Hugo_Valenzuela’s review published on Letterboxd:
Si es que cuando Dreamworks se pone las pilas, consigue ser el rey de la animación occidental.
La verdad es que una cosa que siempre me va a asombrar de este estudio es irónicamente, su nula consistencia en cuanto a estrenos. Por una parte, son perfectamente capaces de hacer algunas de las películas animadas más rompedoras, imaginativas y mágicas de cualquier compañía americana. Pero por otro lado, si también se lo proponen, pueden hacer auténticas aberraciones que se convierten en un blanco fácil de críticas negativas. Y si precisamente hay algo que todos los seres humanos con capacidad de raciocinio pudimos notar durante los últimos 2 años en Internet fue la total falta de neuronas en ciertos individuos que sentían una necesidad enfermiza de idolatrar a Dreamworks mientras le tiraban hate a Disney, incluso si luego la empresa que tanto endiosaban la llega a cagar más que la competencia.
Es por eso que cuando el más reciente proyecto de la compañía de la luna comenzó a recibir elogios de la crítica y el público, muchos ya se vinieron arriba con el mismo discurso cansino de siempre: que si Dreamworks ha revivido, han vuelto a ser el nº1, entre muchas otras estupideces. El hecho de que hayan hecho una cosa bien ahora es prácticamente insignificante a largo plazo, pues en el momento en que vuelvan a lanzar un producto mediocre, la gente volverá a decir que el estudio está en decadencia, y el ciclo se repetirá por los siglos de los siglos. Gente, por favor, no seáis así, vosotros sois mucho más inteligentes que estos energúmenos.
Pero ya hablando de la cinta del día de hoy, después de sufrir una de las experiencias más desagradables en el cine este año, necesitaba un catalizador, y menos mal que lo pude encontrar una semana después cuando más lo necesitaba. Creo que es muy fácil saber que un largometraje va a ser buenísimo cuando todo el mundo se ha puesto unánimamente de acuerdo para elogiarlo, pero estamos ante uno de los pocos casos donde todos los aplausos están totalmente justificados y merecidos. Pero mi amor por esta cinta va mucho más allá, pues no solo me pareció la mejor cinta animada del 2024 (Dreamworks jamás lo tuvo tan fácil para ganarse el Óscar), sino que dentro de su estudio me ha parecido digna de entrar al top 3 tras un tiempo de meditación.
Desde los avances, había un elemento que no iba a defraudar para nada, y ese es la animación. No es broma o una exageración que es de las producciones más vivas y expresivas que he visto en un tiempo desde una perspectiva meramente visual. Si bien el estudio dejó el listón demasiado alto con "El Gato con Botas: el último deseo", por alguna razón milagrosa lograron superarse a sí mismos. Hay un muy palpable mimo y cariño a cada fotograma, con una paleta de colores que acentúa cada momento a la perfección, y también me pareció un detallazo que los distintos animales que habitan esta isla se desplazan y mueven de una forma sumamente realista, demostrando que los animadores tuvieron el tiempo necesario para informarse sobre el comportamiento de las criaturas para reflejarlos de la mejor manera posible en la pantalla. En resumidas cuentas, no hay ni un solo frame de esta película que se puede decir que se ve mal, y si realmente alguien se atreve a decir lo contrario, yo lo siento mucho, pero me temo que se trata de un caso de ignorancia en todo su esplendor.
Algo que no me esperaba fue que la banda sonora emanara tantas vibras de "Cómo entrenar a tu dragón", y no es para menos viniendo del mismo director. Pero el caso es que en "Robot Salvaje", el soundtrack te pone la piel de gallina, habiendo una enorme variedad en cuanto a composición sin sentirse como un refrito o un derivado de la famosa trilogía de la compañía. Si de por sí los momentos más intensos ya te dejaban tiritando por la espectacular animación, con la tremenda música de fondo es científicamente 10000% imposible no dar un carajo por lo que está sucediendo en la pantalla, esto es lo que yo llamo esencia Dreamworks en toda regla, y lo demás son tonterías.
Aunque la trama y personajes siguen ciertos patrones bastante conocidos en el estudio y en otros de la competencia, la razón por la que aquí funcionan tan bien es por su brillante ejecución. Los tráilers me daban la sensación de que habría varios elementos similares a "Wall-E" por la implementación de un robot como protagonista, pero por suerte esta cinta consigue tener su propia personalidad e identidad y separarse de la obra de Pixar para contar una historia sorprendentemente madura sobre el amor y la naturaleza que no subestima a su audiencia y la trata con respeto.
Como de los temas que se tocan en el metraje me gustaría hablar más adelante, primero quiero decir algo que me alivió bastante. Y es que a pesar de que como dije, hay algunas partes del guión que se vieron antes en otras cintas animadas, los realizadores hicieron todo lo posible para de alguna manera "quitárselas de en medio" cuanto antes, para que así el progreso y avance de la trama se sienta menos formulaico y predecible.
Y ahora sí, lo que realmente tenía ganas de hablar sobre este proyecto, los temas que trata. El material promocional no daba demasiados huecos a interpretación sobre de qué trataría la película: una robot que debe cuidar a un gansito en un bosque poblado por múltiples especies animales. Lo que en principio puede sonar como una premisa aburrida y sin demasiada chicha, Dreamworks hizo una de las cosas que mejor sabe hacer: darle la vuelta a la tortilla y sorprendernos a todos con su forma de contar una historia aparentemente simple.
