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por�Robert W. Merry� del Sitio Web�WashingtonTimes
traducci�n de
Adela Kaufmann � �
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y los dem�cratas pretenden que es la �poca de los a�os 60.
El Partido Republicano est� en problemas, o tambi�n la sabidur�a convencional. � Ciertamente, el partido est� pasando por una transici�n dolorosa y dif�cil.�Pero en el contexto amplio de la historia, esa es una transici�n necesaria - de la vieja pol�tica que refleja un mundo que ya no existe a un nuevo tipo de pol�tica que refleja el mundo tal como es. � Una de las razones por las que esta temporada electoral es tan ruidosa e impredecible es que los electores saben que esta transici�n es necesaria, pero parece que no puede conseguir la atenci�n de las �lites pol�ticas. � Pero en el contexto amplio de la historia,�el Partido Dem�crata se encuentra en�un estado mucho peor�que los republicanos.�En declive incluso para intentar hacer frente a la pol�tica de hoy en d�a, se ha quedado pegado en el ayer, donde ning�n partido pol�tico puede sobrevivir. � La mayor diferencia entre los dos partidos es�Donald Trump. � La sabidur�a convencional proclama esta desastrosa diferencia para el Partido Republicano, pero en el largo plazo, va a ser mucho m�s desventajoso para los dem�cratas. � Considere los grandes acontecimientos nacionales y mundiales de nuestro tiempo. � Una de ellas es la desintegraci�n�de la "globalizaci�n"�- la idea de que el libre intercambio de dinero, bienes, ideas y pueblos a trav�s de fronteras nacionales producir�a una gran nueva era de prosperidad y armon�a. � El Lexus de Tom Friedman gana, y todos ganan.�El �rbol de olivo muere, �y a qui�n le importa?�Vamos a ser demasiado ricos y contentos para notarlo. � Resulta que la era globalista devast� la econom�a de Estados Unidos - y otras econom�as en todo el mundo.�La Am�rica industrial fue excavada, se perdieron puestos de trabajo sin el reemplazo total de la econom�a post-industrial, ya sea en una cantidad o calidad.�Un magro crecimiento econ�mico durante a�os fue dejando a la luchadora clase media frustrada y enojada. � La globalizaci�n est��muriendo, en cuanto a lo que se refiere a la base pol�tica de Estados Unidos.�El �nico pol�tico en 2016 que dise�� un mensaje basado en la profunda verdad era Donald Trump, y oblig� a los republicanos a hacerle frente. � De c�mo van a responder a ella en �ltima instancia sigue siendo una pregunta abierta, y much�sima guerra pol�tica se producir� antes de que sepamos la respuesta.� � Pero los republicanos ahora est�n luchando con �l en m�ltiples �mbitos:
No los dem�cratas... � Su respuesta, cortes�a de�Bernie Sanders, es inyectar en Estados Unidos el estilo europeo del socialismo democr�tico - impuestos confiscatorios sobre los enemigos de la sociedad (productores), iniciativas de redistribuci�n, m�s poder para la clase de influencia. � Y con�Hillary Clinton�en la parte superior del tiquete, no se enga�en - las �lites financieras de Nueva York saldr�n bien paradas, como lo han hecho en los �ltimos ocho a�os. � Nada de esto se refiere a la realidad fundamental de que�la globalizaci�n ha demostrado ser un�desastre. � Consideremos ahora la inmigraci�n.�Hasta hace poco, los dos partidos pol�ticos en general estaban a favor de una "soluci�n integral", lo que significaba esencialmente amnist�a para los 11 millones o m�s de ilegales actualmente en el pa�s. � En �ltima instancia, ser� necesario alg�n compromiso en este sentido.�Pero, en verdad, ninguna de las partes hablaba realmente en serio acerca de la soluci�n del problema de la afluencia m�s amplia. � La inmigraci�n masiva, legal e ilegal, ayudar�a a resolver el inminente desastre de la Seguridad Social, por un lado;�y los dem�cratas vieron la inmigraci�n masiva como una v�a hacia la dominaci�n del partido, ya que los reci�n llegados eran propensos a votar por los dem�cratas. � La sabidur�a convencional era que los republicanos podr�an hacer frente a este hecho inevitable solamente abrazando el enfoque democr�tico, lo que significaba dejar de ser republicanos. � Pero con la globalizaci�n moribunda, el nacionalismo sali� a la luz, y el nacionalismo aborrece la inmigraci�n masiva debido a que una naci�n sin fronteras no es realmente una naci�n.�Trump ahora ha reforzado esta nueva conciencia en el discurso republicano. � Una vez m�s, no sabemos el resultado final, pero los republicanos al menos estaremos lidiando con ello abiertamente. � La mayor�a de dem�cratas no son nacionalistas.�No lo han sido desde que el partido fue nuevamente forjado en las calientes llamas de Vietnam.�Pero aferrarse a las pol�ticas de inmigraci�n globalista cuando la globalizaci�n est� muriendo no es probable que sea un poderoso enfoque pol�tico. � O considerar pol�tica exterior la post Guerra Fr�a de Estados Unidos.�Un desastre, como el pa�s ya sabe.�Pero, de nuevo, antes del se�or Trump, ninguna de las partes podr�a forzarse a confrontar esta verdad evidente. � Dem�cratas como Hillary Clinton se negaron a renunciar a su�impulso wilsoniano de sentirse bien usando la fuerza estadounidense para tranquilizar las heridas y da�os de la humanidad en recintos distantes del globo (la globalizaci�n de nuevo). � Y los republicanos estaban cautivados con la idea neoconservadora de que Estados Unidos podr�a mantenerse erguido sobre el globo flexionando sus m�sculos en todas partes (con un poco de naci�n-wilsoniana-que-hace-el-bien en el camino). � Ninguna de las partes podr�a traerse a aceptar la realidad de que la Guerra Fr�a hab�a terminado, y el esfuerzo posterior a la Guerra Fr�a de manejar el mundo como en los tiempos de la Guerra Fr�a ha fallado.�Pero los electores lo sab�an. � Entonces lleg� Donald Trump, y ahora todo el mundo sabe que el pa�s se enfrenta a un ajuste de cuentas en esto.�Una vez m�s, no sabemos el resultado del juicio final, pero sabemos�que suceder�. � Considere tambi�n papel y la funci�n de la OTAN en el mundo posterior a la Guerra Fr�a. � Estas son todas las realidades que la naci�n debe enfrentar, y ellos est�n siendo confrontados ahora s�lo en el Partido Republicano.�Es verdad que muchos perros republicanos de mayor rango han estado luchando contra la correa de estas realidades fundamentales, pero la correa est� tirando de ellas tambi�n. � La mayor�a de los dem�cratas siguen ignorando estas realidades, pegados como est�n a�la moribunda era de la globalizaci�n.�Nadie representa esto m�s crudamente como Hillary Clinton. � Jann Wenner�del Rolling Stones escribi� recientemente que ella era,
El �nico problema es que los a�os sesenta se han quedado atr�s... � � � |
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