La voz de la experiencia: Javier Goyeneche, vivir con propósito

Lleva más de una década dedicado a proteger la salud del planeta, limpiando mares y ríos con su Fundación y promoviendo un consumo responsable con su firma de moda sostenible.
Javier Goyeneche Ecoalf sostenibilidad
Foto: Uxio da Vila. Estilismo: Patricia López

Hoy el concepto de sostenibilidad está en todas partes, pero era diferente hace 15 años, cuando Javier Goyeneche decidió dedicar su vida a ello, convirtiéndose en pionero en un sector, el de la moda, que no se caracteriza precisamente por el respeto al medioambiente... Esa valentía e independencia para ir contracorriente siendo fiel a sus valores representan el espíritu de ‘Viviremos cien años’, iniciativa de Condé Nast para BBVA Patrimonios.

El cuidado del entorno era algo que le preocupaba desde siempre, consciente de la “importancia de equilibrar nuestras necesidades con las del planeta y de cuidar los recursos naturales que, por desgracia, no son infinitos”, explica. Aunque el verdadero punto de inflexión vino con el nacimiento de sus hijos, Alfredo y Álvaro. “Pensaba en qué mundo les iba a dejar a ellos”. Y tomando sus nombres como inspiración, puso en marcha Ecoalf (cuyas prendas están hechas con materiales reciclados) y, posteriormente, su Fundación, destinada a retirar la basura de mares y ríos.

QUIEN BUSCA, ENCUENTRA

Corría 2009 y no existían tejidos reciclados de calidad. Por eso los siguientes tres años los pasó viajando por todo el mundo en su búsqueda: una mujer en Taiwán que transformaba botellas de plástico en alfombras, una compañía en Corea que reciclaba redes de pesca... Y así pudo lanzar su primera colección en 2013.

Ver fotos: Así es el mundo sostenible de Javier Goyeneche

Los inicios, como suele suceder, no fueron fáciles, pero el instinto es un buen consejero y Javier Goyeneche no dudó en seguir el suyo. "Siempre que emprendes lógicamente hay un riesgo y más cuando lanzas algo innovador. Suelo decir que los emprendedores somos un poco ‘taraos’. Si te pones a pensar en todo lo que puede salir mal y todos los riesgos que estás corriendo, pues probablemente no te lanzarías a montar nada y te irías a trabajar a una compañía ya establecida. Tenía claro que quería hacer una marca que fuese diferente. Creo que el mundo no necesita más firmas de moda haciendo las cosas de la misma manera”, afirma. Y asegura con convicción: “Si tú no crees en lo que estás haciendo, nadie lo va a creer. Pero, sobre todo, lo importante es tener un propósito, un porqué, eso es lo que nos guía. Hemos comprobado que cada vez que tomamos una decisión correcta para el planeta, acaba siendo buena para Ecoalf”.

Javier Goyeneche, con total look de Ecoalf, en sus oficinas de Madrid.Foto: Uxio da Vila. Estilismo: Patricia López.

Ante las voces críticas, que siempre las hay, Javier se siente tranquilo y mantiene la independencia del que cree absolutamente en lo que hace. “De lo que más orgullosos estamos es que nuestro propósito sigue intacto y creo que eso es algo que nuestros clientes perciben y valoran. Todo el equipo sabe lo que hacemos, cómo lo hacemos y por qué lo hacemos, y así seguimos adelante. No somos los más grandes ni pretendemos serlo, no somos perfectos ni tenemos miedo a ser transparentes y hablar de las mejoras y del camino que tenemos por delante".

