Tolkienpedia
Advertisement
Beleriand

Beleriand

Conflictos belicos que se dieron en Beleriand

La Primera Batalla[]

En el año 1495 de la Edad de los Arboles los ejércitos de Morgoth penetraron en Beleriand por el este y por el oeste. En Beleriand Este los Orcos fueron derrotados por Elwe Thingol, que recibió ayuda de los Naugrim del monte Dolmed de los Elfos de Ossiriand (Nandor), que perdieron a su Señor, Denethor, abatido por los Orcos. Pero Beleriand Oeste fue invadido, y Cirdán quedó en los Puertos, separado de Elwë. Los bosques de Doriath fueron rodeados por el velo protector de Melian, aislados de las tierras circundantes, y Thingol no volvió a tomar parte en las guerras contra Morgoth.

La Segunda Batalla[]

Dagor-nuin-Giliath (Batalla bajo las Estrellas).

Librada en Mithrim después de la llegada de Fëanor a la Tierra Media.

Los Noldor que seguían a Fëanor llegaron a la Tierra Media desembarcando en el estuario del Drengist y, tras quemar sus naves, pasaron a Hithlum y acamparon en la costa norte del lago Mithrim. Su llegada inesperada sorprendió completamente a Morgoth. Pero esta oportunidad es en cierta medida desperdiciada por el mal juicio de Fëanor, que le llevó a prender fuego a los barcos de los Teleri. La gran hoguera alertó a Morgoth e hizo que el señor oscuro retrasara sus planes de conquista de Beleriand. En cambio redispuso sus fuerzas para enfrentarse a la nueva amenaza inesperada.

Morgoth aún sabía poco de las fuerzas y habilidades de sus contrarios, pero esperaba destruir a los noldor de Fëanor antes de que se pudieran establecer. Intentó concentrar varios grupos de Orcos para lograrlo. Envió una horda desde Angband para atacar en los pasos de montaña de las Ered Wethrin, y avisó a la que ocupaba el este de Beleriand y asediaba los puertos de Círdan en el sur para que se uniera al ataque. Los orcos de Morgoth superaban largamente en número a los noldor Fëanorianos, pero los jefes orcos eran incapaces de coordinar un ataque tan masivo y tomar ventaja de su fuerza conjunta. Los noldor aún disfrutaban del poder de la luz de Valinor, y con sus maravillosas armas y armaduras, así como con el uso de la caballería, inédito hasta entonces en la Tierra Media, derrotaron severamente a los orcos.

La primera horda fue rápidamente derrotada en Mithrim y se retiró hacia el norte por Ard-Galen, con Fëanor en furiosa persecución con la mayoría de su caballería. Los capitanes orcos del sur mandaban una horda reducida en sus fuerzas por el asedio a los puertos de las Falas tras la Primera Batalla de Beleriand, pero se desplazaron hacia el norte para unirse al ataque. Celegorm, al mando del resto de los noldor Fëanorianos, desvió su línea de marcha en el paso anterior a Eithel Sirion, desviándolos hacia los marjales. Atrapados entre las fuerzas de Celegorm y el marjal de Serech, la mayoría de los orcos perecieron en una batalla de diez días y el resto trataron de huir de vuelta a Angband.

Fëanor, ciego de ira, persiguió a los orcos por la planicie de Ard-Galen y llegó a distanciarse de su vanguardia. Al borde norte de la planicie, en Dor Daedeloth, los orcos hicieron una parada y Gothmog condujo a sus balrogs desde Thangorodrim en su ayuda. Fëanor descabalgó y luchó solo bastante tiempo, hasta que fue mortalmente herido. Fëanor fue rescatado por sus hijos, pero murió poco después.

La Dagor-nuin-Giliath fue una victoria amarga para los noldor Fëanorianos, pues destruyeron casi todas las fuerzas de Morgoth en los varios encuentros, pero Fëanor cayó, y habían perdido uno de sus príncipes.

La Tercera Batalla[]

Dagor Aglareb (Batalla Gloriosa)

Ocurrida medio siglo después de las dos anteriores, cuando los Noldor ya se habían establecido en diversos reinos; casi todos ellos en la mitad norte de Beleriand, más cerca del Enemigo que los dominios Sindar. La zona nor-occidental estaba controlada por Fingolfin, Rey Supremo de los Noldor, y sus hijos; mientras que el área oriental estaba bajo la influencia de los hijos de Fëanor; la parte central quedó bajo el dominio de los hijos de Finarfin.

