CASTAÑO

Me presento: Soy Miguel Ángel Robles y llevo toda la vida dedicándome a esto de los pinceles, los lapiceros o las plumillas. He dedicado mis obras a multitud de temas pero ya hace unos cuantos años descubrí mi amor por las plantas y la naturaleza en general. Junto con mi hermano, abrimos un vivero de plantas y yo empecé a hacer dibujos del natural de los detalles más significativos de cada especie. Aquí quiero mostraros  mi trabajo. Empezaré mostrando algunos dibujos hechos a plumilla.

EL CASTAÑO (Castanea sativa)

Mi primera lámina representa distintas partes del Castaño: Hojas, flores, fruto...

El castaño es un árbol caducifolio cuyas grandes hojas superan a veces los 20 centímetros y tienen forma lanceolada con borde aserrado y pecíolo corto. Es una especie monoica con flores masculinas en largos amentos erguidos que se polinizan con la acción de los insectos. Las flores femeninas aparecen en grupos de tres. Las semillas (castañas) suelen presentarse agrupadas también en número de tres (dos laterales plano-convexas y una central con ambas caras planas) y están protegidas por una cúpula espinosa llamada comúnmente erizo.

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PINO RESINERO

El pino resinero o pino marítimo o pino rodeno, como prefieras, (Pinus pinaster) es un árbol no muy longevo de tallo recto o a veces curvado en forma de abanico; puede alcanzar los 30 metros de altura. El follaje es de color verde oscuro, de forma piramidal en la fase juvenil que con los años adquiere una forma más extendida. Las hojas (acículas) alcanzan los 20 cm de longitud, son de color verde brillante, se reúnen en grupos de a dos que se hacen más próximos hacia la extremidad de las ramificaciones. Posee flores masculinas y femeninas. Las masculinas están formadas por estambres afilados que desprenden abundante polen amarillo. Las femeninas se agrupan en conos o piñas, están reunidas en grupos de dos o más y miden de 10 a 20 cm, primero de color verde para adquirir más tarde una tonalidad rojo brillante. Tienen  quillas muy marcadas y ombligos pinchudos. Las semillas son piñones de unos 8 mm con un ala membranosa de unos 3,5 cm. Es un árbol productor de resina, circunstancia que da lugar a uno de sus nombres más comunes.

EL MAGUILLO

Se distribuye por casi toda Europa hasta los países escandinavos. En España es más difícil verlos en las zonas más meridionales, sin embargo en el norte lo conocen bien, ya que sus pequeños frutos fueron durante tiempo la base de la famosa sidra asturiana. Hablamos de esta rosácea, este manzano silvestre al que llamamos “Maguillo” (Malus sylvestris), que puede tener porte arbustivo o de pequeño árbol de 5 a 15 metros de altura. Sus hojas de unos 5 cm de largo, son alternas, caducas, ovadas y con el borde aserrado. Sus flores se producen en corimbos (racimos) separados, son de color rosado compuestas de cinco pétalos y aparecen desde finales de marzo a principios de mayo según zonas. Sus frutos son unas pequeñas manzanas redondeadas y amarillentas de 4 a 5 cm de diámetro en cuyo interior esconde de 5 a 10 semillas (pepitas) de color marrón. Estas manzanas maduran de septiembre a octubre y constituyen un alimento fundamental para pájaros y roedores.

ARCE DE MONTPELLIER

Los franceses como siempre se nos adelantaron. Estuvieron muy diligentes a la hora de poner nombre a este pequeño arbolito caducifolio que se extiende, sin embargo, por gran parte de nuestro territorio patrio. Le pusieron Arce de Montpellier (Acer monspessulanum) en honor a esta bella ciudad francesa de mismo nombre. No obstante nosotros la seguimos sintiendo una especie muy nuestra aunque le vayamos reduciendo cada vez más sus espacios naturales.

El Arce de Montpellier es el hermano pequeño de los arces, aunque pueda llegar a alcanzar de 8 a 10 metros de altura. De carácter monoico, este árbol posee un follaje frondoso con hojas pequeñas y coriáceas, de forma palmeada generalmente con tres lóbulos, aunque ocasionalmente puedan presentar hasta cinco lóbulos. Su color verde se torna amarillento, anaranjado o incluso rojizo con la llegada del otoño. Sus flores aparecen de Abril a Mayo, son unisexuales, poco llamativas, de color pálido verdoso-amarillento formando racimos colgantes. Su fruto es una sámara de doble ala que tan buen resultado le da a la hora de dispersar sus semillas al viento.

