por�Natalie Wolchover
01 Junio 2017

del Sitio Web�QuantaMagazine

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles


Olena Shmahalo

RevistaQuanta

Una nueva matem�tica muestra c�mo,

contrariamente a la opini�n cient�fica convencional,

seres conscientes y otras entidades macrosc�picas

podr�an tener una mayor influencia sobre el futuro

de lo que lo tiene la suma de

sus componentes microsc�picos.


En su obra 1890,Principios de Psicolog�a,William Jamesinvoca a Romeo y Julieta para ilustrar lo que hace a los seres conscientes tan diferentes de las part�culas que los componen.

"Romeo quiere a Julieta como las limaduras de metal quieren al im�n, y si no hay obst�culos interviniendo se mueven hacia �ste por una l�nea tan recta como ellos", escribi� James.

"Sin embargo, Romeo y Julieta, si un muro se hubiese construido entre ellos, no permanecen idiotas presionando la cara contra sus lados opuestos, como el im�n y las limaduras... Romeo pronto encuentra una manera indirecta, escalando la pared o de otra manera, tocando directamente los labios de Julieta."

Erik Hoel de 29 a�os de edad, neuro-cient�fico te�rico y escritor, cit� el pasaje en un ensayo reciente (Agent Above, Atom Below - How agents causally emerge from their underlying microphysics) en la que present� su nueva explicaci�n matem�tica de c�mo surgen la conciencia y la mediaci�n.

La existencia de agentes - seres con intenciones y comportamiento orientado a metas - ha parecido siempre en profunda contradicci�n con el supuesto reduccionista que todo comportamiento surge de las interacciones mec�nicas entre part�culas.

La mediaci�n no existe entre los �tomos, y as� el reduccionismo sugiere que no existen en absoluto mediadores: que los deseos de Romeo y estados psicol�gicos no son las causas reales de sus acciones, sino que simplemente se aproximan a las desconocidas y complicadas causas y efectos entre los �tomos en su cerebro y sus alrededores.

La teor�a de Hoel, llamada "emergencia causal" rechaza rotundamente esta hip�tesis reduccionista.

"El surgimiento causal es una forma de afirmar que su descripci�n del agente mediador es muy real", dijo Hoel, un investigador post-doctoral de la Universidad de Columbia, quepropuso por primera vez la idea junto con Larissa Albantakis yGiulio Tononi de la Universidad de Wisconsin, Madison.

"Si usted acaba de decir algo como, 'Oh, mis �tomos me hicieron hacerlo' - bueno, eso no puede ser cierto y podr�a ser demostrable que no es cierto."

Erik Hoel,

Neurocient�fico te�rico

de la Universidad de Columbia.
Julia Buntaine

Usando el lenguaje matem�tico de la teor�a de la informaci�n, Hoel y sus colaboradores afirman que demuestran que las nuevas causas - cosas que producen efectos - pueden emerger a escalas macrosc�picas.

Dicen que los estados macrosc�picos de grano grueso de un sistema f�sico (como el estado psicol�gico de un cerebro) pueden tener m�s poder causal sobre el futuro del sistema de que una descripci�n m�s detallada, de grano fino del sistema pudiera posiblemente tener.

Los estados macrosc�picos, tales como deseos o creencias,

"no son s�lo la abreviatura de las causas reales", explic�Simon DeDeo, un te�rico de la informaci�n y cient�fico cognitivo de la Universidad Carnegie Mellon y del Instituto Santa Fe que no est� involucrado en la obra "pero en realidad es una descripci�n de las causas reales, y una m�s descripci�n de grano fino, m�s detallada, en realidad omitir�a esas causas".

"Para m�, eso parece la manera correcta de hablar de ello," dijo DeDeo, "porque queremos atribuir propiedades causales a eventos de orden superior [y] cosas como estados mentales."

Hoel y sus colaboradores han estado desarrollando las matem�ticas detr�s de su idea desde 2013.

En un art�culo de mayo (When the Map is Better Than the Territory) en la revistaEntrop�a, Hoel coloca la aparici�n causal sobre una base te�rica m�s firme al mostrar que las escalas macro ganan poder causal exactamente de la misma manera, matem�ticamente, y que losc�digos de correcci�n de erroresaumentan la cantidad de informaci�n que puede ser enviada a trav�s de canales de informaci�n.

Al igual que los c�digos reducen el ruido (y por lo tanto la incertidumbre) en los datos transmitidos - la perspectiva de 1948 deClaude Shannonque form� la base de la teor�a de la informaci�n - Hoel afirma que los estados macro tambi�n reducen el ruido y la incertidumbre en la estructura causal de un sistema, fortaleciendo las relaciones causales y haciendo m�s determinista el comportamiento del sistema.

