por�Sim�n Harvey-Wilson

del Sitio Web�GreyFalcon

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles

A lo largo de la historia ha habido reportes de investigaci�n paranormal, chamanismo, misticismo y� ufolog�a, de personas u objetos que se vuelven invisibles, se materializan, se desmaterializan o se teletransportan.

Debido a su similitud, la comprensi�n de la din�mica de uno de estos fen�menos nos puede ayudar a comprender a los dem�s.�En otras palabras, tal vez la "f�sica", si ese es el t�rmino apropiado, de volverse invisible puede ser similar a la de la materializaci�n y desmaterializaci�n de objetos s�lidos, que a su vez podr�a ser similar a la dl teletransporte.�


Los
escritores de ciencia ficci�n con frecuencia juegan con la idea de la invisibilidad, y los investigadores militares modernos tambi�n est�n interesados ​​en el tema.�No hace mucho tiempo, los soldados sol�an marchar a la batalla vestidos con uniformes de espl�ndidos colores que lamentablemente los hicieron excelentes blancos.


M�s recientemente han comenzado a usar camuflaje, en un intento de armonizar con su entorno.�Una investigaci�n actual por el ej�rcito trata de hacer a los soldados del futuro a�n menos visibles, haciendo que lleven una capa especial cubierta de sensores en miniatura que transmiten una imagen de lo que hay detr�s de cada soldado a una matriz de material de tamiz en la parte frontal del abrigo.�Esto ayuda a camuflarse, dando la impresi�n de que son transparentes.�

Sin embargo, hay una sutil diferencia entre ser invisible y ser transparente.�

Las fuerzas a�reas occidentales, en los �ltimos a�os, han gastado en gran medida en tecnolog�a de sigilo, una forma de invisibilidad de radar para aviones.�Principalmente por su forma, un avi�n de sigilo intenta reducir su reflectividad a la radiaci�n del microondas utilizada en el radar hasta el punto de que un enemigo se deje enga�ar pensando que no est� all�.

Los aviones de cautela tratan normalmente de hacerse menos detectables en la parte visible del espectro electromagn�tico al ser pintados de negro y operando s�lo por la noche.�La Fuerza A�rea de los Estados Unidos actualmente est� experimentando con varias t�cnicas de ocultaci�n a luz del d�a, como la aplicaci�n de un recubrimiento electromagn�tico hacia el exterior de las aeronaves, que cambia de color para que coincida con su fondo.�(Douglas y Sweetman)�

Sin embargo, estos m�todos no pueden ser completamente eficaces, a menos que el ruido de los motores del avi�n tambi�n pueda ser enmascarado, lo que podr�a lograrse mediante alg�n tipo de interferencia destructiva.�

El
Dr.�
Richard Boylan�(1997) afirma que el Departamento de Energ�a de Estados Unidos est� trabajando en la "tecnolog�a de �clandestinidad�, o invisibilidad de alta energ�a", sin embargo la prueba de esta afirmaci�n, obviamente, ser�a dif�cil de obtener.

Aunque algunos OVNIs son detectados por radar, esto s�lo sucede cuando quieren ser detectados.�


Otras veces es posible utilizar la tecnolog�a avanzada de sigilo, porque, adem�s de volar a menudo completamente en silencio,�los ovnis�han desaparecido a veces sin ser vistos salir volando.�En estos casos lo que a nosotros, y, probablemente ala Fuerza A�rea de los Estados Unidos nos gustar�a saber es si s�lo se estaban haciendo transparentes, o en realidad se desmaterializan� y / o tal vez entran a otras dimensiones.�

En su libro�Cr�nicas�OVNIs de la Uni�n Sovi�tica, el veterano uf�logo�Jacques Vallee�describe un aterrizaje ovni en un parque en la ciudad sovi�tica de Voronezh a la vista de�ni�os�jugando al f�tbol all�, as� como unos cuarenta adultos.�


Despu�s de haber aterrizado la nave, surgi� de ella un ser muy alto de tres ojos y una entidad rob�tica, y comenzaron moverse.�Cuando un ni�o cercano grit� de miedo y otras personas comenzaron a gritar, los seres y el OVNI desaparecieron en el acto.

Como Vallee escribe:

"Cinco minutos m�s tarde apareci� la esfera y el ser de tres ojos de nuevo, tal cual extra�amente hab�an desaparecido. El ser ahora ten�a a su lado un tubo de un metro de longitud. Un muchacho de diecis�is a�os de edad, estaba cerca de la escena.

El extraterrestre apunt� su "rifle" hacia el adolescente y el muchacho desapareci� instant�neamente.�El extraterrestre entr� en la esfera y la esfera se fue volando, aumentando gradualmente su velocidad.�En el mismo instante, el adolescente desaparecido reapareci� ".

Ser�a interesante saber si el chico estuvo f�sicamente all�, pero invisible, durante esta experiencia, o, si de alguna manera no estuvo all�, en ese caso, �d�nde estaba, �c�mo logr� regresar, y c�mo sinti� �l la experiencia?

Otras preguntas estar�an relacionadas a la f�sica de la invisibilidad OVNI, y el tubo del extraterrestre.�Sin embargo, podemos estar seguros de que, si bien la ciencia p�blica no puede en la actualidad explicar este fen�meno, los militares estar�an muy interesado en �l, y es probable que haya muchos padres en todo el mundo a quienes a veces les encantar�a tener uno de esos tubos extraterrestres de hacer algo invisible.�

Un art�culo fascinante en�el Anomalist�(1995) de Donna Higbee�describe su investigaci�n sobre lo que ella denomina "
invisibilidad humana espont�nea involuntaria", una condici�n por la cual las personas sanas, por lo dem�s normales, se encuentran que de repente se han vuelto invisibles a los que les rodean.�

Despu�s de hacer una investigaci�n sobre el fen�meno en varios tablones de anuncios de internet, ella dice que,

"las cartas comenzaron a llegar a montones".

