por�
David DiSalvo

09 Abril 2017

del Sitio Web�Forbes

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles

Wikipedia Commons

La larga duraci�n del programa de noticias 60 Minutos est� tomando la industria de los tel�fonos inteligentes descubriendo las formas en las que los desarrolladores de aplicaciones m�viles mantienen a la gente enganchada.

Ex ejecutivo de Google.Tristan Harris, entrevistado para el episodio, argumenta que hemos sido enga�ados a creer en el argumento de que la "tecnolog�a es neutral".

En cambio, dice que los fabricantes de software han llegado a dominar una especie de "c�digo de adicci�n" que mantiene a las personas compulsivamente enganchados, de tal manera que no es posible dejar de usar nuestros tel�fonos, incluso por un poco de tiempo.

En otras palabras,la tecnolog�a ha sidomanipuladapara aprovechar las tendencias que crean dependencia de nuestro cerebro.Conocedores de la tecnolog�a la llaman "piratear el cerebro", y Harris sostiene que est� destruyendo nuestro enfoque y relaciones.

Este es un gran tema que est� cerca de todas nuestras vidas, porque la mayor�a de nosotros estamos casado con nuestros aparatos.

Lo cubr� desde varios �ngulos en mi libro,Qu� es lo que hace feliz a su cerebro y por qu� deber�a hacer lo contrario, y estoy actualizaci�n los argumentos a favor de una nueva edici�n del libro que sale el pr�ximo a�o.

Con la historia de 60 minutos como tel�n de fondo, quiero hablar de algunos de los �ngulos aqu�.

Si los desarrolladores de aplicaciones han dominado un "c�digo" que crea h�bito que est� trabajando horas extraordinarias en nuestros tel�fonos para mantenernos enganchados, �qu� din�mica del cerebro es la que est�n aprovechando?


El sistema de recompensa

La m�s general de las din�micas, y la que da el contexto a otras, es lo que se conoce como sistema de recompensa del cerebro - la red el�ctrica cargada electro-qu�micamente que surge de los neurotransmisores a trav�s de nuestros cerebros cuando �stos est�n haciendo lo que est�n estructurados para hacer:

Predecir y anticipar las recompensas.

El t�rmino "recompensas" es amplio en esta definici�n, porque cualquier cosa, desde aprender a hablar franc�s a ir a una cita hasta colocar de dinero en una mesa de blackjack puede equivaler a una recompensa.

Estamos obligados a buscar recompensas de todo tipo;es la forma en que ocurre el aprendizaje, y tambi�n c�mo se forman los h�bitos.

La naturaleza de pros y contras del sistema de recompensa - con el neurotransmisor dopamina conduciendo la mayor parte de la acci�n - es tan central en nuestras vidas que es dif�cil sobreestimar su importancia.

Es el n�cleo de c�mo interact�a nuestro cerebro con el mundo, ya sea tangible o virtual (es todo lo mismo a su cerebro).

Y ya que es el sistema el que permite la formaci�n de h�bitos, tanto buenos como malos, es tambi�n el sistema que aquellos interesados en hacer que la gente quede enganchada en estudiar cualquier cosa la mayor parte de su tiempo.

Sidebar:

A menudo, en las discusiones sobre el sistema de recompensa, el papel de la dopamina se caracteriz� err�neamente, con demandas desafortunadas como "la dopamina es adictiva."

Eso es un error por varias razones, entre las cuales est� que sin la dopamina no tendr�amos un sistema de recompensas, ni habr�a que aprender, crecer, reproducirse o vivir.

En combinaci�n con otros productos qu�micos, la dopamina es el combustible de alto octanaje que utilizan las adicciones, al igual que es el combustible que usan los h�bitos beneficiosos, estova en ambos sentidos.

Anticipaci�n

Elsistema de recompensaopera a trav�s de la anticipaci�n de recompensas, lo que hace el per�odo entre pensar una recompensa y recibirla muy cr�tico.

