por Anna Couey y Joshua Karliner

Tomado de Corporate Watch y publicado en ZNnet en espa�ol.
Traducido por Pedro Edu Hondo Mart�n y revisado por Gabriel Alonso,

Diciembre 1999
del Sitio Web VeaYLea2001

CW: �C�mo ve de significativas las recientes escaramuzas entre el Departamento de Justicia y Microsoft? �Lo ve como un cambio importante en esta espiral de acontecimientos?

NC: S� es significativo. Pero no deber�amos exagerarlo. Si hay tres grandes empresas controlando lo que son esencialmente propiedades y creaciones p�blicas, esto es, Internet, telecomunicaciones, etc�tera, eso no es algo mucho mejor que el control de una sola empresa, pero quiz�s existe una peque�a diferencia. La pregunta es hasta qu� punto par�sitos como Microsoft deber�an ser expulsados del sistema p�blico, o si se les deber�a conceder absolutamente cualquier derecho.


CW: Proporci�nenos algo de contexto hist�rico. �C�mo encaja lo que est� pasando con el creciente poder de Microsoft y c�mo encaja su papel en la sociedad en la historia del poder de las corporaciones en Estados Unidos y en la evoluci�n de las mismas?

NC: Existen corporaciones desde hace tanto tiempo como en el siglo dieciocho, e incluso antes. En Estados Unidos, las corporaciones eran entes p�blicos. B�sicamente, eran asociaciones. Un grupo de gente pod�a reunirse y decir "queremos construir un puente sobre �ste r�o", y conseguir un permiso estatal que les permitiese hacerlo, necesitando eso y nada m�s. La corporaci�n no ten�a los derechos de las personas individuales. El modelo para la corporaci�n volviendo a los tiempos de la redacci�n de la Constituci�n era un asunto constitucional. Durante el siglo diecinueve, esto empez� a cambiar.

Es importante recordar que el sistema constitucional no fue dise�ado en primer lugar para defender los derechos de la gente. M�s bien, los derechos de los ciudadanos ten�an que ser equilibrados, como propuso Madison, con lo que �l llamaba los "derechos de propiedad". Por supuesto, la propiedad no tiene derechos: mi bol�grafo no tiene derechos. Puede que yo tenga un derecho sobre �l, pero el bol�grafo no tiene ning�n derecho. As�, esta es s�lo una frase codificada para favorecer los derechos de la gente con propiedades.

El sistema constitucional fue fundado sobre el principio de que los derechos de la gente con propiedades tienen que ser privilegiados; ellos tienen derechos porque son personas pero ellos tambi�n tienen derechos especiales porque poseen la propiedad. Como Madison expuso en los debates constitucionales, el objetivo del gobierno debe ser "proteger a la minor�a de opulentos frente a la mayor�a". Esa es la v�a por la que el sistema fue establecido.

En los Estados Unidos de Am�rica, cerca del cambio de siglo, a trav�s del activismo judicial radical, los tribunales cambiaron crucialmente el concepto de la corporaci�n. Simplemente lo redefinieron con el objetivo de garantizar privilegios no s�lo para los due�os de la propiedad, sino tambi�n para lo que los historiadores del derecho llaman "entidades jur�dicas colectivas".

Las corporaciones, en otras palabras, recibieron a principios de este siglo derechos de personas, de hecho personas inmortales, y personas de inmenso poder. Y estaban libres de la necesidad de restringirse ellos mismos las concesiones del Estado.

Ese es un gran cambio. Esencialmente es establecer importantes tiran�as privadas, las cuales no tienen responsabilidades porque est�n protegidas por la Quinta Enmienda, libres de b�squeda y captura, y m�s aun, uno no puede imaginarse qu� es lo que est�n haciendo.

Despu�s de la Segunda Guerra Mundial, era bien sabido en el mundo de los negocios que iban a tener que acordar con el Estado coordinaci�n, subvenciones y una especie de socializaci�n de los costes y los riesgos. La �nica cuesti�n era c�mo hacerlo. El m�todo que se encontr� para ello fue el "sistema del Pent�gono" (que incluye al DOE, a la AEC o a la NASA).

Estos sistemas subvencionados p�blicamente han sido el n�cleo de los sectores din�micos de la econom�a norteamericana desde entonces (bastante parecido es el caso de la biotecnolog�a, la farmacolog�a, etc., que se apoyan en diferentes fuentes p�blicas). Y eso ciertamente se�ala el camino a Microsoft.

As� pues, �c�mo alcanza Microsoft sus enormes beneficios?

