por�Isaac Chotiner
03 Marzo 2020

del�Sitio�Web�TheNewYorker

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles

Versi�n en italiano



Las epidemias como el brote de coronavirus

son un espejo para la humanidad,

reflejando las relaciones morales

que la gente tiene el uno hacia el otro,

dice el historiador Frank M. Snowden.

Fuente: Fotograf�a de los Institutos Nacionales de Salud.

NYT / Redux



En su nuevo libro, "
Epidemics and Society - From the Black Death to the Present",�Frank M. Snowden. profesor em�rito de historia e historia de la medicina en Yale, examina las formas en que se han producido los brotes de enfermedades,

  • pol�tica conformada

  • revoluciones aplastadas

  • la arraigada discriminaci�n racial y econ�mica

Las epidemias tambi�n han alterado las sociedades a trav�s de las cuales se han extendido, afectando las relaciones personales, el trabajo de artistas e intelectuales, y los entornos naturales y creados por el hombre.

Con un alcance gigantesco, que se extiende a lo largo de siglos y continentes, el relato de Snowden tambi�n busca explicar las formas en que las estructuras sociales han permitido que las enfermedades florezcan.

"Las enfermedades epid�micas no son eventos aleatorios que afligen a las sociedades de manera caprichosa y sin previo aviso", escribe.

"Por el contrario, cada sociedad produce sus propias vulnerabilidades espec�ficas. Estudiarlas es comprender la estructura de la sociedad, su nivel de vida y sus prioridades pol�ticas".

Habl� por tel�fono con Snowden el viernes pasado, cuando los informes sobre�la propagaci�n de los mercados hundidos de COVID-19�en todo el mundo, y los gobiernos se involucraron en diversos grados de preparaci�n para lo peor.

Durante nuestra conversaci�n, que ha sido editada por su extensi�n y claridad, discutimos la pol�tica de restringir los viajes durante las epidemias, de c�mo las respuestas inhumanas a la enfermedad han trastornado a los gobiernos y las formas en que los artistas han lidiado con la muerte en masa.�

Quiero comenzar con una gran pregunta, que es: �Cu�les son, en t�rminos generales, las principales formas en que las epidemias han dado forma al mundo moderno?

Una forma de abordar esto es examinar c�mo me interes� en el tema, que abr� los ojos, creo que es doble.

Las epidemias son una categor�a de enfermedad que parece mostrar el espejo a los seres humanos sobre qui�nes somos realmente.�Es decir, obviamente tienen todo que ver con nuestra relaci�n con nuestra mortalidad, con la muerte, con nuestras vidas.

Tambi�n reflejan nuestras relaciones con el entorno: el entorno construido que creamos y el entorno natural que responde.�Muestran las relaciones morales que tenemos unos con otros como personas, y lo estamos viendo hoy.


Ese es uno de los grandes mensajes que la�Organizaci�n Mundial de la Salud�(OMS) sigue discutiendo.

La parte principal de la preparaci�n para enfrentar estos eventos es que necesitamos como seres humanos darnos cuenta de que estamos todos juntos en esto, que lo que afecta a una persona en cualquier lugar afecta a todos en todas partes, que por lo tanto somos inevitablemente parte de una especie, y necesitamos pensar de esa manera en lugar de las divisiones de raza y etnia, el estado econ�mico y todo lo dem�s.


Hab�a hecho una lectura preliminar y pens� que este era un tema que plantea cuestiones filos�ficas, religiosas y morales realmente profundas.

Y creo que las epidemias han moldeado la historia, en parte porque han llevado a los seres humanos a pensar inevitablemente en esas grandes preguntas.

El estallido de la plaga, por ejemplo, plante� toda la cuesti�n de�la relaci�n�del�hombre con Dios.

�C�mo podr�a ser que un evento de este tipo pudiera ocurrir con una sabia omnipresente y 'omnisciente divinidad'?

�Qui�n permitir�a que los ni�os fueran torturados, angustiados, en grandes cantidades?

Tuvo un enorme efecto en la econom�a.

La peste bub�nica mat� a la mitad de la poblaci�n de continentes completos y, por lo tanto, tuvo un tremendo efecto en la llegada de la revoluci�n industrial, la esclavitud y la servidumbre.

Las epidemias tambi�n, como estamos viendo ahora, tienen efectos tremendos en la estabilidad social y pol�tica.�Han determinado los resultados de las guerras, y tambi�n es probable que a veces sean parte del comienzo de las guerras.

