por Neil Freer

traducci�n de Ben Fishold

Versi�n original
del Sitio Web
SapiensRising

En su mayor parte, los investigadores OVNI intentan enfrentarse con lo micro, est�n dirigidos a los hechos. Eso es importante, pero tambi�n se necesita tener una mirada m�s amplia, que no excluya nada.
C.B. Scott Jones, Ph.D.
Human Potential Foundation

La tiran�a m�s extendida no es la que usa la fuerza para asegurar la uniformidad sino la que elimina la conciencia de otras posibilidades, la que hace que parezca inconcebible que otros caminos son viables, la que elimina el sentido de que hay un afuera.
Allan Bloom
The Closing of the American Mind



Dirigido a:

  • The Arlington Institute ( Instituto Arlington)

  • The British UFO Research Association (Asociaci�n Investigaci�n OVNI Brit�nica)

  • Brookings Institution (Instituci�n Brookings)

  • The Center For The Study Of Extraterrestrial Intelligence (Centro Para el Estudio de Inteligencia Extraterrestre)

  • Extraterrestrial Phenomena Political Action Committee (Comit� de Acci�n Pol�tica para Fen�menos Extraterrestres)

  • The Fund For UFO Research ( La Fundaci�n Para Investigaci�n OVNI)

  • J. Allen Hynek Center For UFO Studies (Centro J. Allen Hynek Para Estudios Ufol�gicos)

  • The Human Potential Foundation ( Fundaci�n Potencial Humano)

  • Institut des Hautes Etudes de Defense Nationale (Instituto de Altos Estudios de Defensa Nacional)

  • The International Association For New Science (Asociaci�n Internacional Para la Ciencia Nueva)

  • The McClendon Study Group (Grupo de Estudio Mc Clendon)

  • The Mutual UFO Network (Red OVNI Mutua)

  • The National Institute For Discovery Science (Instituto Nacional Para Descubrimiento de la Ciencia)

  • The National UFO Reporting Center (Centro Informativo OVNI Nacional)

  • Operation Right To Know (Operaci�n Derecho a Saber)

  • Paradigm Research (Investigaci�n del Paradigma)

  • Program for Extraordinary Experience Research (Programa para Investigaci�n de Esperiencias Extraordinarias)

  • Stargate International (Puerta Estelar Internacional)

  • Skywatch International (Vigilancia-Cielo Internacional)




Sinopsis

El contexto actual en el que El Paradigma de la Presencia Alien�gena es visto y tratado es demasiado estrecho y limitado.

El Paradigma de la Presencia Alien�gena deber�a de ser visto como si tuviera dos partes, separadas pero relacionadas:

  1. El reconocimiento de la presencia de una cultura o culturas alien�genas de fuera de nuestro sistema solar, y las ramificaciones de esa presencia y contacto. En este escrito esta parte del paradigma lo denominar�
    la fase OVNI / Extraterrestre

  2. El reconocimiento y recuperaci�n de nuestra verdadera historia como una especie creada gen�ticamente, mitad Anunnaki alien�gena , mitad ind�gena Homo Erectus, de acuerdo con las tesis del erudito sumerio, Zecharia Sitchin, y sus ramificaciones para nuestro futuro. En este escrito esta parte del paradigma es denominado la fase Historia Humana.

Estos son dos problemas creados artificialmente porque las evidencias aplastantes son patente en ambos casos pero la ocultaci�n de las mismas por intereses creados impide su cierre.

Del mismo modo, a veces id�ntico, los condescendientes intereses creados y las autoridades obstaculizan el proceso de revelaci�n de la presencia alien�gena igual que obstaculizan la recuperaci�n de nuestra historia mitad alien�gena por razones parecidas. La soluci�n al �ltimo �problema� revelar� las presiones pol�ticas para ocultarlo de las autoridades y facilitar� la revelaci�n del primer �problema�.

Solo recuperando nuestra verdadera identidad como especie y una definici�n general de los deseos de la naturaleza humana conseguiremos la unidad global y la integridad incuestionable que nos permitir� interactuar con una cultura alien�gena sin importar lo extra�a que sea. Sin prejuicios religiosos o filtros culturales, seremos capaces de conocer lo que es bueno o malo para nosotros y podremos entender lo que es bueno o malo para las especies alien�genas.

No podemos ser aceptados dentro de la sociedad estelar hasta que no alcancemos ese nivel de madurez como especie.

Las dos partes del paradigma est�n definidas, desarrolladas, sus ramificaciones examinadas, y sus interrelaciones explicadas. Las medidas pr�cticas para ejecutar y acelerar ambos procesos est�n sugeridas y remarcadas, y los logros beneficiosos de la especie, al preservar la totalidad de la dignidad y la libertad humana, son definidos en un contexto progresivo evolucionista.

La intenci�n del autor en este documento no es instruir sino sugerir. Lo que sigue esta basado en cincuenta a�os de inter�s, b�squeda, estudio intenso, desarrollo, y reflejo de la condici�n humana como hombre com�n y fil�sofo profesional.

Es enviado para su consideraci�n respetuosamente como un medio de facilitar un avance en la resoluci�n de estos temas que ahora est�n efectivamente y perniciosamente en un punto muerto.



El Status Quo del Fen�meno OVNI/Extraterrestre

Una advertencia preliminar: es completamente conocido que algunos avistamientos de Ovnis, informes de abducciones, encuentros con �extraterrestres� pueden no ser de origen extraterrestre sino acciones humanas, tecnolog�a y hechos humanos.

Este documento se centra solo en la actual presencia de alien�genas, su tecnolog�a y sus interacciones.

La posici�n del autor sobre el paradigma de la presencia OVNI concuerda con la mantenida por la mayor�a de las organizaciones destinatarias del escrito: una civilizaci�n o civilizaciones extraterrestres de fuera de nuestro sistema solar han estado visitando La Tierra durante un tiempo indeterminado, actualmente en el foco de atenci�n esta la de �los grises�.

El autor ha estado intensamente interesado en el fen�meno desde 1947 cuando, con 17 a�os, ley� el primer reportaje publicado de �Roswell, AZ� sobre un platillo volante capturado despu�s de estrellarse.

Unos 50 a�os de investigaci�n y estudio del tema no dejan lugar a dudas en la mente de este autor de que el contacto de probablemente varias razas alien�genas con humanos ya ha sido realizado (los militares en primer lugar debido al peligro de una reacci�n agresiva). Se han realizado intercambios de informaci�n y tecnolog�a, y la gente se ha ido gradualmente haciendo a la idea de la existencia de alien�genas gracias a la acci�n tanto de los alien�genas como de la estructura humana al mando encargada del tema.

Todo el tema OVNI ha sido tapado y negado, al principio debido al miedo a lo desconocido y al posible caos y anarqu�a por parte de la poblaci�n, despu�s por la dificultad de revelar y reconocer la culpa por ocultarlo.

Los cuerpos extraterrestres que han sido examinados, hechas sus autopsias y los extraterrestres vivos en acci�n han demostrado que algunos son humanoides al menos en apariencia si no fisiol�gicamente y otros de hecho son androides. El �problema� es artificial y eso solo por la negaci�n obstaculizadora del gobierno.

La evidencia de la presencia extraterrestre ha llegado hasta un punto tan fuerte y los datos son tan vastos que el reconocimiento final del Gobierno forzosamente debe darse.

Incluso aunque tenemos el testimonio de:

  • Mayor Donald E. Keyhoe

  • Capit�n Jesse Marcel

  • Maurice Chatelain

  • Command Sgt. Major Robert Dean

  • Coronel Col. Phillip J. Corso

  • Almirante James Woolsey

  • Astronauta Gordon Cooper,

...por nombrar solo una min�scula cantidad de gente del gobierno, militares y de la NASA, la suprema iron�a de esta situaci�n es que continuamos acudiendo al Gobierno, que ha estado tapando el fen�meno, para su validaci�n, verificaci�n y autentificaci�n.

La raz�n por la que hemos hecho esto es debido, en gran parte, al condicionamiento, durante miles de a�os, para someterse a la autoridad restringiendo la naturaleza peculiar de nuestros or�genes en subordinaci�n como brillantemente elucidan las tesis del erudito en sumeria, Zecharia Sitchin.

La perpetuaci�n de esta subordinaci�n mediante la forma de un sublimado �temor de Dios� a trav�s de las instituciones religiosas fundadas en aquel ha transformado nuestro mundo tan profundamente que tememos incluso a reconsiderarlo. Entonces confiamos en las autoridades cuando no deber�amos y tendemos a prestar atenci�n a cualquiera que aparezca aqu� de otro planeta como si fueran maestros o salvadores.

