Si me dieran una moneda por cada vez que Barry keoghan se mete a una familia y eso termina en algún miembro muerto, tendría dos, lo cual no es mucho pero es raro que pasara dos veces.

Si algo admito es que Yorgos se está volviendo de mis directores favoritos, lo que me encanta de el es la diversidad en sus películas, no he visto todas, pero junto con esta y otras, más sipnosis de sus demás proyectos, he de admitir que tiene ideas y propuestas bastante interesante y medio fumadas, esta es una de ellas.

Para mí es una gran película, con una historia entretenida, es lento, pero un lento bastante disfrutable por dos razones en particular, su guión y su fotografía.
En la primera mitad no sabemos como tal el rumbo de la película, pero es bastante entretenido ver lo que nos van planteando, pero después que nos súper resumen en un momento de que si va a tratar, la historia fluye de una manera maravillosa, su guión es bastante entretenido, algo ambiguo, pero muy bueno y junto con una fotografía y dirección preciosa, realmente disfrutas mucho la historia.

Sus actuaciones igual son muy buenas, talvez con los niños no me atrapó su actuación, la hija en especial, pero los demás realmente dan una buena interpretación especial Barry Keoghan del cual me enamoro mas tras cada trabajo que veo de el.

Ahora sí, yo esperaba en algún momento nos explicar que estaba pasando, o mejor dicho, el por qué, ya que una historia muy terrenal pasa de golpe a algo más sobrenatural por así decirlo y es que no puedo decir bien que es porque la misma historia no lo hace, y busque si talvez pase algo por alto o dieron alguna explicación, pero no, todas son teorías solamente, no está mal, eso sí, me gusta mucho la historia aún con esa incertidumbre pero si hubiera impulsado más la historia una mejor explicación.

Con un final bastante abierto a interpretaciones, realmente es una gran película de Yorgos, con una atmósfera muy incómoda pero que acompaña a la perfección esta película tan rara y bizarra.