Entonces, creo que podemos decir que no hay un �rea importante de la vida humana que las enfermedades epid�micas no hayan tocado profundamente.

�Intentabas hacer un punto acerca de que la manera en la cual respondemos a estas cosas es a menudo una funci�n de nuestros puntos de vista raciales, �tnicos o religiosos en lugar de nuestra humanidad en general, y que la respuesta ha demostrado los defectos de los seres humanos de alguna manera?��O estabas haciendo un punto diferente?

Creo que estaba tratando de hacer dos puntos.�Creo que la cadena causal funciona en ambas direcciones.

Las enfermedades no afectan a las sociedades de manera aleatoria y ca�tica.�Son eventos ordenados, porque los microbios se expanden y difunden selectivamente para explorar nichos ecol�gicos que los seres humanos han creado.

Esos nichos muestran en gran medida qui�nes somos: si, por ejemplo, en la revoluci�n industrial, realmente nos import� lo que les sucedi� a los trabajadores y a los pobres y la condici�n en que viv�an las personas m�s vulnerables.

El c�lera y la tuberculosis en el mundo de hoy siguen adelante. l�neas creadas por la pobreza y la desigualdad y la forma en que, como pueblo, parecemos estar preparados para aceptar eso como algo correcto y apropiado, o al menos inevitable.

Pero tambi�n es cierto que la forma en que respondemos depende en gran medida de nuestros valores, nuestros compromisos y nuestro sentido de ser parte de la raza humana y no de unidades m�s peque�as.

Cuando�Bruce Aylward. quien dirigi� la misi�n de la OMS a China, regres� a Ginebra al final y se le hizo una pregunta muy similar a la que usted plante�, dijo que lo m�s importante que debe suceder, si queremos ser preparado ahora y en el futuro, tiene que haber un�cambio�absolutamente fundamental�en nuestra mentalidad.

Tenemos que,

  • pensar que tenemos que trabajar juntos como especie humana para organizarnos para cuidarnos unos a otros

  • darnos cuenta de que la salud de las personas m�s vulnerables entre nosotros es un factor determinante para la salud de todos nosotros

  • Si no estamos preparados para hacer eso, nunca estaremos preparados para enfrentar estos desaf�os devastadores para nuestra humanidad

Bueno, ese es un pensamiento muy sombr�o, si puedo decirlo, porque creo que es poco probable que experimentemos ese cambio de mentalidad.


[Risas] No quer�a sugerir que soy un gran optimista en este asunto, pero estoy de acuerdo en que es lo que debe suceder.

Tambi�n hay un lado oscuro en la humanidad y eso es parte del inter�s de esto.

�Qu� elecci�n haremos?

�C�mo iremos cuando nos enfrentemos a esto?

No creo que est� predeterminado, y se est� desarrollando un gran drama moral humano frente a nosotros.


La idea de una conexi�n entre c�mo respondemos a estas cosas y su prevalencia es casi b�blica.

Estoy totalmente de acuerdo con eso.

Realmente es un asunto que existe a ese nivel y es una gran parte de nuestro sentido de imperativo moral.�Creo que es una gran parte de la historia de las enfermedades epid�micas.


Antes de que esto se vuelva demasiado oscuro, d�jame hacerte una pregunta m�s clara...

S�, lamento tener esos intereses.�Mis hijas protestan.

�Hay ciertas epidemias en las que la respuesta ha mostrado algo inspirador sobre la humanidad?

Oh, ciertamente pienso eso.

Creo que cuando dije que nos muestra un espejo, no solo muestra el lado oscuro de la humanidad.�Tambi�nmuestra el lado heroico.

Un buen ejemplo es�M�dicos sin Fronteras�en�la crisis del �bola, y la forma en que ponen sus vidas y su futuro, a sabiendas, directamente en la l�nea, sin intereses propios y sin recompensa, sino simplemente porque se comprometieron a defender la vida y la salud de las personas m�s d�biles del mundo.

Y�M�dicos Sin Fronteras�est� haciendo eso todos los d�as en muchas partes del mundo, e incluso ahora en China se enfrentan a esto.�


Creo que esto es algo que tambi�n resalta las m�s altas cualidades.�De hecho, tambi�n se escriben novelas sobre estos grandes eventos.�Afecta nuestra literatura y nuestra cultura.