Una cuesti�n fundamental, raramente considerada debido a nuestro condicionamiento de depender en los tres criterios cl�sicos, teolog�a, filosof�a y ciencia que son a su vez son tra�dos a colaci�n por la misma:

  • �es posible llegar a una nueva visi�n del mundo que corrija, complete y contenga todas nuestras visiones anteriores del mundo?

  • �que explique todas nuestras explicaciones previas?

La respuesta es, inequ�vocamente, S�.

Pero Kuhn, que examin� la naturaleza de las revoluciones cient�ficas desgraciadamente tiene raz�n. Casi debemos esperar a que la generaci�n m�s mayor desaparezca antes que ver una transici�n racional y ordenada a un nuevo paradigma. Aquellos con intereses propios, la ense�anza acad�mica o la reputaci�n cient�fica o religiosa, pol�ticos o econ�micos no van a acceder f�cilmente en absoluto.

Estamos muy atr�s lejos de la vanguardia de la evoluci�n en este sentido debido a esta inercia.



El Status Quo De La HH (Historia Humana)

El Paradigma de Sitchin De Nuestra Propia Historia como Especie Mitad-Alien�gena

El erudito sobre los sumerios, Zecharia Sitchin, publico su primer trabajo en 1976.

A partir de su conocimiento del Sumerio, el Sem�tico y otras lenguas antiguas y su investigaci�n y estudio de los datos arqueol�gicos y B�blicos adquiridos durante los �ltimos ciento cincuenta a�os ha propuesto su tesis de que los dioses transculturales conocidos en todas las culturas antiguas no eran mitol�gicos sino seres reales alien�genas humanoides de carne y hueso, muy parecidos a los humanos, que hab�an venido aqu� desde el d�cimo planeta de nuestro sistema solar, el Planeta X en la prensa popular, llamado
Nibiru por los Sumerios.

Ellos despu�s crearon mediante ingenier�a gen�tica nuestra especie, al principio como animales esclavos para trabajar en sus minas de oro, mediante el cruce de sus genes con los del Homo Erectus.



El trasfondo Hist�rico Necesario Para Comprender las Tesis de Sitchin

Nota introductoria:

Al tener en cuenta la reacci�n t�pica a este an�lisis: lo que se ha dicho aqu� por este autor ha sido presentado tan cuidadosamente y razonablemente como ha sido posible.

Sin embargo, por el hecho de ser un an�lisis de nuestra historia y, casi sin propon�rselo, de la religi�n, a menudo ser� percibido como el rompimiento de un tab�, quiz�s como un ataque sospechoso, quiz�s ateismo, o algo �Antiamericano� en su esp�ritu, quiz�s incluso �contra Dios��incluso aunque la prueba tra�da aqu� no es diferente en esencia de la presentada contra la conspiraci�n OVNI y, quiz�s, es incluso mas s�lida.

El discurso religioso es la mancha m�s oscura en el tejido de nuestra cultura.

No exist�a literalmente nada parecido a la disciplina conocida como Arqueolog�a en la cultura Occidental hasta el siglo XIX (1800). La Iglesia Romana controlaba y determinaba la visi�n sobre el pasado. El punto de vista del Obispo Usher, de que el planeta entero y la vida en �l, como describ�a el G�nesis, apareci� bajo los auspicios de un creador c�smico all� en el 4004 a.C., fue la doctrina oficial y uno pod�a ser acusado como hereje por negarla.

No se abri� una ventana al pasado y se cuestion� la visi�n mitol�gica, hasta que los descubrimientos paleontol�gicos forzaron que esa visi�n fuera reconsiderada y Schliemann, un comerciante alem�n rico, que se negaba a admitir que las ciudades antiguas y sus gentes fueran leyendas, excav� Troya. La Arqueolog�a Cient�fica como nosotros la conocemos apareci� solo cuando los acad�micos renuentes tuvieron que reconocer el pasado que hab�a sido excavado y reunido por aficionados en el Oriente Medio.

Los Arque�logos acabaron por ser odiados y perdieron la confianza de las instituciones religiosas que tem�an revelaciones que contradijeran sus ense�anzas y la historia narrada en el Antiguo Testamento.



La Demisi�n De La Explicaci�n Mitol�gica De Los Dioses

(Es algo trivial que existen cantidad de mitos locales relativos a variados temas entre los pueblos m�s o menos primitivos por todo el mundo. Aqu� solo consideramos las �ltimas interpretaciones sobre los �dioses� transculturales relacionados en la historia humana como mitos, no reales.

Tambi�n anotamos que las antiguas civilizaciones no llamaron a los Annunaki �dios�. Se refer�an a ellos como maestros, se�ores, en el sentido de gobernantes.)

Aquellos que todav�a mantienen la interpretaci�n mitol�gica est�n en una posici�n insostenible.

Se encuentran con que tienen que mantener que los mismos ciudadanos que, seg�n ellos, crearon � o tuvieron visiones - a los dioses a trav�s de sus primitivas imaginaciones y proyecciones precient�ficas ingenuas como la personificaci�n de las inmensas fuerzas naturales fueron los mismos primitivos que de alg�n modo supieron construir la asombrosa Pir�mide de Gizeh; los que de alg�n modo extrajeron, cortaron y trasladaron al lugar las mil toneladas de piedra del �Templo� de Baalbek (una plataforma de lanzamiento de cohetes) que incluso nuestra moderna tecnolog�a no puede ni intentar levantar; de alg�n modo sab�an el gran ciclo precesional de los cielos, la existencia de los diez planetas de nuestro sistema solar y como se form� el mismo (documento: Enuma Elish)

Para escapar de este embarazoso dilema, algunos caen en la explicaci�n de que �deber�a� haber existido una civilizaci�n a�n m�s antigua, perdida ahora en el misterio del tiempo, cuya identidad no podemos conocer que �debieron� haber sido destruidos o declinaron - pero que de alguna manera dejaron la suficiente tecnolog�a y sabidur�a esparcidas para impulsar el comienzo de la primeras civilizaciones que conocemos.

Pero deben mantener esta interpretaci�n enfrent�ndose a la clara declaraci�n de los sumerios y la de todos los otros pueblos antiguos de que los dioses eran de carne y hueso de verdad, presentes delante de ellos, que les dieron la civilizaci�n.

La definici�n de que los lugares citados en las leyendas antiguas eran m�ticos ha sido gradualmente refutada empezando por el trabajo de Schliemann (un comerciante Alem�n que se neg� a creer que las ciudades antiguas legendarias fueran m�ticas y arriesgo su dinero para ir a Oriente Medio con mapas antiguos y excavar Troya, as� abri� el sello del mito) y completadas con el re-descubrimiento de todas las ciudades antiguas y centros en todos los continentes.

Los hechos relacionados con los �dioses� de anta�o y la tecnolog�a que se les atribu�a, considerados como mitos y leyendas primitivas, han sido refutados gradualmente, empezando con el descubrimiento de documentos en las ciudades m�s antiguas y reforzados por el descubrimiento de la gran biblioteca de Ashurbanipal en Ninive y la acumulaci�n gradual de m�s de dos millones de objetos y documentos confirmando aquellos hechos con gran detalle.

El descubrimiento de ooparts*, herramientas de alta tecnolog�a, juguetes, artefactos, y tecnolog�a junto con documentaci�n de conocimientos cient�ficos avanzados ostensiblemente fuera de lugar en ese tiempo junto con conocimiento astron�micos de todo el sistema solar m�s all� de nuestro conocimiento actual ha reforzado la negaci�n de la interpretaci�n m�tica.


* oopart - objeto fuera de lugar en el tiempo y/o en el espacio, por ejemplo una televisi�n en una cueva prehist�rica. No he encontrado una palabra en espa�ol para traducirlo - Nota del Traductor


La interpretaci�n de los �dioses�, los mismos Anunnaki, como m�ticos, seres irreales (seg�n los mit�logos acad�micos), Arquetipos Jungianos (Joseph Campbell) y su relegaci�n a alucinaciones esquizofr�nicas (Julian Jaynes) ha sido gradualmente refutada empezando con el reconocimiento de la realidad de los acontecimientos atribuidos a ellos; es posible descartar los argumentos a favor de su irrealidad en base a que las acciones atribuidas a ellos parecen fant�sticas, gracias al desarrollo de nuestra tecnolog�a (cohetes, rayos l�ser, radio comunicaci�n, ingenier�a gen�tica, armas at�micas y de emisi�n de part�culas) que repiten esas proezas.

Esta interpretaci�n ha sido complementada m�s a fondo por las investigaciones y exploraciones pioneras ofrecidas por Von Daniken y completadas por las demostraciones brillantes y detalladas de Sitchin y Sir
Laurence Gardner, el historiador y genealogista Ingles.

