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24 Enero 2014
traducci�n de
Adela Kaufmann � � � � �
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� � La gl�ndula pineal�ha estado en el centro de las tradiciones espirituales que datan de miles de a�os, que abarca todos los continentes habitados. � Prominentemente tallada en estatuas budistas, ceremoniosamente pintada sobre rostros tribales, y aparentemente mostrada en la plaza del Vaticano (imagen abajo), la gl�ndula pineal, conocida como el Tercer Ojo, o asiento del alma, sigue envuelta en misterio.� � �
� � Uno de los culpables de la pobreza sin fin, la guerra y la enfermedad en la sociedad actual se encuentra en la desconexi�n colectiva de la humanidad de su alma y su verdadera naturaleza divina. � La clave para el despertar de este sue�o destructivo radica en la gl�ndula pineal, una antena c�smica cristalina que integra nuestra fuente de vida multidimensional fuente con nuestra realidad de cinco sentidos. � A lo largo de las �ltimas d�cadas, sin embargo, el fluoruro y otras toxinas han calcificado este portal-del-alma, bloqueando a muchos seres humanos de su gu�a divina y limitando su poder personal. � Iboga es una antigua planta de medicina cham�nica derivada de la corteza de la ra�z de un curioso �rbol, el�Tabernanthe Iboga, que se ha utilizado durante miles de a�os por la�Bwiti�tribu de �frica Ecuatorial Occidental como sacramento ceremonial.�Tomado por sus grandes propiedades curativas f�sicas y psicol�gicas y, como un derecho de paso e introducci�n al mundo de los esp�ritus, abre el tercer ojo y lo despierta uno a su verdadera naturaleza espiritual. � Cuando se ingiere, el esp�ritu de la planta despierta, proyectando una pel�cula celestial dentro del ojo de la mente del iniciado, ense��ndole por experiencia a trav�s de la visi�n hologr�fica y el di�logo divino. � Tambi�n liberando al cuerpo de las toxinas que aturden la mente y liberando la mente de la programaci�n perjudicial y creencias limitantes, esta planta �medicinal ofrece una promesa seria como una herramienta para los buscadores occidentales en nuestra b�squeda colectiva de liberarnos de la matriz y volvi�ndonos a conectar con la Madre Tierra.� � � � � El Fluoruro y la guerra contra la Conciencia � Como lo explica el reconocido autor e historiador�Graham Hancock� en�su charla prohibida en TED,�La Guerra contra la Conciencia��hay un esfuerzo deliberado para evitar que los individuos soberanos exploren el enorme potencial de sus propias mentes.� � Para controlar una poblaci�n, las masas deben ser programadas a trav�s de hechizos conjurados por un corrupto medio corporativo, programas culturales de autodestrucci�n, y manipulaci�n diab�lica de la�noosfera.� � Se accede al sistema operativo de la mente a trav�s del lenguaje, y la realidad de uno es una combinaci�n de filtros, prejuicios y creencias aprendidas de las conversaciones dominantes en una sociedad.�Quien alguna vez controla el idioma de una sociedad crea la realidad para sus miembros.� � Para influir a�n m�s la conciencia de la humanidad en nuestro mundo, aparentemente hacia atr�s, la mente es el blanco, y es debilitada por una avalancha de toxicidad. � El fluoruro de sodio, un compuesto qu�mico inorg�nico y t�xico,�producto de desecho de la industria del aluminio, es una de las principales toxinas usadas por la elite para aumentar nuestra susceptibilidad a los mensajes subliminales y al control mental. � Al narcotizar un �rea en el l�bulo occipital izquierdo del cerebro, el fluoruro hace a la gente d�cil, pasiva, desconectada, y obediente. � � � Efectos Secundarios del Fluoruro �
� � � El fluoruro es ampliamente utilizado hoy en d�a como uno de los ingredientes b�sicos de�Prozac�(Fluoxetene Clorhidrato) y otras drogas psicotr�picas, y es tambi�n un ingrediente clave en el veneno para ratas y gas nervioso sar�n (isopropil-metil-Fosforilo fluoruro). � Curiosamente, tambi�n es un aditivo com�n para el agua potable municipal en los Estados Unidos y otras naciones, con el pretexto de proteger la salud p�blica mediante la fortificaci�n de los dientes. � M�ltiples estudios cient�ficos en los �ltimos a�os han demostrado que el fluoruro causa una serie de problemas de salud, as� como reducir significativamente los puntos de coeficiente intelectual de sus inocentes v�ctimas, por lo que hay un creciente movimiento popular para poner fin a la fluoraci�n de los suministros p�blicos de agua.� � El�primer uso de agua potable fluorada ocurri� en los campos de prisioneros nazis de Alemania, por la Gestapo, que utilizaba el fluoruro para esterilizar humanos y obligar a la gente a la sumisi�n. � Charles Perkins, un qu�mico estadounidense explica los peligros de fluoruro en el a�o 1954:
Un efecto a�n m�s da�ino de la exposici�n al fl�or es la calcificaci�n de la gl�ndula pineal, que separa a una persona de su naturaleza espiritual. � El fluoruro encapsula la gl�ndula pineal en una c�scara artificial, desconectando f�sicamente el alma y la conciencia superior del computador bio-inform�tico conocido como el cerebro.� � Sin acceso al alma, el cerebro humano se vuelve mec�nico, rob�tico y sin conciencia de su operaci�n,�representa una herramienta f�cil de controlar�por factores sociales de�programaci�n y control mental. � El juego final de la intoxicaci�n de las masas con fluoruro es la creaci�n de una poblaci�n de trabajadores sumisos, obedientes, no-inteligentes, en lugar de verdaderos pensadores, guerreros, artistas y h�roes.� � Esto es evidente en nuestras ciudades modernas, donde los seres humanos una vez animados aparecen ahora como zombies auto-regulados, esclavos en una matriz sin esp�ritu de consumismo y competencia.� � � � � Protocolos de Descalcificaci�n - Liberando el Alma � La mayor�a de las Gl�ndulas pineal es de las personas est�n muy calcificadas para cuando cumplen 17 a�os de edad, hasta el punto que durante una resonancia magn�tica aparece como una masa s�lida de calcio.� � Hay muchos m�todos pr�cticos y suplementos disponibles para los solicitantes que deseen despertar plenamente su esencia espiritual, y para los buscadores en el camino hacia la verdad y la iluminaci�n, la purificaci�n de este �rgano espiritual es una necesidad absoluta. � Aceite de h�gado de R�jidos (rayas)��para descalcificaci�n pineal fue popularizado por Pete Peterson con informaci�n privilegiada del gobierno,��y contiene un compuesto conocido como Activador X, que permite que el cuerpo elimine los dep�sitos de calcio de diversos lugares.�� � El yodo�se ha demostrado cl�nicamente que aumenta la eliminaci�n de fluoruro de sodio del cuerpo, en forma de fluoruro de calcio por medio de la orina.�El tamarindo tambi�n ayuda en la liberaci�n de fl�or a trav�s de la orina.� � El Boro�ha sido encontrado de ser poderoso y efectivo en forma de b�rax decahidrato, reduce la calcificaci�n excesiva de la gl�ndula pineal y al mismo tiempo ayuda a las c�lulas de acceso de magnesio a eliminar m�s dep�sitos de calcio.� � Sin embargo, mientras los suplementos pueden ser eficaces en la desintoxicaci�n de la gl�ndula pineal, �la gente a menudo reporta resultados mixtos con ellos, ya que puede tomar a�os� lograr resultados notables. � Adem�s de los complementos modernos para�la limpieza de la gl�ndula pineal, la medicina de la planta Iboga es, sin duda, un agente muy eficaz para re-despertar de nuestra conexi�n con la espiritualidad, y los iniciados habitualmente tienen poderosas experiencias espirituales en s�lo unas cuantas sesiones con este antiguo maestro de medicina.� � Los estudios con Iboga para la descalcificaci�n pineal a�n no se han llevado a cabo, sin embargo, la evidencia anecd�tica (video abajo) ha elevado la atenci�n a su potencial: � � �
� � � � Varios fen�menos paranormales y espirituales ocurren durante los viajes Iboga, desde,
