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por�Valerie Tarico�
traducci�n
de
Adela Kaufmann � � � � Estos dudosos conceptos
defienden el conflicto, la crueldad y el sufrimiento.
Algunas de las innovaciones tecnol�gicas de la humanidad son cosas que hubi�ramos estado mejor sin ellas:
...vienen a la mente. � Las religiones tienden a inventar�ideas o conceptos en lugar de tecnolog�as, pero como cualquier otra empresa humana creativa, produce, junto con lo bueno, algunas cosas realmente malas. � He destacado previamente algunos de los mejores conceptos morales y espirituales del n�cleo moral compartido de la humanidad.�Aqu�, por el contrario, est�n algunos de los peores.� � Estos doce dudosos conceptos promueven,
...en lugar de amor y paz. � Parafraseando a�Christopher Hitchens,�ellos pertenecen a el basurero de la historia tan pronto como podamos ponerlos all�. � � � � Pueblo Elegido � El t�rmino "pueblo elegido" por lo general se refiere a la Biblia hebrea y la fea idea de que�Dios�ha dado a ciertas tribus una tierra prometida (a pesar de que ya estaban ocupadas por otras personas). � Pero en realidad muchas sectas avalan alguna versi�n de este concepto.� � El Nuevo Testamento identifica los cristianos como los elegidos.�Los calvinistas hablan de 'los elegidos de Dios', la creencia de que ellos mismos son de los pocos especiales que fueron elegidos antes del principio de los tiempos. � Los Testigos de Jehov� creen que 144,000 almas obtendr�n un�lugar especial�en la vida futura. � En muchas culturas se cre�a que ciertos linajes privilegiados y poderosos descienden directamente de los dioses (en contraste con todos los dem�s). � Las sectas religiosas son inherentemente tribales y divisivas, porque compiten haciendo afirmaciones excluyentes de la verdad y prometen bendiciones o recompensas de la vida del m�s all� que ninguna secta competidora puede ofrecer. � "S�mbolos de pandillas", como cortes de pelo especiales, vestimenta, se�ales de mano y jerga diferencian a los de adentro de los forasteros, y sutilmente (o no tan sutilmente) transmiten que los iniciados son inherentemente superiores. � � � � Herejes � Herejes, kafir, o infieles (para usar el t�rmino cat�lico�medieval) no son s�lo los de afuera, son moralmente sospechosos y, a menudo vistos como menos que humanos. � En la Tor�, los esclavos tomados de entre los forasteros no merec�an la misma protecci�n que los esclavos hebreos.�Los que no creen en un dios son corruptos, hacedores de actos abominables. "No hay nadie [entre ellos] que haga el bien", dice el salmista. � El Islam ense�a el concepto de "dimmitud" no musulmanes), y establece normas especiales para la subyugaci�n de las minor�as religiosas, con los monote�stas recibiendo un mejor trato que los polite�stas. � El cristianismo desfocaliza conjuntamente los conceptos de�incr�dulo�y�malvado. El cristianismo enturbia juntos los conceptos de incr�dulo y malvado. � En �ltima instancia, los herejes son una amenaza que necesita ser neutralizada por la conversi�n, la conquista, el aislamiento, la dominaci�n, o - en el peor de los casos - el asesinato en masa. � � � � Guerra santa � Si la guerra puede ser santa, todo vale. � La medieval�Iglesia Cat�lica Romana�llev� a cabo una campa�a de veinte a�os de exterminio contra�los herejes C�taros�cristianos en el sur de Francia, prometiendo sus tierras y posesiones a los cristianos verdaderos que se alistaban como cruzados. � Los musulmanes sun�es y chi�es se han matado entre s� durante siglos. � Las escrituras hebreas recuentan batalla tras batalla en la que�su Dios de guerra, Yahv�, les ayuda, no s�lo a derrotar sino a exterminar a las culturas de pastoreo que ocupan su "tierra prometida". � Al igual que en posteriores�guerras santas, como el�surgimiento moderno de ISIS, sanci�n divina que les permite matar a los ancianos y los ni�os, quemar huertos, y tomar las hembras v�rgenes como esclavas sexuales - todo sin perder un sentido de�superioridad moral. � � � � Blasfemia � La blasfemia�es la noci�n de que algunas ideas son inviolables, fuera del alcance de la cr�tica, la s�tira, el debate, o incluso el cuestionamiento. � Por definici�n, la cr�tica de estas ideas es una barbaridad, y es precisamente esta emoci�n - la indignaci�n - la que el delito de blasfemia evoca en los creyentes.