La interpretaci�n m�tica ha sido apoyada por las religiones porque reconocer a los Anunnaki como seres reales ser�a abrir la puerta a una interpretaci�n radical de todo el fen�meno de la religi�n y poner en cuesti�n la identidad real de la deidad verdadera en el centro de su sistema de creencias. Gardner ha tra�do a la luz, sin embargo, el hecho de que existe una historia muy documentada, robusta que lleva de regreso a los Anunnaki, propiedad de la tradici�n heterodoxa del Cristianismo.

Esta tradici�n es la tildada de her�tica y perseguida de manera asesina por la Iglesia Romana antes y durante la Inquisici�n. No hubo Edad Oscura para esta tradici�n, solo para aquellos a los que la Iglesia quiso mantener en la oscuridad sobre la verdadera naturaleza de la historia humana.

Ahora que hemos empezado a caminar sobre la luna y a explorar el sistema solar y tenemos sondas viajando hacia las estrellas, la posibilidad de una civilizaci�n alien�gena que llegue aqu� se da por sentado y una viniendo de nuestro sistema solar ser�a algo trivial en vez de un mito irreal.

La �Mito-Informaci�n� despu�s de doscientos a�os de fallos, aunque aun se esconda detr�s mantenida en la Universidad, es un tema muerto.


La Esencia del Paradigma de Sitchin

Trabajando en base a los mismos descubrimientos arqueol�gicos, artefactos, y registros recuperados que los arque�logos y ling�istas han utilizado durante doscientos a�os, Sitchin propone - prueba, en su opini�n - que los Anunnaki (en Sumerio: �aquellos que bajaron desde el cielo�), una civilizaci�n avanzada del d�cimo planeta de nuestro sistema solar, amerizaron en el Golfo P�rsico alrededor de 432,000 a�os atr�s, colonizaron el planeta, con el prop�sito de obtener grandes cantidades de oro.

Hace 250,000 a�os los documentos recuperados nos dicen que sus mineros del escalaf�n inferior se rebelaron en contra de las condiciones en las minas y los dirigentes Anunnaki decidieron crear una criatura que ocupara su lugar.

Enki, su cient�fico jefe y Ninhursag la oficial medica jefe, despu�s de resultados insatisfactorios recombinando los genes animales con los del homo-erectus, mezclaron sus genes Anunnaki con los del Homo-erectus y nos produjeron a nosotros, el homo sapiens, una especie dual gen�ticamente, para sus propios intereses como esclavos. Como �ramos un h�brido no pod�amos procrear. La demanda de trabajadores esclavos creci� y fuimos manipulados gen�ticamente para poder reproducirnos.

Finalmente, fuimos tan numerosos que algunos de nosotros fuimos expulsados de los centros de las ciudades Anunnaki, gradualmente extendi�ndonos sobre el planeta. Llegando a tener un stock gen�tico estable y desarroll�ndonos m�s precozmente, quiz�s, que lo que los Anunnaki hab�an previsto, los Anunnaki empezaron a ser atra�dos por los humanos sexualmente y de estas uniones nacieron ni�os.

Esto era inaceptable para la mayor�a del alto consejo Anunnaki y se decidi� eliminar la poblaci�n humana mediante una inundaci�n que era predecible cuando Nibiru, el d�cimo planeta de nuestro sistema solar y el hogar de origen de los Anunnaki, viniera al interior del sistema solar de nuevo (hace unos 12,500 a�os) en una de sus vueltas peri�dicas de 3600 a�os de duraci�n.

Algunos humanos se salvaron gracias a la acci�n del Anunnaki, Enki, que simpatizaba con los humanos a los cuales �l originalmente hab�a creado gen�ticamente. Durante miles de a�os fuimos sus esclavos, sus trabajadores, sus sirvientes, sus soldados en las batallas pol�ticas entre ellos mismos.

Los Anunnaki nos utilizaron para la construcci�n de sus palacios (proyectamos sobre estos la noci�n religiosa de templo actualmente), sus ciudades, sus explotaciones mineras y refiner�as as� como sus complejos astron�micos en todos los continentes.

Ellos se expandieron desde Mesopotamia a Egipto a la India y a Am�rica del Sur y Central y el sello de su presencia se puede hallar en los lugares m�s lejanos del planeta.

Hace alrededor de 6000 a�os ellos, probablemente d�ndose cuenta de que su tiempo en el planeta llegaba a su fin, empezaron a dar gradualmente la independencia a los humanos. Sumer, una civilizaci�n humana, asombrosa, por su repentino origen y por su car�cter maduro y avanzado en alto grado fue preparada bajo su tutelaje en Mesopotamia, los reyes humanos fueron inaugurados como intermediarios, jefes de las poblaciones humanas respondiendo ante los Anunnaki.

Algunos humanos fueron instruidos en tecnolog�a, matem�ticas, astronom�a, artes avanzadas y en los modos de la sociedad civilizada. Las Civilizaciones elevadas de Egipto y Centroam�rica surgieron.

Los Anunnaki se volvieron de alguna manera m�s lejanos a los humanos.

Alrededor del a�o 1250 AC hab�an entrado en la fase final de su desaparici�n. La poblaci�n humana y los reyes dirigentes, ahora dejados a su suerte, empezaron a valerse por si mismos. Durante alrededor de tres mil a�os, consecuentemente, nosotros los humanos hemos estado atravesando una traum�tica transici�n hacia la independencia.

Las reclamaciones hechas por varios grupos de humanos que cre�an saber que deber�amos hacer para conseguir que los Anunnaki regresaran o cuando regresar�an, perpetuaron los rituales de palacio y sociales aprendidos bajo los Anunnaki y en algunos casos el desacuerdo y la discordia irrumpi� entre ellos.

La Religi�n, como la conocemos, se form�, centrada en el �dios� o los �dioses�, conocidos por los humanos claramente y sin ambig�edad quienes estuvieron en contacto con ellos como seres humanoides imperfectos de carne y hueso, ahora ausentes.

Fue solo mucho despu�s que los Anunnaki fueron elevados finalmente a un car�cter y estatus c�smico y, aun m�s tarde, mitificados debido a la lejan�a en el tiempo.


�Que prueba apoya la tesis de Sitchin?

La prueba Astron�mica
Una clave que sostiene el paradigma de Sitchin es la existencia, ahora o en el pasado, del d�cimo planeta en nuestro sistema solar, el planeta hogar de los Anunnaki con, sus caracter�sticas, tama�o, orbita, descritas, seg�n ha demostrado Sitchin, en el texto del Enuma Elish y corroborado por Harrington.

Tombaugh descubri� Plut�n en 1930. Cristie, del Observatorio Naval de Los EE.UU. descubri� Charon, luna de Plut�n, en 1978.

Las caracter�sticas de Plut�n deducidas de la naturaleza de Charon demostraron que debe haber un gran planeta no descubierto aun porque Plut�n no pudo ser la causa de los residuos, los �bamboleos� de las rutas orbitales de Urano y Neptuno claramente identificables.

El IRAS (Sat�lite Astron�mico de Infrarrojos), entre los a�os 83 y 84, obtuvo observaciones de un d�cimo planeta tan claras que uno de los astr�nomos del proyecto dijo que �lo �nico que falta es darle un nombre� � con que prop�sito la informaci�n ha sido curiosamente guardada.

En 1992 Harrington y Van Flandern del Observatorio Naval, trabajando con toda la informaci�n que ten�an a mano, publicaron sus descubrimientos y opinan que hay, de hecho, un d�cimo planeta, llegando incluso a llamarlo un planeta �intruso�. Andersen de JPL expres� despu�s p�blicamente su convencimiento de que esto podr�a ser verificado en cualquier momento.

La b�squeda se estrech� hacia los cielos del sur, por debajo de la ecl�ptica. Harrington invito a Sitchin, habiendo le�do su libro y traducciones del Enuma Elish, a un encuentro en su oficina (video abajo) y ellos relacionaron los descubrimientos actuales con los registros antiguos y Harrington reconoci� la precisi�n de los registros antiguos a la vez que indicaba donde podr�a estar ahora el d�cimo planeta en el sistema solar.



La Prueba Tecnol�gica
Ooparts es el t�rmino usado para describir a los artefactos, juguetes, instrumentos, aparatos t�cnicos, descripciones y documentos a todas luces �fuera de lugar en el tiempo� que han salido a la luz a trav�s de excavaci�n arqueol�gica o descubrimiento.

Casi cualquiera esta familiarizado, a trav�s de los trabajos publicados o documentales, con las bater�as de arcilla que aun contienen los electrodos del desierto Iraqu� datadas del a�o 2500 a.C., la maqueta de un avi�n que pod�a volar sacada de una tumba de una pir�mide, el sofisticado manejo de la piedra que requerir�a las t�cnicas mas avanzadas que conocemos hoy en d�a, el corte preciso de bloques de piedra de 1000 toneladas en los cimientos de un templo que incluso nosotros no podr�amos manejar, un friso en relieve antiguo del templo de Abydos que representa cohetes, aeroplanos e incluso un helic�ptero, etc.