PROYECTOS CON ALMA

Aparte de su marca, en 2015 puso en marcha la Fundación Ecoalf, su iniciativa más personal y la que más le apasiona, que nació fruto de una experiencia que le marcó: “Tuve la oportunidad de embarcarme en un barco de pesca de arrastre y ver con mis propios ojos la cantidad de basura que termina en el fondo marino”, recuerda. A partir de ese momento se puso manos a la obras. “Empezamos con tres pescadores de Villajoyosa a quienes convencimos para que nos dejaran poner un pequeño contenedor en su barco para que recogieran la basura que sacaran y la bajaran a tierra”, explica. Hoy ya están presentes en 80 puertos del Mediterráneo y en diferentes países, como Grecia, Francia, Italia o España, colaborando con más de 5.000 pescadores.

Desde que comenzaron, han sacado más de 1.450 toneladas del fondo del mar. Y la idea es tener 10.000 pescadores en 2025 y extraer, aproximadamente, unas 1.000 toneladas cada año. El 68% de lo recogido entra en el flujo de gestión de residuos, aunque hay un 32% que desgraciadamente no son capaces de reciclar y acaba en el vertedero. “Es un proyecto muy bonito y aunque nosotros solos no consigamos la solución al problema, sí queremos llamar la atención sobre lo que está pasando y la urgencia de parar la entrada diaria de residuos en el océano”.

LECCIONES DE SOSTENIBILIDAD

En todo este tiempo, dice que su mayor aprendizaje ha sido la importancia de “mantenerse fiel a tus valores y seguir avanzando a pesar de lo que la gente te diga”. Y cuando se le pide consejo para crear una sociedad más sostenible, lo tiene claro: “Comprar menos y mejor. Prendas de calidad hechas con materiales de bajo impacto y con un diseño atemporal. Es clave que el consumidor entienda la fuerza que tiene, que con sus decisiones puede marcar el rumbo de las empresas”.

Javier Goyeneche junto a uno de los tejidos con los que se elaboran las prendas de su firma Ecoalf: una lana que proviene de un proyecto de colaboración con pastores, elaborada al 100% en España.Foto: Uxio da Vila. Estilismo: Patricia López.

Javier es una especie de outsider dentro del mundo de la moda, ya que se muestra muy crítico con el modelo general predominante y mantiene la independencia de ir contracorriente: “Lo de compro-tiro, compro-tiro, lanzar una colección nueva cada semana y continuas promociones están agotando nuestros recursos naturales y generando que miles de toneladas de residuos textiles vayan al vertedero cada mes".

Pero más allá de la teoría, predica con el ejemplo: “No somos storytellers sino story-doers, no solo decimos qué se debe hacer, sino que lo hacemos, queremos ser parte de la solución. Todavía tenemos mucho trabajo por hacer, pero nos encanta compartir con nuestra comunidad nuestros compromisos, avances e incluso lo que nos gustaría mejorar. La transparencia implica poder hablar abiertamente de lo que hacemos y cómo lo hacemos". Por eso apuestan por productos atemporales, por la calidad frente a la cantidad y por no participar en campañas como Black Friday basadas en un modelo de consumo impulsivo que genera muchos residuos. "Comercialmente quizás no es la estrategia más correcta, pero está alineada con nuestro propósito”.

Y ante la esperanza de ‘vivir cien años’, asegura que “¡hay tanto por hacer! Nos faltan horas al día... Por ejemplo, ahora desde la Fundación estamos obsesionados con demostrar que si nuestros ríos están limpios también lo estará el mar, ya que el 75% de la basura sale por las desembocaduras. Llevamos dos años con Biotherm colaborando en ‘Limpia Ríos, Salva Océanos’, haciendo un piloto en el Jarama, y queremos ampliarlo a cinco ríos más y crear un proyecto de voluntariado nacional en colaboración con empresas locales”. Pues a por ello.

Foto: Uxio da Vila. Estilismo: Patricia López. Maquillaje y peluquería: Cynthia León. Asistente de foto: Marcos Cubas. Asistente de estilismo: María Requejo. Coordinador editorial: Pablo Ortega. Producción CNCC: Cecilia González y Verónica Álvarez. Project Manager CNCC: Rocío Segarra. Creative Strategist CNCC: Rafa Fos.

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