Estos fen�menos m�sticos est�n vinculados a los poderosos despertares espirituales inducidos por los viajes Iboga, y la desintoxicaci�n de los �rganos espirituales del cuerpo. � � � � Neurociencia Iboga - El �rbol de la Vida � La Iboga�na, el alcaloide activo en Iboga, influye en los procesos neurol�gicos involucrados en el aprendizaje de la conducta adictiva y puede revelar las capas m�s profundas de la programaci�n mental y habitual de uno. � A trav�s de los receptores de NMDA, la iboga�na influye en el proceso de potenciaci�n a largo plazo, una mejora duradera en la transmisi�n de la se�al entre dos neuronas, lo que aumenta�la neuroplasticidad, fortaleciendo las se�ales sin�pticas, ypor lo tanto, aumentando el aprendizaje y la memoria. � Se ha encontrado que la Iboga�na aumenta los niveles de�factor de c�lulas gliales derivado de la l�nea neurotr�fica, o GDNF, que promueve la supervivencia y la reposici�n de muchos tipos de neuronas.� � Una sola dosis de iboga�na puede aumentar la expresi�n de GDNF por semana, dependiendo de la dosis.�La iboga�na es tambi�n altamente lipof�lica y se mantiene en la grasa corporal durante meses, siendo liberada gradualmente, ampliando a�n m�s su influencia sobre la expresi�n� GDNF.� � Est�n pendientes las patentes�en los alcaloides del Iboga para revertir o tratar,
...y el compuesto es ampliamente respetado como un agente efectivo en el tratamiento de serias adicciones de drogas. � Por otra parte, ciertas enfermedades mentales y trastornos psiqui�tricos pueden ser remediados con Iboga.�Es com�n que las personas con despersonalizaci�n, un relativamente nuevo trastorno psicol�gico, donde uno se siente desconectado de su propio yo y del mundo exterior, para encontrar alivio inmediato, potente y duradero con Iboga. � Se cree que esta nueva condici�n psicol�gica junto con varias otras es causada al menos en parte por la calcificaci�n de la gl�ndula pineal y a menudo es desencadenada por un evento traum�tico.� � Adem�s, una visi�n m�s clara tridimensional, una sensibilidad a la vida como un beb�, y la sensaci�n de tener el coraz�n abierto suelen presentarse al d�a siguiente de una jornada espiritual de Iboga. � Los efectos a largo plazo, si es que no permanentes, incluyen aumento de la sensibilidad ps�quica, capacidad de visualizar internamente en claridad de cristal, y un aumento del magnetismo para la manifestaci�n.�Una mayor inteligencia, limpieza de la niebla del cerebro, elocuencia en el discurso, y una energ�a m�s juvenil m�s ligera tambi�n se reportan a menudo.� � El efecto m�s importante de la Iboga es la reconexi�n con el libre albedr�o.�Muchos van a pensar que son libres, y llegan a darse cuenta que las miles de decisiones que toman cada d�a son el resultado de la reacci�n a la programaci�n y narrativas culturales que son mentiras fabricadas destinadas a limitar la libertad personal. � Aunque el viaje en s� es intenso, incluyendo la posible depuraci�n y n�useas, si su cuerpo necesita eliminar toxinas, la experiencia rara vez se describe como de miedo, aunque un aspecto un tanto aterrador com�n com�nmente se produce al d�a siguiente, cuando un iniciado experimenta pensamientos tales como,�
A menudo uno se despierta de un sue�o que no sab�a que era un sue�o, dej�ndolo sin aliento y rodeado de una realidad superior.� � Durante el viaje Iboga, muchas personas no experimentan profundos viajes espirituales en su primera vez, puesto que la medicina debe,
Una vez que el cuerpo est� relativamente limpio, el medicamento puede entonces llegar a la mente y al alma. � Algunas personas lo describen como�diez a�os de psicoterapia��en una noche, ya que el ritmo de los pensamientos y revelaciones aparecen r�pido y frecuentemente, haciendo estallar sin cesar una burbuja con di�logo simple, objetivo. � A diferencia de las visiones l�ricas, abstractas comunes a�la Madre Ayahuasca, el Iboga ense�a a trav�s de descargas directas de informaci�n, l�gicas y es conocido como el "Padre" maestro.� � � � � Ense�anzas Hologr�ficas � Aprovechando su propia base de datos de recuerdos, memes, y puntos de anclaje, el esp�ritu del Iboga cristaliza visuales trascendentales en su tablero de tiza interior, mientras que muchos tambi�n escuchan una voz telep�tica de la verdad, tanto respondiendo a las preguntas y se�alando los puntos ciegos en el transcurso de una sola sesi�n, que puede durar hasta 36 horas, dependiendo de su sensibilidad, la dosis, y el estado actual de conciencia.� � Durante este tiempo, flechas de verdad perforan incesantemente sus burbujas de ensue�o, pero estas flechas est�n recubiertas con barniz de amor, disparadas por un omnisciente arquero que ya sabe lo que usted est� listo para ver. � Su cuerpo emocional tambi�n es temporalmente aliviado a trav�s de esta experiencia, de manera que usted puede observar y procesar un trauma pasado, en un proceso casi instant�neo y m�s suave sin quedar atrapados en viejos detonadores y l�grimas.� � Esto le permite deslizarse r�pidamente a trav�s de la multitud de bloques que pueda tener, porque hay mucho trabajo por hacer. � �
� � El tiempo se ralentiza en Iboga, y mientras que usted yace conscientemente despierto y en control, su cerebro se mantiene en un estado de sue�o REM , en donde usted tiene acceso a lae lectura/escritura en el disco duro de su mente subconsciente. � Pr�cticamente todo el mundo por la ma�ana despu�s del Iboga, que escucha m�sica, comenta que la m�sica suena dos veces m�s r�pido. � Esto es porque el tiempo en realidad se extiende en su realidad personal, pero la m�sica y los relojes siguen siendo relativos.�Trazos visuales tambi�n son bastante comunes en la medicina, ya que se puede ver el reflejo del pasado en cada momento, y cada pensamiento y lecci�n es procesada en una naturaleza c�clica m�s avanzada, en vez de lineal. � Cuando se experimenta en un entorno de grupo con absoluta confianza y amor, se crea una red ps�quica colectiva donde los conceptos, revelaciones que revientan la matriz, y redes de amor sanador pueden ser compartidos instant�neamente con el grupo.� � Muchas veces el grupo simult�neamente expresa la misma revelaci�n, ya que la informaci�n es libremente compartida, y cada miembro se vuelve un c�digo abierto, al abrirse en una burbuja de una�edad de oro� hecha a mano por la experiencia. � Viendo, movi�ndose y hablando en este estado puede ser mejor descrito como�fractal, l�quido, y hologr�fico.� � � � � �Oyes la Llamada del H�roe? � �Se siente la llamada a probar el �rbol de la vida?� � Hay varias opciones para experimentar un viaje Iboga en un entorno guiado, ya que someterse a un viaje por s� solo no es recomendable ni seguro.�Han aparecido algunas cl�nicas de iboga�na en los �ltimos a�os, principalmente orientadas hacia el tratamiento de adictos a las drogas, y en gran parte desprovistas de las verdaderas medicinas de contexto espiritual. � Se recomienda mantenerse alejado de las cl�nicas de tipo m�dico, en caso de buscar un despertar espiritual, apertura del coraz�n, y conexi�n del alma. � Usando la corteza de la ra�z completa del �rbol Iboga o al menos el extracto de alcaloides totales garantiza que el esp�ritu de la planta est� intacto y disponible, y al mismo tiempo utiizando de manera integral la docena de otros alcaloides que la planta tiene para ofrecer. � Algunos se sienten llamados a experimentar la iniciaci�n completa del Iboga en Gab�n, �frica.� � Un buen lugar para comenzar su investigaci�n ser�a�Ebando, que ha durante muchos a�os ha ofrecido ceremonias de iniciaci�n sentidas por el coraz�n.�Las ceremonias de iniciaci�n completa difieren por tribu y regi�n y pueden durar varias semanas e incluyen la ingesti�n de 5-10 veces m�s Iboga que un t�pico centro de Iboga en el mundo occidental.�La mayor�a de las personas no se sienten listas para volar a �frica y experimentar este intenso viaje. � Centros cham�nicos e Iboga, tales como los de Centroam�rica ofrecen un puente para los occidentales, ya que la gente de Occidente tiene su propio conjunto de problemas, incluyendo muchas nuevas enfermedades psicol�gicas y enfermedades causadas por toxicidad.� � Algunos consiguen lo que quieren en un solo viaje, pero la mayor�a requiere varios viajes para limpiar su cuerpo antes de experimentar el despertar espiritual que puede ser impresionante e incre�blemente liberador. � Al final, es importante seguir su propia intuici�n, y darse cuenta que el Iboga, al igual que otras tecnolog�as de plantas, es simplemente una herramienta.� � Como dijo una vez el maestro de Aikido�Morihei Ueshiba:
Al final, su propia dedicaci�n, auto-indagaci�n y apertura al amor determinar�n la velocidad y la profundidad de su curaci�n y el despertar. � El Iboga simplemente levanta la niebla, revelando al�h�roe interno.� � � � � Fuentes � � |
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