El �oopart� m�s reciente y m�s asombroso es el redescubrimiento del oro monoat�mico hecho por David Hudson (los monoat�micos son superconductores a temperaturas ambiente, tienen propiedades antigravitatorios y est�n siendo investigados ahora solamente por la comunidad de f�sicos avanzados) el descubrimiento de Hudson, relacionado con la puesta en luz, por Gardner, del descubrimiento ocultado hecho por el Caballero Flinders Petrie en 1889 de una planta de procesamiento de oro en el monte Horeb, demuestra que los monoat�micos eran conocidos ya al menos hace 3000 a�os.

Hay tambi�n �ooparts� que datan, aparentemente, de millones de a�os atr�s que requieren una interpretaci�n y evaluaci�n seria. En relaci�n al prop�sito de este documento la atenci�n esta centrada, sin embargo, en esa constelaci�n de ooparts que datan de menos de 450,000 a�os atr�s, el tiempo aproximado de la primera llegada de los Anunnaki a la Tierra, y principalmente en aquellos de las fechas de la primera �repentina� civilizaci�n, hace 6000 a�os. Hemos acumulado casi una enciclopedia de dichos ooparts.

Estos ooparts, emparejados con la evidencia de varias disciplinas y los documentos hist�ricos indican que una civilizaci�n avanzada existi� en aquellos tiempos que pose�a una tecnolog�a elevada y que esa civilizaci�n era de hecho la de los Anunnaki.

Sitchin no tiene ninguna duda sobre eso, toda la evidencia y el testimonio propio de los primeros humanos, indican que esa civilizaci�n era, verdaderamente, la de los Anunnaki.


La prueba Documental
La prueba documental, por ejemplo la documentaci�n hist�rica de la existencia y obras de los Anunnaki, ha sido accesible para nosotros desde los primeros a�os del siglo XIX.

Las excavaciones de los lugares antiguos de Mesopotamia sacaron a la luz la asombrosa y avanzada civilizaci�n de Sumer y, con ella, miles de tablillas de arcilla conteniendo no solamente registros de comercio, matrimonios, acciones militares y c�lculos astron�micos sino la historia misma de los Anunnaki. Esta claro a partir de estos registros que los Sumerios sab�an que estos alien�genas eran seres reales de carne y hueso.

Se descubri� que la biblioteca del soberano, Ashurbanipal, en Ninive se hab�a derrumbado en un incendio y las tablillas de arcilla contenidas en ella se cocieron, conserv�ndolas para nuestra lectura. Aun hasta hoy en d�a, m�s y m�s documentos son descubiertos.

Uno de los descubrimiento m�s impresionantes, y muy reciente, ha sido una habitaci�n sellada de 9 pies por 6 pies (2.74 m por 1,83 m) en Sippar que conten�a, dispuesta ordenadamente en estantes, un juego de 400 tablillas de cer�mica que conten�an un registro completo de la historia de aquellos tiempos antiguos, una especie de c�psula del tiempo.

De nuevo, la evidencia es tan abrumadora y fuerte que, si no fuera por aquellos con el poder suficiente para ocultarla, habr�a sido aceptada y nuestra visi�n del mundo habr�a cambiado hace un siglo o quiz�s antes.


La Prueba Gen�tica
Los documentos recuperados sit�an el laboratorio de los Anunnaki donde los primeros humanos fueron producidos literalmente en el este de �frica Central justo sobre sus minas de oro.

Esto cae en el mapa precisamente donde la investigaci�n del ADN mitocondrial �la b�squeda de Eva� sit�a a la primera mujer Homo-Sapiens sapiens y en el mismo marco temporal.

La prueba de la ingenier�a gen�tica avanzada esta toda ah� en los documentos antiguos. Nuestro r�pido progreso desde nuestro origen hasta ir a Marte pronto, despu�s de solo 250,000 a�os, no se corresponde con los periodos de millones de a�os de lento desarrollo evolutivo de otras especies como por ejemplo el homo erectus anterior a nosotros.

El paradigma HH muestra que los Creacionistas solo estaban la mitad de equivocados y los Evolucionistas solo la mitad de acertados:

Hubo una creaci�n pero fue un proceso de ingenier�a gen�tica; hay un proceso evolucionista pero fue interrumpido en nuestro caso por los Anunnaki por sus propios intereses pr�cticos.

Estamos forzados a introducir una categor�a m�s: la de una especie sintetizada.

Dos protocolos Definitivos para Probar o Refutar Paradigma de Sitchin

Una aproximaci�n directa para probar o refutar el paradigma de Sitchin es posible desde la astronom�a. ser�a posible con la tecnolog�a actual una b�squeda profesional y minuciosa de nuestro sistema solar para determinar la existencia o inexistencia de un d�cimo planeta con las caracter�sticas de tama�o, orbita, periodo orbital, declinaci�n respecto a la ecl�ptica, como las que Sitchin ha determinado a partir de las traducciones de los archivos antiguos y especialmente del documento Enuma Elish

Si ese planeta no esta en nuestro sistema solar o no se puede encontrar ninguna evidencia para su escape del mismo o un cataclismo destructivo entonces el paradigma de Sitchin se derrumba.

Esta investigaci�n deber�a realizarse con la m�xima prioridad.

El asunto es lo suficientemente importante para aclarar nuestra situaci�n hist�rica y har�a que tanto el mundo acad�mico como la comunidad cient�fica se involucraran en �l.

Es la opini�n de este autor, a la luz de las evidencias ya obtenidas por el Pioneer 10 y 11, dos naves espaciales Voyager, por el Sat�lite de Im�genes Infrarrojas (IRAS, en los a�os 83-84) y por los datos disponibles para Harrington cuando consultaba a Sitchin que la b�squeda ya ha sido completada, de hecho que el planeta ya ha sido encontrado.

Es interesante que Harrington envi� un telescopio apropiado a Black Birch *, en Nueva Zelanda para obtener confirmaci�n visual, basada en los datos que llevaban a la expectaci�n de que este estar�a por debajo de la ecl�ptica en los cielos meridionales en este punto de su orbita.


* Black Birch - es el nombre de un tipo de �rbol de la familia de las betul�ceas, en espa�ol se llama Abedul, en lat�n su nombre cient�fico es betuna lenta. Aqu� se refiere al nombre de un lugar de Nueva Zelanda. Nota del Traductor


Cuando ocurri� la temprana muerte de Harrington el telescopio fue requerido de vuelta inmediatamente - como anoto un observador, �casi antes de que �l se enfriara�. Reconocer la existencia de un d�cimo planeta significa abrir la posibilidad de la existencia de los Anunnaki. La raz�n por la que se quita importancia a los datos, la dificultad para obtenerlos, la interpretaci�n de los cient�ficos hablando p�blicamente sobre ello, todo tiene el mismo olor que recuerda al manejo que hizo la Fuerza A�rea en el caso Roswell.

Obviamente, antes incluso de cualquier confirmaci�n oficial de la existencia de
Nibiru/Planeta X en nuestro sistema solar y ciertamente despu�s, ser�a productivo realizar un rastreo en su direcci�n mediante un sistema modificado al realizado por el SETI que usar� todo el espectro de la energ�a incluyendo las frecuencias de nuestra radio y televisi�n, para determinar la existencia de vida inteligente que aun siguiera all�.

Para adelantarnos a un posible misterio: aunque el planeta sea confirmado, es posible que no se puedan recibir se�ales de vida inteligente.

Esta es una conjetura, solamente, por parte del autor pero, a la luz de la clase de retirada r�pida y la falta de contacto posterior por los Anunnaki, no es impensable que cualquier se�al artificial haya sido enmascarada.

Esta hip�tesis esta basada en la conclusi�n de que una de las principales razones para su salida r�pida de este planeta fue debida no solamente a que necesitaron un punto (espacio-temporal) concreto de lanzamiento del cohete para alcanzar su planeta cuando este vino la ultima vez desde el interior del sistema solar sino debido a que se hab�an dado cuenta de que necesit�bamos ser dejados a nuestro albedr�o para encontrar nuestra propia identidad. Un rastreo de este tipo deber�a realizarse inmediatamente. Deber�a asumirse que nuestras se�ales han sido analizadas desde su marcha.

Un modo diferente de probarlo o refutarlo es posible desde la gen�tica. En breve tendremos registrado el Genoma humano completo.