"Creo que es muy significativo",George Ellis, un cosm�logo de Sud�frica que tambi�n haescrito sobre la causalidad de arriba hacia abajoen la naturaleza, dijo lo siguiente del papel de Hoel.

Ellis piensa que la aparici�n causal podr�a explicar muchos fen�menos emergentes, tales comola superconductividady las fases topol�gicas de la materia.

Los sistemas colectivos como bandadas de aves y super-organismos - e incluso las estructuras simples como los cristales y las olas - tambi�n podr�an exhibir aparici�n causal, dijeron los investigadores.

El trabajo sobre la emergencia causal a�n no es ampliamente conocido entre los f�sicos, que durante siglos han tenido una visi�n reduccionista de la naturaleza y en gran medida han evitado una mayor reflexi�n filos�fica sobre el asunto.Pero en las interfaces entre la f�sica, la biolog�a, la teor�a de la informaci�n y la filosof�a, donde afloran los rompecabezas, las nuevas ideas han generado entusiasmo.

Su utilidad final para explicar el mundo y sus misterios - incluyendo la conciencia, otros tipos de emergencia, y las relaciones entre los niveles micro y macro de la realidad - se reducir� a si Hoel ha clavado la notoria y dif�cil noci�n de la causalidad:

Es decir, �cu�l es la causa?

"Si usted trae 20 cient�ficos practicantes en una habitaci�n y les pregunta qu� es la causalidad, todos desacordar�an," dijo DeDeo.

"Siempre estamos confundidos sobre ello."

Una teor�a de la Causa

En un accidente fatal por conducir ebrio �cu�l es la causa de la muerte?

Los m�dicos dir�n que la causa es la ruptura de un �rgano, mientras que un psic�logo culpar� a una capacidad deteriorada de toma de decisiones y un soci�logo se�alar� las actitudes PERMISIVAS del alcohol.

Bi�logos, qu�micos y f�sicos, a su vez, ven causas cada vez m�s elementales.

"Famosamente, Arist�teles ten�a una media docena de nociones de causas", dijo DeDeo."Nosotros, como cient�ficos, hemos rechazado todas ellas, excepto las cosas estando en contacto literal, tocando y empujando."

Las verdaderas causas, para un f�sico, son las fuerzas fundamentales actuando entre las part�culas;todos efectos en cadena a partir de ah�.

De hecho, estas fuerzas, cuando pueden ser aisladas, aparecen perfectamente deterministas y fiables - los f�sicos pueden predecir con gran precisi�n los resultados de las colisiones de part�culas en elGran Colisionador de Hadrones, por ejemplo.

En este punto de vista, causas y efectos son dif�ciles de predecir a partir de primeros principios s�lo cuando hay demasiadas variables para realizar un seguimiento.

Es algo audaz hablar

de las matem�ticas de la causalidad.

Simon DeDeo

Por otra parte, los fil�sofos han argumentado que el poder causal existente en dos escalas a la vez ser�a el doble de lo que el mundo necesita;para evitar la doble contabilizaci�n, el "argumento de exclusi�n" dice que todo poder causal debe originarse en el nivel micro.

Pero es casi siempre m�s f�cil hablar de causas y efectos en t�rminos de entidades macrosc�picas.

Cuando buscamos la causa de un accidente automovil�stico fatal, o la decisi�n de Romeo a comenzar a subir,

"No parece adecuada ir todo el camino hasta las escalas microsc�picas de las neuronas dispar�ndose", dijo DeDeo."Ah� es donde Erik [Hoel] est� se�alando. Es algo audaz para de las matem�ticas de la causalidad."

Amable y de complexi�n larga, Hoel creci� leyendo libros en Jabberwocky, la librer�a de su familia en Newburyport, Massachusetts.

Estudi� escritura creativa como estudiante y ten�a previsto convertirse en escritor(todav�aescribe ficci�ny ha comenzado una novela.) Pero tambi�n puso de relieve la cuesti�n de la conciencia - lo que es, y por qu� y c�mo la tenemos - porque lo vio como un tema cient�fico inmaduro que permit�a la creatividad.

Para la universidad, se fue a Madison, Wisconsin a trabajar conGiulio Tononi- la �nica persona en ese tiempo, seg�n Hoel, que ten�a una verdadera teor�a cient�fica de la conciencia.

Tononi concibe la conciencia como informaci�n: bits que est�n codificados, no en los estados de neuronas individuales, sino en la compleja red de neuronas, que se enlazan juntas en el cerebro en conjuntos m�s y m�s grandes.