Bien, Bill Gates es bastante franco acerca de ello. �l dice que ellos lo hacen "adoptando y extendiendo" las ideas de otros. Ellos se han basado en los ordenadores, por ejemplo. Los ordenadores fueron creados a expensas e iniciativa p�blicas. En los a�os cincuenta cuando estaban siendo desarrollados, ten�an cerca del 100% de financiaci�n p�blica. Lo mismo se puede decir de Internet en sus primeros tiempos.

Las ideas, las iniciativas, el software, el hardware... fueron creados a iniciativa y a expensas p�blicas, y est�n siendo entregados a individuos como Bill Gates.


CW: �Cu�les son los impactos sociales y culturales de permitir a no s�lo un monopolio, sino incluso si es a no m�s que a unas pocas grandes corporaciones, dominar algo tan b�sico c�mo el habla humana, la comunicaci�n con el otro?

NC: Es una forma de tiran�a. Pero, ese es el objetivo �ltimo de la corporaci�n - intentar alejar lo p�blico de la toma de decisiones sobre aquello que pertenece a su misma esencia, limitar los campos de discusi�n p�blicos, controlar la opini�n, asegurarse de que las decisiones fundamentales que determinan c�mo va a funcionar el mundo - lo cual incluye la producci�n, el comercio, la distribuci�n, el pensamiento, la pol�tica social, la pol�tica exterior, todo - no est� en manos p�blicas, sino m�s bien en manos de un altamente concentrado poder privado. Y hay varias formas para hacer esto. Una es tener el sistema de comunicaci�n, tambi�n llamado sistema de informaci�n, en manos de una red de, pocas o muchas no importa mucho, tiran�as privadas.

Tomemos los medios de comunicaci�n en Estados Unidos. Son mayoritariamente medios corporativos. Incluso los llamados medios p�blicos no son muy diferentes. Son simplemente enormes corporaciones que venden audiencias a los anunciantes de otros negocios. Y se supone que constituyen el sistema de comunicaciones. No es complicado imaginar que es lo que va a resultar de todo esto.

Y hay cosas nuevas ocurriendo todo el tiempo. Justo en este momento hay un ejemplo dram�tico, que es el Acuerdo Multilateral sobre Inversiones (AMI), el cual se supone que va a ser firmado este mes, aunque no van a hacerlo. Las negociaciones han estado continuando en secreto durante cerca de tres a�os. Es esencialmente un enorme juego de poder entre corporaciones, que intenta ofrecer a los "inversores" - no en referencia al se�or que trabaja en la tienda de abajo, sino a las juntas directivas de General Electric, Merrill Lynch, etc.- derechos extraordinarios.

Se est� haciendo en secreto porque la gente implicada, que es casualmente toda la comunidad de negocios, sabe que la ciudadan�a va a odiarlo. Por tanto, los medios est�n guard�ndolo en secreto. Y es una haza�a asombrosa durante tres a�os mantener la calma acerca de algo que todo el mundo sabe que es un importante conjunto de decisiones, el cual va a encerrar a los pa�ses en ciertos acuerdos. Impedir� la pol�tica p�blica.

Ahora usted puede argumentar que es algo bueno, algo malo, usted puede argumentar lo que quiera, pero no hay duda acerca de c�mo la gente va a reaccionar, y no hay duda acerca del hecho de que los medios, que han estado bien enterados de esto desde el principio, han tenido �xito en no mencionarlo apenas.


CW: �C�mo se beneficiar�a una compa��a como Microsoft del AMI?

NC: Podr�a mover libremente el capital. Podr�a invertirlo d�nde quisiera. No habr�a restricciones en nada de lo que hiciera. Un pa�s, o un pueblo, como por ejemplo Cambridge, Massachusetts, donde yo vivo, donde trabajo, no podr�a imponer condiciones en cuanto a la protecci�n del consumidor, el control medioambiental, las inversiones o los apartados para las minor�as o las mujeres. Menci�nelo y no lo admitir�n.

Ahora lo lejos que esto pueda llegar exactamente depende de la disposici�n a impulsarlo. Estas cosas no se determinan mediante palabras. No hay nada en la Constituci�n, o en las enmiendas a la Constituci�n, que permita a las tiran�as privadas tener el derecho a la personalidad. Lo que el AMI signifique en la pr�ctica depende no s�lo o principalmente de las palabras, sino de c�mo son las relaciones de poder, de si la gente se opone a ello tan estruendosamente que no permite que ocurra, quiz�s mediante alborotos, o mediante cualquier cosa.