(P.156)

Muchas personas afirmaron haber tenido varias de estas experiencias.

"A menudo se necesitan varios de tales hechos antes de darse cuenta de que son verdaderamente invisibles ante otras personas en ciertos momentos. Ellos intentan interactuar con los que les rodean, y simplemente no puede ser vistos ni o�dos."

Estas personas han reportado casos de invisibilidad en lugares como aeropuertos, bibliotecas, tiendas de ropa, restaurantes, fiestas, y en el hogar.

Afortunadamente, el efecto parece desaparecer de forma espont�nea, de lo contrario nunca podr�amos volver a saber de ellos.�Como la invisibilidad a veces es reportada como un componente del�fen�meno de la abducci�n OVNI, Higbee al principio pens� que las personas que se hab�an puesto en contacto con ella pudieran ser todos secuestrados, pero, al ir ampliando su base de datos, este no parec�a ser el caso.� Sin embargo, ella no afirma que ellos parecieran tener mayores habilidades ps�quicas que el promedio de las personas.�

Higbee tambi�n se�ala que el ocultismo occidental y las tradiciones orientales de yoga se refieren a la posibilidad de hacerse invisible.

Por ejemplo, en la tradici�n de la India, uno de�los yoga-sutras, el de Patanjali, afirma que despu�s de una formaci�n adecuada,

"El contacto entre el ojo (del observador) y la luz (del cuerpo) se rompe y el cuerpo se vuelve invisible."

(Taimini, 1975)

Esto no suena como�desmaterializaci�n, y no se refiere a la suspensi�n de los efectos de sonido como en los reportes de Higbee, pero parece afirmar que existe una relaci�n entre�la conciencia�y esta forma de invisibilidad.

En la tradici�n oculta, al parecer, los antiguos cre�an que las piedras preciosas de heliotropo confer�an la invisibilidad, y tambi�n daba el poder de la adivinaci�n.�(Tondriau, 1972)�

El Heliotropo, tambi�n conocido como piedra de sangre, es una variedad verde oscura de la calcedonia mineral de s�lice que se ve con n�dulos rojos de jaspe, que parecen gotas de sangre.�Por lo tanto, el heliotropo fue apreciado en la Edad Media por su idoneidad en las esculturas religiosas representando la flagelaci�n o el martirio.

Calcedonia�es una variedad criptocristalina del cuarzo que puede ocurrir en diversas otras formas, tales como �gata, crisoprasa, cornalina o el �nix.�El cuarzo, o s�lice cristalino, o natural, es el mineral m�s com�n en la corteza terrestre.�Su nombre qu�mico es di�xido de silicio, SiO�2, una combinaci�n de los elementos silicio y ox�geno, que son, respectivamente, el s�ptimo y el tercer elemento m�s com�n en nuestro sistema solar.

La Silica tiene un alto punto de fusi�n, es duro, y se utiliza en la fabricaci�n de vidrio y cer�mica.�

El por qu�, entonces, la variedad de cuarzo llamada heliotropo podr�a conferir invisibilidad es un enigma.�Hay otra versi�n de la conexi�n entre la palabra�heliotropo�y�la invisibilidad.�El heliotropo tambi�n se refiere a un�color morado claro, el cual se deriva al parecer de una de las 250 plantas del g�nero�Helitropium�(el nombre del g�nero se refer�a originalmente a la capacidad de la planta para voltear sus flores hacia el sol) de la familia Boragaceae.

La m�s conocida de ellas, el jard�n o�heliotropo peruano�(Heliotropum arborescens), tiene una fragante flor morada de cinco l�bulos.�En esta versi�n, es la planta de heliotropo la que confiere invisibilidad y poderes de adivinaci�n.�

Una tercera versi�n de esta leyenda, que dice que un ritual m�gico en el que se cubre la piedra de heliotropo con la planta de heliotropo para producir la invisibilidad, simplemente suena como alguien que trata hacer una apuesta con todo.

En una posible conexi�n con el color p�rpura del heliotropo, se observa que al parecer, las leyendas afirman que los�grimorios�o libros que contienen los secretos de la brujer�a, tienen p�ginas de,

"Violeta p�rpura y que los caracteres en la p�gina son invisibles para el profano."

(Trondriau & Villenuve, 1972)

Exactamente qu� clase de personas son consideradas como profanAS por los practicantes de la brujer�a no est� claro.

Las explicaciones de la invisibilidad de la escritura en las p�ginas de color p�rpura no se dan, pero se observa que el color violeta es el �ltimo color del espectro visible antes de que la frecuencia de radiaci�n electromagn�tica se vuelva demasiado alta para ser detectada por el ojo humano, y por lo tanto se vuelve invisible.�

Tambi�n puede ser importante que el color violeta es el color tradicionalmente reservado para la realeza.�

La conexi�n entre la invisibilidad y la conciencia parece el lugar obvio para buscar m�s explicaciones.�En su excelente libro�El Universo Hologr�fico, el divulgador cient�fico�Michael Talbot�describe un incidente en el que un hombre est� hipnotizado en un cuarto lleno de personas, incluyendo a su hija adolescente, y se le da la sugesti�n post-hipn�tica que, al despertar, su hija ser� invisible para �l.�

Cuando fue sacado fuera de su trance, no s�lo pod�a, aparentemente, no ver a la chica riendo de pie delante de �l, pero, cuando el hipnotizador estaba detr�s de ella manteniendo una vigilancia sobre su espalda, �l fue capaz de leer la inscripci�n como si estuviera mirando a trav�s de su cuerpo.�

Talbot, que en realidad hablaba con el hombre, no fue capaz de explicar el incidente, pero sugiri� que tal vez estaba obteniendo la informaci�n a trav�s de telepat�a.�

Al discutir lo que ella llama "escenarios de realidad virtual"�la Dra.�Karla Turner�describe un�caso OVNI de Encuentro Cercano, donde la experimentadora,�Amelia, afirma estaba tumbada en la cama en la noche, cuando oy� un helic�ptero sobre la casa.�Mirando hacia arriba, descubri� que pod�a ver a trav�s del cielo falso y del techo como si hubieran desaparecido, o hubieran llegado a ser completamente transparentes.

