�
�
�
por Sayer Ji
Contributing
Writer
24 Enero 2012
del Sitio Web
ActivistPost
traducci�n de
Adela Kaufmann
Versi�n
original
�
�
�
�
Seamos realistas: La �nica justificaci�n real para el uso de vacunas
para "inmunizarnos" a nosotros mismos contra la enfermedad se deriva
del hecho natural que cuando se enfrentan los agentes infecciosos
del brazo humoral de nuestro sistema inmunitario, �ste lanza una
respuesta satisfactoria capaz de conferir inmunidad duradera.
De no haber sido por la elegancia, la competencia, y el �xito casi
asintom�tico en su mayor�a de nuestro sistema
inmunitario-recombinatorial para hacer frente tan bien a los retos
infecciosas, la vacunaci�n podr�a no tener una causa, ninguna hay
explicaci�n cient�fica, ni justificaci�n alguna.
De hecho, desde la adaptaci�n, del ant�geno espec�fico del
sistema
inmune evolucionado en los primeros vertebrados hace 500 millones de
a�os, nuestros cuerpos han estado haciendo un buen trabajo
manteni�ndonos con vida en este planeta sin necesidad de inmunidad
sint�tica mediada por la vacuna.
De hecho, los problemas infecciosos son necesarios para el
desarrollo de un sistema inmunol�gico saludable, y con el fin de
prevenir enfermedades autoinmunes como resultado del predominio del
Linfocito T CD4+.
En otras palabras, al quitar estos desaf�os infecciosos naturales, y
el sistema inmunol�gico puede y va a girar sobre s� mismo; quitar
estos desaf�os infecciosas e inmunidad duradera contra decenas, si
no cientos de miles de agentes pat�genos a los que estamos expuestos
a lo largo de nuestras vidas, no ser�a posible.
-
�Las vacunas realmente cooptar, mejoran y sustituyen la inmunidad
natural con la inmunidad sint�tica?
-
�Cu�ntas necesito para ello?
-
�No estamos ya en el umbral cr�tico de la sobrecarga de la vacuna?
Al "mejorar" nuestra humanidad de esta manera, �no estamos tambi�n
al mismo tiempo partiendo dr�sticamente de ella?
�
�
En la actualidad, el cumplimiento de calendario de vacunaci�n CDC
para los ni�os desde el nacimiento hasta los 6 a�os de edad requiere
que sean administradas 60 vacunas1, supuestamente para hacerlos m�s
saludables que los no vacunados o inmunizados de forma natural. 2
Sesenta vacunas, mientras es una cantidad alarmantemente alta (para
aquellos que conservan las facultades complementarias humanas de la
raz�n y la intuici�n), sin embargo, no expresan correctamente
cu�ntos desaf�os antig�nicos enfrentan estos ni�os en total....
Un nuevo art�culo publicado en el diario Lupus titulado "Mecanismos
de toxicidad por el coadyuvante aluminio y la autoinmunidad en la
poblaci�n pedi�trica - Mechanisms of
aluminum adjuvant toxicity and autoimmunity in pediatric
populations", se�ala que al menos 125 compuestos
antig�nicos, junto con grandes cantidades de adyuvantes de aluminio
(AI) se les da a los ni�os en el momento en que tienen 4 y 6 a�os de
edad , en algunos pa�ses "desarrollados".
Los autores tambi�n afirman:
"Los desaf�os inmunol�gicos durante el desarrollo temprano,
incluidos aquellos inducidos por la vacuna, pueden conducir a
alteraciones perjudiciales permanentes del cerebro y la funci�n
inmune.
La evidencia experimental muestra que la administraci�n simult�nea
de tan poco como dos a tres adyuvantes inmunol�gicos pueden superar
la resistencia gen�tica a la autoinmunidad."
Los
coadyuvantes de las vacunas son agentes que aceleran, mejoran o
prolongan las respuestas inmunes a ant�genos espec�ficos que las
vacunas supuestamente suprimen.
En esencia, ellos mejoran la �eficacia� de la vacuna, que se define
por la capacidad de reunir los t�tulos de anticuerpos. Una
�efectividad� de la vacuna, por el contrario - y que es la medida
real de si una vacuna funciona o no-no es comprobable a trav�s del
n�mero de anticuerpos producidos.
Sea o no que un coadyuvante de la vacuna o la vacuna misma estimule
anticuerpos que tienen afinidad real con el pat�geno en particular
es lo que cuenta en el mundo real, es decir, afinidad
ant�geno-anticuerpo, (y no la gran cantidad de anticuerpos
producidos) determina si una vacuna ser� efectiva o no.
