de los Jedi fueron denegadas. Finalmente, Divo recibió una copia muy redactada del informe del arresto, que solo compartía el conocimiento de que Hardeen había aceptado una recompensa por un miembro del Consejo Jedi, asesinando al Maestro Jedi Obi-Wan Kenobi en nombre de un empleador. Divo supo de inmediato que incluso esta transcripción redactada era suficiente para derribar a quienquiera que estuviera apoyando a Hardeen, pero los Jedi volvieron a negar a Divo su información sobre el asunto.[3]
Tras una semana del arresto de Hardeen, Divo descubrió que Kenobi seguía con vida, habiendo fingido ser Hardeen para infiltrarse en la comunidad de la prisión para aprender acerca de un supuesto complot contra el Canciller Supremo Sheev Palpatine.[3] Kenobi, como «Hardeen», se alió con Bane y Eval[21] e impulsó una fuga de la prisión que permitió a docenas de endurecidos criminales vagar por las calles de Coruscant. Divo se mostró incrédulo ante esta revelación, especialmente después de descubrir que la oficina del Canciller Supremo no tenía registros de un complot en su contra. Divo contactó con el Canciller Palpatine para recavar más información. El Canciller le dijo que toda la operación había sido un elaborado estratagema Jedi para detener un intento de asesinado ideado por Moralo Eval entre bastidores. El Canciller simpatizaba con la furia de Divo y le dijo que él también había estado preocupado por que los Jedi no le hubieran incluido en sus planes. Divo quedó impactado por la vulnerabilidad del Canciller al admitir que él también estaba incómodo con la creciente independencia de los Jedi durante la guerra. A pesar de lo que ganó en su conversación con Palpatine, Divo no estaba seguro de poder obtener una idea detallada del arriesgado plan Jedi. Otros intentos de investigación dieron a Divo el conocimiento de que el complot contra Palpatine había dependido en gran medida de la matriz de camuflaje holográfica del inventor criminal Sinrich, pero averiguó poco más.[3] Todos los mercenarios que participaron en el intento de asesinato, incluido Bane y Eval, fueron arrestados después de que su plan fuera saboteado por Kenobi. A pesar de tener entre rejas a Bane y Eval una vez más,[22] lo que ocurrió con el verdadero Rako Hardeen permaneció en secreto, uno que los Jedi se llevarían a la tumba.[3]
Cerca del final[]
Un nuevo problema para Divo y la Fuerza de Seguridad de Coruscant estuvo relacionado con el caso estancado durante mucho tiempo para determinar el liderazgo de Sistemas de Transporte Xomit, al producirse la muerte del jefe de STX, Xomit Grunseit. Debido a su muerte, la cúpula de Sistemas de Transporte Xomit fue modificada y se desconocía quién había asumido su liderazgo.[3]
Un tiempo antes del año final de la guerra, una oleada de violencia y una reasignación sospechosa de fondos y capital llevaron al descubrimiento de un sindicato criminal de corta duración pero expansivo conocido como el Colectivo Sombra. Las investigaciones revelaron que el sindicato era resultado de la acción conjunta del Cártel Hutt, el Sindicato Pyke, el Sol Negro, y el grupo terrorista mandaloriano conocido como la Guardia de la Muerte. Divo y la FSC elaboraron una lista conjetural de líderes del Colectivo: Jabba Desilijic Tiure del Cártel Hutt, Pre Vizsla,[3] antiguo gobernador de la luna mandaloriana Concordia y líder de la Guardia de la Muerte,[23] Lom Pyke, antiguo capo y actual jefe del Sindicato Pyke, y Ziton Moj, líder del Sol Negro y sucesor de Xomit Grunseit, que había muerto recientemente. Dos líderes adicionales, que se pensaba que eran los ideólogos de la organización, eran conocidos por estar en activo por Divo pero no estaban identificados. Se creía que el Colectivo Sombra había financiado el golpe de estado contra el régimen de Satine Kryze en Mandalore[3] en el 19 ABY,[2] lo cual había sido un objetivo de Vizsla durante años.[23] Durante la caída de Mandalore, Kryze fue derrocada y asesinada,[24] y el planeta quedó sumido en el caos.[3]