Esto le permiti� ver una embarcaci�n de aspecto extra�o encima de la casa, con dos entidades que posteriormente aparecieron a los pies de su cama.

La otra persona durmiendo en la habitaci�n no hab�a o�do el ruido de los "helic�pteros", ni visto las entidades.�Mientras Amelia, que parec�a envuelta en una bola de luz azulada, hablaba con estas entidades, dos testigos en la sala encontraron que, no s�lo no pod�an comunicarse con ella, sino que apenas pod�an escucharse entre s�, incluso cuando gritaban.�

La uf�loga�Jenny Randles�(1990) acu�� el t�rmino del 'Factor Oz� para describir una caracter�stica de algunos casos de ovnis en el que los testigos se encuentran entrando en un estado de extra�a enso�aci�n donde, entre otras cosas, todo a su alrededor se pone en silencio.

Esto puede aplicarse, por ejemplo, a los ruidos de insectos, o pueden encontrar que no pueden o�r el motor de su coche, o el ruido de los neum�ticos en la carretera.�(Harpur, 1994)�

Mientras que una explicaci�n para esto puede llegar a ser bastante simple, es interesante preguntarse qu� es lo podr�a hacer que las personas repentinamente se vuelvan invisibles, siendo incapaces tambi�n de hacerse o�r, cuando no hay ning�n dispositivo an�malo como un OVNI, a la vista.�La luz y el sonido se propagan a vastamente a diferentes velocidades.

El sonido viaja a unos mil kil�metros por hora, mientras que la velocidad de la luz es de unos mil millones de kil�metros por hora.�

Un art�culo en�la revista New Scientist�en algo llamado�"
Transparencia Inducida Electromagn�ticamente" (Buchanan, 1997), describe la investigaci�n siendo� realizada en la �ptica cu�ntica en varias universidades, donde,

"S�lidos opacos� pueden hacerse transparentes simplemente haciendo brillar una luz l�ser sobre ellos."

Trabajando originalmente con "nubes de baja densidad de gas", y luego pasando a "una pieza de hidr�geno congelado s�lido", los investigadores han encontrado que la luz a partir de dos haces de l�ser ajustados cuidadosamente se puede hacer que interfieran unos con otros de tal manera que la luz de uno de los l�seres dejar� de interactuar con los �tomos del material, y por lo tanto ser� capaz de pasar a trav�s de ese material sin obst�culos.

En otras palabras, desde la perspectiva del rayo l�ser, el material se ha vuelto ahora transparente.�Es todav�a demasiado pronto para concluir que esta investigaci�n puede llevar a una comprensi�n de la invisibilidad humana.

Como dice el art�culo:

"Cualquier esperanza, por ejemplo, que se pueda hacer desaparecer monstruosidades con algunas l�mparas de colores estrat�gicamente colocadas debe ser abandonada. Haciendo un material transparente a todas las muchas frecuencias visibles a la que pueda absorber la luz es probablemente imposible."

Algunos reportes sobre la invisibilidad sugieren que algunas personas pueden hacerse invisibles selectivamente a otras.

Esto suena un poco como el caso de la hipnosis de Michael Talbot sin el hipnotizador:

como si una persona con esta habilidad puede afectar a alg�n otro sistema perceptivo usando algo como control mental telep�tico.

Un ejemplo de ello es el caso del monje espa�ol San�Vicente Ferrer�(1350-1419) que fue muy apreciado en la corte de Arag�n por su sabidur�a y supuestas habilidades milagrosas��

La historia dice que la reina Yolanda pidi� una vez ver su vivienda, y cuando el monje le neg� el permiso, forz� la puerta y entr� con su s�quito.�All� descubri� que, mientras que todos los dem�s en la sala pod�an ver con toda claridad, la Reina no pod�a ver a Ferrer en absoluto.�


Cuando se le pregunt� acerca de esta invisibilidad, el monje explic� que esto era�un castigo de Dios�por la intrusi�n de la Reina, y su ceguera parcial se recuperar�a� cuando ella se fuera, lo que al parecer hizo.�

Hay otros reportes similares de�invisibilidad selectiva�en la Edad Media, los cuales parecen relacionarse con hombres santos, que pueden haber adquirido esta capacidad como resultado de la oraci�n o la contemplaci�n prolongada.�

Sin embargo, no se sugiere que en estos casos el interesado realmente se hab�a desmaterializado.�

La
materializaci�n y desmaterializaci�n son� dos caras de la misma moneda, y a veces ser�a indistinguible de la invisibilidad.�Pero, si alguien simplemente desaparece de la vista de un testigo, m�s tarde vuelve a aparecer, y no pod�a ser tocado mientras estaba invisible, podemos suponer que algo m�s que una inhibici�n en el sistema perceptivo del testigo ha ocurrido.

En los anales de lo paranormal es probable que haya m�s casos de cosas materializ�ndose que desmaterializ�ndose.�En sesiones de espiritismo, por ejemplo, los objetos con frecuencia han llegado a aparecer aparentemente de la nada.

