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por�Adam Frank� del�Sitio�Web TheAtlantic
traducci�n de
Adela Kaufmann � �
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A�Gavin
Schmidt�solo le llev� cinco minutos�superar�la
especulaci�n.� � Un d�a el a�o pasado, llegu� a GISS con una propuesta lejana.�En mi trabajo como astrof�sico, comenc� a investigar el calentamiento global desde una "perspectiva astrobiol�gica".�Eso significaba preguntar si cualquier civilizaci�n industrial que surgiera en cualquier planeta, a trav�s de su propia actividad, desencadenar�a su propia versi�n de un cambio clim�tico. �
Estaba visitando GISS ese d�a con la esperanza de obtener algunos
conocimientos de la ciencia clim�tica y, tal vez, colaboradores.�As�
es como termin� en la oficina de Gavin.�
Me tom� unos segundos levantar mi mand�bula del suelo. � Ciertamente, hab�a entrado en la oficina de Gavin preparado para los ojos en la menci�n de "ex-civilizaciones".�Pero las civilizaciones sobre las que preguntaba habr�an existido muchos millones de a�os atr�s. � Sentado all�, viendo el vasto telescopio evolutivo de la Tierra ante mi mente, sent� una especie de v�rtigo temporal.
Nunca volvimos a los alien�genas. � En cambio, esa primera conversaci�n lanz� un nuevo estudio (The Silurian Hypothesis - Would it be Possible to Detect an Industrial Civilization in the Geological Record?) que hemos publicado recientemente en el�International Journal of Astrobiology. �
Aunque ninguno de nosotros pod�a verlo en ese momento, la penetrante
pregunta de Gavin abri� una ventana no solo al pasado de la Tierra,
sino tambi�n a nuestro propio futuro. � Pero una vez que recuperas el reloj a�decenas de millones o cientos de millones de a�os, las cosas se vuelven m�s complicadas.
� Por ejemplo, el tramo de superficie antigua m�s grande a gran escala se encuentra en el�desierto de Negev. �
Tiene "solo" 1,8 millones de a�os de antig�edad: las superficies m�s
antiguas son en su mayor�a visibles en secci�n transversal a trav�s
de algo parecido a un acantilado o cortes de roca.�Retrocede mucho
m�s que el Cuaternario y todo ha sido convertido en polvo.� � El Homo sapiens�no hizo su aparici�n en el planeta hasta hace 300,000 a�os m�s o menos.�Eso significa que la pregunta se traslada a otras especies, por lo que Gavin llam� a la idea la hip�tesis Siluriana, despu�s de un viejo�episodio del Dr. Who�con reptiles inteligentes.� � Entonces,
Tal vez, por ejemplo, alg�n mam�fero primitivo se elev� brevemente a construir una civilizaci�n durante la �poca del Paleoceno hace unos 60 millones de a�os.� � Hay f�siles, por supuesto.�Pero la fracci�n de vida que se fosiliza es siempre min�scula y var�a mucho seg�n el tiempo y el h�bitat. �
Ser�a f�cil, por lo tanto, perder una civilizaci�n industrial que
solo dur� 100,000 a�os, lo que ser�a 500 veces m�s de lo que nuestra
civilizaci�n industrial ha hecho hasta ahora.� �
La
mejor manera de responder a esta pregunta es averiguar qu� evidencia
dejar�amos si la civilizaci�n humana colapsara en su etapa actual de
desarrollo.� � El uso extensivo de fertilizantes, por ejemplo, mantiene alimentados a 7 mil millones de personas, pero tambi�n significa que estamos redirigiendo los flujos de nitr�geno del planeta hacia la producci�n de alimentos.� � Los futuros investigadores deber�an ver esto en las caracter�sticas del nitr�geno que aparece en los sedimentos de nuestra �poca. � Del mismo modo, nuestro insaciable apetito por los elementos raros de la tierra utilizados en artilugios electr�nicos.�Muchos de estos �tomos ahora est�n deambulando por la superficie del planeta debido a nosotros, que de otra manera ser�a el caso.�Tambi�n pueden aparecer en futuros sedimentos tambi�n. �
Incluso nuestra creaci�n y uso de�esteroides sint�ticos�ahora
se ha vuelto tan penetrante que tambi�n puede ser detectable en los
estratos geol�gicos dentro de 10 millones de a�os.� �
El
viento, el sol y las olas reducen los artefactos pl�sticos a gran
escala, dejando los mares llenos de part�culas de pl�stico
microsc�picas que eventualmente llover�n hasta el fondo del oc�ano,
creando una capa que podr�a persistir durante escalas de tiempo
geol�gicas.� �
En
nuestro estudio, encontramos que cada uno ten�a la posibilidad de
convertirse en sedimentos futuros.�Ir�nicamente, sin embargo, el
marcador m�s prometedor de la presencia de la humanidad como una
civilizaci�n avanzada es un subproducto de una actividad que puede
amenazarla m�s.� � Los cient�ficos de la atm�sfera llaman a este cambio el�Efecto Suess, y el cambio en las proporciones isot�picas de carbono debido al uso de combustibles f�siles es f�cil de ver en el �ltimo siglo.�Los aumentos de temperatura tambi�n dejan se�ales isot�picas. � Estos cambios deber�an ser evidentes para cualquier cient�fico futuro que analice qu�micamente capas de roca expuestas de nuestra �poca. � Junto con estos picos, esta�capa del�Antropoceno�tambi�n podr�a contener picos breves en,
Entonces, si estos son rastros que nuestra civilizaci�n est� destinada a dejar para el futuro, �podr�an existir las mismas "se�ales" en este momento en las rocas, esperando a que nos cuenten sobre civilizaciones desaparecidas hace mucho tiempo?