Una ola de piratería a lo largo de la Ruta Comercial Metellos, una ruta hiperespacial que conducía a Coruscant, hizo que Divo realizara una llamada entre divisiones para recaudar información acerca de asaltantes weequays, en base a las evidencias que había tras los ataques. El torrente de informes que recibió Divo le proporcionaron un nombre único y consistente: Hondo Ohnaka. Ohnaka era el líder pirata de la Banda Ohnaka, un grupo establecido en Florrum mayormente conocido por haber secuestrado al Jefe de Estado Confederado, Dooku, al principio de la guerra. La investigación de la banda por parte de Divo no reveló convicciones políticas, puesto que el grupo se había cruzado tanto con la República Galáctica como con la Confederación de Sistemas Independientes y había resultado ser una molestia para ambos. Mientras analizaba la información que había recibido, Divo encontró una carta enviada por Ohnaka a una nave asaltada y una imagen de vigilancia del infame capitán pirata. Aunque su llamada resultó en un suministro aparentemente interminable de solicitudes, órdenes judiciales y recompensas por la captura de Ohnaka de agencias periféricas, Divo nunca respondió a ninguna de ellas. Durante el resto de la guerra, Ohnaka se mantuvo en la frontera del Borde Exterior.[3]
Más adelante en las Guerras Clon, un impactante ataque terrorista contra el corazón del Templo Jedi en Coruscant manifestó cómo de impopulares se habían vuelto las Guerras Clon. El ataque terrorista estaba aparentemente conectado a una serie de protestas alrededor del templo que exigían el fin de la guerra. Una bomba nanodroide se había detonado en los hangares del templo, matando a doce trabajadores, ocho clones, seis Jedi, e hiriendo a docenas más. El analizador de escenas del crimen de los Jedi, Russo-ISC, lideró una investigación detallada del ataque, ayudado por los Jedi Anakin Skywalker y Ahsoka Tano. A través de una serie de imágenes de vigilancia del ataque mostradas holográficamente, el trío pudo confirmar que la bomba se había encontrado dentro del cuerpo de uno de los trabajadores afectados, Jackar Bowmani, que había sido un experto en municiones con autorización para acceder al templo. Lo que se suponía que era una investigación Jedi estrictamente interna finalmente cayó en la jurisdicción militar de la República, dada la muerte de civiles y soldados clon. Divo y la policía quedaron mayormente al margen de los procedimientos en ambos casos, aunque algo de información fue compartida con el inspector.[3]
En un extraño giro de los acontecimientos, Ahsoka Tano se convirtió en sospechosa de ser la ideóloga del ataque tras aparentemente matar a Letta Turmond, la protestante que había alimentado con nanodroides a su marido, Bowmani.[25] Los policías de la FSC de los niveles bajos ayudaron en la búsqueda de la Jedi fugitiva, que fue capturada por la Guardia de Coruscant[26] y llevada ante un alto tribunal. Su inocencia fue eventualmente demostrada cuando la Caballera Jedi Barriss Offee confesó el crimen y fue arrestada en el lugar de Tano.[27] Divo no recibió información hasta que se formuló un veredicto para Offee. Tras el juicio, Divo recibió un informe detallado del incidente y tuvo acceso a una muestra de nanodroides NM-K incapacitados y a un bote de bariones comprimidos utilizado para contrabandearlos, siendo ambos puestos a prueba y analizados.[3]
Era Imperial[]
Ascenso del Imperio[]
Las Guerras Clon llegaron a un agitado final en el año 19 ABY,[2] cuando el Canciller Supremo Sheev Palpatine declaró que la República Galáctica sería convertida en el primer Imperio Galáctico y él se convertiría en el Emperador Palpatine. Su ascenso al poder vino dado por la pérdida del liderazgo de la Confederación de Sistemas Independientes con las muertes del Jefe de Estado Dooku, el General Grievous, y el Consejo Separatista en rápida sucesión, así como por el genocidio de los Jedi tras un supuesto movimiento golpista para derrocarlo.[28] Aunque el gobierno Imperial revisó el código penal de la República y creó el Buró de Seguridad Imperial como su principal agencia de inteligencia y del cumplimiento de la ley, el Teniente Divo permaneció en su posición en la Fuerza de Seguridad de Coruscant. Divo desconfiaba de la noción «rebelión Jedi» a pesar de su difícil relación con la Orden Jedi. Entre la lista de supuestas víctimas de la Purga Jedi se encontraba Quinlan Vos, con quien Divo había trabajado muchos años antes. A pesar de que Vos estaba supuestamente implicado en la insurrección Jedi, Divo se mantuvo en silencio acerca de cualquier asunto relacionado con él u otros Jedi.[3] Vos fue posteriormente incluido en una lista de posibles supervivientes de la Purga y objetivos principales de la Inquisición, dedicada a cazar Jedi.[29]
El caso sin resolver de Xrexus[]
- «Por lo que sé, los Jedi no tenían constancia de lo que pasó con Eldra Kaitis. Cuando obtuve los datos de KRONOS, no quedaba ningún Jedi a quien informar sobre este descubrimiento. Solo puedo suponer que murió, y que tal vez la desaparición de Xrexus se debió a un «asunto Jedi» del que nunca se informó a ninguna otra agencia.»