Llamados�
aportes, generalmente se supone que un esp�ritu sin cuerpo o bien los ha creado de la "nada", o los ha teletransportado desde otro lugar.

Hay muchos de estos casos para documentar aqu�, pero un ejemplo podr�a ser una fragante rosa, todav�a cubierta de roc�o, que repentinamente cae del aire a una mesa de�sesi�n de espiritismo.�Si tal aporte hubiese sido de alguna manera cortado de un rosal por un esp�ritu, uno se pregunta lo que el due�o de ese arbusto podr�a haber visto si estuviera mirando por la ventana en ese momento.�

�La rosa repentinamente se volver�a invisible, dejando atr�s una ramita quebrada, mientras el esp�ritu 'vuela' invisiblemente de vuelta a la sesi�n para depositar rosa, ahora visible, en la mesa?�Si es posible algo as�, entonces ciertamente tenemos mucho m�s que aprender acerca de la naturaleza de la realidad, por no hablar de la invisibilidad.�

Los objetos no s�lo se materializan en sesiones de espiritismo, y cuando lo hacen, puede ser dif�cil saber si fueron teletransportados desde en otro lugar o no.�

El sanador Ingl�s�Mathew Manning, quien experiment� una gran actividad poltergeist durante sus a�os adolescentes, da varios ejemplos en su libro The Link:

"Yo estaba recogiendo material para una fogata en el fondo de nuestro jard�n. Encontr�ndome corto de basura, a excepci�n de media docena de cajas de cart�n, fui a la casa y le pregunt� a mi madre lo que podr�a usar.

No hab�a nadie m�s en casa y no ten�a ni idea o sugerencia. Volv� al fondo del jard�n, y para mi asombro me encontr� con una pila de grandes troncos y madera colocados junto a las cajas de cart�n.

En ese momento no hab�a nadie que pudiera haber hecho esto, y mucho menos en el corto lapso de tiempo que hab�a estado en la casa.�

En total, hab�a varios quintales de madera y troncos...�Otros de estos aportes incluyen varios discos de gram�fono, una bolsa de az�car, un billete de banco, un par de guantes de encaje negro y sellos postales".

En otro incidente, "una botella de medio litro de cerveza y una tarta de manzana", aparecieron en su bolsa, mientras �l estaba en un tren.

Manning tambi�n describe aportes que parecen haber llegado de otro lugar.

"Un disco de larga duraci�n del cual yo ten�a una copia apareci� un d�a en la casa; parec�a haber venido de otro propietario, ya que mostraba se�ales evidentes de desgaste. No parec�a haber ninguna raz�n por la cual esto se materializara, ya que yo ya ten�a una copia del mismo".

(P.98)

Manning parece sorprenderse cuando� objetos no invitados se materializan en torno a �l, a pesar de la relaci�n ocasional entre lo que est� haciendo o pensando y lo que aparece m�s adelante.�

Por otro lado, el l�der espiritual indio�Sathya Sai Baba�es bien conocido por materializar deliberadamente objetos s�lidos que luego da a los visitantes y devotos.�(Haraldsson, 1987)�

Estos son normalmente peque�as baratijas y, cuando se le pregunt� acerca de esto, Sai Baba insiste en que �l no las teletransporta de alguna joyer�a en otra parte.�(Karanjia, 1994, p.29)

Esto nos deja con la desconcertante pregunta de c�mo alguien puede producir la materia de 'la nada'.�

En la literatura sobre el chamanismo hay casos en que se materializan objetos, o incluso insectos vivos.

En su libro�Dones de Cosas Desconocidas,�Lyall Watson�describe un incidente en el Amazonas, donde fue testigo de un curandero local primero quitando un diente infectado de un paciente y, luego anunciando que ten�a que quitar el dolor de las enc�as infectadas.�Para ello, de alguna manera materializ� m�s de cien hormigas negras que marchaban en una columna ordenada a la boca del paciente, por su brazo y luego lejos en la hierba en el borde del claro.�

Esto caus� gran regocijo entre los nativos viendo porque, como Watson descubri� m�s tarde, la palabra local para� dolor era la misma que para ej�rcito de hormigas.

Como lo expres� Watson:

"El curandero hab�a prometido que el dolor se ir�a, y as� lo hizo en la forma de un elaborado y extraordinario juego de palabras. Se fue."��

(P.142)

Los militares tambi�n est�n interesado en aprender c�mo hacer que las cosas se materialicen.�

A principios de 1997, el cient�fico Dr.�Gary Madera, en el Laboratorio de Investigaci�n del Ej�rcito de Estados Unidos en Maryland, dijo que la investigaci�n de su equipo en la �ptica no-lineal podr�a en el futuro hacer que el ej�rcito proyecte im�genes hologr�ficas tridimensionales de tanques, aviones y soldados en un campo de batalla para confundir al enemigo.

Adem�s de reducir las bajas de soldados de verdad, esta tecnolog�a podr�a ser de gran utilidad en la formaci�n de los comandantes del campo de batalla.�(The West Australian, 13/5/1997)

Reportes de Encuentros cercanos con OVNIs describen con frecuencia a los alien�genas como fantasmas o transparentes, que se puede ver aparentemente� a trav�s de ellos.�Tal vez esto se deba a que algunas de esas apariciones son proyecciones hologr�ficas, junto con alguna forma de sofisticada inteligencia artificial.

La teletransportaci�n�se refiere al movimiento invisible de un objeto o persona, de un lugar a otro por un medio, hasta ahora, desconocidos.�La teleportaci�n ocurre con frecuencia durante los brotes de actividad poltergeist.