Estoy pensando en la gran novela de la peste, que es "Los Novios�(I Promessi Sposi)", del novelista italiano�Alessandro Manzoni.

Habla sobre el arzobispo de Mil�n, el cardenal Borromeo, quien entr� en las casas de plagas y estaba dispuesto a dar su vida para cuidar a las personas m�s pobres y m�s enfermas de su reba�o.

Absolutamente.

Qu� pasa en t�rminos de l�deres mundiales o reg�menes que responden positivamente, o cambios pol�ticos positivos que surjan despu�s de una epidemia?

Estoy pensando en el fin de la esclavitud tradicional en el Nuevo Mundo.�Eso y el �xito de la�rebeli�n haitiana y Toussaint Louverturefue determinado, sobre todo, por la fiebre amarilla.

Cuando Napole�n envi� la gran armada para restaurar la esclavitud en Hait�, la rebeli�n de esclavos tuvo �xito porque los esclavos de �frica ten�an la inmunidad que los europeos blancos, que estaban en el ej�rcito de Napole�n, no ten�an.�Condujo a la independencia de Hait�...

Adem�s, si se piensa desde el punto de vista estadounidense, esto fue lo que llev� a la decisi�n de Napole�n de abandonar la

proyecci�n del poder franc�s en el Nuevo Mundo y, por lo tanto, acordar, con Thomas Jefferson, en 1803, la�Compra de Luisiana que duplic� el tama�o de los Estados Unidos.

Para darle la vuelta, �con qu� frecuencia la existencia de estas enfermedades ha ido de la mano de la opresi�n pol�tica o ha sido utilizada como una excusa para la opresi�n pol�tica?


Creo que�siempre se�ha visto como parte de la opresi�n pol�tica.

Estoy convencido de que el siglo XIX fue una �poca terrible, no solo de rebeli�n sino tambi�n de opresi�n pol�tica.�Por ejemplo, la matanza de personas despu�s de�la revoluci�n de 1848 en Francia. en Par�s en particular, o despu�s de la Comuna de Par�s.

Parte de la raz�n por la que esto fue tan violento y sanguinario fue que las personas que estaban al mando vieron que las clases trabajadoras eran�peligrosas pol�ticamente. pero tambi�n eran muy peligrosas desde el punto de vista m�dico.

Ten�an la posibilidad de desencadenar desastres en toda la sociedad.

Creo que eso fue realmente una parte de esta met�fora de las clases peligrosas, y creo que eso condujo, por ejemplo, a la inhumanidad de la matanza de 1871 despu�s de que la�Comuna de Par�s�fue sofocada.�

�Qu� ha hecho la respuesta de China a�este coronavirus actual?


Esa es una pregunta realmente interesante, y creo que tendremos que pensar mucho, porque tiene una serie de aspectos que son realmente complicados.

Lo primero es los m�todos de mano dura introducidas por los chinos el d�a 23 de enero. cuando introdujeron el�cord�n sanitario. que es una cuarentena por mayor, acordonada con soldados y polic�as enteros �reas geogr�ficas y comunidades.

En este caso, en�Wuhan. una ciudad de unos once millones, y luego en la�provincia de Hubei, que tiene casi sesenta millones de personas, decidieron imponer un bloqueo.�

Eso es algo que se remonta a las medidas de la peste y que se ha repetido una y otra vez, incluso en la epidemia de �bola.

El problema con el�cord�n sanitario�es que es torpe.

Es un gran problema.

Llega demasiado tarde y rompe ese elemento fundamental de la salud p�blica, que es la informaci�n.�Es decir, amenazados con el cierre, la gente no coopera con las autoridades.

Por lo tanto, las autoridades ya no saben qu� est� pasando y las personas toman vuelo, lo que propaga la epidemia.

Me sorprendi� mucho ver que esta fue la respuesta del gobierno chino desde el principio.

Difiere de las normas de salud p�blica, que se han desarrollado desde los a�os de la peste, que enfatizan los hallazgos de casos de individuos, luego el rastreo y el aislamiento.


As� que estaba horrorizado y esperaba lo peor.

Resulta, creo, que el r�gimen lentamente comenz� a cambiar de rumbo.�Se ve que, a medida que pas� el tiempo, los chinos fueron muy diligentes en la recopilaci�n de registros, tratando de obtener la cooperaci�n de la poblaci�n, en cierto sentido para reparar el da�o de los primeros d�as.

