�
� � � �
del Sitio Web�ZenGardner
traducci�n de
Adela Kaufmann � � � � � � � La crueldad que infligimos unos sobre otros no deber�a ser ninguna sorpresa. � Una forma despiadada de competencia es lo que se obtiene cuando se adora a un dios de amor condicional.�Despu�s de todo, no hay suficiente amor para todos.�Los compa�eros competidores deben ser destruidos si se va a ganar su afecto.�Y los�jud�os est�n ganando�...� � La oferta de dinero durante mucho tiempo ha sido tomada por ellos, creando as� un mundo de esclavos asalariados con hambre asegurado para muchos debido a su usura y la imposibilidad matem�tica de crear dinero suficiente para cubrir alguna vez la deuda.� � Despu�s de todo, su dinero es deuda...� �
Organizando el 11/9�y
ech�ndole la culpa a los musulmanes fue un golpe de genio.�El
enga�o y la manipulaci�n se utilizan mejor cuando usted no tiene los
n�meros de su lado.�La
brutalidad implacable manifiesta que contin�an amontonando sobre los
palestinos revela lo que sucede cuando usted lo hace.� � Por otro lado, con los�horrores de la ley isl�mica�y la facilidad con la que los sunitas y chi�tas pueden ser activados uno contra el otro revela que ellos tambi�n se inclinan a�este dios de limitado amor.� �
En cuanto a los�Sionistas�cristianos,�les
contar� un peque�o secreto.�A
pesar de que parecen ser aliados de los jud�os, ellos tampoco tienen
ning�n amor real para cualquiera de estos otros competidores.�La
verdad es que los ven como poco m�s que escalones de apoyo para su
particular visi�n del Armaged�n. �
Esto, junto con�el
ritual de�canibalismo�de
la Eucarist�a�revela
de donde realmente viene este dios.�
� La religi�n provoca una dureza de coraz�n�en donde los otros son vistos como competidores, sobre todo cuando compiten por la atenci�n del mismo dios despiadado.�Cuando el n�cleo del propio sistema de creencias es el miedo al castigo por incumplimiento, usted finalmente termina con el mundo que tenemos hoy.� �
Dios, por favor l�branos de las�resticciones de
la religi�n...
� � |