- ―El Inspector Divo acerca del caso Xrexus
En el primer año del Imperio Galáctico, las fuerzas Imperiales detuvieron a KRONOS-841, un miembro del Gotra Droide, que fue posteriormente interrogado por Divo. A cambio de un indulto, KRONOS ofreció a Divo un elevado volumen de datos de viejos recuerdos, algunos de más de una década. Mientras revisaba estos datos, Divo descubrió inesperadamente una nueva pista en el caso del Cártel Xrexus, que llevaba mucho tiempo sin resolverse. Reconstruyendo los recuerdos de KRONOS, Divo y sus agentes restauraron una imagen de la fundadora del Cártel Xrexus, Xev Xrexus, en su misteriosa subasta del[3] 32 ABY.[30]
Con la imagen restaurada y los otros recuerdos de KRONOS, Divo logró vislumbrar el destino de Xev Xrexus y su cártel. El artículo que había estado en subasta era una Padawan Jedi, Eldra Kaitis, por quien KRONOS y sus secuaces estaban pujando. La subasta había sido ganada por el industrial Jee Kra, quien ofreció 2.5 millones de créditos por la Padawan. La evidencia de KRONOS terminó ahí, pero investigaciones posteriores de Divo revelaron que Kra fue encontrado muerto en un accidente de transbordador más allá de las fronteras de la República Galáctica. Desafortunadamente, Divo también descubrió una vieja orden de la Oficina del Canciller Supremo, que cerraba las investigaciones sobre la muerte de Kra y clasificaba la información relacionada con la situación. Tanto los registros de la Orden Jedi como otras agencias legales empleadas por la República no revelaron nada, y el caso del Cártel Xrexus se enfrió una vez más. En sus archivos, Divo sospechaba que Kaitis había muerto en la subasta o en algún momento posterior y que la desaparición de Xev Xrexus estaba relacionada de alguna manera con «asuntos Jedi», lo que explicaba por qué ninguna otra agencia tenía informes de la subasta.[3]
Retiro y años finales[]
- «No puedo creer que el Imperio apruebe el uso de tales máquinas. ¿No peleamos una guerra para detener a tales ejércitos de asesinos? Estoy totalmente en desacuerdo con tratar a esta cosa como algo más que un arma, Andressa. Esto no es un droide policía. Este es un asesino desinhibido sin noción del valor de la vida o el orden. Nada bueno saldrá de ello.»