La estrategia de Morgoth consistía en separar las fuerzas de los Noldor y conquistar Dorthonion, ganando Tierras altas más fáciles de proteger, sin embargo ésta estrategia fracasa. Entonces Morgoth envió un nuevo ejército, más grande que los tres anteriores juntos. Atacó el paso del río Sirion, uno de los accesos clave a Beleriand desde el norte, y lo forzó.

Pero los Noldor estaban alerta, y cuando los orcos estaban avanzando por la meseta de Dorthonion, Fingolfin y Maedhros atacaron de forma coordinada por los flancos derecho e izquierdo del ejército y lo aniquilaron. Los Noldor revalidaron aquí su gran capacidad. La relación entre orco y noldor muerto era de 20 a 1, lo que hizo a Morgoth concebir criaturas que tuvieran más capacidad punitiva que los orcos (que terminaría en la concepción de los Grandes Dragones y los trolls como las más conocidas).

El ejército orco fue perseguido hasta las mismísimas puertas de su fortaleza Angband, que los Elfos sitiaron. Se inició así el sitio de Angband, que duraría casi cuatrocientos años, durante los cuales los Noldor montaron en las mismas puertas de Morgoth y hubo paz y prosperidad en Beleriand. Por esta razón, esta batalla se conoció como Dagor Aglareb (la Batalla Gloriosa)

La Cuarta Batalla[]

Dagor Bragollach (Batalla de la Llama Súbita)

Librada en el invierno del año 455 de la Primera Edad del Sol. Comenzó cuando Morgoth rompió el Sitio de Angband, lanzando ríos de llamas que abrasaron Ard-Galen y las laderas inferiores de Dorthonion y las Ered Wethrin, matando a muchos Noldor atrapados en la llanura.

Después de cuatrocientos años del sitio de Angband, Morgoth se sintió lo bastante seguro para hacer una salida y romper el cerco a su fortaleza. Tenía un arma secreta: Glaurung, padre de los Dragones. Éste salió al frente de orcos y balrogs, expulsando a los sitiadores mientras Morgoth arrojaba una ola de fuego sobre elfos y hombres haciendo arder toda la llanura de Ard-Galen, que fue rebautizada como "Anfauglith" (Tierra del Polvo Asfixiante). Tras tres grandes derrotas, la Dagor Bragollach (Batalla de la Llama Súbita) fue la primera gran victoria de Melkor.

Detrás del fuego marcharon los vastos ejércitos de Morgoth, compuestos de Orcos, Balrogs y de Glaurung. En el oeste, Fingolfin y Fingon tuvieron que retroceder a las Ered Wethrin, y Hador resultó muerto en Eithel Sirion. Finrod, que defendía el Paso del Sirion, casi fue abatido, pero Barahir lo rescató y pudieron conservar el Paso. En Dorthonion, los Noldor y los Edain fueron superados; Aegnor, Angrod y Bregolas murieron, y la Primera Casa de los Edain jamás se recuperó del todo de las pérdidas sufridas. En el este, el Aglon fue forzado después de una amarga lucha, pero Maedhros reagrupó a las fuerzas de su Casa en Himring y volvió a cerrar el paso. No obstante, Glaurung conquistó entonces Lothlann y atravesó por la fuerza la Hondonada de Maglor, Thargelion y Beleriand Este fueron asoladas al norte de las Ramdal.

Glaurung y su séquito rompieron las defensas Noldor del Este, venciendo a los hijos de Fëanor y de Finarfin y penetrando en Beleriand Oriental. En el Oeste también los Elfos salieron derrotados, pero consiguieron contener al enemigo antes de que penetrara en Hithlum, el reino de Fingolfin. Durante algunos años continuó la acción bélica, que terminó con otra derrota de los pueblos libres: Sauron, principal capitán del Ejército Oscuro, conquistó Tol Sirion a los hijos de Finarfin, el principal acceso a Beleriand desde el norte.