La confusi�n sem�ntica entre "eficacia de la vacuna" y "efectividad
de la vacuna" asegura que las vacunas que da�an/perturban/hipersensibilizan
el sistema inmunol�gico, estimulando artificialmente elevadas
concentraciones de anticuerpos (antibody
titers) pueden obtener la aprobaci�n de la FDA, a
pesar del hecho de que nunca se ha demostrado que confiera una
verdadera protecci�n. 3
Algunos investigadores de la vacuna incluso han sugerido que la
lactancia materna, lo cual puede reducir elevaciones en los t�tulos
de anticuerpos inducidos por la vacuna en los reci�n nacidos, es
decir, sus iatrog�nicosefectos de promoci�n de la enfermedad,
deber�an se temporalmente retrasados el fin de
no interferir con la
llamada �eficacia� de la vacuna.
Los coadyuvantes Com�n incluyen:
...todos los cuales son intr�nsecamente t�xicos, sin importar la
ruta de exposici�n.
Muchos padres de hoy no tienen en cuenta lo peligroso que es la
inyecci�n de sustancias auxiliares directamente en el m�sculo (ya
veces sangre, debido a la aspiraci�n incorrecta y / o t�cnicas
inexistentes), especialmente en los ni�os no infectados, saludables,
cuyos sistemas inmunes apenas est�n aprendiendo a poner en marcha
respuestas efectivas a los innumerables agentes pat�genos que cubren
su entorno.
La lactancia materna adecuada, de hecho, es la estrategia m�s
exitosa en la prevenci�n de la morbilidad y la mortalidad asociadas
con los desaf�os infecciosos, y es tan distintivo de mam�feros (es
decir, obteniendo alimento e inmunidad a trav�s de las gl�ndulas
mamarias), que sin un nivel adecuado (s�lo el 11,3% de los ni�os en
los EE.UU. recibieron lactancia materna exclusiva durante los
primeros seis meses de vida - Fuente: CDC, 2004 ) los ni�os se
vuelven mucho m�s susceptibles a la enfermedad.
No s�lo los seres humanos se apartaron de sus ra�ces de mam�feros
mediante la creaci�n y la
promoci�n de la f�rmula infantil sobre la
leche materna, y luego promover la inmunidad a trav�s de las vacunas
sint�ticas sobre la inmunidad natural conferida a trav�s de la
lactancia materna y la exposici�n al sol, por ejemplo, pero
impl�cita en el modelo m�dico hegem�nico, es reemplazar la inmunidad
natural con una sint�tica.
Esta es la filosof�a del
transhumanismo, un movimiento que tiene la
intenci�n de mejorar y trascender nuestra humanidad, y tiene
estrecha relaci�n con algunos aspectos de la eugenesia. 4
El calendario de vacunaci�n CDC refleja una carencia a consideraci�n
a los 3 mil millones de a�os de evoluci�n que nos han tra�do a
nuestra actual forma, intacta, sin tecnolog�as elaboradas como la
vacunaci�n - y probablemente s�lo porque nunca las tuvimos a nuestra
disposici�n para infligir da�o potencialmente catastr�fico para
nosotros mismos.
El CDC es en gran parte responsable de generar la percepci�n p�blica
masiva de que hay un da�o mayor en no inyectar "profil�cticamente"
m�s de 100 distintas sustancias disruptivas del sistema inmune y
perjudiciales en los cuerpos de los ni�os sanos.
Ellos han inculcado exitosamente el concepto a las masas que la
naturaleza fracasado en su dise�o, y que las tecnolog�as m�dicas y
gen�ticas y las intervenciones pueden utilizarse para crear un ser
humano superior.
En esta cultura de la vacunaci�n, el ni�o no vacunado es "inferior","sucio",
incluso "sub-humano" comparado con aquellos que consideran la
vacunaci�n como la respuesta a lo que perfecciona el sistema
inmunol�gico humano.
El transhumanismo participa en una dial�ctica que requiere una
deshumanizaci�n simult�nea y sistem�tica de aquellos que no
comparten la misma forma de pensar y de comportarse.
Las connotaciones eugen�sicas de la vacunaci�n masiva y el culto de
la inmunidad sint�tica est�n ahora s�lo levemente veladas, mientras
nos acercamos al punto en que una dictadura m�dica pseudo-cient�fica
que reclama nuestros propios cuerpos y los cuerpos de nuestros hijos.
El punto de no retorno (si es que no est� ya atravesado) est� s�lo a
la vuelta de la esquina:
la introducci�n masiva de ADN y tecnolog�a de vacuna de vector
recombinante.
Las vacunas se trasladaron a trav�s de las siguientes etapas (una
tortuosa historia de fracasos y masivos "da�os colaterales"):
Vacunas vivas -> Vacunas atenuadas -> vacunas de subunidades ->
Vacunas t�xicas y -> vacunas conjugadas,
...s�lo que ahora est�n llegando a convertir nuestro tejido vivo en
"f�bricas de vacunas" a trav�s de la utilizaci�n de
ADN y las
vacunas de vectores recombinantes, los cuales est�n dise�ados para
alterar directamente las c�lulas dentro del cuerpo de la persona
vacunada, de modo que crean los ant�genos normalmente proporcionados
por las vacunas en s�. 5
Si bien a�n no est� en uso, los ensayos cl�nicos est�n en curso para
obtener la 'aprobaci�n' de la FDA.