Colin Wilson�(1981, P�g.156) da un ejemplo en el que un huevo, al parecer, desde el refrigerador de la cocina, flot� por la puerta de sala de estar de una casa afectada por poltergeist, y se dej� caer en el suelo.�

Uno de los ocupantes de la casa, entonces, puso todos los huevos del refrigerador en una caja y se sent� en la tapa.�Como si hubiesen sido provocados por este desaf�o, los huevos continuaron estrell�ndose por todo el piso hasta que la caja estuvo vac�a, a pesar de permanecer cerrado durante todo el evento.

Ha sido tradicional� considerar la actividad poltergeist como� travesuras de esp�ritus invisibles de otras dimensiones.�M�s recientemente se ha sugerido que el fen�meno puede estar relacionado con conflictos no resueltos en la mente de un adolescente que vive en una casa as�:

una forma de telequinesis inconsciente de trabajo a trav�s del hiperespacio.

Esta teor�a hace varios supuestos radicales acerca de la naturaleza de la conciencia: por ejemplo, que puede afectar la materia a distancia.�Eventos Poltergeist como tambi�n ocurren despu�s de casos de secuestros de ovnis.�(Cahill, 1996)�

Lo que esto sugiere es a�n m�s especulativo.�S�lo llamarlos poltergeist de duendes extraterrestres de la era espacial no ayuda.

Una sugerencia m�s detallada es que algunos OVNIs pueden ser capaces de teletransportarse a trav�s del hiperespacio, que es a su vez est� conectado de alguna manera a la conciencia, de modo siendo halado a este 'reino' afecta las mentes de los abducidos lo suficiente como para provocar la actividad poltergeist alrededor de ellos despu�s.

Idries Shah, experto en�el sufismo, que es la rama m�stica del Islam, afirma que el Qutub, el jefe del sistema Sufi, siempre hay alguien que haya alcanzado el grado de Wasl (uni�n con el infinito).

Tales hombres,

"Son capaces de transportarse a s� mismos a cualquier lugar instant�neamente, en forma f�sica, por un proceso de descorporearizaci�n."

(Shah, 1973)

Esto suena como teleportaci�n, y refuerza la afirmaci�n de que tales habilidades est�n vinculadas con estados alterados de conciencia.

El parapsic�logo, Dr.�Scott, Rogo,�(1991) se�ala que la teleportaci�n se traslapa con el fen�meno de la�bilocaci�n, en el que una persona es vista en dos lugares a la vez.�El monje italiano Padre P�o aparentemente se apareci� f�sicamente en dos lugares al mismo tiempo en varias ocasiones.�

Rogo tambi�n cita el caso de 1951 del chico adolescente Cornelio Closa en Mil�n, Italia, quien afirm� que su repetida teletransportaci�n fue el resultado de haber sido afectado por la aparici�n de una chica adolescente vestida todo de blanco.

�l reaparecer�a m�s tarde, a veces a millas de casa, incluso despu�s de haber sido encerrado en su habitaci�n con sus padres.�Las desapariciones se detuvieron despu�s de que fue exorcizado por un misionero estadounidense.

John Michell�da un ejemplo de evidente teletransporte en su libro�La Visi�n del platillo volador.�

El 25� de octubre 1593, un soldado espa�ol fue detenido en la plaza principal de la Ciudad de M�xico, porque era incapaz de explicar su presencia all�, y porque llevaba el uniforme de un regimiento que estaba en ese momento estacionado en las Islas Filipinas, casi un a�o� de distancia de en barco.�El confuso soldado, sin embargo, dio detalles precisos de su vida en Manila hasta el momento en que se hab�a encontrado a s� mismo instant�nea e inexplicablemente transportado a M�xico.

Incluso fue capaz de decirle a sus interrogadores de la reciente muerte del gobernador espa�ol de Filipinas. Noticias que no llegaron a la ciudad de M�xico durante muchos meses�

Es interesante preguntarse qu� pudo haber causado este evento.��Pose�a el soldado desconocidas habilidades ps�quicas, era �l excepcionalmente devoto, o estuvo tal vez en el lugar equivocado en el momento equivocado, cuando algunos esp�ritus delincuentes o extraterrestres decidieron tener un poco de diversi�n a su costa?�

El parapsic�logo profesor�Erlendur Haraldsson�(1987) cita varios testigos que, junto con otros devotos, a finales de los a�os cuarenta, sol�a ir para paseos por la tarde con el l�der religioso indio Sathya Sai Baba� hacia el r�o en su pueblo natal de Puttaparthi, en el sur de India.�

En varias ocasiones Sai Baba desaparecer�a de entre los devotos y volver�a a aparecer en la parte superior de una colina cercana.�A veces, �l entonces gritaba que estaba bajando y que inmediatamente volver�a a aparecer entre los devotos.�M�s tarde, en 1995, hubo reportes anecd�ticos de que a la vista de un grupo de devotos de Australia, a quienes se les hab�a concedido una entrevista con �l en su ashram en Whitefield, en las afueras de Bangalore, Sai Baba teletransport� a un anciano de vuelta a su casa en Australia para estar con su esposa enferma.

Sus amigos vieron al hombre desaparecer de la sala de entrevistas, y cuando, poco despu�s de la entrevista, fueron y llamaron a su casa en Australia, se dice que fue �l quien contest� el tel�fono.�Si es verdad, este reporte sugiere que una persona con fuertes�
poderes paranormales�puede teletransportar a otra persona.�


Una breve art�culo en New Dawn (julio-agosto 1997) afirma que la traducci�n de un art�culo de la Agencia de Inteligencia de Defensa Estados Unidos en una revista china 1983 describe las exitosas experiencias en la teletransportaci�n de objetos peque�os como moscas de la fruta, un reloj, un cerillo y un clavo con "ni�os extraordinarios" como sujetos de prueba.