La manipulaci�n de ese per�odo es una clave para el dise�o de aplicaciones.La serie en curso de recompensas intermitentes y variables a la cual sirven los tel�fonos inteligentes son tentadoras para el cerebro, debido a que aprovechan eficazmente esta din�mica.

Estamos siempre anticipando la pr�xima peque�a recompensa, y luego la siguiente y la siguiente.

Nuestra atenci�n es cautivada por la anticipaci�n de recompensas.

Lo que realmente carga esto es la meta-anticipaci�n de joyas ocultas de recompensas que vienen en la mezcla.Por cada 50 o m�s textos, o publicaciones en Facebook, fotos de Instagram o lo que sea, s�lo algunos van realmente a entregar la mercanc�a.

Estamos neuroqu�micamenteentrenadospara ejercitar mas y mas por estas recompensas, a trav�s de cualquier mediocridad sin sentido que est� en el camino.

Para obtener m�s recompensas, contribuimos a la corriente de recompensa escribiendo nuestros propios mensajes esperando una respuesta.

Cada vez que publiquemos algo, estamos empezando un cron�metro de anticipaci�n que funciona con el mismo principio.La sacudida podr�a incluso ser m�s profunda, ya que viene de un proceso de recompensa que nosotros iniciamos, y eso es un impulso cerebral con pocos iguales.

�Y qu� es lo que est� alimentando toda esta anticipaci�n compulsiva de recompensa?

Shutterstock


Ansiedad

Hay un debate sobre el modelo que mejor describe por qu� nos quedamos enganchados en tecnolog�as

Algunos piensan que el modelo de adicci�n es el que mejor encaja, pero el problema con este argumento es que las adicciones funcionan con un principio de placer distinto.Alguien empieza a usar una droga para obtener euforia u otras sensaciones en el otro extremo, ya sea el alivio del dolor u otra cosa.

Con el tiempo, el f�rmaco no puede entregar la recompensa de la misma manera, por lo que cada vez se toma m�s para conseguir el efecto.

Lo mismo para las adicciones conductuales como el juego - el jugador quiere la recompensa que viene de tomar el riesgo, pero el riesgo tiene que aumentar de tama�o con el tiempo para entregar la misma sensaci�n.

Lo que parece encajar mejor el uso compulsivo de la tecnolog�a es el modelo de ansiedad.No es meramente un deseo de placer, sino una respuesta a un estr�s mayor y ansiedad que nos mantiene enganchados.

No estamos hablando ansiedad manifiesta, la ansiedad de nivel de p�nico...

La ansiedad es insidiosa, precisamente porque por lo general no se manifiesta, sino m�s bien permanece como fondo, como un zumbido cargado que se filtra en nuestros pensamientos e influye en nuestras acciones.

A menudo reaccionamos a ella sin pensar conscientemente por qu�.Los tel�fonos inteligentes, resulta que son elixires de ansiedad a corto plazo.


Como la autoraSharon Begleyse�ala en su libro sobre el comportamiento compulsivo,
simplemente uno no se puede detener,

"Haci�ndonos sentir siempre que estamos conectados con el mundo, [tel�fonos inteligentes] alivia la ansiedad que de lo contrario nos inunda, de sentirnos solos y sin ataduras."

La investigaci�n sobre el tema respalda el argumento de que, demostrando que el uso de tel�fonos inteligentes compulsivo est� estrechamente relacionado con la ansiedad, m�s a�n para aquellos con formas de trastorno de ansiedad, pasa a ser un segmento enorme y creciente de la poblaci�n.

Las mismas conclusiones se han alcanzado por la investigaci�n sobre el uso problem�tico de Internet en general: la ansiedad es un potente precursor.