Creo que es una historia de m�s de una respuesta.�No todo fue malo, y no todo fue bueno.

No estoy de acuerdo con la respuesta de�
la OMS. que elogi� esto como una�maravillosa salud p�blica.�Eso me da miedo.

�Eso quiere decir que otros reg�menes y otros pa�ses donde hay hombres fuertes deber�an imponer bloqueos, como se intent� con el �bola en �frica occidental, donde no funcion�?

Eso me aterra.

No creo que esa sea la lecci�n.�Creo que es el enfoque m�s matizado, que probablemente no estaba funcionando tan bien en China, y, de hecho,�Xi Jinping�est� dispuesto a decir, a diferencia de la Organizaci�n Mundial de la Salud, por extra�o que parezca, que se cometieron errores y que tuvieron que cambiar de rumbo y que necesitan aprender de esos errores.

Creo que eso fue lo que China pudo hacer.


Eso es interesante, porque antes dec�as que la Organizaci�n Mundial de la Salud, o al menos miembros de ella, estaba llamando a las personas a encontrar su humanidad com�n, pero al mismo tiempo est�s diciendo que tambi�n est�n dispuestos a alabar una respuesta que fue, al menos inicialmente, algo inhumano.

Si.

No lo estoy justificando, pero puedo decir que puedo entenderlo, porque ser�a terrible alienar al miembro m�s grande de la Asamblea Mundial de la Salud y alienar a un pa�s que est� en medio de esta extraordinaria crisis.

Entonces puedo entender por qu� sucedi�.

Al mismo tiempo, se ha hecho mucho hincapi� en la honestidad total, produciendo evidencia, comunicaci�n, enfoques basados en datos, hechos y cient�ficos para la salud p�blica, y eso no es lo que sucedi� en las primeras etapas de la respuesta china.�Entr� en juego m�s tarde.�


Para retroceder un poco en el tiempo, �hay temas generales sobre c�mo los artistas han reaccionado a las epidemias?

Creo que una de las cosas que he aprendido sobre las epidemias es que cada enfermedad, como la veo, es como una persona.

Cada uno es individual y diferente de cualquier otro.�No son solo causas intercambiables de muerte.�Depende de la naturaleza de cada individuo y de c�mo las sociedades y los artistas reaccionan ante ellos.

Depende de cu�ntas personas maten, si matan personas de manera insoportable, si matan a ni�os y j�venes, o si dejan hu�rfanos, o si son enfermedades familiares o si han venido del exterior.

En el caso de la peste, agita los problemas de mortalidad y muerte s�bita.

Los artistas respondieron a esto, particularmente en el continente.�En los pa�ses cat�licos, el objetivo principal era ver esto como un recordatorio de que esta vida es temporal y provisional.

Uno ve una gran atenci�n a los temas de la muerte s�bita, es decir, el�baile macabro. donde todos son arrastrados.�Por supuesto, el uso del reloj de arena, de huesos, de vanidades.

Ya sabes,

"Vanidad de vanidades, todo es vanidad, dice el Predicador".

Existe esta enorme sensaci�n de eso, y tambi�n una sensaci�n de adoraci�n por los santos de la peste, que fueron ampliamente representados.�

Uno puede ver esto en toda Europa: el culto a la religiosidad, los temas de la muerte s�bita, el arrepentimiento y poner en orden sus asuntos y su alma antes de que la plaga pueda interrumpirlo repentinamente.

Tuvo un efecto transformador en la iconograf�a del arte europeo


Puedes ver esto incluso en el siglo XX con esa maravillosa pel�cula de�Ingmar Bergman. "
El S�ptimo Sello", donde la peste es una met�fora de lo que Bergman estaba preocupado en 1957, que es la guerra nuclear.

Uno puede ver que tiene todas las cosas de las que he estado hablando con respecto a la plaga, incluido el�baile macabro�con el que termina la pel�cula. Usted�ver� pinturas de la�La Muerte. y realmente es un ejemplo de la persistencia de esta respuesta art�stica a la muerte.�

Otras enfermedades provocan diferentes respuestas.

Se podr�a hablar de tuberculosis y de lo diferente que fue en el per�odo rom�ntico, en el siglo XIX.�Eso es realmente extra�o, porque, para m�, la tuberculosis es una de las formas m�s horribles y dolorosas de morir, donde, al final, te asfixias y, sin embargo, la glorificar�s con hero�nas de �pera en el escenario que son percibidos como hermosos.