La idea de que la blasfemia debe ser prevenida o vengada ha causado millones de muertes durante los siglos y un sinn�mero de otros horrores. � Mientras escribo, el bloguero�Raif Badawi espera ronda tras ronda de flagelaci�n en Arabia Saudita - 1,000 latigazos en series de 50 - mientras su esposa e hijos le ruegan desde Canad� que la comunidad internacional haga algo. � � � � Glorificaci�n del Sufrimiento � Imag�nese sociedades secretas de monjes flagelando sus propias espaldas. � La imagen que viene a la mente es, probablemente, de la novela de Dan Brown, El C�digo Da Vinci, pero la idea no la invent� �l.�Una premisa central del cristianismo es la justa tortura�- si es lo suficientemente intensa y prolongada - de alguna manera puede arreglar los da�os causados por el mal y la conducta pecaminosa. � Millones de crucifijos ensucian el mundo como testamentos de esta creencia.�Los musulmanes se chi�tas derrotaron a s� mismos con latigazos y cadenas durante Aashura, una forma de sufrimiento santificado llamado Matam que conmemora la muerte del m�rtir Hussein. � La abnegaci�n en forma de ascetismo y el ayuno es una parte de ambas religiones orientales y occidentales, no s�lo debido a que la privaci�n induce estados alterados, sino tambi�n porque la gente cree que, de alguna manera, el sufrimiento nos acerca a la divinidad. � Nuestros antepasados vivieron en un mundo en el que el dolor llegaba espont�neamente, y la gente ten�a muy poco poder para controlarlo.�Una almohadilla calientita o una aspirina hubiera sido un milagro para los escritores de la Biblia, el Cor�n, o Gita. � Ante el sufrimiento incontrolable, el mejor consejo que la religi�n podr�a ofrecer era�inclinarse o hacer sentido de �l. � El problema, por supuesto, es que glorifica el sufrimiento - convirti�ndolo en un bien espiritual - ha hecho a la gente m�s dispuesta a infligirlo, no s�lo a ellos y a sus enemigos, sino tambi�n a los que est�n indefensos, incluso a los enfermos o moribundos (como en el caso de Madre Teresa y los Obispos de Am�rica�) y ni�os (como en el movimiento patriarcal de maltrato a los ni�os). � � � � Mutilaci�n genital � Los pueblos primitivos han utilizado la escarificaci�n y otras modificaciones corporales para definir la pertenencia tribal durante el tiempo de la historia registrada. � Pero la mutilaci�n genital permiti� a nuestros antepasados varios beneficios adicionales - si quiere llamarlos as�.�La circuncisi�n infantil en el juda�smo sirve como signo de pertenencia tribal, pero la circuncisi�n tambi�n sirve para poner a prueba el compromiso de los conversos adultos. � En una historia de la Biblia, un cacique se compromete a convertir y someter su clan al procedimiento como una muestra de compromiso con un tratado de paz.�(Mientras los hombres yacen incapacitados, toda la ciudad luego es asesinada por los israelitas.) � En el Islam, la dolorosa circuncisi�n masculina sirve como un rito de paso a la edad adulta, como iniciaci�n a un club poderoso.�Por el contrario, en algunas culturas musulmanas cortar o quemar el cl�toris y los labios vaginales femeninos establece ritualmente la sumisi�n de la mujer al reducir la excitaci�n sexual y la urgencia. � Se estima que 2 millones de ni�as al a�o son sometidas al procedimiento, con consecuencias que incluyen hemorragia, infecci�n, dolor al orinar y muerte. � � � � Sacrificio de sangre � En la lista de las peores ideas de la religi�n, esto es lo �nico que parece estar en sus etapas finales. � S�lo algunos hind�es (durante el Festival de Gadhimai, diosa del poder) y algunos musulmanes (durante el Eid al Adha, Fiesta del Sacrificio) siguen sacrificando animales para el sacrificio ritual en una escala masiva. � Las escrituras hind�es como el Gita y los Puranas proh�ben el asesinato ritual, y la mayor�a de los hind�es ahora se abstienen de la pr�ctica basada en el principio de�ahimsa, pero persiste como un residuo de la religi�n popular. � Cuando nuestros ancestros cortaban las gargantas de seres humanos y animales, o cortaban sus corazones u enviaban el humo de los sacrificios al cielo, muchos cre�an que estaban alimentando literalmente a seres sobrenaturales. � Con el tiempo, en la mayor�a de las religiones, lo racional cambi� - los dioses no necesitaban tanta alimentaci�n como se�ales de devoci�n y penitencia.