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por�Richard K. Moore� (Septiembre-Octubre de 2011) del�Sitio Web�NewDawnMagazine
traducci�n de
Adela Kaufmann � �
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� � � En una era de crecimiento econ�mico, la din�mica de la competencia, la innovaci�n y la inversi�n empresarial fueron elementos importantes del juego. � En una era de no crecimiento, el juego est� totalmente basado en din�micas enteramente diferentes.�Los mecanismos de producci�n se volver�n relativamente est�ticos.�En lugar de las empresas compitan para innovar, vamos a tener burocracias de producci�n. � Van a ser semi-estatales, carteles semi-privados, preocupados por los presupuestos y cuotas en lugar del crecimiento, un poco a lo largo de las l�neas del modelo sovi�tico. � Ya podemos ver que se est�n tomando medidas para cambiar el modelo corporativo hacia el modelo burocr�tico, a trav�s de una mayor intervenci�n del gobierno en los asuntos econ�micos. � En los EE.UU., por ejemplo, con los rescates de Wall Street, la reestructuraci�n forzosa de General Motors, la convocatoria de la regulaci�n centralizada de la banca y la industria, y la obligatoriedad de la cobertura de seguro de salud, el gobierno est� diciendo que el mercado va a ser reemplazado por directrices del gobierno. � No es que debemos lamentar la desaparici�n del capitalismo explotador, pero antes de celebrarlo tenemos que entender aquello por lo que est� siendo reemplazado. � En la era del capitalismo y el crecimiento, el foco del juego estaba en el lado de la producci�n de la econom�a.�El juego fue dirigido para controlar los medios de crecimiento: el acceso al capital.�En una era de no-crecimiento, el foco del juego estar� en el lado del consumo de la econom�a. � El juego ser� dirigido a controlar las necesidades de la vida:�el acceso a los alimentos�y la energ�a. � Los l�mites del comercio del carbono proporcionan los mecanismos que permitan a�los banqueros�micro-manejar las necesidades de la vida en una escala global.�Para obtener m�s informaci�n sobre este art�culo lea "El Plan de la Elite para un Nuevo Orden Social Mundial." � En cuanto a los presupuestos financieros,�el FMI�est� haciendo la microgesti�n, usando el apalancamiento de la deuda � Para presupuestos de carbono, ser� el IPCC (Panel Intergubernamental sobre el Cambio Clim�tico) quien va a hacer la microgesti�n, utilizando�la excusa del calentamiento global. � C�mo va a funcionar es explicado por el�Herald Sun, 10 de julio de 2011, discutiendo nuevas leyes de carbono de Australia:
En t�rminos de propaganda, este�r�gimen de cr�ditos de carbono�est� siendo vendido como una�soluci�n�al calentamiento global y al pico del petr�leo. � La campa�a de propaganda ha tenido mucho �xito, y todo el movimiento ambiental ha sido capturado por el mismo.�En Copenhague, los manifestantes se enfrentaron a la polic�a, con pancartas en apoyo de impuestos sobre el carbono y los cr�ditos de carbono. � Pero de hecho, el�r�gimen de carbono no tiene�nada que ver�con el clima o con la sostenibilidad. � Es todo acerca de la micro-gesti�n de cada aspecto de nuestras vidas, as� como de todos los aspectos de la econom�a. � Si las personas que est�n manejando las cosas realmente se preocupasen por la sostenibilidad, estar�an invirtiendo en un eficiente transporte masivo, y estar�an cambiando la agricultura, de m�todos de uso intensivo del hasta el petr�leo, a m�todos sostenibles. � En su lugar, est�n exigiendo biocombustibles y nos est�n vendiendo coches el�ctricos, que no son m�s sostenibles que los coches normales. � A medida que se consolida el nuevo r�gimen global, el IPCC va a repartir un l�mite de carbono anual obligatorio para cada naci�n.�Cada gobierno luego dar� su presupuesto de su asignaci�n de alguna manera, as� como lo est� haciendo Australia. � Con los medidores inteligentes, el uso de energ�a se puede micro-administrar todo el camino hasta el n�mero de minutos que la gente pasa en las duchas, o a qu� temperatura la gente elige lavar la ropa. � Ya sea que este tipo de medidas significativamente reducir�n los niveles de CO2 est� abierto a muchas dudas. � La creaci�n de una plantaci�n de �rboles en el tercer mundo puede ser "negociado" contra continuas emisiones, incluso si una selva tropical, es cortada para hacer espacio para esa plantaci�n - y esta transacci�n global aumenta realmente los niveles globales de CO2. � Y sin duda, habr� casos especiales, tales como industrias favorecidas, o aplicaciones del gobierno y militares, donde se permitir�n excepciones.�Y, en general, el cumplimiento de la normativa industrial tiende a ser notoriamente poco estricto. � Aunque la reducci�n de los niveles de CO2 puede estar en duda, hay una cosa que no est� en duda:
Cada industria que quema combustibles f�siles tendr� un coste adicional a�adido: el costo de la obtenci�n de los permisos de carbono - al ser el mejor postor.�Esos costos, adem�s de los m�rgenes de beneficio, ser�n pasados al consumidor. � Las alternativas f�siles, como la energ�a e�lica y los biocombustibles, ser�n s�lo marginalmente m�s bajos en el precio:
Todo esto va a estimular la inversi�n especulativa en los mercados futuros, lo que aumentar� a�n m�s los precios - y esto ya est� ocurriendo con los precios mundiales de los alimentos. � Con los precios de los alimentos vinculados a los precios de la energ�a, la agricultura y la tierra siendo convertida de producci�n de alimentos a la producci�n de combustible, el resultado s�lo puede ser un aumento masivo de la inanici�n en el tercer mundo. � La despoblaci�n�ha sido durante mucho tiempo una meta establecida en los c�rculos de �lite, y la Dinast�a Rockefeller�frecuentemente ha participado en proyectos de eugenesia de varias clases durante el siglo pasado. � El genocidio mediante la pobreza impuesta ya es un modelo que est� siendo perseguido con �xito en �frica, y los biocombustibles est�n expandiendo sistem�ticamente ese programa. � � � Nota�: � En octubre de Australia aprob� oficialmente la legislaci�n fiscal de carbono. � Puede leer m�s acerca de las verdaderas implicaciones de este impuesto mediante la lectura del art�culo de longitud completa de Richard Moore "El Plan de la Elite para un Nuevo Orden Social Mundial".� � En este art�culo se advierte que el verdadero objetivo de las leyes fiscales de carbono es la micro-gesti�n de cada aspecto de la vida de los ciudadanos y la econom�a. � � � |