Uno de los componentes de esa ansiedad es que no nos gusta estar a solas con nuestros pensamientos.Begley discute un estudio que tambi�n he tratado aqu�, que muestra c�mo para muchas personas que reciben una descarga el�ctrica suave es preferible no hacer nada en una habitaci�n durante 15 minutos.

Esto tiene sentido si tenemos en cuenta c�mo nuestros tel�fonos inteligentes ahora llenan todos los intervalos de tiempo vac�os en nuestros d�as, los tiempos que de otro modo ser�an solo para pensar.La tecnolog�a llena el espacio vac�o disponible, y luego se cuela en espacios ya llenos de cosas como conversaciones con personas en frente de nosotros.

(El episodio de '60 Minutos' tambi�n se�al� que nuestros tel�fonos parecen contribuir directamente a nuestra ansiedad con el tiempo, al activar picos en la hormona de tensi�n cortisol.)

Agravando esa ansiedad, y aliment�ndola a lo largo del camino, est� el temor constante de que vamos a perder las recompensas importantes.

Mientras el t�rmino "FOMO" (Fear Of Missing Out - Miedo de perder) puede haber comenzado como un argot del Diccionario Urgano, es una descripci�n de una din�mica cerebral clave.

Algunos psic�logos lo han definido como,

"Un deseo de mantenerse constantemente conectado con lo que otros est�n haciendo" - porque es exactamente "lo que otros est�n haciendo", quienquiera que sea, la que impulsa la m�quina de recompensa.

Si no estamos conectados, las recompensas nos sobrepasan y nosotros sentimos una sensaci�n de p�rdida, y tambi�n perdemos la oportunidad de contribuir a la corriente de recompensa y anticipar las recompensas que recibiremos en respuesta.


Retirada

Cuando usted combina ese sentimiento de p�rdida con la ansiedad, usted tiene la sensaci�n de que proviene de sentirse desconectado, y realmente es una forma del s�ndrome de abstinencia.

Una vez m�s, aqu� tenemos que tener cuidado con las definiciones, ya que la abstinencia est� en su mayor�a asociada con el modelo de adicci�n.

En el modelo de ansiedad, estamos impresionados por una ansiedad m�s y m�s fuerte de sentirse desconectado a trav�s del conducto digital que nos mantiene atados al mundo.

No es lo mismo que abstinencia de adicci�n (especialmente de adicciones qu�micas), pero hay elementos similares.

Cuando el cerebro ha sido comprometido y se ha establecido un h�bito que alivia la ansiedad, y ese h�bito est� interrumpido, entonces el resultado predecible es a�n m�s ansiedad.

�Alguien quiere sentir eso?No, por lo que la necesidad de mantener a nuestros tel�fonos inteligentes cerca todo el tiempo es una cobertura contra la sensaci�n de algo semejante.


Esta es una historia compleja, por supuesto, como todas las historias del cerebro lo son, pero la din�mica que acaba de entrar a trav�s constituye gran parte del drama.Sabiendo todo esto, se puede ver por qu� los que tienen un inter�s creado en mantenernos enganchados prestan mucha atenci�n a c�mo estas din�micas pueden ser manipuladas.

Para una aplicaci�n a trav�s de romper y agarrarnos - convertirnos en parte de nuestro h�bito personal matriz - debe aprovechar todas estas din�micas ligadas al sistema de recompensa del cerebro.�La m�s exitosa de esas aplicaciones est�n dise�adas tan bien que los efectos son sin fisuras.

�Es todo esto lo mismo que decir que somos "adictos" a nuestros tel�fonos inteligentes?

Yo dir�a que no, por las razones expuestas, pero no hay duda de que hemos desarrollado un h�bito cada vez m�s compulsivo de utilizarlos para contrarrestar el estr�s y la ansiedad, que s�lo se hace cada vez m�s intensa en nuestra cultura de presi�n.

Es la tormenta perfecta de tecnolog�a y la necesidad de cumplimiento, y todos vamos por all� con la prueba en el bolsillo...