- ―Tan Divo habla a su hija acerca de IG-88
Durante los primeros años del Imperio Galáctico, el Teniente Divo se retiró de la Fuerza de Seguridad de Coruscant con honores. Tras su retiro, muchos de sus archivos fueron heredados por la Oficina Imperial de Investigaciones Criminales, incluyendo vastos registros sobre la simbología de los tatuajes. Por recomendación de Divo, la Oficina de Seguridad Imperial implementó un sistema de identificación de tatuajes mediante el despliegue de droides de protocolo especializados en este campo en puertos espaciales y áreas de tránsito abarrotadas, donde podían diferenciar fácilmente las marcas personales y culturales de los criminales. La hija de Divo, Andressa Divo, pretendía continuar con la tradición familiar y se alistó en la Academia de Policía del Distrito Federal, la misma institución a la que había asistido su padre. Cuando se graduó, Andressa decidió unirse al Buró de Seguridad Imperial como agente. Andressa había sido testigo del número de víctimas que las Guerras Clon causaron en la galaxia, y especialmente su padre, y absorbió la retórica e ideología del Imperio. El ahora retirado Inspector Divo, sin embargo, estaba menos entusiasmado con el estado totalitario del Nuevo Orden. Él y Andressa mantuvieron correspondencia después de que ella se uniera al BSI, donde a menudo la enviaban fuera de Coruscant para lidiar con incidentes e investigaciones dispersos en toda la galaxia.[3]
Al final de las Guerras Clon, el Imperio indultó y eliminó los antecedentes penales de varios cazarrecompensas, entre ellos Boba Fett, para que pudieran ejercer como una extensión de la ley Imperial. Andressa, mientras tomaba la custodia del fugitivo Isquik Tors de manos de Fett, habló brevemente con el cazarrecompensas y luego escribió a su padre sobre su interacción, sabiendo que él estaba interesado en él. En correspondencia posterior, Andressa escribió a Divo sobre su trabajo creando un caso para expulsar de Coruscant a las carreras de vainas, mientras investigaba circuitos de carreras en el mundo industrial de Corellia basándose en informes de la FSC. También usó uno de los informes de Divo sobre el intento de secuestro del Canciller Supremo Sheev Palpatine durante las Guerras Clon para realizar más investigaciones sobre la evolución de la matriz de camuflaje holográfica de Sinrich. En el BSI, Andressa intentó averiguar más sobre el liderazgo y el negocio de Sistemas de Transporte Xomit, con pocos resultados. Las diferentes opiniones de Tan y Andressa sobre la forma de gobernar del Imperio los llevaron a discutir sobre el caso de Andressa sobre el droide asesino IG-88B. Divo se horrorizó al enterarse no solo de que el Imperio permitía que el droide asesino trabajara para él, sino de que la misma Andressa trataba al droide como a cualquier otro cazarrecompensas. En la mente de Divo, IG-88 era una señal de que el Imperio estaba llevando la aplicación de la ley a sus extremos.[3]
A medida que movimientos rebeldes iban apareciendo por toda la galaxia, el trabajo de Andressa se centró en sofocar la disidencia y la oposición al Imperio. Uno de los focos de Andressa estuvo sobre los Senadores Bail Organa y Mon Mothma, que se habían vuelto cada vez más críticos con el Imperio y reservados en sus asuntos. En un acto de traición, Mothma se fugó públicamente del Senado Imperial[3] y declaró la creación de la Alianza para Restaurar la República,[31] mientras que Organa se convirtió en delegado a tiempo parcial y su hija, Leia Organa, se convirtió en Senadora de Alderaan. Ambos Organas fueron intensamente monitoreados por Andressa y el BSI. Las pruebas de la relación de Alderaan con la rebelión hizo que el Gran Moff Imperial Wilhuff Tarkin emprendiera una acción rápida y decisiva contra el planeta.[3] En el 0 ABY,[32] Tarkin usó una súperarma recién creada, la Estrella de la Muerte, para destruir Alderaan. Tan Divo se encontraba en Alderaan en ese momento, y murió en el desastre[3] junto a Organa[33] y casi dos billones de formas de vida.[34] Ese día fue el último día en que él y su hija hablaron, y después de su muerte, todos los archivos que Andressa había recopilado sobre Bail Organa desaparecieron.[3]
Legado[]
- «La base de la aplicación de la ley es servir a las personas luchando contra los delitos que amenazan su seguridad. Esto estaba, en mi opinión, separado del gobierno. La retrospectiva obtenida al recorrer estos archivos de casos y ver las actitudes exhibidas por mi abuelo y mi madre es esclarecedora. Si bien puedo castigar a aquellos que tienen una visión ingenua de la aplicación de la ley, yo mismo he tenido una visión ingenua de su relación con el gobierno galáctico. Es, en revisión humillante, demasiado fácil que el largo brazo de la ley sea manipulado por intereses distintos al bien público.»