Aprecio mucho la valentía de la cinta por indagar en temas profundos en algunas ocasiones como es el caso de la vida y la muerte, y sobre cómo la cadena alimenticia y la jerarquía del mundo animal puede ser muy injusta para la mayoría. Y aunque de por sí hubiera sido interesante ver una película que aborde el tema de la naturaleza de esta manera, los realizadores dieron un paso más allá, y decidieron añadir una trama que en mi opinión se acaba por llevar todos los aplausos y críticas favorables por parte de los espectadores.
Si bien Chris Sanders ya había mostrado una de las mejores amistades en la animación con Hipo Y Desdentao en "Cómo entrenar a tu dragón", esta vez subió más la apuesta, y nos brindó una historia muy conmovedora entre un ser robótico y una cría de ganso, con una pasión y dedicación que se puede notar en cada segundo que pasa en la duración. El ritmo de esta historia es simplemente perfecto, te introducen a ambos personajes de forma natural para que los conozcas a fondo, las interacciones se sienten creíbles por que se les dedica el tiempo necesario para hacerlas brillar, y eso es especialmente visible entre la protagonista y su inesperado hijo ganso y su amistad con el zorro.
Por cierto, ¿os he mencionado ya lo estúpidamente adorable que es Roz? Nuestro personaje principal cumple con todas las características que todo buen protagonista debería tener: es carismática, divertida, siente una enorme curiosidad por aquello que le rodea y sobre todo, crece, madura y evoluciona a lo largo de la película. Resulta muy satisfactorio ver cómo este robot que en principio solo fue diseñado para el cuidado y servicio de los humanos terminó por unir a todas las criaturas del bosque en una comunidad, porque al fin y al cabo, esta es una historia sobre la ayuda. Pero no simplemente en el sentido de hacer favores a los demás y ya, sino que en esta cinta se muestra como una herramienta de disposición y sacrificio, de entrega a aquellos que más lo necesitan. Roz eligió criar al gansito porque así lo requirió su programación, pero conforme más aprende sobre el concepto de maternidad, más se da cuenta de que gracias a ella, tanto su hijo como todos los animales son mucho más felices, y eso sí que es una verdadera muestra de amor, deseo por hacer el bien y entrega al prójimo, maldita sea.
Otro personaje que me sorprendió de forma positiva fue el zorro. Al principio no me molestaba la idea de que fuera el alivio cómico, pero agradezco que no solo estuvo encasillado en ese rol, ya que también le dieron su propio arco de personaje. Aunque los seres humanos siempre hemos tenido la costumbre de asociar algunos animales con emociones/sentimientos concretos (véase el cerdo con el apetito por ejemplo), en esta película su carácter mentiroso y astuto es fruto de su rechazo por los demás animales. Y a pesar de iniciar con mal pie, el cánido logra desarrollar un tierno vínculo con Roz, ya que por fin encontró a alguien que lo amara y respetara tal y como es, así como todos aquellos que lo despreciaron en su día.
La estructura narrativa me pareció de lo más completa, pues al igual que en otras cintas de Dreamworks que adoro con todo el alma como "Shrek 2", sabe darle algo a todo el mundo. La primera mitad tiene un tono desenfadado y misterioso, con una isla por explorar y personajes que conocer, con una buena dosis de humor, y en general, resulta muy agradable de ver. Pero cuando la trama se torna más oscura y seria durante el tercer acto, no se siente fuera de lugar en lo absoluto. Además, es una gran oportunidad para darle tiempo en pantalla a todos los animales y darles la posibilidad de redimirse. Además de la hermosa animación e imponente música, el planteamiento y conclusión a la que la película llega me parece sensacional. Y lo mejor es que como mencioné anteriormente, la cinta es lo suficientemente valiente como para no censurarse a sí misma, ya que no tiene reparo en mencionar la muerte de algunos personajes menores y sin ningún tipo de tapujo. Además de que el final, aunque algunos podrán encontrarlo previsible, considero que fue lo mejor que pudieron haber hecho, para así cerrar con broche de oro y con un cosquilleo en el corazón esta grandiosa producción.
En conclusión, hacía años que una obra de Dreamworks no me impresionaba tanto, pero es que aún así me ha dejado totalmente en shock lo soberbia que fue cada segundo, que lo disfruté con los ojos de un niño. A diferencia de cintas pasadas de la compañía como "Kung Fu Estafa 4", que se nota que se hizo sin ningún tipo de motivación artística y con el dinero fácil como única meta, cintas como "Robot Salvaje" son todo lo contrario. Es una película que con tan solo verla, se puede ver que todos los que la hicieron sentían un enorme cariño y empeño por su trabajo, y no lo hicieron para cobrar un cheque. Y precisamente por eso me animo a darle el codiciado 10/10, pues me ha demostrado que gracias a su precioso estilo visual, banda sonora prodigiosa, historia conmovedora y personajes sobresalientes que si Dreamworks se enfoca en hacer una gran cinta, lo va a lograr sin apenas esfuerzo, y si para ello tienen que darnos 20 obras mediocres en el proceso, que así sea, pues pocas películas últimamente me hacen salir de la sala de proyección con una sonrisa esbozada en mi rostro como esta.