Ese proceso y la informaci�n obtenida nos dar�an la oportunidad de examinar el genoma completo para buscar la evidencia de la mezcla de dos tipos de c�digos gen�ticos, Homo Erectus y Anunnaki. El protocolo para esa novedosa decisi�n tendr�a que ser desarrollado. Un problema potencial puede estar en el hecho de que la mezcla tuvo lugar entre 250,000-200,000 a�os atr�s.

Un efecto derivado de este esfuerzo puede ser no solo la identificaci�n de los dos c�digos, o al menos, la prueba de la uni�n b�sica, sino la evidencia del porque tenemos unos cuatro mil enfermedades gen�ticas y otras especies de este planeta dif�cilmente tienen una. Es una especulaci�n como m�nimo razonable que la causa primera para esos defectos sea debido a la complejidad de una mezcla importante de los dos genomas.

Recomendamos que estas investigaciones sean implementadas de nuevo con la m�xima prioridad con el fin de probar o refutar el paradigma de Sitchin.


Los factores negativos Aun Operativos En las Culturas Humanas

Procedentes de Nuestra Historia como Raza Subordinada Creada Mediante Ingenier�a Gen�tica.

El primer Factor - El Fondo Del Condicionamiento Para La Servidumbre
La evidencia abrumadora del paradigma de Sitchin demuestra concluyentemente que fuimos creados mediante ingenier�a gen�tica por los Anunnaki y tratados como esclavos y despu�s como compa�eros con restricciones pero siempre subordinados a ellos.

La derivaci�n principal (Neil Freer: Breaking the Godspell) de la explicaci�n de Sitchin es que �la religi�n�, como la hemos conocido, es la transmutaci�n, la transmutaci�n de la relaci�n Anunnaki-humana de maestro-s�bdito esclavo, de la esclavitud primitiva a la servidumbre. Los Anunnaki dejaron gradualmente este planeta al fin alrededor de 1250 a. C.

Desde entonces, hemos atravesado fases de una transici�n traum�tica hacia la madurez y la independencia de nuestra especie.

La caracter�stica principal de este proceso ha sido la transmutaci�n de ellos (los Anunnaki) en todas las culturas, en particular Enlil/Jehov� en la cultura Occidental, convertido en una deidad c�smica, llamada popularmente �Dios� en la tradici�n Judeo-Cristiana.

�Es esto ateismo? No, no como tal. Es simplemente una correcci�n que deb�a haberse hecho hace mucho tiempo de la pol�tica local dentro del sistema solar, relativamente bastante pedestre desde una perspectiva c�smica.

El Ateismo ordinario puede entenderse ahora como un signo temprano de la rebeli�n adolescente de una especie precoz y el cuestionamiento de la autoridad del �dios� local Nefilim de la tribu Hebrea y de la Cristiandad, Yahweh/Jehovah con caracter�sticas obviamente demasiado humanas.

El nuevo paradigma, una vez que el antiguo, y servil encantamiento divino es difuminado, simplemente nos permite ponernos cara a cara con el universo y buscar directamente el principio �ltimo que esta detr�s de �l sea lo que sea imaginable o inimaginable.


En una fase posterior hemos mitificado (a los dioses) convirti�ndolos en seres irreales y despu�s, con mayor sofisticaci�n en arquetipos de la psicolog�a.

Solo mediante las pruebas acumuladas y la historia recuperada por los estudiosos modernos hemos sido capacitados para comprender la verdadera naturaleza de nuestra creaci�n gen�tica, nuestra transici�n traum�tica, y la oportunidad para salir de la amnesia y la adolescencia hasta la madurez de la especie.


El Segundo Factor - El Factor Babel, La Divisi�n de La Raza Humana en Religiones Hostiles
Y entonces ellos abandonaron el planeta colonizado. Se fueron casi sin cerrar la puerta del laboratorio, empezando aparentemente sobre el 1250 a.C.

Los reyes de repente son representados en los grabados de piedra de pie donde sol�an estar cuando o�an las instrucciones del maestro apuntando hacia la ahora vac�a silla en total consternaci�n.

Los lamentos todav�a est�n grabados en las tablillas de arcilla.

�Que har� cuando mi maestro no est� nunca m�s aqu� para instruirme...que le dir� a la gente.�

Nosotros ca�mos en la aflicci�n, la desesperaci�n, la negaci�n. Nos culp�bamos y dirig�amos nuestra atenci�n al cielo esperando su vuelta.

Los reyes buenos hicieron lo que pudieron, a los l�deres algunas veces se les pidi� subir a la monta�a para obtener instrucciones a larga distancia desde el espacio o hacer una caja de madera forrada de metal para actuar como receptor.

�Ahora escucha esto�.

Finalmente quedamos solos y confusos, empezando a luchar para dirimir quien aun sab�a lo que realmente dijo el maestro, lo que realmente significaba, que deber�amos hacer realmente si el apareciese.

El servicio en su mesa se transform� en un sacrificio ritual de comida, la asistencia en sus ba�os en ba�ar y vestir a estatuas sustitutivas de ellos y gradualmente los servicios rutinarios se convirtieron en rituales de culto y sus palacios en templos vac�os. Y los reyes mediocres empezaron a coger ventajas, empezaron a pavonearse. A veces lo lograron por si mismo. Otras veces la gente, desesperada, elev� a su rey al nivel de un dios simb�lico.

Y el buen rey y la semilla del concepto del derecho divino de los reyes aparecieron. Y los sirvientes jefes lo apoyaron porque era beneficioso para ellos ser sacerdotes o preservar sus trabajos y estatus. Y aquellos a los que se les hab�a instruido, viendo que el conocimiento avanzado de tecnolog�as y ciencia y las artes, aprendido como parte de su funci�n, la escritura, matem�ticas, astronom�a, ciencia, metalurgia, y las artesan�as en general estaba perdi�ndose prepararon una agenda para preservarlo.

A pesar del desacuerdo y la amenaza ellos lo disfrazaron, lo retiraron, lo escondieron. Y lo �oculto� apareci�.

Finalmente, la situaci�n evolucion� a una fase muy macabra. En un esfuerzo para demostrar nuestra subordinaci�n y celo para hacer las cosas correctas si ellos solo volvieran mantuvimos las reglas, mantuvimos las rutinas del servicio pero, despu�s de mucho tiempo de desilusi�n, alcanzamos un punto de humillaci�n, desesperaci�n profunda en la que har�amos cualquier cosa para conseguir que regresaran�y lo hicimos.

Recordando la atracci�n que los varones
Nefilim sent�an por nuestras j�venes mujeres, empezamos a sacarles sus corazones en lo alto de los palacios piramidales vac�os en un alarido de suplica colectivo a los cielos de donde hab�an venido y a donde hab�an marchado. Pero ese horror inefable y despreciable no pod�a durar: empezamos a dudar, a mantener con cinismo aterrador, pensamientos secretos de independencia y de porque preocuparse.

Lentamente un proceso t�pico de disociaci�n se desarroll� debido a la larga separaci�n y empezamos a sublimar a los Nefilim de carne y hueso en conceptos absolutos c�smicos y sus personas en arquetipos m�ticos.

Mirando atr�s en la historia de nuestra especie la transici�n traum�tica por la que hemos pasado podr�a muy bien ser descrita como la creaci�n nuestra del concepto de un Dios c�smico, a trav�s de una serie de fases psicol�gicas cambiantes. Finalmente, simplemente empezamos a olvidar.

La transici�n desde el olvido hasta la madurez de la especie ha sido un pasaje muy traum�tico. Romper el �encantamiento-divino� nos ha visto pasar por los estadios del abandono hasta la disociaci�n, la transmutaci�n, la religi�n, la rebeli�n y ahora por el de la recuperaci�n. Es an�logo al s�ndrome de familia disfuncional pero en una escala planetaria.

As�, de vuelta a nuestros d�as, incre�blemente, nos hemos mantenido aun �Babel-factorizados� para un buen control de la muchedumbre, separados en tribus cada una dici�ndole a la otra que la nuestra es la �nica tradici�n correcta sobre lo que un �dios� en particular entend�a, que reglas seguir, que deber�amos hacer para demostrar que todav�a somos sirvientes leales y d�ciles.

A veces hasta nos matamos por ello...

Y las persecuciones, las Cruzadas, Jihads, Inquisiciones, imperios del mal, los salvados y los condenados, los m�rtires, los infieles, los santos, los protestantes, los fundamentalistas, los ateos aparecieron�y se mantienen.


El Tercer Factor: Una Tradici�n de Absolutismo, Ocultaci�n y Represi�n
La naturaleza de los hechos hist�ricos por los cuales Yahweh/Jehovah lleg� a ser el �dios� monote�sta (�nico, supremo � y extranjero) de los Hebreos es lo que suministra la tercera clave de c�mo est�n interrelacionados el paradigma OVNI/Extraterrestre y el de la Historia Humana seg�n Sitchin.