�El sacrificio residual de ni�os en la Biblia hebrea (s�, est� all�) normalmente tiene esta funci�n. � El foco persistente de la expiaci�n por sangre del cristianismo - la noci�n de�Jes�s�como cordero sin mancha, la "propiciaci�n" final por el pecado humano - esperamos que sea la �ltima iteraci�n de larga fascinaci�n de la humanidad con el sacrificio de sangre. � � � � Infierno � Ya sea que estemos hablando de�cristianismo, el islam o�el budismo, la otra vida llena de�demonios,�monstruos�y�tortura eterna�fue el peor sufrimiento que las mentes de la Era de Hierro pudieron concebir y las mentes medievales pudieron elaborar. � Inventado, tal vez, como un medio para satisfacer el deseo humano de justicia, el concepto del infierno se degener� r�pidamente en una herramienta para coaccionar el comportamiento y las creencias. � La mayor�a de los budistas ven el infierno como una met�fora, un viaje hacia el mal dentro de uno mismo, pero las descripciones de monstruos torturadores�y los niveles del infierno pueden ser bastante expl�citos.� � Del mismo modo, muchos musulmanes y cristianos se apresuran a asegurar que es un lugar real, lleno de fuego y angustia de los no creyentes. � Algunos cristianos han ido tan lejos como para insistir en que los gritos de los condenados pueden ser escuchados desde el centro de la Tierra o que la observaci�n de su angustia de lejos ser� uno de los placeres del para�so. � � � � Karma � Al igual que�infierno, el�concepto del karma�ofrece un incentivo ego�sta para el buen comportamiento, pero tiene enormes costos. � El principal de ellos es un enorme peso de pasividad cultural frente al da�o y al sufrimiento.�En segundo lugar, la idea de karma�santifica la amplia pr�ctica humana de culpar a la v�ctima. � Si lo que va, vuelve, entonces el ni�o discapacitado o enfermo de c�ncer o el pobre intocable (o el conejo hambriento o un perro sarnoso) deben haber hecho�algo, ya sea en esta vida o en una anterior para atraer eso sobre s� mismos. � � � � Vida Eterna � Para nuestros cansados y sucios antepasados, la idea de paredes con incrustaciones de gemas, calles de oro, la fuente de la juventud, o una eternidad de coros angelicales (o el sexo con v�rgenes) puede haber parecido pura felicidad. � Pero no se necesita mucho an�lisis para darse cuenta cu�n r�pido el para�so eterno se convertir�a en un infierno - una repetici�n sin fin de nunca cambia (porque �c�mo podr�an cambiar si eran perfectos). � La verdadera raz�n por la que la noci�n de la vida eterna es un mal invento, sin embargo, es el grado en el que se disminuye y degrada la existencia en este plano terrenal.�Con los ojos levantados al cielo, no podemos ver la belleza intrincada bajo nuestros pies. � Devotos creyentes ponen su energ�a espiritual en prepararse para un mundo futuro en vez de acariciar y administrar el salvaje y precioso mundo se nos ha dado. � � � � Propiedad masculina de la Fertilidad Femenina � La noci�n de las mujeres como yeguas madres y los ni�os como activos, probablemente no se originaron con la religi�n, pero la idea de que las mujeres fueron creadas para este fin, y que si una mujer deber�a morir de la maternidad para la 'que fue hecha', estaba bien. � Las religiones tradicionales variadamente afirman que los hombres tienen un derecho ordenado por Dios para dar a las mujeres en matrimonio, de llevarlas a la guerra, de excluirlas de los cielos, y matarlas si los or�genes de su descendencia no pod�an ser asegurados. � De ah� la obsesi�n mani�tica que tiene el catolicismo con la�virginidad�de Mar�a y de las m�rtires femeninas. � A medida que nos acercamos a los l�mites de nuestro sistema de soporte de vida planetaria y enfrentamos la distop�a, la definici�n de las mujeres como reproductoras y los ni�os como activos se vuelve cada vez m�s costoso.