por�Shelley M. White

12 Mayo 2015�
del Sitio Web�
Collective-Evolution

traducci�n de Adela Kaufmann
Versi�n original en ingles


"... Es casi como si el mundo vegetal asignara ciertas plantas para ser las diplom�ticas y maestras para nuestra joven y confusa especie, para ayudar a ponernos en un camino diferente al que hemos elegido, corriendo hacia la destrucci�n ecol�gica y la auto-extinci�n.

�C�mo explicar los consistentes mensajes recibidos en las visiones de las setas, la ayahuasca, la iboga, y el peyote de un mundo fuera de balance, de la necesidad de asumir la responsabilidad, de la gran sensibilidad emp�tica de la Mente de Gaia?...

De la misma manera que cultivamos plantas de jard�n, las plantas maestras como el ayahuasca nos parecen cultivarnos a nosotros cuando las digerimos"[1]

Que nuestros antepasados nativos eran m�sconectados a la tierrade lo que somos nosotros no es tema de debate.

Tambi�n para poco debate es el que la destrucci�n de nuestro medio ambiente est� aumentando a un ritmo alarmante, amenazando la extinci�n prematura de nuestra especie, debido a la forma de vida moderna en la que los seres humanos viven m�s de la naturaleza que con ella.

Cuando empezamos a creer que pod�amos controlar la vida, de muchas maneras perdimos el contacto con el salvajismo innato dentro de nosotros mismos y con el mundo que nos rodea.En pocas palabras, nos volvimos menos humanos.

Cuando la tierra a�n exist�a como un lugar delicioso, rico en una gran diversidad de plantas y tierra salvaje, la gente estaba m�s consciente de la interconexi�n de todas las formas de vida - y lo m�s importante, tal vez, que "las cosas "como las plantas son organismos vivos e inteligentes.

Como resultado, la tierra floreci�.Muchos atribuyen estos mayores niveles de conciencia en los que el mundo parec�a m�s vivo y en donde la gente cre�a que no hab�a separaci�n entre ellos y la naturaleza al salto de conciencia provocado por las plantas psicod�licas, siempre aclamadas como "plantas visionarias."


De hecho, el uso sagrado de los hongos psicod�licos, en el que fueron adorados como veh�culos con mensajes divinos, imperativos para el bienestar del hombre, pueden rastrearse ya en el Neol�tico tard�o.

La prueba se puede encontrar en lameseta de Tassilien el sur de Argelia.

La meseta de Tassili se ve casi como un laberinto de alg�n tipo, hecha de escarpas de piedra cincelada por el viento en numerosos pasillos perpendiculares estrechos, adornados con pinturas rupestres de chamanes bailando, con setas psicod�licas en sus manos y brotando de sus cuerpos.

La imagen de las setas brotando de sus cuerpos a menudo es interpretado como una representaci�n de su capacidad para mejorar y emanar el esp�ritu cuando se ingiere.

Una de las teor�as m�s conocidas en relaci�n con el papel hist�rico de los psicod�licos en la evoluci�n es lateor�a del Mono Alucinado�de Terrence McKenna.

Terence Mckenna - La teor�a del mono alucinado

McKenna cre�a que el linaje evolutivo del homo sapiens podr�a remontarse a las setas psicod�licas en las praderas de �frica, alegando que actuaba como una,

"Tremenda fuerza para dirigir la evoluci�n de los seres humanos lejos de la de los monos antropoides y hacia la adaptaci�n �nica que vemos como los seres humanos especiales hoy."�[3]

Relaci�n bioqu�mica entre plantas psicod�licas y el cerebro humano

"�Por qu� hay superposici�n bioqu�mica entre ciertas plantas y los cerebros humanos? Una de las propuestas es que hay un nicho en evoluci�n, que se hizo necesario por un ecosistema cuya supervivencia est� amenazada".

Kim A. Dawson [2]

Adem�s alimentando la idea de que las plantas psicod�licas juegan un papel ecol�gico y evolutivo, es importante el hecho de que las plantas psicod�licas contienen sustancias qu�micas psicoactivas que son sorprendentemente similares a las encontradas en el cerebro humano, lo que les permite actuar como sin�rgicos claves que disuelven las ilusiones de separaci�n del mundo natural y otras formas de vida, restaurando as� la unidad bioqu�mica.

Losqu�micos que causan alucinacionesen las plantas psicod�licas responsables de cambiar la conciencia de una persona al revelar su inextricable interrelaci�n con la naturaleza son notablemente similares a los encontrados en el cerebro humano, tales como�las�neuro-hormonas indolamina, que al igual que la serotonina y la melatonina regulan los estados de conciencia.

Los qu�micos psicoactivos, que fueron creados hace millones de a�os antes de la existencia de la humanidad, fueron generados por la mol�cula de la serotonina, por lo que no es ninguna sorpresa que son activadoresserotonin�rgicos que influyen en los receptores de serotonina en las redes neurales de todas las formas de vida.

Sin embargo, �stos no activan todos los receptores serotonin�rgicos.M�s bien, activan los receptores selectivos en el cerebro, para producir efectos espec�ficos en las redes neuronales.

Aunque los psicod�licos, tambi�n conocidos como "serotonin�rgicos neurognostics" tienen un impacto en variosreceptores 5-HT, tienen el mayor impacto en los receptores 5-HT 2A, que se encuentran en todo el cuerpo humano.

Las �reas con altas concentraciones de los receptores 5-HT 2A, es decir, el sistema gastrointestinal, el sistema inmunol�gico, el sistema cardiovascular y el cerebro, son los m�s afectados debido a su intr�nseca y superpuesta bioqu�mica con la naturaleza de activaci�n serotonin�rgica de las plantas psicod�licas.

Enel cerebro,

  • La corteza cerebral

  • El t�lamo

  • El hipocampo

  • La am�gdala

  • El bulbo olfatorio,

... son fuertemente afectados, llevando a alteraciones en el procesamiento del hipocampo de los datos y el aprendizaje sensorial, expresi�n de genes alterados, y aumenta el procesamiento visual.

Esencialmente, la entrada sensorial (discutida en el art�culo anterior sobrelas puertas de la percepci�n) es alterada, permitiendo la entrada m�s sensorial alcanzar la conciencia.

Aunque una gran parte de la sociedad de hoy en d�a tiene una opini�n negativa sobre el uso deplantas psicod�licas, la significativa superposici�n bioqu�mica de las plantas psicod�licas y el cerebro humano hace que sea muy dif�cil continuar adhiri�ndonos a la creencia de que sonperjudicialesy deben ser evitadas, y mucho menos que no tienen ninguna relevancia para nuestra existencia y bienestar.

Es dif�cil imaginar que su bioqu�mica notablemente similar careczca de importancia a escala ecol�gica.

Est� claro que no somos tan "independientes" del mundo natural y de las plantas, tal como las psicod�licas, como pudi�ramos haber sido guiados a creer...

RECURSOS

1.http://realitysandwhich.com/u/danielpinchbeck

2.Dawson, K.A.The Ecological Niche of Psychedelics.Mapas Bolet�n.6 (1)

3.http://lyaceum.org/~sputnik/McKenna/Evolution/

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Sabemos que eres curioso - �Estamos REALMENTE creando una pel�cula sobre setas?

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