Un elemento crucial de esto es lo que llaman el efecto trinquete; que la legislaci�n existente va a ser permitida pero tiene que ser retirada pasado un plazo. Tiene que ser echada atr�s, y ninguna nueva legislaci�n puede ser introducida que entre en conflicto con los derechos de Microsoft o cualquier corporaci�n para hacer cualquier cosa en el �mbito internacional o nacional.

En un cierto plazo que se supone que se va a tener un efecto trinquete, de someter el mundo m�s y m�s a las principales tiran�as privadas, como Microsoft, con sus alianzas y relaciones.


CW: El economista Brian Arthur afirma que debido a la naturaleza r�pidamente cambiante de la tecnolog�a, nadie permanecer� en una posici�n del monopolio durante mucho tiempo, de modo que el poder monopol�stico en la industria de la tecnolog�a es diferente que el que se ha visto hist�ricamente, y no hay nada de lo que preocuparse.

NC: Pero nunca ha habido poder monopol�stico; o ha habido muy raramente poder monopol�stico. Tomemos los grupos de poder altamente concentrados, como en la industria de la energ�a. No son en sentido estricto monopolios. Shell y Exxon son competidores. �ste es un sistema de administraci�n del mercado intensivo en gesti�n, con un enorme poder estatal implicado en los intereses de una peque�a colecci�n de tiran�as privadas.

Es muy extra�o encontrar un verdadero monopolio. La AT&T fue un monopolio durante una �poca, eso es por lo que pudo crear cosas como el transistor, por ejemplo. Era un monopolio, as� que por tanto pod�an cobrar tarifas altas. Pero eso es ciertamente inusual.


CW: �Piensa usted que todo el asunto de los monopolios es algo como para estar preocupado?

NC: �stos son oligopolios; son peque�os conjuntos de grupos de poder altamente concentrados en relaci�n unos con otros. Si uno de ellos consiguiera control total sobre un cierto sistema, otros poderes probablemente no lo permitir�an. De hecho, eso es lo que usted est� viendo.


CW: �As� pues, usted no piensa que Bill Gates es un nuevo John D. Rockefeller?

NC: John D. Rockefeller no era un monopolista. Standard Oil no gobernaba toda la industria; aunque lo intentaban. Pero otros centros de poder simplemente no desean dejar tal cantidad de poder a uno de ellos.


CW: �Entonces de hecho, quiz�s hay un paralelismo ah� entre Gates y Rockefeller, o no?

NC: Piense en el sistema feudal. Usted ten�a reyes, pr�ncipes, obispos, se�ores, etc. La mayor parte de ellos no deseaban que el poder estuviese concentrado totalmente, ellos no quer�an tiranos absolutos. Cada uno de ellos ten�a sus feudos que deseaban mantener en un sistema de poder altamente concentrado.

S�lo quer�an cerciorarse de que la poblaci�n, la llamada chusma, no ser�a parte de �l. Es por esta raz�n la cuesti�n del monopolio -no quiero decir que no sea importante- sino que no es de ninguna manera el n�cleo del asunto.


CW: �C�mo esa transferencia de la esfera p�blica a la privada ha cambiado Internet?

NC: Mientras Internet estaba bajo el control del Pent�gono, era libre. La gente podr�a utilizarla libremente para compartir informaci�n. Esto ha seguido siendo verdad cuando permanec�a dentro del dominio estatal de la National Science Foundation.

Incluso hasta 1994, gente como por ejemplo Bill Gates ten�a poco inter�s en Internet. No ir�a nunca a las conferencias sobre Internet, porque no ve�a una manera de sacar beneficios. Ahora se est� entregando a las corporaciones privadas, y te dicen todas las cosas buenas que desean hacer. Desean tomar grandes zonas de Internet y sacarlas totalmente del dominio p�blico, convertirlas en intranets, que sean cercadas con cortafuegos, y utilizadas s�lo para operaciones corporativas internas.

Desean controlar el acceso, y �sa es una gran parte de los esfuerzos de Microsoft: controlar el acceso de tal manera que dirijan a la gente que tiene acceso a Internet hacia lo que "ellos" deseen, como servicios de compra a domicilio, u otras diversiones.

Si usted realmente sabe exactamente lo que desea encontrar, y tiene suficiente informaci�n y ganas, puede ser capaz de encontrarlo. Pero ellos desean hacer eso tan dif�cil como sea posible. Y es perfectamente natural. Si usted estuviera en la junta directiva de Microsoft, seguro que eso es lo que usted intentar�a hacer.