EL LORO

Hoy os presento al más olvidado de nuestros árboles autóctonos: el loro o azarero. (Prunus lusitanica). Su nombre, su aspecto general y la forma de sus hojas recuerdan al laurel, especie con la que el profano puede llegar a confundirlo, pero la estructura de sus flores demuestran claramente que pertenece a la familia de las Rosáceas, es decir, es un pariente cercano de almendros, cerezos o endrinos.

Es un árbol perennifolio, que puede alcanzar hasta 18 metros de altura, con las hojas ovadas o elípticas acuminadas, dentadas, con el haz verde oscuro y brillante, lampiñas por ambas caras, con pecíolos delgados y rojos. Las flores son aproximadamente de 1 centímetro de diámetro, blancas, con 5 pétalos distribuidas en racimos de 25 centímetros de largo, a mediados del verano. El fruto es ovado de más de 1 centímetro que en su proceso de maduración pasa del verde, luego rojo, para finalizar negro, formando racimos de diminutas “cerecitas”.

EL OLMO DE MONTAÑA

El Olmo de montaña (Ulmus glabra) es un árbol caducifolio de 20-25 m de altura, de tronco recto y grueso con la corteza rugosa y fibrosa. Sus hojas son alternas, dispuestas en dos hileras sobre un mismo plano, a uno y otro lado del tallo, tienen de 12-15 cm de longitud, con la base asimétrica. El limbo es ovalado con el haz pubescente, áspero al tacto y el envés con pelillos en la nervadura. El margen es doblemente aserrado. Los nervios destacan en el envés, que es de un verde más claro que en el haz. El pecíolo es muy corto. Las flores se disponen en aglomeraciones florales densas (glomérulos) a lo largo de las ramillas del último año. Florece en Marzo-Abril. Las semillas están situadas en el centro de una sámara monosperma  con las membranas aladas de forma ovalada.

EL ACEBUCHE

Manzanilla o gordal, arbequina o picual, primorosos frutos del vetusto olivo, bien arraigado en nuestras tierras y en nuestras tradiciones. Pero aunque el parecido les delata y su parentesco es obvio, el dibujo que os muestro hoy no representa a la forma cultivada productora de decenas de variedades de exquisitas aceitunas, sino a la especie que con toda seguridad dio origen al entrañable olivo. Se trata del Acebuche (Olea europaea var. sylvestris), un arbusto o arbolillo pequeño significativamente menor que su pariente cultivado. Alcanza entre metro y “metroymedio” de altura. Posee un porte achaparrado y ramas intrincadas. Sus hojas son opuestas, lanceoladas, coriáceas y con el margen entero algo revoluto. El color del haz es verde oscuro mientras que si giramos la hoja encontraremos un envés verde grisáceo y cubierto de pequeños pelillos (tomentos). Las flores son minúsculas y blancas, distribuidas en pequeños racimos axilares, con el cáliz gamosépalo con 4 pequeños dientes, y la corola gamopétala con 4 pétalos abiertos en forma de estrella y 2 estambres. El fruto es una drupa, recibe el nombre de acebuchina y tiene un aspecto similar a las aceitunas cultivadas pero de tamaño bastante más pequeño. Contiene una única semilla que está bastante estriada y es idéntica pero en miniatura a los huesos de aceituna que todos conocemos. Como confirmación de que ambas son una misma especie, si sembramos sus respectivas semillas nos dará el mismo  resultado: un  acebuche.

EL ACEBO

Seguramente alguno sólo se acuerde de esta planta cuando se acerca la Navidad. Hoy, cuando aún faltan algunos meses para esas fechas tan señaladas quiero recordar que el acebo no es un adorno que se compra en las tiendas de todo a cien sino que se trata ante todo de una planta de primordial importancia para nuestros bosques. El acebo (Ilex aquifolium) es un arbusto que alcanza de 8 a 10 metros de altura provisto de corteza lisa, verde al principio y después grisácea. El follaje es de forma piramidal cónica formado por hojas persistentes, ovales y elípticas, otras veces agudas con los márgenes irregularmente dentados y espinosos. Son coriáceas y alternas de color verde oscuro brillante por el haz y más claro y mate por el envés. Las flores son unisexuales, pequeñas y de pedúnculo corto, existiendo acebos con floración masculina y acebos con floración femenina. El fruto es una drupa globosa de color rojo brillante que contiene cuatro semillas en forma de diminutos gajos de naranja. Este fruto posee propiedades purgantes.