Estudios modernos, trabajando sobre las bases puestas anteriormente como la Escuela Alemana, han revalorizado el Antiguo Testamento. Cuando los registros Mesopot�micos empezaron a ser desenterrados en el siglo XIX, se tuvo claro que la historia revelada desde 4000 a.C. hacia delante, era la fuente de la historia del Antiguo Testamento.

Los Jud�os, confinados en cautiverio por los Babilonios con el permiso de su �dios� Jehovah, han usado esa historia y la han falsificado (seg�n Sitchin) al rescribirla seg�n sus necesidades para establecer a Enlil/Jehovah como su gobernante supremo.

Esa historia muestra claramente que dos hermanos Anunnakis, Enlil y Enki siempre hab�an estado en desacuerdo uno con el otro tanto en lo personal como en lo pol�tico.

Enki era el Anunnaki cient�fico que, junto a su media hermana cient�fica, Ninhursag, hab�an creado a los humanos y siempre hab�an estado a su favor.

Enlil siempre hab�a tenido reservas respecto a los humanos y los dominaba con severidad.

Gardner ha descrito el caso (
Bloodline Of The Holy Grail *, Genesis Of the Grail Kings)� cuando el Antiguo Testamento se refer�a a el Se�or (Adonai, Enki) era cuando se hac�an cosas buenas para los Hebreos.

Cuando les eran hechas cosas terribles o se permit�a que les sucediera, la referencia era siempre a Jehovah/Yahweh, (Enlil) y fue a la dominaci�n de Enlil a la que finalmente capitularon y rindieron culto con temor.

* publicado en espa�ol por Mart�nez roca en 2007, La Estirpe del Santo Grial - Nota del Traductor

Enki (El Se�or, Adonai) inici� un linaje de lideres humanos, elevados con m�s genes Anunnaki y les ense�o los conocimientos cient�ficos avanzados que ellos pose�an (Gardner). Este linaje real, que descend�a de David y el messiah ungido (el ungido - el elegido) fue reconocido pero tratado ambiguamente por la mayor parte de los Hebreos que ofrec�an lealtad a Enlil.

El Antiguo Testamento, una recopilaci�n de libros de los cuales algunos, considerados inaceptables, fueron excluidos porque contradec�an las manipulaciones necesarias para establecer a Enlil como el supremo, promulga una actitud religiosa basada en la subordinaci�n y en el �temor a Dios�.

Esta actitud es una extensi�n de la antigua relaci�n maestro-esclavo que esta en la ra�z de la Cultura Occidental y de la visi�n dominante de que los poseedores del poder y el dominio como la autoridad �ltima y absoluta.

El escenario se repiti� de nuevo cuando la rama del Juda�smo que finalmente fue conocida como Cristianismo aliado con Roma se convirti� en la Iglesia Romana. Perpetuo la tradici�n de un Dios temible como Enlil y, por otro lado, reprimi�, persigui� y trato brutalmente a la rama humanista del Cristianismo que derivaba de la tradici�n mantenida por Enki.

Fue esta religi�n poderosa de los Obispos y de la Inquisici�n la que pod�a torturar, forzar y matar para dominar y controlar la que tambi�n controlaba y dictaba a las primeras Universidades. Nuestras escuelas de �ense�anza� superior aun hacen ostentaci�n de las parafernalias de la universidad Medieval en ocasiones ceremoniales y, desafortunadamente, todas demasiado a menudo mantienen su limitaci�n al debate a los temas aprobados.

Esta pol�tica y posici�n de autoridad absoluta dominante por parte de la Iglesia Romana se extendi� gradualmente por la v�a de la Pol�tica Romana y militarmente y controlaba y formaba gobiernos y pol�ticas de gobierno a trav�s de reyes y reinas cuyas coronas eran custodiadas por la Iglesia.

Sus pol�ticas inamovibles, la Inquisici�n existe bajo el titulo de Congregaci�n para la Doctrina de la Fe.

La m�s reciente soluci�n a la deliberada mutilaci�n religiosa, siempre justo por debajo de la superficie, desarrollada en la Constituci�n de los EE.UU., aun estim� necesario mostrar deferencia al temible Dios de la tradici�n Judeo Cristiana, Yahweh/Jehovah � Enlil el dios Anunnaki alien�gena.

Similitudes Claras e Interrelaciones Cr�ticas

Entre los Paradigmas OVNI-Alien�gena e Historia Humana seg�n Sitchin

El foco del control y ocultamiento de informaci�n resulta ser id�ntico: la existencia y presencia, acci�n e interacci�n de una civilizaci�n alien�gena de nuestro sistema solar en el pasado y actualmente posiblemente (HH); la existencia y presencia, acci�n e interacci�n de una civilizaci�n alien�gena de fuera de nuestro sistema solar en el pasado y contempor�neamente (OVNI-A).

El tipo de autoridad y su modo de ejecutar el control y la represi�n son similares: los actores principales en el contexto Jud�o y Cristiano trabajan para consolidar condescendientemente un r�gimen pol�tico-religioso de su propiedad en su propio inter�s y corrupto seg�n el ideal original; los actores principales en nuestra sociedad trabajan, probablemente con sinceridad al principio pero despu�s condescendientemente para consolidar un r�gimen pol�tico basado en su propio inter�s y corrupto seg�n el ideal Democr�tico.

La metodolog�a del uso del ocultamiento de la informaci�n, la manipulaci�n de los hechos relevantes, el enga�o, el uso de la amenaza, la intimidaci�n y la fuerza es similar y algunas veces id�ntica: el cachete dado por el polic�a en la palma para enfatizar la amenaza de muerte hacia la hija de un testigo en Roswell recuerda las amenazas de la Inquisici�n y las ejecuciones de los �herejes�.

La agenda del Proyecto Libro Azul (Project Blue Book) refleja la ocultaci�n de los fondos de la exploraci�n Egipcia y la destrucci�n completa de la publicaci�n de Petrie sobre su descubrimiento de la planta de procesamiento de oro en el monte Horeb (Gardner: La estirpe del Grial - Genesis Of the Grail Kings)

Entonces, no debe sorprender, a la luz de nuestro origen mitad alien�gena pero como esclavo servicial, que hemos tolerado las manipulaciones condescendientes y los abusos de autoridad que han sido ejercidos por quienes han controlado la situaci�n del tema OVNI/Extraterrestre desde al menos los a�os 40.

No es sorprendente que muchos reaccionemos, casi involuntariamente, a la posibilidad de que otra raza venga de las estrellas o del d�cimo planeta de nuestro sistema solar, asumiendo inmediatamente su superioridad y benevolencia o su poder para mandar. Si hemos estado mirando al cielo durante unos tres mil a�os esperando a que �Papaito� vuelva de donde los Anunnaki fueron cuando abandonaron el planeta, esperando su regreso para hacer todo bien y que nos digan que hacer, nos ponemos en una posici�n peligrosa y altamente vulnerable de ser dominados por cualquier cosa que pase y aparezca aqu� � incluso aunque fueran androides.

Debemos romper este encantamiento-divino para llegar a ser completamente independientes y efectivos.

No es sorprendente que incluso aquellos que reconocen la realidad de la presencia alien�gena actual y la naturaleza medio extraterrestre de nuestro propio material gen�tico aun pueden ser enga�ados por peticiones de subordinaci�n. Algunos conferenciantes de la Nueva Era guiar�an a gente a lo alto de las monta�as donde esperar�an a que la nave espacial aterrice y despu�s los rescatara para ser incorporados a una sub-cultura alien�gena.

Algunos reclamar�an que deber�amos permitirnos ser los Soldaditos de cualquier conflicto alien�gena entre las presuntas fuerzas de la luz y la oscuridad de manera que podamos ser recompensados por el l�der de la luz victorioso y obtener en compensaci�n tecnolog�a avanzada en la fiesta de la victoria.

Considerad incluso la Constituci�n de EE.UU. desde la perspectiva del encantamiento-divino: fue construida para crear una sociedad donde una poblaci�n con pluralidad religiosa pudiera coexistir con el m�nimo de violencia entre las confesiones.

Un resultado de esta aceptaci�n forzosa de una pluralidad Babelica ha sido el protocolo incomodo de falta de discusi�n y una actitud en la que cualquier cuestionamiento es autom�ticamente prejuzgado como partidista. Esto hace extremadamente dif�cil cualquier revisi�n o evaluaci�n imparcial de la historia de la raza porque es, de hecho, inevitablemente la historia �religiosa� de alguna confesi�n.

El fondo religioso y el sistema de creencias de los investigadores de los OVNIS, pol�ticos, cient�ficos origina conflictos internos que a menudo debilitan sus esfuerzos. El grado de desarrollo de la conciencia de los cient�ficos, los estudiosos, los pol�ticos, los fil�sofos, los Uf�logos, determinan el nivel de efectividad de sus acciones.

