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traducci�n de
Adela Kaufmann � �
� � � � � � � La agencia de salud m�s importante del pa�s,
los
Centros para el Control de Enfermedades (CDC) ... � � Durante m�s de dos d�cadas, las familias estadounidenses se han enfrentado a un enemigo inescrupuloso que amenaza la salud p�blica y el bienestar. � Es una instituci�n deshonesta e inmanejable dentro de nuestro gobierno federal, que ahora parece estar sujeta �nicamente a intereses privados.�Los ciudadanos han estado terriblemente equivocados al creer que la agencia de salud l�der de la naci�n, los�Centros para el Control de Enfermedades�(CDC), cumple su mandato de proteger al p�blico de las "peligrosas amenazas para la salud", tanto nacionales como extranjeras. � Se espera que asumamos que la CDC se basan en la ciencia y los datos m�dicos m�s avanzados y de punta, para tomar decisiones pol�ticas. � Sin embargo, el historial de corrupci�n y fraude de la agencia contradice su propio�compromiso, tal como se describe en su sitio web. � En lugar de proteger la "seguridad de la salud de nuestra naci�n",�la CDC utilizan�bromuros y actos sin sentido para ocultar su verdadera naturaleza.� � Durante el a�o pasado, especialmente en los �ltimos meses, la propagaci�n de inculcaci�n de miedos de la CDC se ha vuelto virulenta.�Es una escritura orwelliana cl�sica. � El reciente�'brote de sarampi�n', aunque no es tan alarmante como los brotes de �pocas pasadas, se ha aprovechado como una oportunidad para lavar el cerebro y transformarlo�en un�ganado obediente�para aumentar el�cumplimiento de la�vacunaci�n. �
Peor
a�n, esta campa�a de desinformaci�n ignora todo lo que sabemos sobre
la infecci�n por sarampi�n y los fallos de la vacuna MMR.� � Los m�dicos, investigadores m�dicos, inmun�logos y ex defensores de las vacunas que cuestionan las afirmaciones de seguridad y eficacia de las vacunas est�n frustrados y ansiosos por debatir p�blicamente cu�les son los mejores defensores de las�vacunas�que ofrecen�la CDC y la�industria de las vacunas, pero ninguno aceptar� el desaf�o porque la ciencia Est� tan claro que no est� de su lado.� � La agencia constantemente falla en realizar y aplicar el est�ndar de oro en su propia investigaci�n m�dica e ignora la mejor ciencia independiente revisada por pares. � En resumen, esta agencia es un portavoz�del complejo farmac�utico-industrial�y opera por su propia ventaja financiera, m�s que por el beneficio de la sociedad.�Sus puertas giratorias se mantienen con un constante influjo y una afluencia constante de la industria farmac�utica y de las vacunas. � De hecho, las l�neas que separan la influencia corporativa y la salud p�blica est�n muy borrosas y distorsionadas. � No es sorprendente que los documentos obtenidos a trav�s de la�Ley de Libertad de Informaci�n�(FOIA, por sus siglas en ingl�s) pinten a la CDC como podridos en su n�cleo y una de las mayores amenazas para la salud de la naci�n. � La agencia, en�palabras de�Robert Kennedy Jr,
Lo que nunca escuchar� en los medios de comunicaci�n tradicionales es que hay otra instituci�n m�dica a la que se supone que se le ha otorgado la responsabilidad de garantizar que la CDC reciban investigaciones cient�ficas confiables y de calidad para usar como base en sus decisiones de atenci�n m�dica. �
El�Instituto
de Medicina�(IOM)
no posee la influencia legislativa de la CDC;�sin embargo,
representa un cuerpo muy superior de cient�ficos e investigadores en
sus campos m�dicos.� � La Academia fue fundada con el prop�sito de reunir a las mejores mentes cient�ficas de la naci�n para asesorar al gobierno en asuntos cient�ficos.�La OIM se fund� m�s tarde para brindar asesoramiento experto e investigaci�n m�dica confiable a los legisladores de la Casa Blanca y el Congreso para guiar sus decisiones, manteni�ndolos informados sobre los impactos sociales, econ�micos y pol�ticos de la atenci�n m�dica. �
De
acuerdo con sus principios, y a diferencia de la CDC, se espera que
los miembros de la OIM que deliberan sobre la investigaci�n y las
pol�ticas de vacunas sean independientes y no representen intereses
privados.� � A lo largo de veinte a�os, la OIM ha supervisado y revisado la literatura m�dica para determinar las lesiones m�s y menos probables asociadas con vacunas espec�ficas y ha proporcionado recomendaciones a la CDC. � En 1991 se identificaron 22 enfermedades,
Los casos con causa confirmada incluyeron problemas de aprendizaje, trastorno por d�ficit de atenci�n y diabetes infantil. � Estos datos se recopilaron luego de que el presidente�Ronald Reagan�firmara la�Ley Nacional de Compensaci�n por Lesiones por Vacunas, un punto en el que las tasas de autismo comenzaron a subir de manera exponencial. � Tres a�os m�s tarde, la OIM identific� 54 condiciones m�dicas, la literatura m�dica,
Entre las enfermedades confirmadas se encontraban,
Nuevamente en 2011, la OIM report�155 condiciones adversas�con 16 lesiones inducidas por la vacuna apoyadas por la ciencia, incluida una correlaci�n entre la�vacuna DTaP�y el autismo. � Desafortunadamente, la OIM no tiene autoridad oficial sobre nuestras agencias federales;�en consecuencia, sus recomendaciones a la CDC para investigar m�s a fondo los efectos adversos de las vacunas no fueron atendidas. � Hoy, nada ha cambiado en el CDC. � En cambio, la agencia se ha excavado en un agujero m�s profundo de�secreto�y�corrupci�n.�Con un presupuesto de $ 11,5 mil millones, Kennedy se�ala�que solo $ 20 millones son designados para la seguridad de las vacunas. � El CDC est� pidiendo una auditor�a p�blica completa. � � �
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Estos primeros informes de la OIM son extremadamente valiosos. � Ellos identifican muchas de las mismas enfermedades infantiles que han crecido a proporciones epid�micas en los a�os intermedios, y acusan a las vacunas como un factor causal. � Sin embargo, lamentablemente, la OIM ha mostrado recientemente se�ales de estar tan�comprometida�como otras agencias de salud. �
Tambi�n puede haberse convertido en otro pe�n del estado�m�dico
profundo�que se est� infiltrando en todos los cuerpos
legislativos del estado para aprobar leyes draconianas de
inmunizaci�n con el objetivo final de vacunar a los estadounidenses
con mentiras e incluso amenazas y fuerza si es necesario.� � Tampoco existen estudios cre�bles y confiables que respalden las afirmaciones de que no surgen riesgos sin�rgicos para la salud si se administran varias vacunas simult�neamente. � Ahora, la OIM tambi�n basa sus conclusiones en�la�"ciencia"�corporativa�basura. �
Sus
informes recientes tambi�n omiten revisiones de la literatura
cient�fica que se�ala la toxicidad del�adyuvante
de aluminio,
utilizado en muchas vacunas, incluida la MMR. � Se encontraron niveles altos de aluminio en el cerebro de ni�os autistas fallecidos, cuyos tejidos fueron donados para su investigaci�n.�Los ni�os autistas pueden tener hasta diez veces la cantidad de aluminio alojado en el cerebro en comparaci�n con un adulto normal. � En su blog sobre el�Post Hipocr�tico,�Exley se�ala�que Merck se niega a hacer que su adyuvante de aluminio est� disponible para que los investigadores realicen an�lisis independientes.� � Los cr�menes de la CDC son una cuesti�n de registro p�blico.�Estos no son secretos o informaci�n confidencial.�Los documentos y las voces de los informantes dentro de la CDC se encuentran f�cilmente en Internet para respaldar todos nuestros cargos contra la agencia.� � Est�n disponibles para cualquier persona que desee investigar. �
Desafortunadamente, los medios de comunicaci�n nuevamente han
fallado en hacer su trabajo al informar con precisi�n sobre la