Los investigadores llegaron a la conclusi�n de que:

����������� "La transferencia no es un simple proceso de movimiento mec�nico en el espacio tridimensional." (P.12

Si estos reportes son ciertos, podemos sospechar que el art�culo original en chino impuls� a los militares de Estados Unidos a patrocinar investigaciones similares.

El Dr. Richard Boylan (1997) afirma que los investigadores del Lawrence Livermore y el Laboratorios Nacional de Sandia en los Estados Unidos han llevado a cabo "exitosos experimentos de teletransporte."

No es sorprendente que los detalles no parecen haber sido publicados en ninguna revista cient�fica, por lo que es dif�cil saber qu� hacer con tales afirmaciones.�

�C�mo es posible que algo se desmaterialice y / o se teletransporte de un lugar a otro?�

Una explicaci�n com�n es que estos objetos entran en otras dimensiones invisibles a la percepci�n humana normal.�Desafortunadamente, �sta no es una explicaci�n muy satisfactoria, ya que simplemente sustituye a un misterio con otro.�Sin embargo, la posible existencia de dimensiones superiores, tambi�n conocido como hiperespacio, es frecuentemente mencionado por los f�sicos en estos d�as.

La ventaja del hiperespacio es que, al estar m�s all� de las tres dimensiones f�sicas del espacio-tiempo, puede facilitar los accesos directos de una parte del espacio-tiempo a otra.�


Los
top�logos, que estudian otras dimensiones desde una perspectiva matem�tica, se�alan que tres barreras f�sicas dimensionales , tales como los lados de una caja, dejan de ser obst�culos en espacio dimensional superior.�En 1985, el f�sico estadounidense�Kip Thorne�sugiri� que los atajos interdimensionales llamados "agujeros de gusano" alg�n d�a podr�an facilitar los viajes espaciales.

El astr�nomo�Carl Sagan�utiliz� esta idea en su libro�Contact�(que ya ha sido llevado al cine), sobre el contacto humano con los extraterrestres.�Sin embargo, los f�sicos dicen que para crear un agujero de gusano se requerir�an vastas cantidades de energ�a.�Incluso se sugiere que�los agujeros negros�son versiones de estas rasgaduras en el tejido del espacio-tiempo.�(Couper y Henbest, 1996)�


A una escala mucho m�s peque�a, pero no menos dram�tica, tal vez la conciencia misma de alguna manera es capaz de crear el equivalente de un agujero de gusano para facilitar la teletransportaci�n.�Si es as�, entonces tal vez una civilizaci�n extraterrestre avanzada ha investigado este aspecto de la "f�sica" de la conciencia lo suficiente como para utilizar los resultados en el fen�meno y el secuestro OVNI.�


En su libro�Hiperespacio�Michio Kaku�explica c�mo�la teor�a de supercuerdas�postula que muchas otras dimensiones existen debajo de la escala sub-at�mica, y que el electromagnetismo y las otras tres fuerzas fundamentales del universo se unen en este reino.

Tal vez la materia producida por la energ�a del Big Bang, y la producida por cualquier persona que materializa objetos, se origina en el hiperespacio� al que la conciencia tambi�n tiene acceso.�De hecho, en el hiperespacio, la materia, la energ�a, el tejido del espacio-tiempo, y la conciencia de s� mismo, pueden derivar de la misma fuente.�


Otra explicaci�n para la teletransportaci�n es que el objeto en cuesti�n se desmaterializa, de alguna manera viaja a su destino, y luego se solidifica de nuevo.�En su libro�La f�sica de Star Trek, el f�sico estadounidense�Lawrence Krauss�analiza la validez cient�fica de las ideas de la ciencia ficci�n en la popular serie televisiva.

Krauss se�ala que, desde la perspectiva de un f�sico, para teletransportar a un cuerpo humano, como en "L�nzame el rayo, Scottie", requiere de varios pasos.

�Primero vamos a tratar con las objeciones de Krauss a la teletransportaci�n.�

  • En primer lugar usted tiene que grabar la configuraci�n exacta de todos los �tomos en el cuerpo, y almacenar toda la informaci�n que requerir�a una pila astron�micamente alta de 10 gigabytes-unidades de disco duro.

  • En segundo lugar, usted tendr�a que desmaterializar de alguna manera a la persona, que seg�n �l requiere grandes cantidades de energ�a.

  • En tercer lugar, usted transmite a la nueva ubicaci�n o bien las part�culas sub-at�micas del cuerpo, llamados quarks, o tal vez s�lo la informaci�n at�mica sobre ellos.

  • Finalmente, ya sea con los quarks originales o algunos nuevos, usted utiliza la informaci�n acerca del cuerpo de la persona a materializarse en el otro extremo.

Krauss es lo suficientemente sabio como para a�adir la advertencia de que si los seres humanos tienen alma, como mucha gente cree, todo su plan se cae a pedazos.�

Sin embargo, teniendo en cuenta estos y varios otros obst�culos, Krauss es de la opini�n de que la ciencia no va a estar teletransportando a nadie a ning�n lugar durante alg�n tiempo por venir.

Vamos a tratar con las objeciones de
Krauss a la teletransportaci�n primero. Krauss dice que el volumen de los datos at�micos acerca del cuerpo humano es dif�cil de manejar.�

Sin embargo, las matem�ticas de la Geometr�a Fractal, aparte de producir hermosos dise�os psicod�licos, permite que sean eliminados los datos redundantes, por ejemplo, una imagen de sat�lite esp�a de alta resoluci�n, para facilitar su transmisi�n a la Tierra, donde, utilizando las mismas matem�ticas a la inversa, la imagen puede ser descomprimida.