El Uf�logo mas experto que aun esta buscando seres superiores que aparezcan para ayudarnos a salir, �salvarnos�, instruirnos, esta mirando a trav�s de un filtro fuera de moda y restrictivo, incluso sumiso.

El cient�fico que ignora o niega la evidencia de la presencia alien�gena, presente o pasada, por permitir o consentir presiones religiosas o del gobierno esta limitado igualmente. La negaci�n o el ignorar la evidencia de la presencia alien�gena, actual o pasada y que esta directamente conectada con nuestros propios or�genes por el SETI es an�loga a la negaci�n o el ignorar la evidencia arqueol�gica de la presencia y el papel de los Anunnaki en nuestro pasado por parte de los cient�ficos y las religiones del mundo.

Las actitudes que hemos mostrado, las modos como hemos actuado y la manera como nos hemos dejado manipular por los poderes dominantes en relaci�n a la presencia OVNI/alien�gena y en relaci�n a nuestra propia historia como especie y las posturas que continuamos exhibiendo claramente son las ramas derivadas de nuestro antiguo fondo e historia de sumisi�n al encantamiento-divino.


La integraci�n de Las Dos Partes del Paradigma Extraterrestre

Puede Llevarnos a un Nuevo Nivel de Existencia como Especie.

Este autor tiene la convicci�n de que, hasta que no recuperemos nuestra verdadera historia, y alcancemos una definici�n y comprensi�n de lo que es el ser humano con un amplio consenso y pasemos la fase de adolescencia como especie hasta entonces, no resolveremos totalmente la cuesti�n actual del tema OVNI- Extraterrestre porque no tendremos la madurez como especie y la unidad planetaria para ser capaces de interaccionar con elegancia con especies extra�as, y saber f�cilmente que es aceptable y que no para ambos.

Este es simplemente otra cara del razonamiento hecho por aquellos que se sintieron obligados necesariamente a tratar militarmente y diplom�ticamente con los alien�genas grises y eligieron mantener el asunto tan secreto como fuera posible.

La restauraci�n de nuestra verdadera historia mitad alien�gena, sin embargo, nos dejar� alcanzar la integridad incuestionable que nos permita demandar y presentar credenciales, determinar el prop�sito, la agenda, y negociar con seguridad para ser aceptados en la sociedad interestelar con plena dignidad. Nos permitir� obtener la confianza individual y como especie y la perspectiva que nos evitar� ser manipulados, amenazados o conquistados por quienquiera que ya este aqu� o que aparezca aqu� en el futuro.

Solo esta clase de integraci�n nos permitir� alcanzar la explicaci�n y la comprensi�n de muchos detalles de los dos escenarios, el de la HH y el de los OVNIS-ET.


Ventajas Pr�cticas Derivadas de La Integraci�n de los Paradigmas OVNI y HH

La aclaraci�n de la presencia alien�gena Anunnaki en el pasado explica la existencia de ooparts* (objeto extra-temporal), los enigmas concernientes a las civilizaciones �repentinas�, nuestro progreso de desarrollo evolutivo anormal y al caso de nuestro singular c�digo gen�tico y resuelve el conflicto entre Creacionistas y Evolucionistas.

La comprensi�n de nuestra herencia racial doble, mitad homo-erectus y Anunnaki y nuestra creaci�n mediante bioingenier�a gen�tica por motivos pr�cticos de los Anunnakis puede explicar el porque tenemos mas de 4000 enfermedades de origen gen�tico debido a imperfecciones en la s�ntesis gen�tica mientras otras especies en el planeta solo tienen unas pocas o ninguna.

Un repaso mas completo y preciso de nuestro pasado nos permite diferenciar entre mito, seres m�ticos y extraterrestres o cualquier tipo que se haya manifestado o venido aqu� tanto en el pasado como en el presente y nos ayudar� a distinguir y a tratar con los alien�genas en el futuro.

El hecho de que somos literalmente mitad extraterrestres gen�ticamente hablando lanza toda la cuesti�n del tema extraterrestre a una perspectiva muy distinta.



Posibles Escenarios Abiertos por El Reconocimiento De Los Anunnaki

Hay varios escenarios posibles l�gicos presentados por la ampliaci�n del paradigma extraterrestre. Aqu� simplemente los enumeraremos, sin una evaluaci�n sopesada, para que el lector los tenga en consideraci�n.

Nota preliminar: No hace mucho tiempo, uno pod�a estar en un serio problema con las autoridades religiosas por expresar la creencia de que pod�an existir otras razas de otros lugares - mucho menos de otras dimensiones (
Giordano Bruno, un monje que afirm� esto fue quemado en la hoguera por la Iglesia solo unos pocos a�os antes de la fundaci�n de la Universidad de Harvard).

La idea de que existen m�s de nuestras c�modas tres dimensiones es relativamente nueva y aun en parte especulativa; los f�sicos aun disputan por el n�mero real. Es comprensible, por lo tanto, que una especie de aura de misterio y veneraci�n, algo casi religioso sobrenatural, se proyecte sobre el concepto de �dimensionalidad�.

La mayor capacidad de diferenciaci�n aportada por esta ampliaci�n del punto de vista elimina el halo m�stico del concepto de ��nter dimensional� aplicado a algunos alien�genas.

Bien puede ser cierto, seguramente lo sea, que algunos alien�genas y sus tecnolog�as y, por consiguiente, su conciencia, entra�en formas que usen u operen en otras dimensiones mas all� de las tres que estamos acostumbrados a percibir. La f�sica, humana o alien�gena, de cualquier forma, sigue siendo f�sica � sea de este sub-universo o de otro.

Ser� m�s f�cil tratar con cualquier manifestaci�n f�sica o descubrimiento cuando los elementos m�sticos subliminales sean descartados de nuestro pensamiento y cuando el reflejo autom�tico � o quiz�s, el ponerse de rodillas�en un reflejo de servidumbre al encantamiento-divino sea eliminado.

Si Nibiru, el planeta de origen de los Anunnaki y el d�cimo de nuestro sistema solar aun est� en �rbita en este (si no ha sufrido ninguna cat�strofe destructiva o se haya escapado del mismo) hay una expectativa razonable de que los Anunnaki aun existan. Las evidencias reunidas por la investigaci�n en el 83-84 mediante el IRAS (Sat�lite Astron�mico de Infrarrojos) de que dicho planeta aun existiera en nuestro sistema solar fue suficiente para convencer a Harrington del Observatorio Naval.

El tipo de alien�gena conocido como �N�rdico� es el que m�s se ajusta en su apariencia f�sica a los
Anunnaki. Se puede pensar f�cilmente que ellos podr�an, en su actual estado de desarrollo tecnol�gico, venir aqu�, como monitores o incluso como turistas cuando lo desearan (aunque, al principio, estuvieran limitados a determinadas orbitas pues al parecer solo pose�an tecnolog�a de misiles bal�sticos )

Puede que se descubra que los �grisesy otros tipos de extraterrestres son robots y androides de los Anunnaki , usados como sondas remotas o quiz�s como controladores rutinarios de este planeta, o como mensajeros cautelosos, quiz�s sacrificados en accidentes como una manifestaci�n introductoria no amenazante, esterilizada y segura (caso Roswell).

La relaci�n entre las profec�as registradas en el C�digo Maya y la aparici�n de muchos OVNIS grabados en videos sobre M�xico en 1991 al tiempo del eclipse solar y la relaci�n de los Anunnaki con las primeras civilizaciones de Am�rica Central, pueden se�alar que estos platillos volantes sean Anunnaki.

Algunos Grises y otros tipos pueden ser de sociedades de sistemas fuera del sistema solar y completamente humanoides o androides y ser diferentes de los androides asociados con los Anunnaki. Algunos tipos originarios de sistemas extra-solares pueden ser conocidos, o desconocidos, amistosos, o antag�nicos en su relaci�n con los Anunnaki.

Puede que haya, como ha sido defendido o afirmado por algunos, cooperaci�n o colusi�n directa con una especie alien�gena por parte de grupos humanos con influencia socio-econ�mica internacional, con el prop�sito de controlar a la poblaci�n y, quiz�s, incluso el planeta.

En el caso de que esos alien�genas resulten ser Anunnaki, las dos partes del paradigma se unir�n completamente.

Algunas representaciones de criaturas en el periodo Anunnaki en el Medio Oriente tienen una semejanza sorprendente con las descripciones y representaciones de los alien�genas �grises� reconocidos en los tiempos modernos. Las interpretaciones de Sitchin sobre estas im�genes y sobre descripciones detalladas son que ellos eran robots y androides desarrollados y utilizados por los Anunnaki.