EL AVELLANO

Antiguamente el avellano se consideró una fuente de cultura pues los maestros utilizaban las varas de este árbol para instruir a sus alumnos, (ya saben “la letra con sangre entra”, decían). Bromas aparte, hoy en día el avellano (Corylus avellana) se considera una especie mucho más productiva y menos detestada pues tanto la amplia utilización de sus frutos (la avellana), como su madera, utilizada para la fabricación de bastones, aros de barricas y trabajos de torneado y marquetería, le confieren esta categoría.

Se trata de un pequeño árbol de tendencias arbustivas de hasta 7 metros de altura cuyas hojas son caducas, de forma ovado-acorazonadas, dentadas, aterciopeladas y que se disponen de forma alterna a lo largo de las ramas. De color verde intenso en la parte superior y más claro en la inferior. Las flores son unisexuales, las masculinas se reúnen en amentos colgantes, mientras que las femeninas permanecen erectas, son de tamaño insignificante y se manifiestan únicamente mediante los estambres que sólo se pueden ver en el momento de la floración, en invierno. Los frutos son aquenios globosos reunidos en grupos de 2 a 4 y están protegidos por un recubrimiento o invólucro de forma de campana muy dentada. Maduran en septiembre, son comestibles y además contienen un aceite de muy alta calidad utilizado para uso alimentario.

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LA SABINA

La Sabina (Juniperus sabina) es un arbusto de gran importancia ecológica para nuestros montes y que desgraciadamente ha sido sistemáticamente maltratado como otras muchas especies autóctonas. Es una conífera dioica de poco tamaño que puede alcanzar los dos metros de altura. Sus aromáticas hojas son minúsculas, de unos dos milímetros cuando son adultas y algo mayores las jóvenes. Son de color verde azulado y están dispuestas una sobre otra a modo de tejas. Las flores son monoicas y se reúnen en conos, tanto las femeninas como las masculinas, floreciendo en el mes de abril. El fruto es una fructificación carnosa en forma de baya de 5 a 7 milímetros, de color azul oscuro con pruina, al madurar. En su interior contiene de 2 a 3 semillas. Produce una resina irritante que puede ser venenosa para el hombre.

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EL MAJUELO

El Majuelo o Espino Albar (Crataegus monogyna) es un arbusto o árbol de tamaño pequeño que alcanza como máximo 5 metros de altura con ramificaciones provistas de espinas. Las hojas son glabras, simples y alternas, profundamente lobuladas y con márgenes dentados. Son de color verde brillante en el haz y verde glauco por el envés. Las flores son blancas, hermafroditas, reunidas en corimbos terminales con pedúnculos tomentosos. Su corola está formada por cinco pétalos circulares. Los frutos son drupas redondas con una pequeña área hundida en el ápice que al madurar adquieren su característico color rojo encendido. Contienen en su interior una semilla única.



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EL ALMEZ

El Almez (Celtis australis) es una especie que crece de manera espontánea en toda la región mediterránea. En la vertiente sur de la Sierra de Gredos, donde habito, es bastante común, aunque los lugareños le conocen por el nombre de Ojaranzo. Es un árbol de hoja caduca de hasta 25 metros de altura y de follaje globoso. Posee hojas ovalo-lanceoladas, muy acuminadas, provistas de pecíolo corto y bordes dentados, cuya cara inferior es pubescente. Las flores de color verde y tamaño insignificante aparecen en la axila de las hojas de las ramas jóvenes y al mismo tiempo que las hojas, sobre un largo pedúnculo. Son hermafroditas o masculinas. Las masculinas tienen 4-5 sépalos libres y cada uno está con su estambre. En las flores hermafroditas, en el centro está el pistilo con dos estigmas divergentes. Florece en Abril- Mayo. Los frutos son drupas de color verde que maduran en el otoño mostrando su color definitivo de tonos violáceos muy oscuros. Aunque estos frutos son dulces y comestibles sólo las aves parecen apreciar su sabor. Las semillas que contienen en su interior son como una diminuta nuez de forma esférica que dada su fácil germinación garantizan la difusión de la especie.

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EL TILO

Si alguna vez te has puesto algo nervioso o demasiado excitado, quizás hayas echado mano de una tila para tranquilizarte. La tila es una infusión de agua caliente que se hace con flores de las distintas especies de tilo.