Tononi argumenta que este especial "informaci�n integrada" corresponde al estado unificado e integrado que experimentamos como conciencia subjetiva.La teor�a de la informaci�n integrada ha ganado importancia en los �ltimos a�os, como ha sido derivado de debates acerca de si es un poder preciso y suficiente para la conciencia.

Pero cuando Hoel lleg� por vez primera a Madison en 2010, s�lo dos de ellos estaban trabajando en ello all�.

Giulio Tononi,

un neur�logo y psiquiatra

de la Universidad de Wisconsin, Madison,

muy conocido por sus investigaciones sobre el sue�o y la conciencia.
John Maniaci / UW Health

Tononi le dio a Hoel la tarea de la exploraci�n de la relaci�n matem�tica entre las escalas generales y la informaci�n.

Los cient�ficos se centraron m�s adelante en c�mo la cantidad de informaci�n integrada en una red neural cambia a medida que asciende la jerarqu�a de escalas espacio-temporales, viendo los v�nculos entre los grupos cada vez mayores de neuronas.

Ten�an la esperanza de averiguar qu� tama�o de conjunto podr�a estar asociado con el m�ximo de informaci�n integrada - y por lo tanto, posiblemente, con pensamientos y decisiones conscientes.Hoel se ense�� a s� mismo la teor�a de la informaci�n y se sumergi� en los debates filos�ficos alrededor de la conciencia, el reduccionismo y la causalidad.

Hoel pronto vio que entendiendo que la forma en la que la conciencia emerge a escalas macro requerir�a una forma de cuantificar el poder causal de los estados cerebrales.

�l se dio cuenta, dijo, que,

"La mejor medida de la causalidad es en bits."

Tambi�n ley� las obras del cient�fico de la computaci�n y fil�sofoJudea Pearl, que desarroll� un lenguaje l�gico para estudiar las relaciones causales en la d�cada de 1990 llamada c�lculo causal.

ConLarissa Albantakisy Tononi, Hoel formaliz� una medida del poder causal llamada "informaci�n efectiva", que indica el grado de eficacia que un estado particular influye en el estado futuro de un sistema.

(La informaci�n efectiva puede ser utilizada para ayudar a calcular la informaci�n integrada, pero es m�s simple y m�s general y, como la medida del poder causal, no se basa en las ideas de otros Tononi sobre la conciencia.)

Los investigadores demostraron que en los modelos simples de redes neuronales, la cantidad de informaci�n eficaz aumenta cuando usted ve magnificadas las neuronas en la red - es decir, trata a grupos de ellos como unidades individuales.Los estados posibles de estas unidades interconectadas forman una estructura causal, donde las transiciones entre estados pueden ser modeladas matem�ticamente usando las denominadas cadenas de Markov.

A una cierta escala macrosc�pica, la informaci�n efectiva aumenta:

Esta es la escala en la que los estados del sistema tienen el mayor poder causal, prediciendo los estados futuros de la manera m�s fiable y eficaz.

Al aumentar la magnificaci�n, usted comienza a perder detalles importantes sobre la estructura causal del sistema.

Tononi y sus colegas plantean la hip�tesis de que la escala de la causalidad pico debe corresponder, en el cerebro, a la escala de las decisiones conscientes;basado en los estudios de im�genes del cerebro, Albantakis adivina que esto podr�a suceder en la escala de microcolumnas neuronales, que consiste en alrededor de 100 neuronas.

La causalidad es lo que se necesita

para dar estructura al universo.

Larissa Albantakis

El surgimiento causal es posible, explic� Hoel, debido a la aleatoriedad y la redundancia que afecta la escala b�sica de las neuronas.

Como un simple ejemplo, dijo que imaginemos una red consistiendo en dos grupos de 10 neuronas cada uno.Cada neurona en el grupo A est� vinculada a varias neuronas en el grupo B, y cuando una neurona en el grupo A se dispara, por lo general causa que una de las neuronas B se dispare tambi�n.

Exactamente qu� es lo que vincula el disparo de las neuronas es impredecible.

Si, por ejemplo, el estado del grupo A es {1,0,0,1,1,1,0,1,1,0}, donde 1 y 0 representan las neuronas que se activan y las que no se activan, respectivamente, dando como resultado el estado del grupo B puede tener posibles combinaciones innumerables de 1s y 0s.

En promedio, seis neuronas en el grupo B se disparan, pero cu�les seis es casi al azar;el micro estado es irremediablemente indeterminista.

Ahora, imagine que magnificamos de nuevo a trav�s del sistema, por lo que esta vez, agrupamos todas las neuronas A juntas y simplemente contamos el n�mero total que se disparan.El estado del grupo A es {6}.