Es la opini�n del autor de este escrito que el tema de la presencia alien�gena es sencillamente algo antiguo, y reaccionar contra ello en el estadio actual de nuestro entendimiento colectivo se esta volviendo algo bastante aburrido. El progreso que estamos realizando con estos problemas creados por nosotros mismos esta lejos de la vanguardia de nuestra evoluci�n y sufrimos debido por ello un retraso artificioso.

Es evidente que aquellos que se encontraron con la responsabilidad de manejar el fen�meno OVNI-ET desde el tiempo del caso Roswell conspiraron para ocultarlo con el prop�sito general de aprehender la tecnolog�a para uso militar y de defensa pero igualmente por la preocupaci�n de que toda la poblaci�n se ver�a trastornada hacia el caos.

Restaurar nuestra verdadera historia mitad alien�gena eliminar� las desventajas derivadas de un pensamiento religioso, ingenuo, provincial y nos proporcionar� una madurez como especie , una perspectiva c�smica e independencia que puede asegurar a aquellos encargados de manejar la cuesti�n OVNI-ET que la alteraci�n y el caos previsto en la poblaci�n cuando se revele el asunto no tendr� lugar finalmente.

El hecho de que han estado tratando como ni�os a los ciudadanos de este pa�s es en un sentido real un reflejo de sus propias limitaciones, un producto de su modo militar de actuar que, como dec�a Corso, se resume en la siguiente pregunta b�sica �amigo o enemigo�.

Necesitan una oportunidad para informar al p�blico que les salve la cara lo suficiente y este puede ser el art�culo que se lo permita.

Ellos presentaran el argumento de que el p�blico no tuvo ni tiene idea de los peligros y amenazas provenientes de los alien�genas, ni idea de lo extra�o de su ciencia, su sociedad y sus intenciones y del grado de superioridad de su desarrollo sobre el nuestro.

Este nivel de conciencia e independencia libera al individuo de la servidumbre y la dependencia a las autoridades del tipo paternalista y estas incluso no ser�n necesarias por mas tiempo. Veremos la lucha inevitable que libraran para mantener su poder los menos evolucionados de ellos y el reconocimiento elegante de la requerida maduraci�n de la especie y la resignaci�n resultante de ese poder en aquellos mas evolucionados.

No es como si hubieran mantenido conocimiento exclusivo de la situaci�n todo el tiempo. El fen�meno OVNI-ET siempre ha manifestado un elemento de contacto directo con el p�blico general a trav�s de manifestaciones f�sicas de naves, abducciones, comunicaciones directas de informaci�n, claramente de una manera gradual, planeada y orquestada al menos por parte de algunas especies.

Quiz�s si aquellos que tienen el control se dan cuenta de que simplemente seguiremos adelante sin ellos, entender�n que no es necesario tratar como ni�os a la gente por m�s tiempo o �proteger� esa ficci�n cl�sica inventada para las �persona corrientes�.


El siguiente Paso

La evaluaci�n de la informaci�n contenida aqu� y la decisi�n de tomarla en consideraci�n e incorporarla o no en las agendas de las diferentes organizaciones a las que va dirigida, ir�nicamente y parad�jicamente, estar� influenciada por los mismos factores elucidados aqu� como contraproducentes y represivos.

Unos miraran hacia la academia o a la ciencia establecida como criterio y la rechazaran por miedo de perder el contacto con esos mundos que sobreviven gracias a las subvenciones gubernamentales.

Otros lo estimaran demasiado complicado porque el tema OVNI-ET es todav�a tan controvertido que incorporarlo seria, desde su punto de vista, complicar la situaci�n hasta el punto de hacerla inmanejable � o demasiado pol�ticamente incorrecta.

Algunos la rechazaran simplemente porque sienten que ofender� a los grupos religiosos y les distanciar�a de aquellos que de otra manera podr�an darles su apoyo o al menos est�n abiertos a su influencia. Es algo tan sorprendente y terror�fico ver a un defensor de la causa OVNI-ET que esta preparado para confrontar cualquier autoridad gubernamental amilanarse ante la autoridad institucional �religiosa�.

Algunos dentro de la comunidad OVNI-ET la rechazaran, suprema iron�a, porque contradice su sistema de creencia religioso, metaf�sico, filos�fico o �Nueva Era� sin una seria consideraci�n de los hechos.

Hay, sin embargo, un numero creciente de aquellos que se han liberado a si mismos de los condicionamientos y las huellas de su cultura y de su religi�n lo suficiente para ser capaces de integrar las dos mitades del paradigma alien�gena dentro de su pensamiento y visi�n global. Han alcanzado la iluminaci�n gen�tica ofrecida por la recuperaci�n de nuestra verdadera historia y esto les ha permitido crecer para comprender la fase OVNI-ET.

Este crecimiento les ha impulsado a pensar y decidir por ellos mismos en relaci�n a la aplastante cantidad de pruebas tanto en el tema de la presencia OVNI-ET como en la visi�n general de la Historia Humana de Sitchin, y moverse por encima del obscurecimiento y obstruccionismo religioso y gubernamental. Para ellos, el Reloj del Paradigma ha marcado las doce hace tiempo y est�n ocupados siendo los propios art�fices de su evoluci�n y prepar�ndose para encontrarse con los alien�genas y preparados para recuperar la relaci�n con los Anunnaki.

Y han experimentado y superado el profundo cambio de paradigma anticipado y predicho por muchos. En verdad ellos son el cambio de paradigma: ellos son, acabada esta fase de investigaci�n, especulaci�n, la fuerza de revelaci�n. La situaci�n actual del tema OVNI-ET es como una vieja pel�cula de los a�os 40: la resistencia a la fase de la Historia Humana seg�n Sitchin es como una telenovela acad�mica en el espacio de la facultad.

Son libres para responder la cuesti�n ��Qu� significa todo esto?" con �lo que nosotros queramos� porque ellos son libres para experimentar el universo como un todo lleno de libertad en el cual la interacci�n con otras especies es solamente otro asunto importante.

Si los alien�genas eligen con quien har�n el primer contacto abierto, p�blico lo m�s probable es que ser�n de este grupo. Ellos son sus propios due�os con una integridad incuestionable y el autoconocimiento, la confianza y la sensibilidad que les permitir� interactuar con sencillez e inteligencia, sin miedo, servilismo o prejuicios paralizantes.

De este grupo es de donde provendr� la claridad de visi�n de la siguiente fase, ya se esta manifestando: la reuni�n sencilla y l�gica y la puesta en funcionamiento de equipos preparados para el contacto.

Saben quienes son y son capaces de reconocer f�cilmente a los de su clase. Saben que deben de estar por encima de las antiguas divisiones basadas en barreras sociales, pol�ticas, nacionales y provincianas.

Saben que no pueden vivir sin una historia humana com�n, no pueden estar enfrentados con los otros en la concepci�n b�sica de los que es un ser humano, no pueden estar separados en lo b�sico de las creencias religiosas. Saben que no pueden esperar a las masas cuando suena la campana de la �ltima vuelta porque son la vanguardia y conocen bien su papel en la evoluci�n.

Es esta conciencia expandida, radicalmente libre, con confianza en si misma, y plenamente independiente la clave del siguiente paso: el contacto abierto y directo, la comunicaci�n y el intercambio entre especies con quienquiera que elija hacerlo de este modo por primera vez.

Puede que sea una especia de fuera de nuestro sistema solar, o de dentro de nuestro sistema solar y, en este caso lo m�s probable, por tanto, que sean los Anunnaki. A estos humanos mutantes les ser� indiferente el caso porque tendr�n la informaci�n y la perspectiva adecuada para comprender, evaluar e interactuar.

El primer proyecto de estos nuevos humanos ser� el perfeccionamiento de un modo de transferencia universal basado en el principio de la relaci�n con uno mismo. Los principios generales y las aplicaciones pr�cticas ya han sido establecidos.

El autor tiene la intenci�n de que esto sea el tema de un segundo escrito.



Lecturas recomendadas:

  • Freer, Neil
    Breaking the Godspell (�87, �90�, �93) -- (Rompiendo el Encantamiento-Divino)
    God Games: What Do You Do Forever? (�98) -- (Juegos Divinos: �Qu� haces eternamente?)

  • Gardner, Sir Laurence
    Bloodline of the Holy Grail ( �96) � El linaje del Santo Grial
    Genesis of the Grail Kings (�99) � El Genesis de los Reyes del Grial

  • Sitchin, Zecharia
    The Twelfth Planet � El Doceavo Planeta
    The Stairway To Heaven � Escalera al Cielo
    The Wars Of Gods and Men � Las Guerras de los Dioses y los Hombres
    The Lost Realms � Los Reinos Perdidos
    When Time Began � Cuando el Tiempo Comenzo
    Genesis Revisited � El Genesis Revisitado