Nuestro tilo (Tilia cordata) es una especie europea que presenta una extensa área de distribución desde España hasta el Cáucaso. Es un árbol de copa ovoide y densa que alcanza los 25 metros de altura. Las hojas son pequeñas, provistas de una estípula caduca. De forma subcircular, asimétrica y acorazonada en la base. De color verde oscuro y glabra por el haz y verde más claro y glauca por el envés con pelos rojizos en la axila de las nervaciones. Las flores son hermafroditas y se presentan en grupos de 3 a 12 en cada inflorescencia. Son de color blanco amarillento y son poco olorosas. Los frutos son pequeños, grisáceos, frágiles y con las costillas poco marcadas.

ÁLAMO BLANCO

También conocido como chopo, el álamo blanco (Populus alba) es un árbol de hasta 25 metros de altura que habita en las márgenes fluviales. De tronco cilíndrico y recto, blanco o grisáceo, liso en los pies jóvenes y agrietado longitudinalmente hasta cierta altura en los añosos. De hojas caducas, simples y alternas que pueden ser ovales o palmeado-lobuladas, con pecíolo poco comprimido y limbo blanco-tomentoso por ambas caras, después, verde oscuro por el haz y blanco o verde grisáceo por el envés. Sus flores masculinas son grandes y rojizas, en amentos colgantes, y las flores femeninas son de color amarillo-verdoso sobre pies separados. El fruto es una cápsula bivalva, ovoidea y lampiña.

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EL LAUREL

Los griegos le llamaban dáphne en referencia a la leyenda en la cual la ninfa Daphne fue convertida en laurel con el fin de eludir a Apolo; el árbol se convirtió en sagrado para los dioses y se utilizaba en las fiestas en su honor, y cuando el culto pasó a Roma, con laurel se fabricaron las cintas que coronaban la cabeza de los vencedores y de los poetas.

El laurel (Laurus nobilis) es un árbusto de hojas perennes, de color verde brillante, alternas, coriáceas, de forma lanceolada y muy aromáticas. Es una especie dioica (con ejemplares macho y ejemplares hembra). Sus flores son unisexuales, amarillentas y reunidas en pequeñas umbelas. Sus frutos son drupas negras, brillantes, de forma ovoide, parecidas a las aceitunas.

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EL CEREZO SILVESTRE

Las plantas son unos modelos pacientes, posan para que puedas retratarlas y ni se quejan ni se mueven. Así todos mis dibujos tomados “al natural” pueden mostrar muchas de sus intimidades. Como este Cerezo silvestre (Prunus avium) que nos enseña, sin ningún tipo de sonrojo sus hojas, sus frutos e incluso sus órganos sexuales: sus flores.

Este árbol alcanza los 30 metros de altura, un tamaño bastante mayor que los cerezos de variedades frutales y es mucho más resistente que éstos. Sus hojas son caducas de forma aovada y oblonga con el margen dentado. De flores blancas, con cinco sépalos, cinco pétalos y numerosos estambres, se reúnen en haces en forma de umbela. Sus frutos, pequeños en comparación con las variedades que vemos en las fruterías, no les envidian sin embargo en sabor, a las que supera con creces en muchas ocasiones. Suelen ser de color rojo en su madurez aunque ocasionalmente pueden presentarse en tonalidades claras tomando matices amarillentos.

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EL MIRTO

Este arbusto denso y ramificado no suele pasar de tres metros en su hábitat natural. Se trata del Mirto (Myrtus communis). Posee hojas opuestas y coriáceas aunque las jóvenes aparecen flexibles transluciendo incluso las glándulas aromáticas que posee en las hojas. Son de un verde lustroso, algo más claro por el envés. De forma lanceolada, a veces aovada, desprenden un fragante olor al estrujarlas. Sus flores de color blanco son pequeñas y numerosas y presentan cinco pétalos y numerosos estambres. Los frutos (Murtones) son del tamaño de los arándanos y parecido color, de un azul oscuro, casi negro y poseen la pruina característica que le confiere su aspecto violáceo. En su interior contienen numerosas semillas en forma de caracolillas.

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EL TEJO

El tejo (Taxus baccata) es un árbol perennifolio dioico que alcanza en ocasiones los 20 metros de altura. Tiene hojas dispuestas en hileras, lineales, aplanadas y agudas. Los frutos están formados por una envoltura carnosa roja en su madurez y de sabor dulce que recibe el nombre de arilo y protege una solitaria semilla. Los pájaros consumen el fruto sin digerir la semilla que se dispersa a través de sus excrementos. Es una planta tóxica para el hombre salvo el arilo, que es comestible.