Este estado es altamente probable que lleve al estado del grupo B tambi�n como siendo {6}.El estado macro es m�s fiable y eficaz;�los c�lculos muestran que tiene informaci�n m�s efectiva.

Un ejemplo del mundo real cimenta el punto.

"Nuestra vida es muy ruidosa", dijo Hoel.

"Si usted me da su estado at�mico, puede ser totalmente imposible adivinar donde estar� su estado futuro [at�mico] en 12 horas Trate corriendo hacia adelante. Va a haber mucho ruido, no tiene ni idea. Ahora de una descripci�n psicol�gica o fisiol�gica: �D�nde va a estar usted en 12 horas"?dijo (era mediod�a).

"Usted va a estar dormido - as� de f�cil estas relaciones de alto nivel son las cosas que parecen fiables Este ser�a un ejemplo s�per simple de aparici�n causal".

Para cualquier sistema dado, la informaci�n efectiva alcanza su mejor momento en la escala con la estructura causal m�s grande y confiable.

Adem�s de los agentes conscientes, Hoel dice que esto podr�a escoger las escalas naturales de las rocas, los tsunamis, los planetas y todos los dem�s objetos que normalmente notamos en el mundo.

"Y la raz�n por la que estamos sintonizados en ellos evolutivamente [podr�a ser] porque son fiables y eficaces, pero eso tambi�n significa que son causalmente emergentes," dijo Hoel.

Los experimentos de im�genes cerebrales est�n siendo planeados en Madison y Nueva York, donde el Hoel se ha unido al laboratorio del neurocient�fico de ColumbiaRafael Yuste.

Ambos grupos examinar�n los cerebros de los organismos modelo para tratar de catalogarlos en escalas espacio-temporales en las que tienen un control m�s causal sobre el futuro.La actividad cerebral a estas escalas debe predice con mayor fiabilidad la actividad futura.

Como lo expres� Hoel,

"�De d�nde surge la estructura causal del cerebro?"

Si los datos apoyan su hip�tesis, van a ver los resultados como evidencia de un hecho m�s general de la naturaleza.

"La Agencia o la Conciencia es donde esta idea se hace m�s evidente", dijo William Marshall, un investigador post-doctoral en el grupo de Wisconsin.

"Pero si encontramos que el surgimiento causal est� sucediendo, el supuesto reduccionista tendr�a que ser re-evaluado, y tendr�a que ser aplicada ampliamente."

Nuevo Pensamiento Filos�fico

Sara Walker, una f�sico y astro-bi�loga de la Universidad del Estado de Arizona, que estudia los or�genes de la vida, espera que las medidas como la informaci�n efectiva y la informaci�n integrada ayudar�n a definir lo que considera la escala de grises que conduce entre la no-vida y a la vida (con los virus y los ciclos celulares en alg�n lugar del �rea gris).

Walker ha estado colaborando con el equipo de Tononi en estudios de ciclos celulares reales y artificiales, con indicaciones preliminares de que, integrando la informaci�n, esto podr�a correlacionarse con estar vivo.

Enotros trabajos recientes, el grupo Madison ha desarrollado una forma de medir la aparici�n causal llamado "caja-negra" que dicen que funciona bien para algo as� como una sola neurona.

Una neurona no es simplemente el promedio de los �tomos que lo componen y por tanto no es susceptible a la magnificaci�n.

Poner en Caja-negra es como poner un cuadro alrededor de una neurona y medir las entradas y salidas generales de la caja, en lugar de asumir nada acerca de su funcionamiento interno.

Poner en "caja-negra" es la verdadera forma general de emergencia causal y es especialmente importante para los sistemas biol�gicos y de ingenier�a", dijo Tononi en un correo electr�nico.

Walker es tambi�n un fan de la nueva obra de Hoel que rastrea el eficaz seguimiento de la informaci�n y el surgimiento causal con los fundamentos de la teor�a de la informaci�n y el teorema de los canales de Shannon.

"Estamos en ese profundo territorio conceptual, y en realidad no es claro en qu� direcci�n ir," dijo �l, "as� que creo que cualquier bifurcaci�n en esta �rea es buena y constructiva".

Robert Bishop, un fil�sofo y f�sico en el Wheaton College, dijo,

"Mi opini�n sobre la IE" - informaci�n efectiva - "es que puede ser una medida �til de aparici�n, pero probablemente no es la �nica."

La medida de Hoel tiene el encanto de ser simple, y refleja solamente la fiabilidad y el n�mero de relaciones causales, pero de acuerdo con Bishop, podr�a ser uno de los varios sustitutos de la causalidad que aplican en diferentes situaciones.