La Dagor Bragollach inclinó la balanza a favor de Melkor, atemorizando a toda Beleriand y desplazando las fronteras muchos kilómetros a su favor. Fingolfin fue muerto en combate singular contra Morgoth, heredando así su hijo Fingon el título de Rey Supremo de los Noldor. Aunque Morgoth jamás abandonó su ofensiva después de la Dagor Bragollach, se consideró que la batalla en sí finalizó con la llegada de la primavera. El resultado final fue la pérdida de Ard-Galen y Dorthonion y el serio debilitamiento de la Frontera de Maedhros.

La Quinta Batalla[]

Nirnaeth Arnoediad (Lagrimas Innumerables) Nombre dado a la desastrosa quinta batalla de las Guerras de Beleriand.

Fue la mayor de la Primera Edad del Sol. Su nombre surge de la llamada Profecía de Mandos, quien anunció el destino desastroso que seguiría a los noldor en su lucha contra Morgoth en Tierra Media: "Derramaréis lágrimas innumerables..."

Librada en el verano de 473 de la Primera Edad en Anfauglith. Tras la hazaña de Beren y Lúthien, Maedhros comprendió que Morgoth no era invencible pero era necesario construir un frente común. Reunió a sus hermanos y, a pesar de que no obtuvo ayuda de Orodreth ni Thingol (en un principio), organizó una alianza de Elfos, Hombres y Enanos conocida como la Unión de Maedhros .

La Unión de Maedhros expulsó primero a los Orcos de Beleriand y en pleno verano sus fuerzas se agruparon para emprender el asalto de Thagorodrim. En poco tiempo, recuperaron los territorios septentrionales perdidos e incluso liberaron Dorthonion gracias a la inesperada llegada de Turgon de Gondolin con una fuerza de diez mil soldados. Pero el ataque fue precipitado y puso sobre aviso a Morgoth, quien consiguió infiltrar espías y convertir a su causa a parte de los Hombres de la Unión. Las tropas Gwindor y algunas de Turgon, derrotaron a una hueste de orcos y atravesaron la Anfauglith: incluso ingresaron hasta las puertas y entraron en Thangorodrim en tres días. Pero al cuarto día de la batalla, Morgoth activó su trampa y comenzó la Nirnaeth Arnoediad...

Un enorme ejército surgió por todos los lados y la mayoría de los hombres de Brethil cayeron en la retaguardia. Turgon, que acudió desde el sur, se abrió paso entre el cerco. La batalla ocurrió en el norte de Beleriand. Pelearon elfos, hombres y enanos contra orcos, balrogs, el dragón Glaurung y otras criaturas del ejército de Morgoth.

Maedhros, tras demorarse cinco días, llegó por fin y atacó la retarguardia de los Orcos. La hueste oriental no llegó, porque de Angband salió otro ejército arremetiendo contra el flanco derecho de Maedhros. Al mismo tiempo el traidor Uldor, hijo de Ulfang, llamado desde entonces el Maldecido cambió de bando y atacó a Maedhros por la retaguardia, mientras que por la derecha rodeaban a Maedhros otros hombres venidos de las colinas. Hostigada por tres frentes, la hueste oriental se dispersó y los dos ejércitos de la Unión no pudieron reunirse. El valor de los Enanos de Belegost conducidos por su Señor Azaghâl (que cayo durante aquel combate), mantuvieron a Glaurung a raya, esto permitió la lenta retirada y posterior huida hacia Ossiriand.

Entretanto las fuerzas de Morgoth habían repelido a Turgon y estrechado el cerco contra Fingon. Así atrapado, Fingon cayó desgraciadamente asesinado por los balrogs y casi todos sus hombres murieron.

Pero Huor, líder de los hombres de Dor-lómin con su hermano Húrin, tuvieron una premonición antes de la derrota final. Huor sintió que de él y Turgon surgiría una estrella de esperanza para elfos y hombres. Por eso, urgió al rey de Gondolin, y nuevo Rey Supremo de los Noldor ante la caída de Fingon, que tomara refugio otra vez en la ciudad oculta de Gondolin, preservando el secreto de la ciudad escondida para frustrar por algo más de tiempo la campaña de Morgoth.

