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traducci�n de
Adela Kaufmann
versi�n
original
del Sitio Web
DreamScape
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La explicaci�n de las plagas de Egipto y la separaci�n del Mar del
Pasaje en el tiempo del �xodo de los Israelitas como fen�menos
naturales no es aceptado por el Dr. Immanuel Velikovsky. �l vio
estos eventos como la primera manifestaci�n de los estados tempranos
de una cat�strofe c�smica que golpe� la tierra entera, y qu� alcanz�
su cenit despu�s de 52 a�os, cuando Josu� persiguiendo a los el
Cananitas, "el sol se detuvo en medio del cielo y no baj�
aproximadamente un d�a entero�.
Un d�a, en alg�n tiempo a mitades del segundo milenio A.C., la
tierra o dej� de rotar, o se inclin� sobre su eje. Por el avance de
esta teor�a y su explicaci�n de la causa de los fen�menos, el Dr. Velikovsky lanz� un formidable ataque a los atrincherados dogmas de
astronom�a y geolog�a. �l desafi� la creencia de Newton
en la
ortodoxia general del universo, y propuso una herej�a tan detestable
para los cient�ficos modernos como fueron las opiniones de Galileo y
Cop�rnico a los eclesi�sticos medievales. Los herejes ya no son
quemados en la estaca; ellos o son ridiculizados o ignorados.
�Por qu� son las teor�as de Velikovsky tan ultrajantes?
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Si el sol se
detuviera un d�a entero, se negar�an las m�s fundamentales creencias
de astronom�a, porque se supone que la tierra siempre ha rodado del
oeste al este y siempre le ha tomado 365 d�as, 5 horas, y 49 minutos
para dar la vuelta alrededor del sol. Velikovsky afirma que los
movimientos de la tierra han sido err�ticos, que una vez dej� de
rotar, y que, previamente, le tomaba solamente 360 d�as para
completar su �rbita.
�l cree que hace unos 3,500 a�os, la tierra fue afectada por la
aparici�n, en el cielo, de un cometa gigante que eventualmente se
convirti� en el planeta Venus. La proximidad tan cercana a la tierra
de este cometa caus�, en su primera aparici�n, ciertos fen�menos y,
en su segunda y m�s cercana aparici�n, el efecto de d�a y noche
prolongados en diferentes partes del mundo. El Dr. Velikovsky, un
estudioso m�s no astr�nomo, afirma haber encontrado tradiciones
mundiales de estas extra�as cat�strofes y una descripci�n de
testigos oculares egipcios de las ocurrencias grabadas en el primer
cap�tulo de la Biblia, el �xodo.
La primera pista vino de los versos b�blicos que afirman que grandes
piedras fueron lanzadas del cielo. Tomado en combinaci�n con el
�xodo, estas afirmaciones implicaron un inusual estado de incidentes
que, si fueran verdad, probablemente fueron atestiguados por otras
personas adem�s de los Israelitas.
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Si un d�a se prolongara en una
parte del mundo, un largo per�odo de oscuridad debe de haber
prevalecido en otra parte. Dr. Velikovsky encontr� que hab�a muchas
tradiciones de oscuridad prolongada en el hemisferio occidental, y
en la mitad oriental del el mundo, de un d�a de inusual longitud,
ambos acompa�ados por historias de un cataclismo c�smico.
Estas extendidas tradiciones sugirieron que la tierra, a una fecha
sin revelar, fue golpeada por alguna espantosa cat�strofe, cuya
confusa memoria hab�a sido conservada en forma de mitos. Estos
parec�an revocar una batalla en el cielo, de la cual Venus, hasta
aqu� desconocido, surgi� como planeta. Es una cuesti�n de mitos
versus matem�ticas.
Muchas de las tradiciones antiguas de los peruanos, mayas, y
mexicanos de Am�rica fueron grabadas poco despu�s de las conquistas
espa�olas. Los anales mexicanos relatan que el sol no apareci�
durante una noche de cuatro-pliegues y que 52 a�os antes, hab�a
ocurrido otra cat�strofe. Los mayas cre�an que alg�n tiempo en el
pasado hab�a habido un per�odo en que el movimiento del sol hab�a
sido interrumpido, y las aguas se hab�an puesto rojas.
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El sagrado
libro de los mayas, el
Popul Vuh, dice:
"Hubo ruina y destrucci�n... el mar se amonton� ... fue una gran
inundaci�n... las personas fueron ahogadas en una sustancia pegajosa
que llovi� del cielo... la faz de la tierra se volvi� oscura, y la
tenebrosa lluvia dur� d�as y noches... y hubo entonces un gran
fragor de fuego sobre sus cabezas ".