- ―Exantor Divo, reflexionando sobre los archivos de casos de Tanivos y Andressa Divo
En los años posteriores a la muerte de Tan Divo y la destrucción de Alderaan, estalló la Guerra Civil Galáctica entre el Imperio Galáctico y la Alianza Rebelde envolviendo a toda la galaxia. Andressa Divo continuó sirviendo en el Buró de Seguridad Imperial, investigando a desertores Imperiales y operaciones de contrabando.[3] En el 4 DBY,[2] no obstante, el Emperador Sheev Palpatine fue asesinado durante la Batalla de Endor y el Imperio se fracturó poco después. La Alianza Rebelde se transformó en la Nueva República,[35] y, en el 5 DBY,[2] derrotó al Imperio durante la Batalla de Jakku, tras la cual el Concordato Galáctico concluyó finalmente el reinado del Imperio.[36] Andressa, todavía leal al Imperio, tomó consigo a su joven hijo, Exantor Divo, y se dio a la fuga, ya que esperaba que la Nueva República la ejecutara como enemiga del estado. Costó mucho convencerla para que saliera de su escondite, tras lo cual la República la convenció de que no llevaría a cabo su arresto ni sería castigada dado su historial, que fue meticulosamente investigado por los nuevos jefes de las fuerzas del orden. Se le ofreció una invitación para ayudar a la Nueva República con su experiencia, pero se negó rotundamente y se retiró, considerando ilegítimo al nuevo gobierno.[3]
Exantor Divo, por su parte, siguió los pasos de su familia y se alistó en la Academia de Cumplimiento de la Ley de Hosnian Prime, para disgusto de su madre. Aunque ella no evitó su alistamiento, su correspondencia posterior se volvió tensa y se abrió una brecha entre ellos por su apoyo al Imperio Galáctico, al igual que en su relación con su difunto padre. Exantor se graduó en el 19 DBY y no vio a su madre asistiendo a la ceremonia de graduación. Años después, sin embargo, encontró un holograma de la ceremonia que no era parte de la grabación oficial emitida por la Academia. Contactó a Andressa para hablar sobre ello, y ella reveló que había asistido a la ceremonia. En su conversación, Andressa añadió que su tradición familiar de hacer cumplir la ley no les permitía el lujo de elegir las leyes que hacían cumplir. En un cambio sorprendente de sus creencias durante los primeros años de la Nueva República, Andressa admitió que tenía dudas sobre el Imperio pero que no tenía una salida para expresarlas, lo que había dañado la relación con su padre. Como no quería que Exantor enfrentara el mismo aislamiento que ella, prometió que él siempre podría hablar con ella si tenía alguna duda sobre la ley de la Nueva República.[3]
Aunque inicialmente quería ser Ranger de Sector, Exantor se convirtió en Comisario de Policía en Hosnian Prime y recibió tres veces la Medalla de la Nueva República al Servicio Público Distinguido. Vivió en Hosnian Prime con su pareja y dos niños, los bisnietos de Tan Divo. Cuatro años después de obtener su título de Comisario, Exantor recibió como regalo los archivos de casos personales de Tanivos Divo, que se habían dado por perdidos en tiempos de las Guerras Clon. Exantor también tuvo acceso a los archivos del Buró de Seguridad Imperial de Andressa, y, junto a los suyos, ensambló tres generaciones de información e historia en una compilación conocida como Escoria y Villanía: Archivo de Casos Acerca de los Más Notorios de la Galaxia. Junto a sus propias anotaciones y escritos sobre los casos de su abuelo y su madre, Exantor incluyó extractos de sus archivos y sus reflexiones sobre el significado y el propósito de la aplicación de la ley. En el epílogo de la compilación, Exantor reflexionó sobre las revelaciones esclarecedoras que tuvo sobre la aplicación de la ley mientras recorría los archivos de su abuelo y su madre, que consideró que eran una clave útil para comprender cómo evolucionaban tanto el crimen como la ley.[3]
Apariciones[]
- Star Wars: The Clone Wars — «Esfera de Influencia»
- Star Wars: The Clone Wars — «Asesinato Senatorial» (Primera aparición)