El producto final es de alta calidad, y tales t�cnicas est�n aumentando r�pidamente en sofisticaci�n.�

La Geometr�a Fractal tambi�n puede producir patrones que son similares a muchos de los que se encuentran en la naturaleza. Debido a que el cuerpo humano est� compuesto de billones de part�culas subat�micas casi id�nticas, la compresi�n de datos podr�a ayudar en la transmisi�n de dicha informaci�n.�

As� que la informaci�n que pesa m�s que la objeci�n de Krauss es probablemente irrelevante.�Krauss afirma que para evaporar el cuerpo en energ�a pura, en preparaci�n para la teletransportaci�n tomar�a el equivalente de mil 100 megatones de bombas.

Sin embargo, los reportes paranormales de teletransporte no mencionan tales energ�as.

Podr�amos sugerir, por lo tanto, que la f�sica moderna est� investigando la naturaleza de la materia de la manera dif�cil - desde el exterior.�Pruebas paranormales sugieren que la sutileza de la conciencia puede afectar la materia desde el "interior" en forma de energ�a muy eficiente.�

Un ejemplo sencillo de esto es la forma paranormal de doblar la cuchara, donde la mente parece capaz de afectar la estructura molecular de los metales desde dentro.�En la actualidad no sabemos c�mo funciona esto, pero nunca lo sabremos a menos que hagamos la investigaci�n pertinente.�Un lugar para buscar es la relaci�n entre la materia, la energ�a, la conciencia y el dominio en el que operan, llamado espacio-tiempo, que es cada vez m�s visto por los f�sicos y otros, no como el�vac�o�en el que suceden las cosas, sino m�s bien como una �sustancia� que se puede ampliar, contraer, doblar o reverberar.�

Esto sugiere que el espacio-tiempo pudiera tener un "afuera" o "m�s all�" (Matthews, 1997), lo que podr�a ser s�lo una descripci�n alternativa del hiperespacio.

Los intentos de lidiar con una definici�n de este "m�s all�" se han referido a estados alterados de conciencia, otras longitudes de onda, vibraciones, o, m�s esot�ricamente, una especie de conciencia trascendental o mente universal.�Yo prefiero usar una analog�a de la inform�tica y referirme a este desconocido "m�s all�"�como un "reino" que parece tener sorprendentes capacidades de procesamiento de informaci�n, sofisticadas y multidimensionales, o�
no- locales,� y que� pueden utilizar el espacio-tiempo de cuatro dimensiones como �pantalla� sobre, o en, la que para visualizan los resultados de dicho procesamiento de informaci�n.

La sugerencia de Krauss, que en la teletransportaci�n es posible que s�lo se necesite transmitir informaci�n at�mica en vez de part�culas at�micas, hace eco de esta idea, que la teor�a de la informaci�n puede proporcionar el mejor modelo de la naturaleza fundamental de la realidad.�En otras palabras, las unidades b�sicas de la materia, si existen tales cosas, pueden ser unidades de informaci�n en lugar de algo s�lido.

Como ejemplo de ver m�s all� del espacio-tiempo, los f�sicos dicen que nadie necesitaba mostrar la energ�a producida durante el Big Bang, de c�mo se uni� a la materia.�Las part�culas subat�micas y �tomos parec�an saber c�mo ensamblarse a ellos mismos, como si las reglas de la f�sica ya estaban all�.

Si esto es as�, �c�mo fue almacenada esta informaci�n, y de d�nde vino realmente la energ�a del Big Bang?�

Algunos investigadores hablan de la energ�a del vac�o o�
energ�a de punto cero, lo que sugiere que "detr�s" del tejido del espacio-tiempo pudiera existir una cantidad casi infinita de energ�a.

Por ejemplo:

"Seg�n la teor�a cu�ntica, el espacio vac�o no es tan vac�o como parece: si pudi�ramos examinar un vac�o en la "escala de Plank"- una resoluci�n de 10-35 metros - ver�amos una masa hirviente de part�culas virtuales, icluyendo fotones, revoloteando dentro y fuera de la existencia. "

(Watson, 1996)

Si el universo entero surgi� de la nada, parece m�s bien grosero por parte de los f�sicos de afirmar que es imposible que una persona con extraordinaria capacidad paranormal, como Sai Baba, produzca un objeto conteniendo menos de un kilogramo de materia de esa misma� �ninguna parte�.

Lo que nos gustar�a saber es c�mo lo hace.�Tal vez la conciencia de alguna manera puede abordar la energ�a de la escala de Plank, y persuadirla a crear part�culas at�micas permanentes en lugar de simplemente virtuales.

Pero, �c�mo estas part�culas saben qu� objeto hacer?

Para responder a esto tenemos que hacer referencia a la anterior exenci�n de responsabilidad anterior de Krauss que, si los seres humanos tienen alma, sus teor�as de teletransportaci�n est�n probablemente equivocadas.�Sin embargo, la existencia de las almas puede hacer m�s f�cil de explicar el teletransporte, y no m�s dif�cil.�

Hay evidencia de hechos como las ExperienciasCercanas a la Muerte que al menos algunos seres humanos tienen formas invisibles de conciencia que tal vez� podr�an llamarse almas.�

Desde hace tiempo tambi�n ha sido afirmado que todos los seres vivos tienen algo parecido a una versi�n sutil de su c�digo gen�tico que existe m�s all� del cuerpo.� Plat�n�se refiri� al�reino de las formas�y en los tiempos modernos�
Rupert Sheldrake�habla de�campos m�rficos.