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EL DURILLO

Este es un clásico del jardín moderno aunque en una variedad específica para jardinería. En el dibujo sin embargo he representado la variedad silvestre que podemos encontrar aún en algunas partes de la Península Ibérica. Se trata del Durillo (Viburnum tinus). Es un arbusto perennifolio, de hojas enteras, coriáceas y ovaladas. Posee flores blancas de floración temprana dispuestas en corimbos densos y vistosos. Los frutos consisten en una drupa en forma elipsoidal de color azul metálico en la madurez que resultan ser venenosos.

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NUESTRO PERAL SILVESTRE: EL PIRUÉTANO

Seguramente alguno de vosotros no conozca esta especie de peral silvestre que habita en la mitad oeste y central de la Península Ibérica. Es el piruétano (Pyrus bourgaeana). Este árbol de hasta 10 metros de altura con tendencia arbustiva produce unas peras pequeñas (pomos) de unos tres centímetros o poco más. Sus hojas son ovadas, por lo general aserradas, pelosas al brotar y después glabras (sin pelo). Las flores contienen cinco pétalos blancos e igual número de sépalos con numerosos estambres, aproximadamente de 20 a 25.

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EL NOGAL EUROPEO

El nogal (Juglans regia) es un árbol caducifolio de hasta 20 metros de altura. Las ramillas finas tienen una médula ahuecada. Las hojas son imparipinnadas con 5-9 foliolos, el terminal de mayor tamaño que los laterales. Las flores masculinas son amentos colgantes que nacen en las ramas del año anterior, las femeninas nacen al extremo de las ramillas del año. Los frutos tienen una capa carnosa fina, de color verde, que encierra la nuez, comestible y rica en aceite.

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LA ADELFA, AROMA Y COLOR.

Otra planta agradecida para dibujar es este arbusto: la adelfa (Nerium oleander). En la lámina podemos apreciar sus hojas lanceoladas, de color verde- grisáceo o con borde amarillo en sus variedades variegadas. Las flores pueden tener distintos colores desde el rosa, el rojo, amarillo o blanco, y pueden ser simples o dobles. Sus frutos son vainas largas, redondeadas que esconden en su interior numerosas semillas en forma de plumeros con punta de lanza.

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EL ALISO, UN ÁRBOL DE RIBERA

El aliso (Alnus glutinosa) es un árbol caducifolio que habita en la ribera de los ríos, de hojas ovadas con el ápice truncado y el borde aserrado, segregan una sustancia pegajosa. Es monoico, las flores masculinas son amentos colgantes y las femeninas se muestran en amentos globosos que se lignifican en la madurez formando un fruto leñoso parecido a pequeñas piñas que contienen numerosas semillas.

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EL PINO PIÑONERO

El pino piñonero (Pinus pinea) es un árbol de copa elevada en forma de parasol. Las piñas son grandes, ovoides y globosas con las escamas más o menos hexagonales. La semilla o piñón es la más grande de todas las especies de pinos con un ala rudimentaria que no es útil para su dispersión. Los piñones son comestibles y se utilizan sobre todo en repostería. El pino piñonero se ha utilizado mucho en la estabilización de dunas costeras y terrenos arenosos.


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EL QUEJIGO

Esta lámina representa al quejigo (Quercus faginea). Emparentado con robles, encinas y alcornoques, es sin embargo menos conocido que sus parientes. De follaje marcescente (las hojas permanecen secas en las ramas hasta el brote de las nuevas). La forma de sus hojas es variable, con el borde dentado o lobulado, tomentosas (con pelillos cortos) por el envés y glabras (sin pelo) por el haz. Sus frutos son bellotas con una cúpula característica tomentosa.


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LOS ENEBROS: ENEBRO DE LA MIERA

EL ENEBRO DE LA MIERA (Juniperus oxicedrus)

El enebro de la miera (Juniperus oxicedrus), también llamado cedro de España por ser muy común en algunas sierras de nuestro país, comparte características con el enebro común aunque distinguible en su porte y en el haz de sus hojas aciculares con dos bandas blancas de estomas en lugar de una (ver detalles de las hojas en las láminas de ambas especies). De la destilación de la madera y de las raíces se obtiene el aceite de cada o miera, usado para afecciones cutáneas del ganado, heridas, etc.



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LOS ENEBROS: ENEBRO COMÚN

EL ENEBRO COMÚN (Juniperus communis)

Los enebros forman parte del conjunto de las coníferas y son características sus hojas en forma de aguja. En el enebro común (Juniperus communis) estas hojas poseen una banda estomática blanca en el haz, detalle que la diferencia de otras especies de enebro. Sus frutos (arcéstides), llamados enebrinas, son de maduración bianual de color azulado y es conocido su empleo en la elaboración de la ginebra y como condimento.



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