O "La Caba�a del t�o Tom", que no se trata solo de la esclavitud.�Tambi�n se trata de tuberculosis...

�Por qu� se glorific� la tuberculosis?


Quiero decir algo, esperando te haga sonre�r, pero me gustar�a poder darte una respuesta definitiva a eso.�


Los seres humanos son criaturas divertidas, �no es as�?�No todas las cosas que se hacen son f�ciles de entender, pero, con respecto a la peste, fue una enfermedad que afect� a todos.

Creo que eso es cr�tico.�Era el fin del mundo, el juicio final, el apocalipsis final.

Con la tuberculosis, por otro lado, la gente pensaba algo que no era cierto.�Pensaron, y las doctrinas m�dicas de principios del siglo XIX les ense�aron esto, que era una enfermedad de la �lite, del artista, de lo bello, de lo refinado, y que hac�a a las personas mucho m�s bellas, por lo que la moda intent� convertir a las mujeres en criaturas con tuberculosis.

Ves a�Toulouse-Lautrec�pintando a una mujer de aspecto anor�xico que se pone arroz en polvo en la cara para verse p�lida como la gente con tuberculosis.

Los prerrafaelitas en realidad se casaron con sus modelos, que eran pacientes con tuberculosis.

Sus amigos le dijeron a�V�ctor Hugo�que ten�a un gran defecto como escritor, que era no ser tuberculoso y que, por lo tanto, no ser�a tan buen escritor como lo habr�a sido de otra manera.

Hubo un pensador y escritor estadounidense sobre cultura,�Arthur C. Jacobson. quien tuvo la idea de que Estados Unidos, a fines del siglo XIX, cuando la tuberculosis comenzaba a retroceder, enfrentar�a una crisis por las artes, las ciencias, y cultura, porque ya no habr�a genios como hab�a existido en la �poca de la tuberculosis.


Eso es incre�ble.

No soy un ludita con respecto a la ciencia, pero las ciencias a veces tienen una resaca, y esta es una de las consecuencias de la teor�a de los g�rmenes de la enfermedad.

La teor�a de los g�rmenes en realidad ayud� a estigmatizar a los pobres.�La TB, insist�a �l, no era abrumadoramente una enfermedad de las clases hermosas sino de las clases feas que eran sucias y pobres.�All�, toda la interpretaci�n cambia.

Si nos fijamos en�"El inmoralista" de�Andr� Gide. a principios del siglo XX, considera que su propio caso de tuberculosis es lo m�s despreciable y repugnante que podr�a suceder.

La idea de una�enfermedad hermosa�ha desaparecido para siempre, y la tuberculosis nunca vuelve a ser eso.


Terminemos aqu�: podemos estar viendo una respuesta a una epidemia que combina tragedia y farsa, como vimos hace un par de d�as, donde un grupo de funcionarios de salud se levantaron en la Casa Blanca y decidieron elogiar al presidente�Trump�y hablar sobre lo que estaba pasando��Tienes alguna historia divertida de la historia de reyes locos o gobernantes locos que se enfrentan muy inadecuadamente o tal vez tragic�micamente con las epidemias?


Bueno, s�.

No estoy seguro de que sea exactamente divertido, pero creo que la reacci�n de�Napole�n�a las enfermedades que estaban destruyendo su gobierno fue tr�gica y grotesca en una especie de humor negro, donde no valora la vida de sus soldados.

Por lo tanto, puede hablar de la llegada de la fiebre amarilla en las Indias Occidentales como un insulto personal.

Creo que esto es algo que podr�amos ver una vez m�s.�Es algo de lo que quiz�s te puedas re�r.�Quiz�s la historia se vea mejor como una comedia en retrospectiva, pero no creo que lo que va a suceder este pr�ximo a�o con respecto a esta epidemia en particular en los Estados Unidos vaya a ser divertido.

Tener funcionarios en la Casa Blanca diciendo:

"Oh, no es m�s que el resfriado com�n, lo tenemos bajo control"

... cuando�no tienen�nada�bajo control por lo que puedo ver, y han puesto a cargo a personas que ni siquiera creen en la ciencia.


Las epidemias y el�solipsismo�son las dos cosas que la naturaleza humana no puede conquistar.

Estoy de acuerdo en eso...