Las ideas de Hoel no impresionan aScott Aaronson, un cient�fico te�rico inform�tico de la Universidad de Texas, Austin.Dice que el surgimiento causal no es radical en su premisa b�sica.

Despu�s de leer ensayo reciente de Hoel del Instituto de Preguntas Fundamentales, "Agente Arriba, �tomo Abajo" (en el que se habla de Romeo y Julieta), Aaronson dijo,

"Fue muy dif�cil para m� encontrar algo en el ensayo con lo que reduccionista m�s ortodoxo del mundo estar�a en desacuerdo.

S�, por supuesto, usted desea pasar a mayores niveles de abstracci�n con el fin de hacer predicciones, y para contar historias causales que son de utilidad predictiva - y el ensayo explica algunas de las razones por qu�".

No parec�a tan obvio para otros, teniendo en cuenta c�mo el argumento de exclusi�n ha obstaculizado los esfuerzos para conseguir manejarse en la causalidad de nivel superior.

Hoel dice que sus argumentos van m�s all� de lo que reconoce Aaronson, mostrando que,

"Las escalas m�s altas tienen demostrablemente m�s informaci�n e influencia causal que su informaci�n subyacente. Es la parte 'demostrable' la que es dif�cil y es directamente opuesta al pensamiento m�s reduccionista".

Larissa Albantakis,

Neurocient�fico te�rico

en la Universidad de Wisconsin, Madison.
Sophia Loschky

Por otra parte, la aparici�n de causalidad no es meramente una afirmaci�n acerca de nuestras descripciones o "historias causales" sobre el mundo, como sugiere Aaronson.

Hoel y sus colaboradores tienen como objetivo demostrar que las causas de nivel superior, - as� como los agentes y otras cosas macrosc�picas - existen ontol�gicamente.

La distinci�n se refiere a lo que el fil�sofoDavid Chalmersdice acerca de la conciencia:

Ah� est� el "problema f�cil" de c�mo los circuitos neuronales dan lugar a comportamientos complejos, y el "problema dif�cil", que pregunta, en esencia, qu� es lo que distingue a los seres conscientes de los aut�matas sin vida.

"Es medir la potencia causal de aquella en la que sentimos que tenemos en acci�n, el tipo de experiencias conscientes que queremos tener?" dijo Hedda Hassel M�rch, fil�sofo de la Universidad de Nueva York y protegido de Chalmers.

Ella dice que es posible que la informaci�n efectiva podr�a,

"Realizar un seguimiento del surgimiento ontol�gico real, pero esto requiere un nuevo pensamiento filos�fico sobre la naturaleza de las leyes, poderes y c�mo se relacionan."

La cr�tica que golpea Hoel y Albantakis el m�s duro es uno f�sicos a veces hacen al o�r la idea:

Afirman que ese ruido, la fuerza impulsora detr�s de emergencia causal, no existe realmente;el ruido es s�lo el nombre que dan los f�sicos a todas las cosas que sus modelos dejan fuera.

"Es un punto de vista t�pico de la f�sica", dijo Albantakis, que si se conociera el estado microsc�pico exacto de todo el universo ", entonces se puede predecir lo que sucede hasta el fin del tiempo, y no hay raz�n para hablar de algo as� como el poder de causa-efecto".

Una r�plica es que el conocimiento perfecto del universo no es posible, ni siquiera en principio.

Pero incluso si el universo podr�a ser pensado como una sola unidad que evoluciona de forma aut�noma, esta imagen no ser�a informativa.

"Lo que queda all� es identificar entidades - cosas que existen," dijo Albantakis.

La Causalidad,

"Es en realidad la medida o la cantidad que es necesaria para identificar d�nde en todo este estado del universo tengo grupos de elementos que componen las entidades?... La causalidad es lo que se necesita para estructurar el universo."

El tratamiento de causas es necesaria como herramienta real, para dar sentido al mundo.

Tal vez de alguna forma lo sab�amos desde el principio, como sostiene Aaronson, que las escalas m�s altas arrebatan el control de las escalas inferiores.

Pero si estos cient�ficos tienen raz�n, entonces el surgimiento causal podr�a ser la forma en que esto funciona, matem�ticamente.

"Es como entreabrir la puerta abierta", dijo Hoel.

"Y en realidad, demostrar que esa puerta est� un poco abierta es muy importante. Porque cualquiera puede entregar saludar y decir, s�, probablemente, tal vez, y as� sucesivamente.

Pero ahora se puede decir,

'Aqu� hay un sistema [que tiene estos eventos causales de alto nivel];demu�streme que estoy equivocado en ello'."