�l sugiere que a medida que crecen las cosas, obtienen informaci�n sobre el desarrollo tanto de sus c�digos gen�ticos como de su�resonancia m�rfica.�Estas dos fuentes de informaci�n pueden incluso solaparse, con una siendo capaz de sustituir a la otra.�

A largo de estas l�neas, un breve art�culo, mal referenciado en Nexus (Kanzhen, 1995) afirma que un cient�fico chino que trabaja en Rusia ha perfecionado un proceso de campo bio-electromagn�tico mediante el cual �l puede cambiar la estructura gen�tica de algunas plantas y animales.

Si es cierto, tal descubrimiento ser�a de enorme importancia.�Esto podr�a significar que la informaci�n necesaria para reensamblar el cuerpo humano despu�s del teletransporte es obtenible a partir de un reino de informaci�n como la resonancia m�rfica.�

Sheldrake ha sugerido que los campos m�rficos pueden trascender el tiempo y el espacio, lo que podr�a significar que, siempre que el �rgano sea desmontado correctamente, la informaci�n para volver a montarlo no tendr�a que ser transmitida desde ning�n lugar, sino que en su lugar podr�a ser almacenada, no localmente y por lo tanto, ser accesible desde cualquier lugar.�Despu�s de varios experimentos sin precedentes, la f�sica moderna ha aceptado que la no-localidad no existe en el nivel sub-at�mico.

De lo contrario conocido como el�paradigma hologr�fico, esta investigaci�n muestra que dentro de la esfera cu�ntica, algo que ocurre en la regi�n A puede tener un efecto f�sico instant�neo en la regi�n B, independientemente de la distancia o las condiciones entre A y B. (Talbot, 1991)�

Investigaci�n adicional en este campo, sin embargo, puede dar lugar a importantes avances en nuestra comprensi�n tanto de lo paranormal como de la naturaleza de la conciencia.�

Por ejemplo, hace unos a�os, el profesor�Roger Penrose�(1989) en la Universidad de Oxford present� la controversial propuesta que�
la conciencia�puede tener algo que ver con el�dominio cu�ntico.

Es evidente que se necesita m�s investigaci�n, pero si �l y otros te�ricos en la materia est�n en lo correcto, entonces tal vez la conciencia tiene la capacidad de ir m�s all� de las limitaciones dimensionales del espacio-tiempo, a un asombrosamente creativo reino�
no local� de informaci�n que tiene algo as� como las "plantillas" para la estructura de la materia.

Una vez que se accede, la fuerza de voluntad por s� sola puede ser capaz de �dar cuerpo a� o �consolidar� dicha informaci�n para producir, dentro del espacio-tiempo, algo que los habitantes de ese reino normalmente consideran como �s�lido�.

Estas propuestas implican que los cient�ficos van a tener que echar un vistazo m�s a la evidencia de anomal�as paranormales como la teleportaci�n, la materializaci�n, la invisibilidad y el fen�meno OVNI si alguna vez quieren descubrir la naturaleza fundamental de la realidad que pretenden buscar.


Referencias

Boylan, Richard J. (mayo-junio de 1997).�"�El gobierno en la sombra: la identificaci�n y el an�lisis�.�Nuevo Amanecer, n � 42, p.21.�
Buchanan, Mark.�(15/2/97).�"Ahora lo ves, ahora no lo ves ...
'New Scientist, n � 2069, p.19.�
Cahill, Kelly.�(1996).�Encuentro.�
Couper, H. & Henbest, N. (1996).�Agujeros negros.�
Douglass, S. y Sweetman, B. (mayo de 1997).�"Ocultando a plena vista.�Popular Science, pp.54-59.�
Haraldson, E. (1987).�Los milagros son mis tarjetas de visita.�
Harpur, Patrick.�(1994).�Realidad Demon�aca.�
Higbee, Donna.�(Winter, 1995/96).�El Anomalist.�
Kanzhen, Chiang.�(Diciembre de 1995-enero de 1996).�"Los experimentos con auras."�Nexus, Vol 3, No 1.�
Kaku, Michio.�(1994).�
Hiperespacio�.�Karanjia, RK (1994).�Dios vive en la India.�Krauss, Lawrence.�(1996).�La f�sica de Star Trek.�Manning, Mathew.�(1974).�El Link.�Matthews, Robert.�(17/5/97) "M�s all� del espacio y el tiempo. '�New Scientist, 2082, pp.38-42.�Michell, John.�(1974).�Visi�n platillo volador.�'psicocin�ticos en China, Nuevo Amanecer, julio-agosto de 1997, n � 43, p.12.�Penrose, Roger.�(1989) La nueva mente del emperador.�Randles, Jenny.�(1990) Abducciones Alien�genas.�Sagan, Carl.�(1986).��Contacto��de Scott D.Rogo, (1991).�Milagros.�Shah, Idries.�(1973).�Magia Oriental.�Taimini, IK (1975).�La ciencia del Yoga.�Talbot, Michael.�(1991).�El universo hologr�fico�.�Tondriau, Julien.�(1972).�Ocultismo.�Trondriau, J. & Villenuve, R. (1972).�Un diccionario de diablos y demonios.�Turner, Karla.�(1994).�Ampliaci�n de los par�metros de la agenda abducci�n extraterrestre-humana.�MUFON Actas del Simposio.�'Ej�rcito estadounidense - Planes guerra falsa ".�The West Australian.�13 de mayo 1997.�Vallee, J. (1992).�OVNI Cr�nicas de la Uni�n Sovi�tica.�Watson, Andrew.�(05/04/96).�"Destellos de luz desde el mundo cu�ntico."�New Scientist, n � 2028, p.13.�Watson, Lyall.�(1976).Regalos de cosas desconocidas.�Wilson, Colin.�(1981).�Poltergeist.