Si no nos educamos ahora y actuamos en consecuencia, su aplicaci�n
masiva es inevitable, y nuestros propios genomas se convertir�n en
el pr�ximo objetivo de la vacunaci�n/agenda transhumanista.
�
Notas
1 - Contando el n�mero de ant�genos de la vacuna, en total,
trivalente gripe, por ejemplo = 3 ant�genos de la vacuna.
2
- La inmunizaci�n natural ocurre a aquellos que obtienen la
competencia inmunol�gica habiendo sido infectados (a menudo asintom�ticamente) por un agente pat�geno de tipo salvaje, lanzando
una respuesta inmune normal, superando el desaf�o infeccioso, y como
consecuencia obteniendo una inmunidad duradera.
3 - El transhumanismo es un movimiento internacional que cree en la
transformaci�n de la condici�n humana mediante el uso de tecnolog�as
para mejorar las capacidades intelectuales humanas, f�sicas y
psicol�gicas.
4 - El t�rmino "eficacia�, cuando es utilizado en el contexto de
efectos de la vacuna de elevar los anticuerpos no se puede equiparar
a la efectividad, es decir, si una vacuna realmente funciona o no en
la vida real para proteger contra el agente infeccioso de
preocupaci�n.
Es este truco sem�ntico (confundir y confundir "eficacia" con la "efectividad"),
que convence a la mayor parte del mundo "desarrollado�, de que la
investigaci�n de la vacuna est� "basada en la evidencia" y que se
centra en la creaci�n de una inmunidad mejorada, cuando en realidad
es sobre todo una empresa exitosa que depende de estafar a
sus "clientes" tanto de su dinero y su salud.
Los peligros de las vacunas comunes son tan bien conocidos por los "expertos
en salud", y los fabricantes que las producen, que su riesgo (al
igual que la energ�a nuclear) es suscrito por los gobiernos del
mundo. La importancia de este hecho no puede ser sobrestimada ni
subestimada.
La introducci�n de ADN pat�geno extra�o, productos qu�micos, metales,
conservantes, etc. en el cuerpo a trav�s de una jeringa va a generar
una respuesta parecida a la de patear a una colmena de abejas.
Mientras m�s duro patee la colmena, mayor ser� la "eficacia" (es
decir, anticuerpos elevados), pero la afinidad real que estos
anticuerpos tienen con el ant�geno (es decir pat�geno) en
particular, no se puede garantizar, ni los investigadores de vacunas
pueden probar la afinidad ant�geno-anticuerpo para recibir
aprobaci�n de la FDA.
Adem�s, los valiosos recursos inmunes se pierden mediante la
generaci�n de respuestas a una amenaza de "bandera falsa" que no tan
f�cilmente puede existir en el medio ambiente, por ejemplo, hay m�s
de 200 formas de la influenza A, B y C, que pueden producir los
mismos s�ntomas asociados con la gripe anual A, por lo que la vacuna
trivalente contra la influenza estacional s�lo se ocupa de algo m�s
del 1% de los posibles vectores de la infecci�n - y, a menudo, al
precio de distraer recursos de las amenazas reales, as� como
agotador y/ o da�ino para el todo el aparato inmune.
La verdad sea dicha, en realidad
existe una escandalosa falta de
pruebas para apoyar las vacunas contra la gripe, en cualquier edad o
poblaci�n.
Lo que es peor, la respuesta a la vacuna puede "soplar hacia atr�s",
causando la p�rdida de la auto-tolerancia y, a trav�s de la
resultante Th2 dominante del sistema inmune, el cuerpo puede
atacarse a s� mismo (auto-inmunidad). Mientras tanto, la primera
l�nea de defensa contra la infecci�n (Th1) se ve comprometida y esta
"puerta de entrada" se puede dejar de par en par abierta para los
problemas infecciosos.
Est� claro que uno puede crear una respuesta inmune a trav�s de la
vacunaci�n sint�tica, pero no es probable que resulte en una
inmunidad mejorada, en lo que se refiere a una efectividad real, que
es el �nico juez verdadero de si una vacuna es valioso o no.
Uno puede ver los criterios b�sicos utilizados por los
investigadores de la vacuna, es decir, que generando t�tulos
elevados de anticuerpos demuestra el valor de la vacuna, en sentido
opuesto: demostrar que la vacuna est� causando da�os al infante en
desarrollo mediante la generaci�n de anticuerpos innecesariamente
elevados por cualquier medio necesario, es decir, lanzar todo el
fregadero de la cocina qu�mica y biol�gica en el sistema
inmunol�gico, por ejemplo aluminio, fenol, c�lulas diploides (de
fetos abortados), aceite de cacahuete, pertactina, etc.
5 -
Tipos de Vacunas del Instituto Nacional de Alergias y
Enfermedades Infecciosas.
�
|