� Durante el PETM, la temperatura promedio del planeta subi� hasta 15� Fahrenheit (-9.44�C) por arriba de lo que experimentamos hoy.�Era un mundo casi sin hielo, ya que las temperaturas t�picas de verano en los polos alcanzaban cerca de 70�Fahrenheit (21�C). � Al observar el registro isot�pico del PETM, los cient�ficos ven que las proporciones de is�topos de carbono y ox�geno se disparan exactamente de la manera que esperamos ver en el registro del Antropoceno. � Tambi�n hay otros eventos como el PETM en la historia de la Tierra que muestran rastros como nuestra hipot�tica se�al del Antropoceno. � Estos incluyen un evento unos millones de a�os despu�s de que el PETM se denomin�Capas�Eocenas�de Origen Misterioso, y eventos masivos en el Cret�ceo que dejaron al oc�ano sin ox�geno�durante muchos milenios (o incluso m�s).� �
�Son
estos eventos indicaciones de civilizaciones industriales no humanas
previas?�Casi seguro que no. Si bien hay evidencia de que el PETM pudo haber sido impulsado por una liberaci�n masiva de carbono f�sil enterrado en el aire, lo que importa es la escala de tiempo de estos cambios. � Los picos de is�topos de PETM se elevan y caen durante unos cientos de miles de a�os.�Pero lo que hace que el Antropoceno sea tan notable en t�rminos de la historia de la Tierra es la velocidad a la que estamos descargando el carbono f�sil en la atm�sfera. � Ha habido per�odos geol�gicos en los que el CO2 de�la Tierra�ha sido tan alto o m�s alto que en la actualidad, pero nunca antes en la historia de miles de millones de a�os del planeta se ha vertido tanta cantidad de carbono enterrado a la atm�sfera tan r�pidamente. � Entonces, los�picos isot�picos�que vemos en el registro geol�gico pueden no ser lo suficientemente puntiagudos para ajustarse a la ley de la hip�tesis siluriana.� � Pero hay un�acertijo�aqu�.�Si la actividad industrial de una especie anterior es de corta duraci�n, es posible que no podamos verla f�cilmente.� � Los picos de PETM en su mayor�a nos muestran las escalas de tiempo de la Tierra para responder a lo que sea que lo haya causado, no necesariamente a la escala de tiempo de la causa. � Por lo tanto, podr�a llevar tanto m�todos de detecci�n dedicados como novedosos, para encontrar evidencia de un evento verdaderamente ef�mero en sedimentos antiguos.�En otras palabras, si no lo est� buscando expl�citamente, es posible que no lo vea. �
Ese
reconocimiento fue, tal vez, la conclusi�n m�s concreta de nuestro
estudio.� � Pero al preguntar si pudimos "ver" civilizaciones industriales verdaderamente antiguas, nos vimos obligados a preguntar sobre los tipos gen�ricos de impactos que cualquier civilizaci�n podr�a tener en un planeta. � Eso es exactamente la perspectiva astrobiol�gica sobre el cambio clim�tico. � � � � La construcci�n de la civilizaci�n significa recolectar energ�a del planeta para hacer el trabajo (es decir, el trabajo de la construcci�n de la civilizaci�n). � Una vez que la civilizaci�n alcanza escalas verdaderamente planetarias, tiene que haber alg�n comentario sobre los sistemas planetarios acoplados que le dieron nacimiento (aire, agua, roca). � Esto ser� particularmente cierto para las civilizaciones j�venes como la nuestra, que todav�a est�n subiendo en la escalera de la capacidad tecnol�gica.�En otras palabras, no hay almuerzo gratis... �
Si bien
algunas fuentes de energ�a tendr�n un impacto menor, digamos contra
combustibles f�siles o solares, no se puede impulsar una
civilizaci�n global sin un cierto grado de impacto en el planeta.� �
Entonces, cuanto m�s sostenible se vuelva tu civilizaci�n, menor
ser� la se�al que dejar�s para las generaciones futuras.� � Si una civilizaci�n usa combustibles f�siles, el cambio clim�tico que provocan puede conducir a una gran disminuci�n en los niveles de ox�geno en el oc�ano.�Estos bajos niveles de ox�geno (llamado�anoxia del oc�ano) ayudan a desencadenar las condiciones necesarias para fabricar combustibles f�siles como el petr�leo y el carb�n en primer lugar. � De esta manera, una civilizaci�n y su desaparici�n podr�an sembrar la semilla de nuevas civilizaciones en el futuro.�
� Incluso sin los restos paleocenios, solo ahora estamos aprendiendo a ver cu�n rico podr�a ser ese potencial. � � � |
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