corrupci�n federal, en lugar de convertirse en un instrumento del
estado m�dico profundo y un portavoz para enga�ar al p�blico.�
El CDC ha�falseado las�estad�sticas de�seguridad de armas de fuego;�ese informe llev� al director del Centro de Investigaci�n de Control de Lesiones de la Universidad de Harvard,�David Hemenway,�a declarar que nadie deber�a confiar en las estimaciones de la CDC.� � Durante la d�cada de 1970, fue la Dra.�Colleen Boyle de�la CDC�quien cubri� la naturaleza horriblemente t�xica�del Agente Naranja�y la dioxina a la que fueron expuestos miles de veteranos de la Guerra de Vietnam.� �
Aunque la OIM y el Congreso revelaron el enga�o de Boyle, la agencia
recompens� debidamente su lealtad con una promoci�n.� � Ese mismo a�o, la�Oficina de Asesor�a Especial de�EE.UU.�descubri� posibles evidencias de que la CDC y las compa��as farmac�uticas estaban destruyendo los datos que vinculan la vacuna�timerosal�conservadora�con trastornos neurol�gicos. � La exposici�n del�senador�Tom Coburn�revela que el�mal manejo presupuestario de�la agencia�ha desperdiciado millones de d�lares de impuestos y concluye que la CDC no pueden demostrar que est�n controlando la enfermedad.� � En octubre de 2017, el congresista�Bill Posey�envi� una carta�al entonces fiscal general�Jeff Sessions�pidi�ndole que reanudara los esfuerzos para extraditar y procesar al Dr.�Poul Thorsen�por lavado de dinero de m�s de $ 1 mill�n del CDC. � El problema es que el CDC contrat� a Thorsen para realizar una investigaci�n fraudulenta en Dinamarca, que enmascarar�a cualquier asociaci�n entre el preservante de la vacuna, el timerosal y el autismo. � En 2011, Thorsen fue colocado en la lista de los m�s buscados por el Inspector General;�sin embargo, el CDC ha continuado erigiendo obst�culos a los esfuerzos de extradici�n. �
M�s
preocupante, el Representante Posey descubri� que durante al menos
tres a�os despu�s de que el FBI emitiera su orden de arresto, el CDC
y los Institutos Nacionales de Salud continuaron colaborando con
Thorsen e incluso publicaron conjuntamente m�s ciencia basura en
conjunto.� �
Los
datos se cocinaron e inscribieron a muchas menos mujeres de las que
la CDC informaron al Congreso.�
Por
temor a represalias, este grupo de empleados de la CDC present� su
queja de forma an�nima.� � Ninguno de los comit�s asesores cumple con la�Ley del Comit� Consultivo Federal, que requiere una diversidad de opiniones m�dicas;�en cambio, los comit�s est�n repletos de firmas corporativas que abogan por el r�pido seguimiento de vacunas mal desarrolladas con datos de seguridad y eficacia insuficientes y poco confiables para respaldar su aprobaci�n. � En 2009, la�Oficina del Inspector General�llev� a cabo una investigaci�n�de conflicto de intereses dentro de la CDC. �
La
Oficina descubri� que el�97 por ciento�de
sus asesores no declararon sus v�nculos con�la
industria farmac�utica.� � Mientras tanto, las epidemias de,
...ruedan y los funcionarios de salud federales abrazan las
supersticiones de la�"magia"�de la�vacuna�y residen en
una cultura de negaci�n m�dica.�
Para los cientos de miles de ni�os da�ados por la vacuna, el�CDC sigue siendo�un delincuente�suelto. � Y el resto del�gobierno�de los�Estados Unidos�es menos competente que los borrachos�polic�as de Fachada�para autorizar una limpieza a fondo.� � La agencia no muestra ning�n inter�s sincero en el bienestar y la salud de su hijo, ni en los de ning�n estadounidense.� � Y los medios de comunicaci�n principales, cada una de las principales redes, peri�dicos y revistas, son igualmente c�mplices inconscientes de preservar la cultura de enga�o de la CDC. � Todos los medios de comunicaci�n�deben ser timbrados con una advertencia como un peligro para la salud p�blica que amenaza la vida. � � � |
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