La poblaci�n entera fue aniquilada. Otros mitos centroamericanos
contienen historias de un diluvio de lluvia pegajosa de bet�n, del
cielo; los hombres fueron asidos por la locura e intentaron
escaparse alberg�ndose en las cavernas, pero las cavernas se
cerraron repentinamente. El cataclismo fue precedido por una
colisi�n de estrellas y fue seguido de una inundaci�n del mar. Los
peruanos ten�an tradiciones similares. Un patr�n de leyendas sugiere
que una cat�strofe c�smica, que culmin� en un largo per�odo de
oscuridad, acompa�ada por maremotos, huracanes y con la ca�da de
rocas gigantes y lluvia sangrienta del cielo, precedieron la
aparici�n de un nuevo planeta.
Fuera del hemisferio occidental hab�a historias similares de un d�a
prolongado. Las cronolog�as chinas informaron que, en el tiempo del
Emperador Yaltou:
"El sol no se puso durante varios d�as; los bosques prendieron
fuego, una alta ola alcanzando el cielo se verti� sobre la tierra".
El Altai Tatars habl� de una cat�strofe en la cual "la sangre volvi�
rojo al mundo entero". El Voguls de Siberia dec�a que "Dios envi� un
mar de fuego a la tierra ".
Muchos antiguos mitos cosmol�gicos se refirieron a una batalla en el
cielo en la que el dios planeta mata a un monstruo del cielo,
normalmente un drag�n o una serpiente.
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Seg�n los mayas:
"El sol se neg� a mostrarse y durante cuatro d�as el mundo fue
privado de luz. Entonces apareci� una gran estrella, y se dio el
nombre de
Quetzacoatl".
Eso significa serpiente emplumada, un t�rmino que puede indicar un
cometa con una cola. En otros mitos, la batalla era entre Bel y el
Drag�n, Marduk y Tiamat, Isis y Seth, Vishnu y la Serpiente, y Zeus
y Tif�n. En el mito griego, el acto final de la batalla celestial
tiene lugar en el Lago Serbon, en las fronteras entre Palestina y
Egipto.
En el Estadista, Plat�n habla del " cambios en la subida y puesta
del sol y otros cuerpos celestes, c�mo en esos tiempos ellos se
pon�an en el cuartal d�nde ellos ahora suben" y, �en ciertos
per�odos, el Universo tiene su actual movimiento circular, y en
otros per�odos rotan en direcci�n inversa�. A Herodotus le fue
dicho, por sacerdotes en Egipto, que cuatro veces antes que Egipto
se convirtiera en un reino,
"el sol subi� contrariamente a su costumbre: dos veces �l subi�
donde se pone ahora y dos veces se pone donde ahora sube" ahora.
Los chinos recuerdan que "s�lo desde que ha ocurrido un nuevo orden
de las cosas, ha sucedido que las estrellas se mueven del este hacia
el oeste". Los Esquimales de Groenlandia creyeron que el mundo se
hab�a dado vuelta. Los aztecas de M�xico, durante un largo per�odo
de oscuridad, se preguntaron desde donde reaparecer�a el sol de y se
sorprendieron cuando subi� desde este.
El Dr. Velikovsky cree que las plagas de Egipto, el pilar de nube de
d�a y de fuego de noche, y la divisi�n de las aguas del Mar de
Pasaje (la Biblia: El �xodo) era manifestaciones tempranas del
contacto cuando la tierra fue barrida trav�s de la cola del cometa.
El polvo rojo y las piedras calientes descendieron en la tierra y
dieron lugar a huracanes y maremotos.
El �xodo y el Papiro egipcio Ipuwer parecen referirse a la misma
serie de eventos como est�n relatados en las tradiciones de otras
gentes. A pasar la tierra a trav�s de la cola del cometa (ahora
conocido como Venus), el polvo rojo volvi� rojas las aguas y las
hizo impotables. El calor engendrado por su cercana proximidad causa
que se propaguen a proporci�n febril los bichos, ranas, moscas, y
langostas, las cosechas son destruidas por un granizo de fuego, la
tierra se cubre en oscuridad, y, finalmente, un terremoto mata a
muchos de aquellos que viven en las casas.
Si la teor�a b�sica de Velikovsky es correcta o no, �l hizo varias
contribuciones al conocimiento hist�rico. Lo importante es que �l ha
mostrado la necesidad de utilizar los registros acumulados de
experiencia humana.
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