� � Ahora sabemos que la escasez de recursos es un factor desencadenante de conflictos y que la demanda de agua y tierra cultivable est� creciendo incluso mientras disminuyen los recursos. � Y, sin embargo,�un Papa que afirma�que se preocupa por los pobres desesperados y les da conferencias contra la anticoncepci�n, mientras que l�deres musulmanes proh�ben las vasectom�as en un intento de superar en n�mero a sus enemigos. � � � � Bibliolatr�a (tambi�n conocido como Culto al Libro)� � La gente pre-alfabetizada dictaron sus mejores conjeturas sobre dioses y la bondad por medio de la tradici�n oral, y hac�an objetos de piedra y madera, �dolos, para canalizar su devoci�n. � Sus nociones de lo que era bueno y lo que era real y c�mo vivir en comunidad moral entre s� eran libres para evolucionar a medida que la cultura y la tecnolog�a cambiaba. � Pero el advenimiento de la palabra escrita cambi� eso.�A medida que nuestros antepasados de la Edad de Hierro fueron registrando y compilando sus ideas en los textos sagrados, estos textos permitieron que su comprensi�n de los dioses y la bondad se volviera est�tica. � Los textos sagrados del juda�smo, el cristianismo y el Islam proh�ben la adoraci�n de �dolos, pero con el tiempo, los textos mismos se convirtieron en �dolos, y muchos creyentes modernos practican - esencialmente - el Culto al Libro, tambi�n conocido como�bibliolatr�a.
Su declaraci�n revela una ingenua�falta de informaci�n�sobre el origen de sus propios dogmas. � Pero en t�rminos m�s generales, �l resume el desaf�o que enfrentan todas las religiones de avanzar. � Imag�nese si un f�sico dijera,
Los adherentes que piensan que su fe es�perfecta, no s�lo son ingenuos o mal informados. � Est�n�detenidos en su desarrollo, y en el caso de las principales religiones del mundo, est�n anclados a la Edad de Hierro, una �poca de violencia, esclavitud, desesperaci�n y muerte prematura. � Ir�nicamente, la mentalidad de que nuestros textos sagrados son�perfectos�traiciona la misma b�squeda que llev� a nuestros antepasados a escribir esos textos.�Cada uno de los hombres que escribieron parte de la Biblia, el Cor�n, o Gita tomaron su tradici�n recibida, la revisaron, y ofreci� su mejor articulaci�n de lo que es bueno y verdadero. � Podemos honrar la b�squeda de nuestros antepasados espirituales, o podemos honrar sus respuestas, pero no podemos hacer ambas cosas. � Los apologistas religiosos a menudo tratan de negar, minimizar o justificar los pecados de las Escrituras y los males de la historia religiosa.
Tales t�picos pueden ofrecer consuelo, pero neg�ndolos no resuelve los problemas. � Muy por el contrario, de hecho.�El cambio viene con la introspecci�n y conocimiento, la voluntad de reconocer nuestras faltas y defectos, y al mismo tiempo abrazar nuestras fortalezas y potencial de crecimiento. � En un mundo que est� lleno de humanidad, armados con bombas caseras y ametralladoras y armas nucleares y aviones no tripulados, no necesitamos defensores del status quo de la religi�n - nosotros necesitamos una reforma real, tan radical como�la del siglo 16�y mucho, mucho m�s m�s amplia. � Es s�lo reconociendo peores ideas de la religi�n�que tenemos alguna esperanza de abrazar la mejor... � � � |
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