Bien, esas cosas no "tienen" que suceder. Internet puede ser mantenida bajo control p�blico. El acceso podr�a promoverse para todo el mundo. M�s aun, los proveedores podr�an ser subvencionados para que aquello que est� disponible on-line no fuese principalmente las ideas, entretenimientos y comercios colocados por instituciones privadas con grandes beneficios.

Pero eso va a significar mucho trabajo duro a todos los niveles, desde en el Congreso hasta en organizaciones locales, asociaciones, otros grupos de ciudadanos que puedan presionar en contra de la privatizaci�n y la mercantilizaci�n por todas las maneras habituales.


CW: �Qu� es lo que parecer�a si estuviera bajo control p�blico?

NC: Parecer�a lo que era antes, excepto que ser�a mucho m�s accesible porque m�s gente tendr�a acceso. Y sin constricciones. La gente podr�a simplemente utilizarla de forma libre. Se ha hecho eso, mientras estaba bajo dominio p�blico. No era perfecto, pero ten�a m�s o menos el tipo correcto de estructura.

Eso es lo que Microsoft y otros desean destruir.


CW: �Y cuando usted dice eso, usted se est� refiriendo a Internet tal como era hace 15 a�os?.

NC: Estamos hablando espec�ficamente de Internet, de momento. Pero m�s generalmente, los medios de comunicaci�n durante la mayor parte de este siglo, y cada vez m�s en a�os recientes, han estado bajo poder corporativo. Pero �se no se es siempre el caso. No tiene que ser el caso. No tenemos que ir muy lejos atr�s a encontrar diferencias.

Bastante recientemente, en los a�os cincuenta, hab�a cerca de 800 peri�dicos laboristas que alcanzaban a entre 20 y 30 millones de personas a la semana, con un punto de vista muy diferente. Rem�ntese usted m�s atr�s, y a principios de siglo los medios comunitarios, laboristas y otros estaban b�sicamente al nivel de los medios corporativos.

La eliminaci�n de todo esto es consecuencia de la alta concentraci�n del poder concedida por el estado con el activismo judicial y otras presiones privadas, que pueden ser invertidos y superados.


CW: Tome la creciente concentraci�n en la tecnolog�a a la que estamos asistiendo con Microsoft y algunas de estas otras compa��as, y comp�rela con fusiones recientes en los sectores de defensa, comunicaciones, seguros, y banca, y especialmente el contexto de la globalizaci�n. Estamos viendo una nueva etapa en el capitalismo global, o es simplemente una continuaci�n de los negocios como siempre?

NC: En l�neas generales, la globalizaci�n contempor�nea est� llevando el mundo de nuevo a lo que era hace m�s o menos un siglo. A principios de siglo, bajo la dominaci�n b�sicamente brit�nica y el patr�n oro, si usted mira la cantidad de comercio, de flujo financiero, etc�tera, en relaci�n con el tama�o de la econom�a, estamos bastante cerca de volver a eso ahora, despu�s de una depresi�n entre las dos guerras mundiales.

Ahora hay algunas diferencias. Por ejemplo, la velocidad de transacciones financieras se ha acelerado mucho en los �ltimos 25 a�os con la llamada revoluci�n de las telecomunicaciones, que era una revoluci�n en gran parte dentro del sector p�blico. La mayor parte del sistema fue dise�ado, desarrollado y mantenido a expensas p�blicas, y despu�s entregado al beneficio privado.

Las medidas del estado tambi�n desbarataron el sistema econ�mico internacional de posguerra, el sistema de Bretton Woods, en los primeros a�os setenta. Fue desmontado por Richard Nixon, con la iniciativa estadounidense y brit�nica sobre todo.

El sistema de regulaci�n de los flujos de capital fue desmantelado, y eso, junto con la revoluci�n de las telecomunicaciones iniciada por el Estado, llevaron a una explosi�n enorme del flujo de capital especulativo, que ahora est� bien por encima del trill�n d�lares por d�a, y es sobre todo no productivo. Si regresamos a alrededor de 1970, los flujos de capital estaban relacionados en un 90% con la verdadera econom�a, como el comercio y la inversi�n.

Ahora, s�lo un peque�o porcentaje est� en relaci�n con la verdadera econom�a. La mayor parte tienen que ver con las manipulaciones financieras, las especulaciones con la innovaci�n, cosas que son realmente destructivas para la econom�a. Y eso es algo que antes no era cierto, no solamente no lo era hace 100 a�os, sino que no era cierto hace 40 a�os. As� pues hay cambios. Y usted puede ver sus efectos.