Por otra parte Huor, Húrin y los hombres de Dor-lómin se mantuvieron en el campo de batalla hasta la hora final. Todos murieron, excepto Húrin quien quedó atrapado entre los cuerpos de los enemigos que lo rodeaban, muertos bajo su propia mano. Húrin, el único superviviente, fue capturado y llevado a Angband para someterlo a tormento y sufrir la venganza de Morgoth.

Las consecuencias de esta batalla, aparte del desgraciada asesinato Fingon de parte los balrogs, fueron el fin de la oposición efectiva a la penetración de Morgoth en Beleriand. En el oeste, todo Hithlum quedó privado de sus habitantes y Himring fue abandonada lo que permitió que el flanco de Morgoth atacara el Paso del Sirion; al norte de la ciudad de Nargothrond no quedó resistencia organizada contra Morgoth en Beleriand Occidental. En el este, la dispersión de los hijos de Fëanor dejó abiertos el Aglon y el Paso de Maglor permanentemente y permitió a Morgoth destruir Thargelion y todo Beleriand Oriental al norte de Ramdal. Con excepción del reino de Gondolin, la totalidad de las tierras altas quedó en manos del enemigo.

Última Batalla[]

La Gran Batalla o Guerra de la Cólera.

La Quinta Batalla o Nirnaeth Arnoediad(«Lágrimas Innumerables») dejó a Morgoth como potencia dominante de las tierras de Beleriand, si bien existían reinos que no fueron conquistados, tales como: Gondolin del ahora Rey Supremo Turgon, Doriath del Rey de Beleriand Thingol y Nargothrond de Orodreth. Con el paso de los años, estos reinos fueron sucumbiendo uno a uno a causa de traiciones y engaños, en los que la codicia por los Silmarils jugaron a menudo un papel destacado. Finalmente casi nada quedó fuera de los dominios de Melkor, y el dominio total de aquellas tierras estaba casi asegurado.

Tuvo entonces lugar la Guerra de la Cólera, en la que por mediación de Eärendil medio elfo, los Valar acudieron en ayuda de la Tierra Media. Un gigantesco ejército formado por Maiar y Elfos Vanyar, Noldor fieles súbditos de Finarfin llegó del otro extremo del mar, liderados por el Heraldo de Manwë, Eönwë.

El ejército de los Valar, se preparó para atacar Angband, la fortaleza de Morgoth; contaba con la ayuda de los Maiar, las Águilas comandadas por el mismo Eärendil en su barco Vingilor, y la compañía de los Vanyar (los Elfos Hermosos) y los Noldor que se quedaron en Valinor. Los Teleri de Alqualonde contribuyeron prestando y conduciendo sus naves, pero no desembarcaron en la Tierra Media, a causa del rencor que sentían por los Noldor, los asesinos de muchos de su raza.

Antes de comenzar el ataque, Eärendil se levantó en el cielo por primera vez a bordo de Vingilot, portando el Silmaril en su frente, con lo que fue señal de esperanza para los pueblos libres de la Tierra Media (que lo llamaron Gil Estel, la estrella de la esperanza), y de dudas y temor para los aliados de Morgoth.

A Morgoth el ataque lo tomó completamente por sorpresa; sus huestes cayeron en cuestión de tiempo, aunque al final de la batalla, la última embestida de Morgoth hizo retroceder incluso al ejército de los Valar: los Balrogs azotaron a los elfos con sus látigos de fuego, los licántropos y monstruos de todo tipo salieron de las mazmorras de Angband, y por último, el más grande de los dragones, Ancalagon el Negro, con el resto de los de su especie, atacó a las Águilas.

Finalmente los Valar se alzaron con la victoria cuando Eärendil intervino en favor de las Águilas, y, tras un combate de un día y una noche, venció a Ancalagon y lo arrojó del cielo, provocando su caída la destrucción de las torres de Thangorodrim, que se erguían sobre Angband. Sólo muy pocos de los Dragones, Balrogs y Orcos sobrevivieron, pues la mayoría fue barrida como paja en un incendio ante el viento poderoso del ejército de Valinor. El ejército victorioso descendió a la más profunda mazmorra de Angband, y allí Morgoth fue atado con la cadena Angainor (la única que podía mantenerlo cautivo). Le rebanaron los pies y con su corona de hierro hicieron un collar, hundiéndole la cabeza entre las rodillas. Los Silmarils pudieron brillar libres otra vez.

Advertisement