porIsaac Davis

28 Noviembre 2016
del Sitio WebWakingTimes

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles

Islandia se ha ganado la admiraci�n

de los populistas en los �ltimos a�os

por hacer lo que ninguna otra naci�n en el mundo

parece estar dispuesta o ser capaz de hacer.

"Si quieres seguir siendo un esclavo de los bancos y pagar el costo de tu propia esclavitud, entonces deja que los banqueros sigan creando dinero y controlando el cr�dito.

Josiah Stamp

Islandia ha ganado la admiraci�n�de los populistas en los �ltimos a�os haciendo lo que ninguna otra naci�n en el mundo parece estar dispuesta o ser capaz de hacer:�

enjuiciar a los banqueros criminales por dise�ar el colapso financiero con fines de lucro.

Su eficaz revuelta contra la clase bancaria, que condujo a la peque�a naci�n a una crisis econ�mica en 2008, es el ejemplo a�n m�s brillante de que el mundo no tiene que estar en deuda a perpetuidad a una austera y criminal �lite adinerada.

En 2015, 26 banqueros islandeses fueron condenados a prisi�n y�el gobierno orden� una venta del banco en beneficio de la�ciudadan�a.

Inspirados por el progreso de Islandia, activistas en Suiza ahora est�n haciendo un stand importante contra�los c�rteles de la banca�y han solicitado exitosamente a llevar la iniciativa a refer�ndum p�blico que atacar� a los bancos privados donde m�s importa:

Su poder para prestar dinero que en realidad no tienen, y crear dinero de la nada:

"Suiza celebrar� un refer�ndum para decidir si se debe prohibir a los bancos comerciales crear�dinero.

El gobierno federal suizo confirm� el jueves que celebrar�a un plebiscito, despu�s de que m�s de 110,000 personas firmaron una petici�n para que al banco central se le diese el �nico poder de crear dinero en el sistema financiero.

La campa�a - dirigida por el movimiento�Dinero Suizo Soberano y conocido como la iniciativa Vollgeld - est� dise�ada para limitar la especulaci�n financiera, al exigir alos bancos privados mantener reservas 100pc contra sus dep�sitos."

The Telegraph

Suiza se encuentra en una posici�n clave para desempe�ar un papel revolucionario en cambiar c�mo funciona la banca global.

Adem�s de ser el puerto m�s seguro del mundo para el almacenamiento de la riqueza, es tambi�n el hogar del�Banco de Pagos Internacionales (BIS), una sombr�a empresa privada propiedad de muchos de los bancos centrales del mundo, y actuando como un prestamista de los bancos centrales.

El BIS es�el coraz�n de la�banca mundial de�reserva,�es la pol�tica que permite a los bancos a prestar dinero que no existe realmente en sus dep�sitos bancarios, sino que es, literalmente, creado electr�nicamente de la nada cada vez que un banco extiende una l�nea de cr�dito.

La reserva bancaria es la pol�tica que garantiza la deuda insuperable como el resultado de todas las transacciones financieras.

La iniciativa de Dinero Soberano en Suiza tiene como objetivo frenar la especulaci�n financiera, que es el resultado deseado e inevitable de la banca de reserva, la herramienta que hace posible el aventurerismo financiero mediante el suministro de los bancos con cantidades infinitas de dinero fiduciario.

Limitar la capacidad del banco para producir dinero de la nada ser�a un golpe directo a las ra�ces del cartel bancario, y paralizar�a su capacidad de manipular la econom�a mundial.

As� es como funciona, en t�rminos bastante simplificados:

"...si tuvi�ramos acceso a los mismos terminales inform�ticos que los bancos tienen, podr�amos hacer magia dentro o fuera de la existencia de todas las cosas imaginarias a las que estamos entrenados para pensar como importantes - el dinero - en cualquier cantidad que quisi�ramos.

As� es como funciona:

  • cuando imprimen un buen mont�n de estas cosas hay un auge

  • cuando imprimen demasiado de �l, hay inflaci�n (en realidad, la impresi�n del dinero es inflaci�n)

  • cuando dejan de imprimirlo o simplemente se aferran a �l, hay una depresi�n".

Fuente

En Suiza, el 90% de todo el dinero en circulaci�n es electr�nico, y para ello,�el Banco Nacional de Suiza�se ha convertido en el blanco directo de�la Campa�a de Dinero�Soberano.

La legislaci�n suiza en el pasado ha requerido a los bancos respaldar toda creaci�n de moneda con activos colaterales como la plata o el oro f�sico, sin embargo, en las �ltimas d�cadas, el clima ha cambiado, y,

"debido a la aparici�n de las transacciones de pago electr�nico, los bancos han recuperado la oportunidad de crear su propio dinero."

La campa�a de base dijo en una�declaraci�n p�blica con respecto a las intenciones del refer�ndum,

"Los bancos ya no ser�n capaces de crear dinero para s� mismos, s�lo ser�an capaces de prestar el dinero que ellos tienen de los ahorradores o de otros�bancos."

Este es un interesante giro en la saga humana del�hombre versus los�bancos,�y si bien queda por ver si el refer�ndum pasa o no, debe ser se�alado que tiene sus propios problemas, articulados por Sam�Gerrans:

"...se dice que al banco central se le debe dar derecho exclusivo de crear dinero.

Esto dejar�a esencialmente la creaci�n de dinero en las mismas manos que aquellos que controlan la Reserva Federal o el Banco de Inglaterra en lugar de permitirles cosechar del proceso.�Pero al menos se nota que la gente est� empezando a despertar a d�nde reside el verdadero poder.

En el improbable caso de que este movimiento popular en Suiza se saliera con la suya y su legislaci�n propuesta fuera promulgada y, luego empieza a transformarse en algo que realmente amenazar�a a la �lite bancaria, no hay que sorprenderse si Suiza es dentro de poco acusada de albergar armas de destrucci�n masiva, o haber planeado el 09/11, o que est� financiando el Estado Isl�mico".

Parte del condicionamiento cultural de nuestro tiempo es una arraigada presunta dependencia en las instituciones de vacas sagradas como la banca.

Al igual que es imposible para la mayor�a de los estadounidenses imaginar un mundo sin�dem�cratas y�republicanos,�es dif�cil para la mayor�a de la gente imaginar un mundo sin banca global depredadora.

Sin embargo, hay�una serie de otras posibilidadespara comerciar, almacenar riquezas, y facilitar el desarrollo en el mundo.

Este no es el �nico sistema econ�mico que podemos imaginar, y como Islandia ha demostrado, la gente puede recuperar el control de su riqueza colectiva, as� que quiz�s esta revoluci�n se fomentar� a�n m�s en Suiza, presentando la oportunidad de, al menos, lograr una mayor sensibilizaci�n de la verdad sobre la banca central.