nieve


También se encuentra en: Sinónimos.

nieve

(Del lat. nix, nivis.)
1. s. f. METEOROLOGÍA Fenómeno atmosférico que consiste en la caída de pequeños cristales agrupados de agua congelada que llegan al suelo en forma de copos blancos la nieve es frecuente en las zonas de gran altitud .
2. literario Suma blancura de una cosa la nieve de su piel relucía entre el oscuro terciopelo.
3. argot Alcaloide obtenido de las hojas de la coca que se utiliza como droga y estupefaciente o como anestésico en medicina. cocaína
4. METEOROLOGÍA Nevada, nieve caída de una vez y sin interrupción.
5. s. f. pl. METEOROLOGÍA Período de tiempo en el que nieva mucho durante las nieves los niños se dedican a esquiar.
6. s. f. MINERALOGÍA Defecto de una piedra preciosa que afecta a su transparencia, en joyería.
7. TELECOMUNICACIONES Pequeñas manchas o puntos intermitentes que se observan en el televisor debido a interferencias o debilidad de la señal.
8. Méx., Cuba, P. Rico Polo, sorbete de helado.
9. nieve carbónica QUÍMICA Anhídrido carbónico sólido de color blanco que se usa como refrigerante.
10. nieves eternas, permanentes o perpetuas METEOROLOGÍA Las que, por estar a gran altura, no se derriten nunca.
11. nieve ventisquera GEOLOGÍA Masa granulosa y llena de burbujas de aire que está en un estadio intermedio entre la nieve y el hielo.
Gran Diccionario de la Lengua Española © 2022 Larousse Editorial, S.L.

nieve

 
f. med. amb. Forma más común de la precipitación de hielo producido por la congelación del vapor de agua en las nubes.
Temporal en que nieva mucho.
quím. nieve carbónica Dióxido de carbono en estado sólido. Se emplea, comercialmente, como refrigerante de los alimentos y helados, en especial durante su transporte.
Diccionario Enciclopédico Vox 1. © 2009 Larousse Editorial, S.L.

nieve

('njeβe)
sustantivo femenino
1. meteorología precipitación en forma de gotas de lluvia heladas nieve densa
2. blancura de una cosa Era más blanco que la nieve.
3. imagen defectuosa de puntitos blancos y oscuros que se ve en el televisor por falta de señal u otros problemas Gira la antena se ve mucha nieve.
4. cocaína La cocaína es conocida como nieve o perico.
Kernerman English Multilingual Dictionary © 2006-2013 K Dictionaries Ltd.
Sinónimos

nieve

nombre femenino
(América) helado sorbete
Diccionario Manual de Sinónimos y Antónimos Vox © 2022 Larousse Editorial, S.L.

nieve:

cocaína
Traducciones

nieve

snow

nieve

ثلج, ثَلْج

nieve

сняг

nieve

neu

nieve

sníh

nieve

sne

nieve

Schnee

nieve

neĝo

nieve

برف

nieve

lumi

nieve

neige

nieve

हमपत

nieve

snijeg

nieve

hó

nieve

salju

nieve

snjór

nieve

neve

nieve

雪, ゆき

nieve

눈

nieve

nix

nieve

sniegas

nieve

sniegs

nieve

sneeuw

nieve

snø

nieve

neve

nieve

zăpadă

nieve

sneh

nieve

sneg

nieve

снег

nieve

snö

nieve

theluji

nieve

หมะ, หิมะ

nieve

kar

nieve

сніг

nieve

雪

nieve

tuyết

nieve

雪

nieve

SF
1. (Meteo) → snow
nieve abundante o copiosaheavy snow
copo de nievesnowflake
las primeras nievesthe first snows, the first snowfall
nieve artificialartificial snow
nieve en polvopowdery snow
nieves perpetuasperpetual snow
2. (Culin) a punto de nievestiff, beaten stiff
batir a punto de nieveto beat until stiff
3. (LAm) (= polo) → ice lolly; (= sorbete) → sorbet, water-ice
4. (= cocaína) → snow, coke
5. (TV) (= interferencia) → snow
Collins Spanish Dictionary - Complete and Unabridged 8th Edition 2005 © William Collins Sons & Co. Ltd. 1971, 1988 © HarperCollins Publishers 1992, 1993, 1996, 1997, 2000, 2003, 2005

nieve

f. snow; Mex. ice cream.
Spanish-English Medical Dictionary © Farlex 2012
Collins Multilingual Translator © HarperCollins Publishers 2009
Ejemplos ?
¿Por qué callas? La tarde expira, llueve, y la lluvia tenaz deslustra y moja tu acolchado plumón de raso y nieve. ¡Huérfano soy!...
Si lo que no tiene calor fuera necesariamente imperecedero, siempre que alguien acercara el fuego a la nieve, ¿no subsistiría ésta sana y salva?
y ¿alguna a la que puedas dar el nombre de calor? Seguramente. ¿La misma cosa que la nieve y el fuego? No, ¡por Júpiter! ¿El calor es, pues, diferente del fuego, y lo frío de la nieve?
XVI Están dos sierras muy altas y muy maravillosas, porque en fin de agosto tienen tanta nieve que otra cosa de lo alto de ellas si no la nieve, se parece; y de la una que es la más alta, sale muchas veces, así de día como de noche, tan grande bulto de humo como una gran casa, y sube encima de la sierra hasta las nubes, tan derecho como una sierva, que según parece, es tanta la fuerza con que sale, que aunque arriba en la sierra andaba siempre muy recio viento, no lo puede torcer.
Por un instante, sintió la madre que sus esperanzas se fundían, a semejanza de la nieve ligera que acababa de caer y que, suspensa del alero, iba a convertirse en agua y en lodo.
Vino la Nochebuena acompañada de mucha nieve; pero cuanto más espeso era el sudario que cubría el huerto del convento, más calor notaba Lucía en su celda solitaria; una ilusión singular le mostraba, al través de los emplomados vidrios, que en lugar de copos de nieve llovían sobre las ramas de los árboles y sobre la dura tierra millares de azucenas nítidas, finas como plumas arrancadas del ala de los ángeles.
La luz, la visión, el perfume de las azucenas, todo desapareció, y al través de los emplomados vidrios sólo se vio el huerto amortajado de nieve.
El invierno se había adelantado; helaba intensamente. En la calle arreciaba la tempestad de nieve, y los que podían hacerlo se quedaban en casa.
Todos los árboles estaban cubiertos de escarcha, como blancos corales; la nieve crepitaba bajo los pies, como si se llevasen siempre zapatos nuevos, y en el cielo se sucedían las lluvias de estrellas.
¡Fuera, fuera, todos fuera! -No te entiendo, camarada -dijo el hombre de nieve-. ¿Es acaso aquél de allá arriba el que tiene que enseñarme a correr?
Se portaría como hija, y aún más, porque las hijas no prestan cuidados tan íntimos, no ofrecen su calor juvenil, los tibios efluvios de su cuerpo; y en eso justamente creía don Fortunato encontrar algún remedio a la decrepitud. «Lo que tengo es frío -repetía-, mucho frío, querida; la nieve de tantos años cuajada ya en las venas.
Ni saben de los hombres que lucharon allí, ni de las mujeres que vertieron agua hirviendo sobre los enemigos que, vestidos de blanco para confundirse con la nieve, trepaban por el lado exterior del muro.