�sa es seguramente parte de la raz�n de que en el per�odo reciente, los �ltimos 25 a�os, haya sido un per�odo de desarrollo econ�mico inusualmente lento, de bajo crecimiento de la productividad, de estancamiento o de la disminuci�n de salarios y de rentas para probablemente dos tercios de la poblaci�n, incluso en un pa�s rico como �ste. Y beneficios enormemente altos para una parte muy peque�a de la poblaci�n. Y es peor en el tercer mundo.

Usted puede leer en el New York Times, en el art�culo de portada en "Week in Review", ayer domingo 12 de abril, que Am�rica es pr�spera y feliz. Y si usted mira a los americanos de los que est�n hablando, resulta que no son las casi dos terceras partes de la poblaci�n cuyos ingresos est�n estancados o disminuyendo, son la gente que posee el capital.

As� pues, de acuerdo, lo est�n haciendo indudablemente bien, excepto porque cerca del 1% de las familias posee cerca del 50% del capital, y casi lo mismo pasa con otras posesiones. La mayor parte del resto de cosas es propiedad del 10% de la poblaci�n. As� que seguro, Am�rica es feliz, y Am�rica es pr�spera, si Am�rica significa lo que el New York Times entiende por tal.

Son los peque�os grupos de �lite de quien y para quien est�n hablando.


CW: �Qu� tipo de cosas puede la gente hacer para intentar extender y exigir la democracia y el control p�blico a las corporaciones?

NC: Bien, lo primero que han de hacer es averiguar que es lo que les est� ocurriendo. As� pues, si usted no tiene informaci�n sobre eso, no puede hacer mucho. Por ejemplo, es imposible oponerse, pongamos, al Acuerdo Multilateral sobre Inversiones, si usted no sabe que existe. Ese es el prop�sito del secretismo. Uno no puede oponerse a la forma espec�fica de globalizaci�n que est� teniendo lugar, a menos que la comprenda.

Tendr�a no s�lo que leer los titulares que dicen que la econom�a de mercado ha triunfado, sino que tendr�a que leer a Alan Greenspan, el presidente de la Reserva Federal, cuando habla internamente; cuando dice que el estado de la econom�a depende de una maravillosa conquista que hemos conseguido, llamada "inseguridad laboral". Ese es su t�rmino. Inseguridad laboral, que es no saber si vas a tener un trabajo ma�ana. Es una gran bendici�n para la salud de la econom�a porque mantiene los salarios bajos.

Es estupendo: mantiene los beneficios altos y los salarios bajos.

Bien, a menos que la gente sepa esas cosas, no pueden hacer mucho sobre ello. Por tanto lo primero que hay que hacer es crear para nosotros, para la poblaci�n, sistemas de intercambio, interacci�n, etc�tera, como Corporate Watch, Public Citizen y otras agrupaciones ciudadanas, que proporcionen al p�blico el tipo de informaci�n y comprensi�n que de otra forma no van a tener. Despu�s de eso tienen que luchar contra ello, de montones de formas que est�n abiertas. Puede hacerse directamente a trav�s de presi�n sobre el Congreso, o de manifestaciones, o de creaci�n de instituciones alternativas.

Y deber�a apuntar, en mi opini�n, no s�lo a cuestiones menores, como la prevenci�n de los monopolios, sino tambi�n a cuestiones m�s profundas, como porqu� tienen las tiran�as privadas derechos totales.


CW: �Qu� piensa acerca del potencial de todos los medios alternativos que est�n surgiendo en Internet, dadas las actuales tendencias?

NC: Ese es un asunto para la acci�n, no para la especulaci�n. Es como preguntar hace cuarenta a�os cu�l era la probabilidad de que tuvi�ramos un sistema de salud como Medicare. Estas cosas ocurren si la gente lucha por ellas.

En el mundo de los negocios, Microsoft, tiene conciencia de clase alta. Son b�sicamente vulgares marxistas, que se ven a s� mismos metidos en una amarga lucha de clases. Por supuesto siempre van a continuar con ella. La cuesti�n es si tienen ese campo para ellos solos.

Y la cuesti�n m�s profunda es si se les deber�a permitir participar; yo no creo que deban.

Regresar a Noam Chomsky

Regresar a The Global Media Control

Regresar a Windows-Microsoft-Bill Gates

Regresar a Globalization - The Octopus of The New World Order